We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Antigitanismo
Queridas payas

Queridos blancos... ¡Vaya! ¡Vais a muerte! Entiendo que quedar reducidos a una generalización racial es una nueva y aterradora experiencia para algunos... pero hay una diferencia: mis bromas no encarcelan a vuestros jóvenes a un ritmo alarmante ni hacen que os resulte peligroso pasear por vuestros propios barrios, pero las vuestras sí. Cuando os mofáis o nos ninguneáis fomentáis un sistema ya existente. Los polis de todo el país que encañonan a un hombre negro no ven a un ser humano, ven una caricatura, un matón, un ...”
Sam White, 'Queridos Blancos'
Queridas payas:
Llevamos siglos soportando vuestra mirada turbia, esa que ve en nosotras lo que habéis querido ver, lo que os tranquiliza y os reafirma en vuestra superioridad. Antes éramos la amenaza de la puñalada trapera, la gitana de la navaja en la liga, la delincuente por naturaleza. Ahora, somos las víctimas de un patriarcado del que solo vosotras, payas ilustradas, podéis salvarnos. El cuento cambia, pero la historia es la misma: nos definís, nos categorizáis y nos utilizáis para reafirmar vuestra visión payocéntrica del mundo.
Queridas payas, os arrogáis el derecho de hablar en nuestro nombre, de decidir qué mujeres gitanas merecen ser referentes, de escribir nuestra historia sin nosotras. Y cuando os señalamos vuestra arrogancia, nos llamáis agresivas, nos tacháis de radicales, nos silenciáis.
Antigitanismo
Opinión Un Año del Pueblo Gitano sin gitanas ni gitanos
El caso del material didáctico Mujeres gitanas cambiando el mundo, presentado en Asturias, es un ejemplo más de esta apropiación sistemática. Unas mujeres payas deciden que deben enseñarle al mundo lo que es ser una mujer gitana. Lo hacen sin contar con nosotras, sin preguntarnos, sin escucharnos. Y en el colmo del delirio, se atreven a decir que no encontraron maestras gitanas con las que colaborar ¿De verdad no había maestras gitanas? ¿O simplemente no mirasteis donde debíais porque no os interesaba escuchar nuestras historias reales?
Queridas payas, os parecéis tanto a los señoros que os oprimen y que son vuestros hombres, esos que mandan y moldean el mundo, esos que hacen leyes contra ti, señora paya, y contra nosotras gitanas. Os parecéis tanto a vuestros hombres como nosotras a los nuestros. La diferencia es que a los nuestros sí los encañona y mata la policía, como dice Sam en Queridos blancos, esa policía formada y erigida por vuestros hombres.
Encima, os dedicáis a invocar el “patriarcado gitano” como amenaza a vuestro estatus. Queridas payas, escuchadnos bien: nuestros hombres son más hermanos nuestros, que vosotras nuestras “hermanas”. Evocando y remedando a la Princesa del Pueblo: Nosotras por nuestros hombres matamos. No penséis que es una amenaza, es nuestra consigna antirracista, os lo podemos también cantar que suena más amable “Quien se meta con nosotros, tendrá problemas, tendrá problemas, tendrá problemas” (ponerle ritmito de rumbas por Sonsonete).
Queridas payas, ninguna gitana de las que conocemos se siente identificada con vuestras racistadas, con vuestras películas, con vuestros documentales, con vuestros artículos y menos con esos materiales que desde el principio están mal, queridas payas salvaoras asturianas autoras de los materiales didácticos racistas. Y hemos de deciros que conocemos muchas gitanas, aunque no las hemos contado porque no tenemos esa obsesión retestina que tenéis las gitanólogas de hacer censos, clasificarnos y casi disecarnos para vuestra colección de gitanas.
No necesitamos vuestra condescendencia ni vuestra tutela. Lo que necesitamos es que dejéis de apropiaros de nuestra historia, de nuestro sufrimiento, de nuestra lucha, de nuestro trabajo y de nuestro talento
Queridas payas, este 3 de marzo del 2025 se cumplen 526 años del inicio de la persecución al Pueblo Gitano por parte del Estado español. Nuestro Pueblo ha sobrevivido a siglos de persecución, a más de 230 leyes antigitanas, a un sistema que ha intentado exterminarnos de todas las maneras posibles. Y aquí seguimos. Resistiendo. Peleando. No necesitamos vuestra condescendencia ni vuestra tutela. Lo que necesitamos es que dejéis de apropiaros de nuestra historia, de nuestro sufrimiento, de nuestra lucha, de nuestro trabajo y de nuestro talento. Que dejéis de reproducir y mantener el sistema que nos oprime.
Queridas payas, nuestra ira responde a vuestras acusaciones, insultos y maltratos cotidianos.
Que sepáis que nuestros primos y primas asturianas no están solos ni solas, cuentan con nosotras y estamos dispuestas a lo que sea menester: un artículo, una disertación científica o un café.
Relacionadas
Opinión
Movilización 23-F Cuaderno de quejas o por qué los profesores debemos defender la universidad pública madrileña
Opinión
Expansionismo El Golfo de América
Opinión
Desafío colectivo Richard Gere tiene razón: o nos entendemos o nos hundimos
Entré al artículo porque iba dirigido a mi mí, sentí una especie de obligación.
En mi isla no hay gitanas (que yo sepa). Por lo menos, no ha habido históricamente comunidades gitanas asentadas, por lo que el "antigitanismo" no está presente en el día a día, no es algo con lo que crecí. Somos más de "temerle al moro". Sin embargo, mi boca se ha ensuciado alguna vez con el "esos viven como gitanos" o "no me seas gitana", frases hechas que están en nuestra memoria colectiva y que repetimos sin pararnos a pensar en el daño que hacen. Yo ya me paro y pienso, es mi deber.
Bravo por el término "payocentrismo". ¡Me ha sacado una carcajada!
Me alegra sentir esta rabia y esta indignación que transmite el escrito. Son muestras de que vuestra lucha está muy viva, una lucha que también debe ser mía, como mujer trabajadora que soy. Nos aplasta la misma bota.