Austria
Austria se prepara para la victoria de la ultraderecha

La izquierda califica como de poco creíbles los intentos de la derecha del ÖVP de distanciarse de los ultras del FPÖ. Todo indica que este último partido no solo entrará en el Gobierno sino que, por primera vez, será el partido líder de la coalición.
Herbert KICKL  Presidente del Partido de la Libertad
Herbert Kickl, Presidente del ultraderechista Partido de la Libertad austriaco. Foto:
8 sep 2024 05:23

Después de Alemania, Austria. Al significativo avance de la ultraderecha en las elecciones de los estados federados de Sajonia y Turingia probablemente le seguirá Brandeburgo, el próximo 22 de septiembre, y siete días después, el 29 de septiembre, Austria. El Partido de la Libertad de Austria (FPÖ) lidera las encuestas de intención de voto en la república alpina desde hace meses. La situación es inédita, ya que, aunque la ultraderecha ha formado parte del gobierno austríaco antes, en esta ocasión sería la fuerza dominante del ejecutivo.

Siempre y cuando, eso sí, el Partido Popular Austríaco (ÖVP) quisiese formar gobierno con el FPÖ. Algunos políticos conservadores expresan sin demasiadas reservas su posición favorable a este escenario. Es el caso del portavoz del grupo parlamentario del ÖVP, August Wöginger, para quien los populares “están más cerca” del FPÖ que de cualquier otro partido. Otros, como el secretario general de Economía, Kurt Egger, han acusado al FPÖ de “envenenar” a la economía austríaca con un programa “contradictorio que no hará avanzar a nuestro país”.

Aún otros han ideado un “cordón sanitario” no al partido, sino a su candidato, Herbert Kickl, con la voluntad de contener daños electorales e intentar controlar la situación, dividiendo a la ultraderecha. El canciller austríaco, Karl Nehammer, hizo hincapié en esta táctica de los cristianodemócratas en una entrevista a la radiotelevisión pública en la que dijo que no habría ninguna coalición con Kickl, pero en la que concedió que “el FPÖ es un partido heterogéneo” en el que tiene buenos contactos.

“Un gobierno del ÖVP y el FPÖ después del 29 de septiembre amenazaría con enormes recortes en la educación, las jubilaciones y la sanidad”, explica Katharina Ebhart-Kubicek

Desde la prensa liberal, los comentaristas barajan varias coaliciones que impidan que Kickl se convierta en canciller y su partido asuma las carteras clave del nuevo gobierno. Austria podría ser la siguiente pieza de dominó en caer en la paciente estrategia europea de una ultraderecha cuyas velas parecen recoger los vientos de descontento que atraviesan el viejo continente. Su programa de gobierno lleva por título un inequívoco “Austria fortaleza, una fortaleza de la libertad”. En consonancia con la dirección más discreta de Kickl, no hay en él propuestas estrella, pero los “azules” –como se los conoce en el país por el color que representa al partido– prometen restricciones en materia de inmigración, políticas medioambientales y ayudas sociales, y rebajas de impuestos.

Extrema derecha
Perspectivas electorales La ultraderecha en Austria aprende a cabalgar el tigre
El Partido de la Libertad de Austria (FPÖ) lidera desde hace meses los sondeos para las próximas elecciones europeas en el país centroeuropeo, con entre un 22% y un 28% de la intención de voto.


“Si el FPÖ y el ÖVP tienen una mayoría, formarán coalición”, responde a El Salto Katharina Ebhart-Kubicek, del Partido Socialdemócrata de Austria (SPÖ). Para Ebhart-Kubicek, “los intentos del ÖVP de distanciarse del FPÖ no son creíbles”, y recuerda que los populares austríacos gobiernan con la ultraderecha en la Baja Austria, en la Alta Austria y en Salzburgo. Una coalición así a nivel federal “tendría consecuencias dramáticas para los austríacos”, ya que los anteriores gobiernos de los conservadores y la derecha radical llevaron a “recortes en las pensiones, el desmantelamiento de la seguridad social y la introducción de la jornada laboral de 60 horas”. “Teniendo en cuenta los enormes déficits presupuestarios de los que tiene que responder el actual gobierno entre conservadores y verdes”, agrega, “un gobierno del ÖVP y el FPÖ después del 29 de septiembre amenazaría con enormes recortes en la educación, las jubilaciones y la sanidad”.

Fiona Sinz, del Partido Comunista de Austria (KPÖ), coincide con Ebhart-Kubicek. “El canciller Nehammer ha excluido hasta la fecha una coalición entre el ÖVP y el FPÖ, pero que se trata de una promesa vacía es algo que debería quedar claro a todo el mundo.” Según Sinz, “el Partido Popular Austríaco ha mostrado repetidamente que no tiene ningún reparo en coaligarse con la extrema derecha con tal de permanecer en el poder.”

Frustración hacia los partidos establecidos

Tras su salida de la coalición de gobierno con los conservadores en 2019, el FPÖ, salpicado por varios casos de corrupción, sufrió un fuerte descenso electoral. Hoy la ultraderecha no sólo se ha recuperado, sino que incluso ha hecho el sorpasso a los conservadores, a quienes mira por encima del hombro. La ultraderecha austríaca flirtea con la idea de los republicanos estadounidenses de presentarse como un “partido de los trabajadores”.

Aunque no con la misma intensidad ni repercusión mediática que en Alemania, las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania y la política de sanciones de Bruselas se dejan notar en la industria y el sector servicios del país, uno de los pocos que sigue manteniendo su neutralidad dentro de la Unión Europea tras la entrada de Suecia y Finlandia en la OTAN (los otros dos son Irlanda y Malta). Austria cerró el mes de agosto con 352.000 desempleados, unos 31.000 parados más (+9’8%) que en agosto de 2023, con la industria y la construcción como sectores más afectados.

Sinz cree que “las crisis múltiples de los últimos años han incrementado enormemente la presión sobre la gente, sobre todo las preocupaciones económicas por la inflación y el riesgo constante de guerra” y que los partidos establecidos “no han logrado hasta la fecha abordar cómo se debe estas cuestiones, ni siquiera hacer propuestas políticas para mejorar la situación, y en vez de eso se acomodan al discurso de la derecha y, de este modo, desplazan peligrosamente el discurso, algo de lo que se aprovecha claramente el FPÖ.”

Ebhart-Kubicek coincide con el diagnóstico de Sinz. “Hay una enorme frustración hacia el sistema político y una elevada insatisfacción hacia los últimos acontecimientos en Austria”, una situación en la que “el FPÖ consigue llegar a la gente y hacer una oposición radical.” La política socialdemócrata advierte que el “FPÖ se encuentra en el bando de los superricos”, ya que, entre otras cosas, rechaza la aprobación de un impuesto a la riqueza.

¿Un cordón sanitario a la ultraderecha?

¿Podría alguna coalición entre dos o más partidos cerrar el paso al FPÖ? Todas las combinaciones están sobre la mesa, siempre y cuando se cumplan dos condiciones. La primera, como se ha señalado más arriba, es que el ÖVP rechace formar gobierno con el FPÖ. La segunda, que la aritmética parlamentaria permita su formación. El abanico es amplio: desde una reedición de la Gran coalición entre conservadores y socialdemócratas hasta una coalición tripartita entre socialdemócratas, verdes y liberales como la que gobierna en Alemania.

Llegado el caso, la tarea de construir una coalición de gobierno funcional y armonizar diferentes sensibilidades no será fácil —los socialdemócratas austríacos se encuentran más a la izquierda que los alemanes y NEOS, el partido liberal austríaco, ya se ha pronunciado a favor de “duras reformas”—, y el FPÖ, siguiendo la estela de la Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen en Francia, siempre puede hacerse fuerte en el parlamento y esperar a una mejor ocasión para consumar su asalto a la cancillería.

Katharina Ebhart-Kubicek, que responde por los socialdemócratas, recalca el perfil más de izquierdas del partido desde la llegada de Andreas Babler a la presidencia del SPÖ, con la que, sin embargo, no todos están de acuerdo, como se ha visto obligado a reconocer el propio Babler en una entrevista a finales de agosto en la que habló de “resistencias” en el seno de la formación después de que se filtrasen a los medios críticas internas al programa electoral. Una coalición entre socialdemócratas, liberales y verdes podría significar la renuncia de Babler.

Los comunistas austríacos han registrado recientemente éxitos electorales en las elecciones municipales de Graz —donde en 2021 se alzaron con la alcaldía con un 20’3% de los votos– y Salzburgo

“Lo importante es que el SPÖ salga tan fortalecido que, en primer lugar, se pueda evitar un gobierno de derechas, y que sea, después, posible un gobierno estable con el SPÖ”, sentencia Ebhart-Kubicek a la pregunta sobre posibles coaliciones, atajando especulaciones. Su partido exigirá a cualquier socio de coalición que haga “política para los trabajadores y no para las grandes empresas y los superricos”. “Queremos una política para el bienestar de la mayoría y no el beneficio de una minoría, en la que haya más democracia, transparencia y libertad de expresión, y no menos”, aclara.

“En las encuestas actuales los números no dan para una coalición entre el SPÖ y el ÖVP”, apunta Fiona Sinz. “Una coalición entre socialdemócratas, verdes y liberales tampoco tendría una mayoría en el parlamento”, continúa, aunque “hasta que lleguen las elecciones, y aún quedan varias semanas, pueden cambiar algunas cosas.” “Algunas cosas”, para el KPÖ, significaría sobre todo su retorno al parlamento nacional, en el que dejó de estar representado en 1959. Los comunistas austríacos han registrado recientemente éxitos electorales en las elecciones municipales de Graz —donde en 2021 se alzaron con la alcaldía con un 20’3% de los votos– y Salzburgo –donde el año pasado consiguió un 11’66%—, que esperan que sirvan de trampolín para estos comicios. Sinz prefiere guardar cautela: “Por ahora no esperamos un éxito como los de Graz o Salzburgo, pero nos dejamos sorprender”, dice, “luchamos por cada voto para superar el umbral del 4% y entrar en el parlamento.” Pero también termina con un rayo de esperanza: “La oportunidad se presenta mejor que nunca, así que nos mostramos optimistas de que así sea”.

Frenar a la ultraderecha

Cada país europeo cuenta con su propia ultraderecha, y cada partido cuenta con sus propias estrategias para frenar a la ultraderecha. Austria no es por supuesto ninguna excepción. Es más, a pesar de ser un “país pequeño” cuando se lo compara con Alemania, Francia o Italia, cuenta con años de experiencia en este campo.

“Con el FPÖ no se puede construir un estado”, sentencia Ebhart-Kubicek. La ultraderecha “intoxica, divide y siembra odio” y “carece de soluciones para los problemas más urgentes, desde la inflación hasta el calentamiento global pasando por el declive de nuestro sistema sanitario”. El SPÖ, sigue, “se opone decididamente a estas políticas y presenta soluciones para mejorar la vida de la gente: queremos intervenir en los mercados, que se congelen las subidas de los alquileres hasta finales de 2026, prohibir los jets privados y una semana laboral de cuatro días, o que se suspenda el IVA de los alimentos básicos.” También que la atención de un especialista médico se reduzca a 14 días o luchar contra la pobreza infantil con una prestación universal básica por hijo. Kickl ya ha tachado este programa de “neocomunismo”. “Sólo con un SPÖ fuerte puede impedirse un giro autoritario y ahorrar a Austria un tercer gobierno entre la derecha y la ultraderecha”, remacha.

Para los comunistas se trata de “tomarse en serio las preocupaciones cotidianas de la gente”. Por eso, afirma Sinz, “no esperamos a las próximas elecciones, sino que empezamos a trabajar aquí y ahora”. Pone como ejemplo las consultas gratuitas a los ciudadanos o los fondos sociales que el KPÖ tiene en Graz y otras ciudades. Sus cargos electos, explica, “se abstienen de los salarios exorbitantes de los políticos y se quedan con el salario medio de un trabajador especializado, el resto se destina a un fondo con el que se ayuda a personas en situaciones de necesidad financiera”. Para Sinz, “los políticos con salarios altos hacen política desde las alturas y no entienden las preocupaciones cotidianas de la población”. Del mismo modo, los candidatos del KPÖ “no son políticos profesionales, sino que tienen empleos normales”, y cita a Bettina Prochaska, una trabajadora de la sanidad pública. “Todo ello genera confianza, una confianza en la política que mucha gente en Austria ya ha dejado de tener”, lamenta.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Austria
Austria La ultraderecha austríaca gana las elecciones, pero sobre todo la hegemonía
El ultraderechista Partido de la Libertad de Austria se convirtió en las elecciones de este domingo en la primera fuerza del país, con un 28,8% de los votos.
Partidos políticos
Austria El Partido de la Cerveza llama a las puertas del parlamento austríaco
La formación del médico y líder de una banda de punk-rock Dominik Wlazny se mueve en la ambigüedad ideológica mientras propugna lo que han llamado la “despolitización de la política”.
Análisis
Análisis Alemania gira a la derecha
En un contexto europeo de ascenso de los partidos de extrema derecha, Alternativa por Alemania recaba el apoyo de un tercio del electorado de rentas bajas e incrementa su voto joven, mientras la coalición gobernante sufre un rapapolvo electoral.
Hodei Alcantara
Hodei Alcantara
9/9/2024 7:21

Se agradece este análisis, que en los medios liberales no existe más allá de España, Francia o Alemania en Europa...
El éxito de la extrema derecha, lamentablemente, también es responsabilidad de una izquierda que, alejándose de su radicalismo y anticapitalismo, ha decidido irse al centro para contentar a los mercados y conseguir electorado centrista. La ultraderecha, en cambio, ni se ha moderado ni centrado y miremos sus resultados.
Si la izquierda transformadora quiere aspirar al gobierno, necesita mantener sus políticas revolucionarias, de lo contrario, seguiremos poniendo más alfombras rojas al fascismo y neoliberalismo.

0
0
Hodei Alcantara
Hodei Alcantara
9/9/2024 7:21

Se agradece este análisis, que en los medios liberales no existe más allá de España, Francia o Alemania en Europa...
El éxito de la extrema derecha, lamentablemente, también es responsabilidad de una izquierda que, alejándose de su radicalismo y anticapitalismo, ha decidido irse al centro para contentar a los mercados y conseguir electorado centrista. La ultraderecha, en cambio, ni se ha moderado ni centrado y miremos sus resultados.
Si la izquierda transformadora quiere aspirar al gobierno, necesita mantener sus políticas revolucionarias, de lo contrario, seguiremos poniendo más alfombras rojas al fascismo y neoliberalismo.

0
0
Paco Caro
8/9/2024 22:13

"... cada partido cuenta con sus propias estrategias para frenar a la ultraderecha". Pero la mayoría no funcionan. Quizás, porque la mayoría de partidos sirven a la oligarquía, y la oligarquía ve en la ultraderecha la mejor defensa de sus intereses.

0
0
Dana
València Mazón se atrinchera detrás de un militar y cierra su crisis de gobierno
El president valenciano ha remodelado el Consell de la Generalitat dando salida a dos conselleras y fichando un general en la reserva para la vicepresidencia.
COP29
Cumbre del clima La propuesta de los países ricos para cerrar la COP29 enfurece a las naciones en desarrollo
El Norte global, causante histórico del cambio climático, propone 250.000 millones de dólares anuales para la adaptación y mitigación climática del Sur, cuando el propio borrador del acuerdo establece que al menos serían necesarios cinco billones.
València
Dana La Diputación de València adjudica a dedo otros 735.000 euros a una empresa de Gürtel para obras de la dana
El gobierno del Partido Popular contrata por el procedimiento de emergencia a CHM Obras e Infraestructuras, que tienen detrás a los hermanos Martínez Berna, condenados en el marco del 'caso Gürtel' a un año y nueve meses de prisión.
Líbano
Guerra contra Líbano Israel mantiene la intensa ofensiva en Líbano a pesar de las órdenes de detención y de las negociaciones
Las tropas israelíes bombardean provocando un desplazamiento civil que desborda las capacidades del país. Beirut Urban Lab denuncia que el objetivo de la destrucción masiva de edificios es evitar que las personas regresen a sus barrios y pueblos.
Argentina
Argentina El Bonaparte: la historia del hospital de salud mental que le torció el brazo a Milei
Es el centro referente en Argentina para tratamientos de salud mental y adicciones. Javier Milei intentó acabar con él, pero los profesionales sanitarios y los pacientes del hospital no lo permitieron. Esta es su historia.
Opinión
Opinión Vacío y censura en el colonialismo del interior
VV.AA.
La historia está siendo escrita con un silencio cómplice con el genocidio y mediante la censura a su condena. El silencio implica un precio terrible, pues consolida el borrado impune de la existencia, la cultura y el futuro del pueblo palestino.

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Italia
Italia Milán, cuando la ciudad de las oportunidades se hace inaccesible
Ya quedan pocos talleres, farmacias, peluquerías o papelerías de barrio en Milán, y el precio de la vivienda aniquila su población originaria.
Brasil
Brasil Bolsonaro es acusado por la policía del intento de asesinato de Lula da Silva para dar un golpe de Estado
El expresidente tenía “pleno conocimiento”, según la policía brasileña, de un plan para asesinar a los elegidos por el pueblo para ser presidente y vicepresidente después de las elecciones de 2022.
Opinión
Opinión Yo he venido aquí a licitar
El capitalismo de licitación, o capitalismo licitador, es el modelo económico que mejor define las prácticas que los diferentes gobiernos del PP valenciano han llevado a cabo a lo largo de la historia.
Cine
Cine Nicolás Pereda, el Hong Sang-soo mexicano que habla de clases y desigualdad con humor (extraño)
El realizador presenta su último largometraje, ‘Lázaro de noche’, una comedia contenidísima sobre los deseos y sobre el trabajo cultural, en el marco de L’Alternativa, Festival Internacional de Cinema Independent de Barcelona.
Opinión
Opinión El TPI finalmente emitió las órdenes de arresto contra Netanyahu y Gallant. La lucha está lejos de terminar
La corte ha emitido órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el ex ministro de Defensa, Yoav Gallant, por crímenes de guerra cometidos en Gaza. Como resultado, ambos no podrán viajar a al menos 124 países.
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Los sindicatos denuncian a la Comunidad de Madrid por exponer a sus sanitarios a “gravísimos” riesgos
Solicitan la mayor indemnización económica pedida contra una administración por no contar con un verdadero plan de prevención de riesgos laborales para atención primaria.
Baleares
Crisis política La ciudadanía de Formentera se planta tras un año de parálisis institucional en la isla
Centenares de personas se concentran bajo el lema “Deim prou” para exigir un Gobierno estable y transparente ante la crisis institucional en el Consell Insular.

Recomendadas

Estados Unidos
Hari Kunzru “En EE UU hay dos tipos de nazis: los que llevan botas y los que llevan corbata”
El escritor británico reflexiona sobre la victoria de Donald Trump y cómo los conservadores han movilizado teorías como la psicología evolutiva para renovar sus posiciones y plantear una batalla cultural en foros online o redes sociales.
València
Exclusiva El Gobierno de València contrata 12,9 millones en obras de la dana a una constructora investigada por pagos al cuñado de Barberá
La Generalitat Valenciana ha hecho el encargo a Ocide, una empresa cuya matriz está siendo investigada en el caso Azud por pagos “de naturaleza ilícita” al abogado José María Corbín a cambio de contratos adjudicados por el Ayuntamiento de València.