Elecciones
En defensa del “CIS de Tezanos”

Con la llegada de  José Félix Tezanos al CIS este organismo ha cambiado la metodología de la encuesta política periódica.

Encuesta CIS eleciones generales enero 2019

Con la llegada de Pedro Sánchez al Gobierno, el catedrático de Sociología y afiliado al PSOE José Félix Tezanos fue designado presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), dependiente del Gobierno. Poco después, el CIS decidió cambiar la metodología con la que se presentaban los resultados de su encuesta electoral periódica, atrayendo recurrentes acusaciones de manipulación por parte de políticos y medios de derechas. Pero ¿qué hay de verdad en ello? ¿Puede haber un interés en manipular el baremo electoral? ¿Qué CIS sería deseable?

El CIS histórico

Para responder a estas preguntas es preciso saber cómo se hacía el baremo del CIS hasta la llegada de Tezanos. El CIS periódicamente pregunta a un conjunto aleatorio de españoles sobre sus preferencias políticas y sus características sociológicas, por ejemplo, el género del encuestado o su nivel de estudios. La parte más polémica de la encuesta siempre ha sido el baremo electoral: qué opción política elegirían los encuestados si hoy hubiera elecciones. Hasta la llegada de Tezanos se publicaban dos resultados: la intención de voto directa —lo que responde espontáneamente el encuestado al ser preguntado— y la estimación de voto, obtenida de la intención directa de voto a través de un procesamiento de datos popularmente conocido como ‘la cocina’.

¿Cuál es el motivo para presentar unos datos distintos de la respuesta espontánea de los encuestados? No hay una respuesta firme. Un lugar común para justificar una ‘la cocina’ que siempre sobrerrepresentaba el voto de derechas ha sido argumentar que sus votantes son reticentes a reconocerse como tales. El CIS decía detectar este comportamiento preguntando a qué partido se votó en las últimas elecciones (el llamado recuerdo de voto). Así, se asumía que, si la proporción de encuestados que dijeron votar al PP era menor de lo que obtuvo en las urnas, el resultado final debía ser ajustado en esta dirección. Que esto era una decisión arbitraria se demuestra al constatar que no se hacía con ninguna otra pregunta. Por ejemplo, Pablo Iglesias podía ser peor valorado que Albert Rivera y su partido más votado que Ciudadanos. Sin embargo, no se ajustaba la valoración de líderes para poner al líder morado por delante del líder naranja en valoración.

Otra respuesta más razonable para justificar el uso de la ‘la cocina’ es la posibilidad de que en la muestra elegida aleatoriamente —las personas preguntadas— algunos perfiles aparezcan sobrerrepresentados. Por ejemplo, si el número de encuestados que se identifican como varones es mayor al de mujeres, o que algunas áreas geográficas no estén representadas en la muestra proporcionalmente a su población. El problema de este argumento es que siempre se puede buscar una variable sociológica para ‘retocar’ el resultado en una u otra dirección. Cualesquiera los motivos, al final del día el CIS (y cualquier otra encuesta que sale publicada en medios) utilizaba unos factores de ‘correción’ secretos que alteraban la respuesta espontánea. Y aquí es donde la supuesta motivación estadística se mezcla con la manipulación con objetivos políticos.

Manipulaciones históricas y el modelo ‘Tezanos’

¿Por qué manipular una encuesta? Por ejemplo, para orientar el voto útil. Vivimos en un periodo histórico con varias formaciones ‘emergentes’ (Podemos, Ciudadanos, Vox y, más recientemente, Más Madrid). Una encuesta que de un día para otro da opciones de escaños a una formación que no tiene representación hace que mucha gente se plantee cambiar su voto a esta formación con la que puede simpatizar pero que evitaba votar por estrategia. Del mismo modo, si se sobrerrepresenta a las dos primeras opciones, el votante puede optar por elegir el mal menor en las urnas. Por tanto las encuestas tienen un efecto performativo. Cuando la encuesta se paga con dinero público y la diferencia entre intención directa y baremo ‘cocinado’ es considerable, la polémica está servida. Este fue el caso en enero de 2016 con el voto a Podemos. Mientras la intención directa de voto les llegó a poner como primera fuerza, la ‘cocina’ del CIS la rebajaba a segunda por detrás del PP y a una distancia insignificante del PSOE, tercera fuerza.

La primera encuesta con Tezanos al frente sufrió críticas de manipulación por su ‘cocina’, que dejaba de sobrerrepresentar descaradamente a PP y Ciudadanos. Para afrontar las críticas (y quien sabe si por pudor científico) en las sucesivas encuestas se eliminó la ‘cocina’, presentando simplemente la intención directa de voto. Esto no fue del gusto del bloque conservador, que no estaba dispuesto a titular que los españoles ya no conciben al PP como primera fuerza. El propio Tezanos justificaba el cambio aduciendo que los modelos aplicados basados en recuerdo de voto no sirven, toda vez que desde 2015 hay cuatro fuerzas con representación nacional.

Por una ‘cocina’ de ‘receta pública’: el ejemplo de Reino Unido

¿Es correcto renunciar a ‘ajustar’ la encuesta para corregir errores muestrales? Dado que el CIS nunca ha justificado cómo hace su ‘cocina’, se puede considerar un avance que hace imposible hablar de manipulación, pero impide estimar el número de diputados.

¿Cuál es el interés de una encuesta electoral si descartamos su carácter performativo? En primer lugar, analizar cuál es la tendencia de cada partido. Si usando la misma metodología un partido crece y otro cae, es posible valorar qué decisiones políticas premia o castiga la ciudadanía. En segundo lugar, de una encuesta electoral uno esperaría poder vaticinar cuál será el reparto de poder en futuras elecciones. Salvo en las elecciones al Parlamento Europeo y en algunas comunidades uniprovinciales, España no tiene un sistema de representación proporcional puro. En provincias pequeñas —con el caso extremo de Soria, con dos diputados— no caben cuatro o cinco fuerzas políticas, incluso si cada una de ellas logra un 20%. Tampoco hace falta el mismo número de votos para conseguir un diputado en Madrid que uno en Teruel. Como resultado, transmitir directamente la intención directa de voto a nivel nacional impide hacerse una idea de cual será la composición del Parlamento, que al final es el que determina quien gobierna. La única manera de lograr estas estimaciones es utilizar algún tipo de ‘cocina’ que permita entender qué opciones reales de representación tiene cada formación, ajustando los resultados territorialmente. Pero este ajuste debe ser hecho de manera científica y, por tanto, transparente. Esto es especialmente importante al tratarse de un organismo público financiado con 11,4 millones de euros al año.

Nunca he entendido muy bien cuál es el motivo por el que los métodos de cocina no son públicos. La sociología electoral no deja de ser una ciencia, y en toda ciencia se espera que datos y métodos sean publicados con el ánimo de poder reproducir las conclusiones. De ese modo se alejan las dudas sobre el resultado, beneficiando a la sociedad en su conjunto. Sin embargo, este no es el caso de las encuestas electorales: no solo los organismos privados no están obligados a publicar sus métodos, tampoco está obligado el CIS. Para justificarlo,  una vez escuché a Gonzalo Rivero (Politikon) decir que los sociólogos a cargo de las encuestas (incluyendo al CIS) quieren preservar el ‘secreto profesional’ que les hace competitivos. En su momento no cuestioné que ese fuera siempre el caso, pero no es así. En Reino Unido, por ejemplo, el organismo British Election Study Team publica con todo detalle el método utilizado para ajustar los resultados de las encuestas y, como consecuencia, está libre de acusaciones de manipulación. Es injustificable que éste no sea el caso del CIS.

Que los estudios electorales tienen un efecto performativo en nuestra democracia es algo que reconoce todo el mundo. Que este consenso incluye a los políticos de derechas es obvio, toda vez que critican los métodos del CIS solo cuando no controlan el organismo. Sería deseable que se regulara por ley la elaboración y publicación de encuestas electorales, tanto públicas como privadas. Esta regulación debería obligar a publicar tanto los datos brutos anonimizados de las encuestas electorales como el método de procesamiento de los mismos. Solo así podremos empezar a poder disputar una cierta garantía en la veracidad de las encuestas, protegiendo nuestra democracia de influencias interesadas.

Arquivado en: Elecciones
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Ecuador
Ecuador El día que Simón Bolívar escuchó del ‘Ecuador’: un análisis de la segunda vuelta electoral
Las elecciones entre el conservador Daniel Noboa y la correista Luisa González han sido definidas como “históricas”. Sin embargo, no parece que ninguno de los candidatos represente la “gran figura” que el momento lo requiere.
Análisis
Análisis La hipérbole pasa factura a Vox y deja la mayoría absoluta en manos de Sumar y Podemos
La caída de dos puntos de Vox muestra cómo la izquierda y el PSOE podrían seguir teniendo una oportunidad de evitar un Ejecutivo del Partido Popular con la ultraderecha.
Ecuador
El Salto Twitch Ecuador: cuando el Estado asesina
Cuatro menores afrodescendientes de Guayaquil fueros asesinados en diciembre pasado por militares. El cruel hecho, ya que fueron encontrados incinerados y con signos de tortura, desató la indignación nacional e internacional.
#31210
4/3/2019 8:27

Los datos brutos están disponibles, así como la metodología empleada. La ley electoral y la circunscripción provincial se tienen en cuenta en la misma. Que poco nivel tiene este artículo

1
2
#31318
7/3/2019 0:52

No dice eso, no? Dice que cuando se hacía cocina no se explicaba como se hacía y por tanto no era reproducible (es decir, si cogías los datos brutos no eras capaz de ver lo publicado como 'metodología' y obtener el mismo baremo que el CIS). Y por tanto, no se podía saber si se usaba la misma metodología de una encuesta a la siguiente.

0
0
#31176
3/3/2019 16:46

Yo miento en todas las encuestas, en todas.

5
2
Galicia
Galicia A Xunta aprobou a celulosa de Altri argumentando que a súa cheminea de 75 metros sería “icónica”
O Informe de Patrimonio Cultural, favorable á multinacional, emitiuse con base en dúas encargas externas, contratadas e pagadas pola empresa ao ex presidente e ao actual tesoureiro de Icomos-España.
Israel
Día de la Nakba Ex Libris, la empresa israelí que provee tecnología a las bibliotecas del mundo
Los principales productos de gestión y servicios bibliotecarios provienen de una empresa cuya sede principal se encuentra en el Malha Tecnology Park, sito en el territorio ocupado donde antes se levantaba la aldea palestina de Al Maliha.
Irlanda
Lavanderías de la Magdalena Caelainn Hogan: “Las madres “descarriadas” y sus criaturas eran un desafío a la autoridad de la Iglesia"
Caelainn Hogan, periodista irlandesa nacida en 1988, es autora de 'La república de la vergüenza', donde revela los abusos en las instituciones para mujeres que se desviaban de la norma en Irlanda.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'Os Pecadores' loitan contra montruos reais e mitolóxicos no novo episodio de 'O Teleclube'
O dúo do director Ryan Coogler e o actor Michael B. Jordan estrean unha película sobre a experiencia afroamericana cunha ameaza sobrenatural engadida.
Genocidio
Genocidio 470.000 personas están en situación de hambruna en Gaza, donde continúan los asesinatos
El Ministerio de Salud de Gaza reporta que 52.928 personas han sido asesinadas y 119.846 heridas desde el 7 de octubre de 2023. Trump se reúne con los países del Golfo, pero no se mueve de su apoyo a Israel.
Educación
Educación Protocolos éticos en espacios educativos: ¿qué dicen sobre el abuso de poder?
La asociación de referencia para las escuelas gestalt acaba de aprobar un protocolo para detectar y abordar del abuso de poder. Otros ámbitos educativos cuentan con documentos éticos sobre este asunto.
Más noticias
Opinión
Opinión Abolir la familia, la perspectiva de une superviviente
La familia se vende como un espacio seguro, un lugar de amor y de cuidados mutuos, algo que no corroboran los datos. ¿Hay alternativas? ¿Cómo llevamos nuestras experiencias de redes de apoyo mutuo al centro de la sociedad?
Madrid
Movimiento estudiantil Vuelve la acampada universitaria por Palestina y contra el asedio de Gaza por parte del Estado de Israel
Los estudiantes vuelven a acampar en el campus de la Universidad Complutense en protesta y contra el genocidio palestino que “ha continuado y se ha intensificado”. Acusan de “inacción” al Gobierno español y exigen detener el rearme europeo.
LGTBIAQ+
Informe Estado del Odio Las agresiones físicas y verbales a personas LGTBI+ se han duplicado en el último año
El informe Estado del Odio: Estado LGTBI+ 2025 revela que el 20,3 % de las personas LGTBI+ encuestadas ha sufrido acoso. La discriminación en ámbitos como el empleo, el acceso a servicios o la vivienda, alcanza al 25,25 % del colectivo.
Reducción de jornada
Reducción de jornada ¿Vivir mejor o más trabajo para todos? las diferentes vías para llegar a la reducción de la jornada laboral
Situar el empleo fuera del eje central de la vida de las personas trabajadoras enfrenta la visión clásica de los sindicatos para lograr el pleno empleo al de asociaciones que buscan la conciliación y el autocuidado.

Recomendadas

Investigación
Investigación Varios refuxiados denuncian á ONG Rescate Internacional por explotación laboral e agresión sexual
A Garda Civil investiga o centro de Mondariz-Balneario tras varias denuncias por parte de voluntarios migrantes que aseguran traballar sen contrato a cambio de 50 euros semanais. A ONG xestiona 1.700 prazas do programa estatal de acollida.
Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Uruguay
Muere Mújica Muere José Mujica: el descanso del guerrero
La muerte de Pepe Mujica hará aumentar sin duda la leyenda que rodeó durante tantos años al viejo guerrillero tupamaro convertido en presidente de Uruguay, pero no todos serán elogios.