Feminismos
Angela Davis: la libertad como campo de batalla

Angela Davis invita a llevar el feminismo a las mujeres de clase obrera, a las negras, a las trans, a las pobres e indigentes, en definitiva, a las olvidadas, porque no se ha generado un espacio político lo suficientemente amplio para relatar la vida de estas mujeres cuyas vidas han sido excluidas de la historia universal.

Angela Davis Feminismo
Angela Davis, durante la rueda de prensa en La Casa Encendida en Madrid. Álvaro Minguito
24 oct 2018 15:00

Cierren los ojos y piensen en lo que significa ser mujer, ser negra, ser lesbiana y ser comunista”, es el ejercicio que propone en silencio Angela Davis, un ejemplo de lucha y de superación que camina de la abolición carcelaria a las luchas de Black Lives Matter, de los movimientos sociales y lucha por la justicia global a condenada a pena de muerte por la reivindicación contra la segregación estadounidense en los años 70.

Ella es, quizá, una feminista sin feminismo tradicional, una revolucionaria sin revolución al uso porque el feminismo, pese a las reivindicaciones —pasadas y presentes— es un feminismo blanco y burgués que olvida de manera consciente los problemas de raza y clase “privilegiando a las que ya tienen privilegios a priori”.

Angela Davis invita a llevar el feminismo a las mujeres de clase obrera, a las negras, a las trans, a las pobres e indigentes, en definitiva, a las olvidadas, porque no se ha generado un espacio político lo suficientemente amplio para relatar la vida de estas mujeres cuyas vidas han sido excluidas de la historia universal.

Según Angela Davis, hay una falsa concepción de feminismo en nuestra actualidad compuesta por mujeres que sí pueden tocar el “techo de cristal” y ver sus privilegios, pero que son capaces de segregar y explotar laboralmente a otras mujeres.

Angela Davis defiende la interseccionalidad también teorizada por Kimbelé Williams Crenshaw, rompiendo los llamados “techos de cristal”, ya que siguiendo los preceptos de su maestro Marcuse, con el que inició una tesis doctoral antes tutorada por Adorno, “es un deber del individuo luchar contra el sistema”, en este caso contra el statu quo y las modas del feminismo tradicional que no han avanzado demasiado desde los años 70, y que como afirma Silvia Federici, aún no es lo suficientemente fuerte y no se ha configurado una verdadera subjetividad libre sobre su significado pues siguen siendo en su mayoría mujeres las discriminadas, las dedicadas al cuidado, a la limpieza, al hogar.

Como profesora de Filosofía, considera que esta es la única disciplina donde pueden cuestionarse todas las estructuras del mundo ya que la ciencia, que presume de tal poder, no es más que un ensamblaje dentro de las teorías dominantes. Davis, incansablemente, defenderá la Filosofía como un contrapoder y una forma de resistencia capaz de remover toda la geografía del pensamiento establecido por el poder.

Por esa razón Davis cuestiona: “¿Y las mujeres que están abajo? Queremos un feminismo que represente el interés de todas y que se amplíe a todo el ámbito político para concebir un mundo más justo”. Sin embargo, continúa diciendo que cuando le preguntan qué es ser una mujer en este periodo hay que dejar claro que la categoría “mujer” no es una categoría unitaria ya que es una categoría tradicionalmente reducida a “mujer blanca de clase media” y que es un concepto que hay que modificar.

En ese mismo sentido, ha afirmado que la revolución consiste en trastocar los procesos de lo asimilado socialmente como lo normal ya que el principio de inclusión y diversidad no es suficiente. Lo que necesitamos, según Angela Davis, es un “feminismo integrador”, pues cuando se aborda el problema del feminismo hay que ser tan amplio y espacioso como sea posible, afirma Davis, ya que algunos feminismos no solo abordan temas de género sino que reivindican la estructura binaria del sexo y de lo que se presenta como normativo cuestionando también qué significa ser hombre en la actualidad y cuáles son las nuevas formas de masculinidad que se están creando fuera de las establecidas por el patriarcado.

Actualmente, Angela Davis aborda los problemas de las personas migrantes como una de las lacras más graves en términos de Derechos Humanos de la que todos somos cómplices desde la no denuncia. “Los que denunciamos el racismo tenemos que solidarizarnos con los que huyen de la violencia estatal en Centroamérica y exigir el asilo político entre Guatemala, Honduras y México y luchar contra él porque está siendo utilizado por la administración Trump para acabar, no solamente contra los indocumentados, sino con toda la gente de color en Estados Unidos”.

En un momento muy emotivo, Angela Davis recuerda sus años como estudiante en Alemania donde subraya que las plazas de estudiantes de intercambio extranjeros eran en su mayoría ocupadas por españoles y españolas migrantes de la España franquista que sufrían discriminación y tratos de vejación racial. Angela Davis invita a recuperar la memoria pues la lucha de los derechos civiles no ha terminado y puede ser relevada por la lucha de los migrantes que EE UU y la administración de Donald Trump quieren oprimir de una manera abierta.

Una pregunta surge en este punto, ¿hemos ido asimilando como normales posiciones totalitarias a lo largo de los años? El racismo siempre ha estado en el centro del problema político, afirma Angela Davis, y representa una confluencia de factores históricos que no varían mucho de una época a otra. Por supuesto, no estamos viendo retornos muy fuertes porque en realidad nunca se marchó. La demagogia y el racismo pueden conducir de nuevo al totalitarismo y es algo sobre lo que tenemos que mostrar la mayor resistencia.

Si miramos la situación en Brasil, el candidato a las elecciones apela directamente a la homofobia, racismo, al ataque de género… Sin duda es significativo que la presencia de alguien como Donald Trump que ocupa el principal puesto en EE UU sea un referente para otros países como Filipinas, afirma Davis, sin embargo, subraya que con la administración de Obama hubo una gran cantidad de deportaciones y persecuciones raciales “que no podemos dejar caer en el olvido”.

No obstante, pese a la dificultad de la lucha, la libertad para Davis es una batalla constante donde se tienen que extraer fuerzas de su afirmación en la Universidad De Santiago de Chile: “Si acabamos con la segregación racial en EE UU, ¿cómo no vamos a acabar con el patriarcado racista y de clase?”.

Arquivado en: Feminismos
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Violencia machista
25 de noviembre Con el lema “Juntas, el miedo cambia de bando”, el movimiento feminista llama a organizarse este 25N
En un año en el que ha vuelto al primer plano el debate público sobre la violencia patriarcal sistémica que siguen padeciendo las mujeres, la marcha del 25 de noviembre vuelve a las calles el próximo lunes.
Música
Festival de Valdencín Música y reivindicación: así fue el II Festival Tejiendo Redes en Valdencín
Reivindicando el espacio de las mujeres en la música, Valdencín (Cáceres) se convirtió el 9 de noviembre en el escenario de una celebración que trascendió lo meramente musical: la segunda edición del Festival Tejiendo Redes.
Ciencia
Ciencia ¡No más genios! Por una ciencia colectiva
Al no incluir a las mujeres en la historia de la ciencia, no se ha materializado una realidad que depende del trabajo colectivo y relacional
#25175
28/10/2018 14:18

La cuestión fundamental sigue siendo la lucha de clases :mujer negra y rica, mujer pobre y blanca .. pobre o rica es la mayor diferencia para que te traten de una manera u otra

1
22
#25045
26/10/2018 21:29

A Miguel
¿Qué es "sentirse mujer"? Si yo "me siento" negra ¿soy negra? ¿puedo exigir amparo por minoría racializada o hablar en nombre de las afrodescendientes? ¿Podré exigir que aparten sus apresiones las nacidas con piel negra y tratadas como tales desde su nacimiento porque yo me siento negra y mi problema es que la sociedad no me reconoce como tal y quiero ser la primera diputada negra en la Asamblea de Madrid? Si yo me siento adolescente pasando de los 40 ¿lo soy? ¿Tengo derecho a exigir estar escolarizada con adolescentes? Si me siento anciana ¿lo soy, y tengo derecho a una pensión?Si yo me siento presidenta del consejo de administración de un banco ¿lo soy y me deben el puesto? Si yo me siento campesina indígena de Centroamérica ¿lo soy, y puedo exigir trabajar su tierra? Si siento que soy parada, diabética, toxicómana, políglota ¿están los demás obligados a reconocerme como tal y obtener las demandas de las personas paradas, de las enfermas dibéticas y de las intérpretes?
Estoy hecha un lío.

2
26
#25042
26/10/2018 20:27

Angela Davis ha sido para mí la heroína revolucionaria de los EEUU. En cambio, ahora parece que no acaba de aportar mucho que no esté ya en la corriente mayoritaria de la comunicación que allì llaman 'liberal'.
“Si acabamos con la segregación racial en EE UU...", que Marx y Luxemburg me perdonen. Han acabado con la segregación en los asientos y en las escuelas. Hay negros y negras ricos, ha habido un presidente negro. Pero ¿Ha acabado la segregación de la mayor parte de la población afrodescendiente? ¿Es su esperanza de vida la misma que la de la población blanca? En las cárceles, ¿es proporcional el número de reclusos y reclusas negras respecto al porcentaje de afrodescendientes en todo el país? Pienso que el capitalismo puede mutar y digerir a una parte de negros, a un sector de mujeres en los sectores dominantes, cambia su apariencia para que no cambie nada de la realidad profunda de todas las explotaciones. ¿Dónde están, si viven, sus vecinas de la Dinamite Hill?

7
24
Miguel
26/10/2018 8:30

Plenamente de acuerdo con el concepto de "feminismo integrador". La sociedad requiere que todas aquellas que se sienten mujeres formen parte del movimiento feminista y combatan el modelo patriarcal, ya que éste es el sustento del Régimen Capitalista, que no sólo explota sino también discrimina y depreda.Miguel Tauro.

22
0
#25009
26/10/2018 0:44

Mil gracias por compartir estas enseñanzas.

22
0
Genocidio
Genocidio El TPI emite la orden de detención contra Netanyahu y Gallant por crímenes de guerra
La Sala de Cuestiones Preliminares del TPI rechaza las impugnaciones de competencia formuladas por el Estado de Israel y emite órdenes de arresto contra Benjamin Netanyahu y Yoav Gallant.
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Los sindicatos denuncian a la Comunidad de Madrid por exponer a sus sanitarios a “gravísimos” riesgos
Solicitan la mayor indemnización económica pedida contra una administración por no contar con un verdadero plan de prevención de riesgos laborales para atención primaria.
COP29
Cumbre del clima La COP29 encara su última jornada con un final agónico sin acuerdo en los temas clave
Los borradores de los textos de negociación sobre la mesa quedan muy lejos de un acuerdo sobre financiación climática en línea con las necesidades para que el planeta no rebase los 1,5ºC de calentamiento medio.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Estados Unidos aprueba la “ley más peligrosa para las libertades” desde la Patriot Act
En Gaza, Cisjordania y Líbano, nuevos ataques israelíes dejan más de un centenar de muertos. En Washington, el Congreso aprueba una ley que permite quitar fondos a ONG, universidades y colectivos sin pruebas ni un proceso transparente.
Barcelona
Derecho a la vivienda El hartazgo por la vivienda impagable se da cita este 23 de noviembre en Barcelona
El amplio movimiento por la vivienda catalán, sindicatos y organizaciones vecinales, sociales y soberanistas demandan soluciones urgentes ante una crisis de vivienda sin solución a la vista

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Opinión
Opinión Non sempre ter moitas luces é sinónimo de intelixencia
Que impacto ecolóxico e social produce a iluminación do Nadal de Vigo? A cidade sofre máis aló da masificación, o caos de tráfico, as molestias á veciñanza, o malgasto ou os recortes en orzamentos de emerxencia social.
Violencia machista
25 de noviembre Con el lema “Juntas, el miedo cambia de bando”, el movimiento feminista llama a organizarse este 25N
En un año en el que ha vuelto al primer plano el debate público sobre la violencia patriarcal sistémica que siguen padeciendo las mujeres, la marcha del 25 de noviembre vuelve a las calles el próximo lunes.
Crisis climática
Informe de Unicef El cambio climático multiplicará por tres la exposición de los niños y niñas a las inundaciones para 2050
Es la proyección que hace Unicef en su informe 'El Estado Mundial de la Infancia 2024'. La exposición a olas de calor extremas será ocho veces mayor para 2050 respecto a la década del 2000. “El futuro de todos los niños y las niñas está en peligro”, advierte la agencia de la ONU.
Memoria histórica
Memoria histórica Museo del franquismo, ¿eso dónde está?
España sigue ajena a la proliferación mundial de espacios museísticos dedicados a dictaduras y resistencias democráticas.
Unión Europea
Unión Europea La ultraderecha europea, ante la victoria de Trump
El triunfo de Donald Trump da alas a todas las formaciones ultraderechistas de Europa y del resto del mundo, que han visto cómo el millonario republicano ha conseguido volver a ganar las elecciones sin moderar un ápice su discurso.
Tribuna
Tribuna Vivienda: es hora de organizarnos
La situación de crisis inmobiliaria nos exige leer el momento para acertar en las batallas que debemos dar ahora, reflexionar sobre los modos de acción colectiva y lograr articular una respuesta política amplia.

Recomendadas

València
Exclusiva El Gobierno de València contrata 12,9 millones en obras de la dana a una constructora investigada por pagos al cuñado de Barberá
La Generalitat Valenciana ha hecho el encargo a Ocide, una empresa cuya matriz está siendo investigada en el caso Azud por pagos “de naturaleza ilícita” al abogado José María Corbín a cambio de contratos adjudicados por el Ayuntamiento de València.
Galego
Dereitos lingüísticos Miles de persoas desbordan a praza da Quintana para mudar o rumbo da lingua galega
A Plataforma Queremos Galego, que convocou esta mobilización, sinala unha nova data para outro acto protesta: o vindeiro 23 de febreiro na praza do Obradoiro, en Santiago de Compostela.