Ciencia y tecnología
Tecnología, conflicto y democracia

Barcelona acogerá un año más el Mobile World Congress, mientras la sociedad civil denuncia los impactos sociales y ambientales que se esconden tras uno de los sectores más importantes de la economía mundial.
Acción en el Mobile Social Congress(Autoría: Arnau Pla)
Setem Catalunya
3 mar 2025 16:45

Detrás del relato que continuamente se nos vende sobre el progreso que nos traen las tecnologías digitales y la inteligencia artificial, se esconde una importante cara oculta que pocas veces aparece en los discursos oficiales. Lo cierto es que en una sociedad cada vez más digitalizada, la estructura global de la industria electrónica se ha ido construyendo bajo el dominio de grandes empresas, respaldadas por complejas redes de producción globales, en muchas ocasiones muy poco transparentes, en las que se vulneran sistemáticamente derechos laborales y ambientales. Ello se traduce en una realidad cada vez más desproporcionada: mientras que la industria externaliza sus costes ambientales y sociales al Sur Global, de donde se obtienen las materias primas necesarias para elaborar los dispositivos electrónicos que consumimos diariamente y la mano de obra, la mayor parte de los beneficios se concentran en empresas con sede en Estados Unidos.

De hecho, somos testigos del creciente nivel de concentración de poder y capital que se acumula en manos de un reducido número de empresas del sector Big Tech, y de cómo estas compañías se están aliando para evadir cualquier tipo de regulación que suponga un obstáculo para su acumulación de capital, aunque ello suponga silenciar a sus trabajadoras, destruir el medio ambiente e incluso ser cómplice del genocidio y ocupación que Israel está ejerciendo en Palestina.

Empresas tecnológicas, genocidio y ocupación

Tal como hemos hemos observado en las últimas semanas gracias a la denuncia de distintas asociaciones, empresas como Amazon, Google y Microsoft son activamente cómplices del actual genocidio del pueblo palestino, ya que están vendiendo servicios de nube e inteligencia artificial a las fuerzas de ocupación de Israel, facilitando que el gobierno israelí vigile a la población palestina, la obligue a abandonar sus tierras y perpetre el genocidio.

Dentro de estas empresas, se sigue castigando, reprimiendo, silenciando y tomando represalias contra los trabajadores y trabajadoras que se pronuncian en contra de lo que está ocurriendo en Palestina, además de alimentar un entorno hostil hacia sus empleados y empleadas palestinas, árabes y musulmanas.

Impactos del extractivismo en las poblaciones del sur

En un contexto global de creciente competición por los recursos naturales, la demanda de minerales críticos que son necesarios para la fabricación de electrónica y tecnologías digitales están intensificando los conflictos y la destrucción ambiental que ocurren en torno a la minería. Ejemplos de ello son el caso de Madagascar, país afectado por la minería de tierras raras, así como aquellos países donde la minería afecta a territorios ya tensionados o en conflicto, como en la República Democrática del Congo, país que posee recursos minerales claves por la producción de electrónica como el coltán y el cobalto. Mientras Ruanda facilita la exportación de minerales de sangre, la Unión Europea firma acuerdos con ambos países para garantizar su suministro.

Explotación laboral y luchas sindicales

A pesar de producir algunas de las tecnologías más valiosas del mundo, millones de trabajadores y trabajadoras —muchas de ellas en Asia— continúan enfrentándose a barreras sistémicas para la sindicalización y la negociación colectiva. Desde tácticas agresivas antisindicales desarrolladas en Silicon Valley, hasta la prohibición total de los sindicatos independientes en China, tanto gobiernos como corporaciones han trabajado para reprimir los movimientos liderados por los y las trabajadoras en nombre del beneficio y la eficiencia. Muchas de ellas reciben salarios que apenas cubren sus necesidades básicas, mientras que las jornadas extremas —a menudo superando las 72 horas semanales— son la norma. Para debilitar aún más el poder laboral, las empresas recurren cada vez más a contratos precarios que les permiten despidos laborales sin previo aviso, especialmente a aquellas personas que intentan organizarse. Además, las mujeres, que representan una parte significativa de la fuerza laboral, enfrentan desafíos adicionales, como el acoso laboral y la falta de apoyo para el cuidado de los hijos.

Una IA imperfecta

A pesar de que la IA generativa se ha presentado como una herramienta revolucionaria, cada vez existen más voces críticas que evidencian que esta tecnología no es neutra, sino que reproduce sesgos discriminatorios y perpetúa desigualdades.

En este sentido, cada vez se hace más necesario resaltar que las predicciones mediante inteligencia artificial no son objetivas. En realidad, estos sistemas reproducen y amplifican patrones históricos en los que los grupos más afectados son los que han sido discriminados históricamente: en particular, las mujeres y los colectivos minoritarios. Ello se traduce en una generación de potenciales formas de violencia y discriminación a gran escala, sin olvidar el consumo de grandes cantidades de energía que conlleva su uso, con un elevado impacto ambiental.

Hackeemos el sistema, construyamos resistencias: las alternativas del Mobile Social Congress

Del 3 al 6 de marzo, la ciudad de Barcelona volverá a convertirse en la capital internacional de la vanguardia digital con la celebración del Mobile World Congress, el mayor evento mundial dedicado la innovación en la industria tecnológica. Un momento crucial en el que la sociedad civil se ha organizado para reflexionar y buscar alternativas justas que den respuestas a los impactos sociales y ambientales que se esconden detrás de esta imagen de vanguardia que se nos intenta ofrecer.

SETEM Catalunya, como respuesta al congreso internacional, vuelve a organizar el Mobile Social Congress para denunciar la cara oculta de este sector, del 3 al 5 de marzo. La 10ª edición del proyecto propone “Hackear el sistema y construir resistencias” para promover el uso responsable de la tecnología y una mirada crítica frente al Mobile World Congress. Para ello, el programa contará con un podcast en directo de LaTurra, dirigido por la periodista Alba Riera, y distintas charlas que tendrán lugar en el CCCB (Barcelona) y en línea, donde representantes de entidades como Good Electronics, No Tech for Apartheid, el ODHE, Afrewatch y la Federación del Sindicato de Trabajadoras y Trabajadores del Metal de Indonesia, entre otras, analizarán casos actuales en los que la fabricación o el uso de la tecnología supone una vulneración de los derechos humanos.

La iniciativa se ha iniciado el lunes 3 de marzo en las puertas de la Fira de Barcelona con una concentración abierta para denunciar, junto con la plataforma Prou Complicitat amb Israel y La Fira en la Mira, la complicidad del MWC con el genocidio y ocupación de Israel en Palestina.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Río Arriba
Río Arriba Brenda Chávez: “El consumo es un desmovilizador social, es el opio del pueblo”
Segunda entrevista del programa Río Arriba en formato podcast y vídeo donde hablamos de consumismo, Trump, gastos de recursos, economía social, clases medias y mucho más.
Galicia
Galicia La esperanza de la gestión colectiva frente al expolio: la Comunidad de Montes de Tameiga contra el Celta
Mientras varios proyectos industriales intentan privatizar y destruir los ecosistemas gallegos, algunos grupos de vecinos y vecinas organizadas hacen oposición social construyendo alternativas comunitarias. A veces, también ganan al gigante.
Economía social y solidaria
Litigios estratégicos La economía social llega a los tribunales: el auge de los juicios con impacto social y medioambiental
La litigación estratégica va tomando fuerza en España como herramienta de defensa de derechos humanos y de modelos económicos más sostenibles y justos social y medioambientalmente
Medio rural
Medio rural A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Ourense
Ourense Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.
O Salto medra contigo
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.
Medio ambiente
Medio ambiente Iberdrola proxecta un parque eólico que pon en risco un dos maiores xacementos fortificados de Galiza
A Xunta vén de declarar a utilidade pública para o parque eólico Castro Valente, a pesar de que a súa construción está suspendida cautelarmente polo Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
A Catapulta O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria

Recomendadas

Culturas
Erika Lust y Sara Torres “El deseo tiene una potencia inagotable para transformar la realidad si lo liberamos de las normas”
Sexo, deseo o ética del placer son algunos de los temas que hilan la escritora Sara Torres y la productora de cine porno Erika Lust en ‘La abundancia del deseo’.
Filosofía
Brais Arribas, filósofo “Non se trata de empoderar senón de disolver o poder”
Durante a conversa, o profesor reflexiona sobre a saúde da filosofía galega, o poshumanismo, as novas masculinidades ou a experiencia da pandemia.