Opinión
La desmemoria de los lazos rojos

Actualmente, el acceso a medicación antiretroviral ha cambiado el paradigma de trasmisión del VIH. Pero como en todos los avances médicos, solo afecta a personas que se encuentran en determinadas latitudes geográficas y con un determinado status de ciudadanía.
Lazo rojo VIH

Coordinador de Alternatiba en Nafarroa


1 dic 2021 06:00

Como cada 1 de diciembre, celebramos el Día de la Lucha contra el VIH-SIDA. Un día que se volverá a llenar de actos institucionales, firmas de diferentes acuerdos, un sinfín de lazos rojos, un bombardeo de información sobre los puntos donde puedes realizarte la prueba del VIH, repartos de condones…

En contraste con toda esta presencia mediática en un día señalado, el resto del año no hay ni rastro del tema. Parece que ya lo conocemos todo, que existe una conciencia social real, o que ya es algo del pasado. Nada más lejos de la realidad. Sigue estando presente, muy presente, para quienes viven con el virus; y siguen estando presentes la profunda estigmatización y el cruel señalamiento de las personas seropositivas.

Recordar la lucha contra el VIH-SIDA nos trae a la mente imágenes de edificios públicos pintados de rojo, cuerpos debilitados poniendo rostro a las consecuencias del abandono y silencia institucional, siluetas en el suelo simbolizando las personas que perdían la vida en soledad y con el único apoyo de pequeñas redes de solidaridad, gritos de rabia señalando que la acción es vida. Significa poner en valor la resistencia frente al silencio. Significa poner en valor una parte de nuestra memoria. 

Cuando el virus comenzó a afectar a personas más allá de los demonizados “grupos de riesgo”, cuando el “virus rosa” también habitaba en cuerpos que cumplían la norma, fue entonces cuando comenzaron los avances médicos para paliar esta pandemia

Cuando el virus comenzó a afectar a personas más allá de los demonizados “grupos de riesgo”, cuando el “virus rosa” también habitaba en cuerpos que cumplían la norma, cuando las personas seropositivas no eran exclusivamente maricas, drogadictas o gente relacionada con el trabajo sexual, sino que también afectaba a personas “de bien”; fue entonces cuando comenzaron los avances médicos para paliar esta pandemia.

Actualmente, el acceso a medicación antiretroviral ha cambiado el paradigma de trasmisión del VIH. Pero como en todos los avances médicos, solo afecta a personas que se encuentran en determinadas latitudes geográficas y con un determinado status de ciudadanía. Sí, estoy hablando de las personas que residen en países fuera del mundo globalizado y de las personas migrantes en situación irregular. Para ellas, el acceso a la salud se limita o es inexistente. Estamos viendo la actual política de patentes para las vacunas frente a la COVID-19. Hay vacunas, sí; pero no llegan a todas las partes del mundo donde son necesarias.

Que no se nos olvide lo sucedido en esta pandemia: centros de salud saturados; personal sanitario desbordado, sin recursos y agotado; desaparición de la atención primaria y demoras en operaciones y diagnósticos que empeoran notablemente la salud comunitaria. Que esto nos sirva para poner en valor la necesidad de una salud pública, universal, de calidad y con los recursos suficientes. Sin esto, la salud comunitaria es inexistente. 

Mas allá de grandes declaraciones y actos institucionales, más allá de solapas llenas de lazos rojos, ¿dónde está la apuesta clara por la investigación? ¿Dónde queda el perdón desde las instituciones públicas por el abandono? ¿Para cuándo el reconocimiento de las decenas de miles que perdieron la vida por el abandono médico y el estigma? ¿Para cuándo la reparación a esos viudos que vieron morir a sus parejas en el más absoluto silencio y la más ignominiosa soledad? ¿Para cuándo una educación sexual pública, libre de señalamientos y prejuicios?

Seguiremos haciendo memoria de todas esas personas que fueron silenciadas y abandonadas. Seguiremos rompiendo barreras estigmatizadoras que también provocan aislamiento, estigmas y silencio. Seguiremos en el compromiso por una salud pública y unos servicios públicos dignos que garanticen vidas dignas de ser vividas y libres de toda violencia. ¡Vamos a dignificarlos desde la rabia, desde el placer y desde la alegría!

Cargando valoraciones...
Comentar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cargando relacionadas...

CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
AGANTRO
O desprazamento forzoso en Chiapas: metáfora da vida núa
Conversamos coa investigadora América Navarro sobre o desprazamento forzoso en Chiapas.
Altri
Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Salto medra contigo
O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.
Orgullo
O Orgullo Crítico enche de diversidade e de humanismo Galiza: “Transfeministas con Palestina”
Crónica visual de como unha enorme multitude encheu de diversidade o centro da cidade de Vigo.
O Teleclube
'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria
O Teleclube
'O Teleclube' pecha a temporada cos supervivintes de '28 anos despois'
Danny Boyle e Alex Garland volven ao mundo dos infectados que inspirou o renacemento dos 'zombis'.

Recomendadas

Medio rural
A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Migración
A veciñanza mobilízase para acoller migrantes tras o peche de centros de Rescate Internacional en Galiza
Tras o progresivo desmantelamento de varios dispositivos de acollida, moitos refuxiados foron trasladados a outros puntos do Estado sen aviso previo. Outros son simplemente desaloxados trala denegación da súa solicitude de asilo.
Ourense
Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.
Comentarios

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...