Sexualidad
Apuesta por el amor

El amor puede transformarse más allá de lo que cuentan las canciones. Porque, en realidad, más que ir nosotras detrás de ellas, ellas van detrás de nuestras nuevas formas de querernos.

18 ago 2019 06:56

Porque la vida, sin amor, no es nada”. Cantan Lolita y Lola, madre e hija, en una gala en Canal Sur, 1994. Imágenes de archivo con la mosca de YouTube para una siesta de verano, antes de que Lolita fuera la Lolita de hoy y mientras Lola era ya la Lola inmortal de siempre, pero se moría. Corte a: declaraciones de Lola, un fragmento de El coraje de vivir, memorias habladas, cantadas y documentadas con mucho material de archivo y producida por Antena3 también a mediados de los 90. Lola nos habla de cómo decidió “entregarse sexualmente” a una empresario, a cambio de dinero, en un hotel de Triana. “A pagar con mi cuerpo la deuda contraída”. Y cómo eso no era amor, por supuesto, nos puntualiza mirando a cámara, eye liner bien arriba.

El programa lo veo con mi tía en su casa, en la casa que fuera de mis abuelos. Las huellas familiares están cosidas aquí, los pasos perdidos. Mi tía mueve exactamente el abanico como lo hacía mi abuela: “Hay que ver qué inteligencia, pero encarnada, tenía esta señora”. Mi tía nombra, con sus propias palabras y sin saberlo, el saber situado de Donna Haraway. Desde la otra habitación suena el rumor del Tour, mi tío lo mira, mudo. O dormido. Termina la visita, trabajos de amor ganados. Me dieron de comer a cambio de intercambiar historias, de abrir la ventana, colocar unos potos, “que no llegamos ya, ni tu tío ni yo”, “mírame también la configuración de la tele antes de irte, hazme el favor, que no sé por qué ahora me salen los subtítulos de repente”.

Me viene a la memoria una de las frases más controvertidas de Haraway respecto al amor: “Haz vínculos y no bebés”. Haz tías y abuelas en vez de novios imbéciles podría ser otra versión de la cita

En la puerta, mi tía me regaña porque no he traído al niño. Que otro día no me venga directa desde el trabajo, que lo recoja y “se lo traiga” y “se lo deje” un rato. Mientras paso la mano por el pasamanos de la escalera, el mismo en el que se apoyaba mi abuela antes de la muerte de Lola, antes de la existencia de YouTube, me viene a la memoria una de las frases más controvertidas de Haraway respecto al amor: “Haz vínculos y no bebés”. Haz tías y abuelas en vez de novios imbéciles, podría ser otra versión de la cita, adaptada a esta zona de Usera-Villaverde (Madrid).

Vuelvo a casa caminando, cruzando la Glorieta de Cádiz, lejos, muy lejos, del Jerez natal de Lola. Desde mis auriculares, Triana, el grupo, canta desde una aplicación que selecciona intuitivamente música online: “Cada noche mi vida es para ti / Como un juego cualquiera / Y nada más / Y a mí me atormenta/ En el alma/ Tu frialdad”. Después, un anuncio muy refrescante nos recuerda que a nadie le gusta quedarse a medias. En nada.

Me pregunto si Google ha escuchado la conversación con mi tía y por eso me propone escuchar Triana. Y sigo pensando, no hay nada mejor para el pensar que el caminar, cómo nuestro amor también está monitorizado por las canciones, los libros, las películas, los memes… Todos nuestros recuerdos y vivencias de amor podrían entrelazarse para encontrar su lugar, su tonalidad, en la peor o la mejor letra o melodía de cualquier canción de amor, por ejemplo. En esas notas estamos cosidas con mandatos que nos indican cómo comportarnos en esa arena. Y lo mejor es que muchos de ellos tienen más que ver con la métrica, con el espacio dentro de una estrofa, que con la ideología. Recetas, mapas y consejos de amor encajados en las lyrics. Y no hablo del reguetón, tan demonizado. El pop, la copla, el rock progresivo y el metal, todas, fans y letristas, nos rendimos ante las instrucciones del misterio del amor. Ante el relato del patrón cultural, solo tenemos que ceñirnos a él. O buscar nuevos referentes. No pagar las deudas con el cuerpo, ni siquiera con lo simbólico.

Esa misma noche: “Into my arms, Oh, Lord”… Le canto a mi hijo imitando la voz grave de Nick Cave, “into my arms”… Se lo canto convirtiéndome en una deidad que emite gorgoteos ancestrales, conectada al canal de las nanas, que son milenarias porque responden a un requerimiento social muy básico, el de las personas vulnerables. También hay instrucciones a este respecto en las canciones populares. Así, nuestro amor tiene hoy en esta casa, junto a esta cuna, formas indescriptibles pero, a la vez, idénticas a cualquier amor entre madre e hijo.

Mientras tanto, se desata una tormenta, escucho gritos de la gente que estaba plácidamente achicharrada en la terraza de abajo. Y entra un SMS de mi madre. Su amor, a veces áspero, curtido en otros códigos, otra época y nanas diferentes a las que le despliego a mi hijo hoy. “Naciste en uno de los últimos años en que la lluvia no era noticia ni algo extraordinario”. Tendré que inventar nanas para la emergencia climática. El amor puede transformarse más allá de lo que cuentan las canciones. Porque, en realidad, más que ir nosotras detrás de ellas, ellas van detrás de nuestras nuevas formas de querernos, todas por inventar.

Arquivado en: Sexualidad
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cine
Lucía Delgado y Tábata Cerezo “Las escenas de intimidad van mucho más allá del sexo”
Lucía y Tábata son coordinadoras de intimidad, es decir, se ponen al servicio de una historia audiovisual para acordar, delimitar, construir escenas que pueden suponer situaciones de especial vulnerabilidad a los actores y actrices.
Feminismos
Andrea Proenza “Debemos aproximarnos a nuevos horizontes feministas en nuestra forma de amar”
‘Cartografías del deseo amoroso’ es el título de un ensayo intimista sobre chicas que quieren ser Bravo y buscan no solo el amor, sino un buen relato.
Opinión
Opinión Poliamor de derechas, poliamor de izquierdas
La no-monogamia no puede ser simplemente una etiqueta identitaria o una preferencia personal, sino una práctica material que cuestiona la propiedad privada, la privatización de los cuidados y la reproducción de los roles de género
#38565
21/8/2019 22:23

También serviría: " Haz tíos y abuelos y no novias imbéciles "

0
0
Álvaro
19/8/2019 10:27

Krudas Cubensi

0
0
LGTBIAQ+
LGTBIAQ+ Unha casualidade, unha resposta masiva e un debate incómodo: a sentenza de Samuel Luiz en contexto
O 22 de maio, o TSXG ratificaba o veredicto do xurado popular e recoñecía que o asasinato de Samuel Luiz foi un crime motivado por LGTBIfobia. O caso supuxo unha mobilización sen precedentes.
Xunta de Galicia
Política A Xunta recibe ao embaixador de Israel en funcións mentres Gaza agoniza ao bordo da fame
O Goberno de Alfonso Rueda escenifica a súa boa sintonía coa Administración de Benjamín Netanyahu apenas unhas horas despois de que Israel bombardease unha escola que servía de refuxio e ordenase unha evacuación masiva en Gaza.
O Salto medra contigo
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.

Últimas

Alemania
Litigio climático Un tribunal alemán abre la puerta a que grandes emisores puedan ser responsabilizados de daños climáticos
El jurado descarta la demanda del agricultor peruano Saúl Luciano Lliuya por entender que el riesgo a su propiedad es demasiado bajo, pero esta misma argumentación podría llevar a condenas en otros casos.
Madrid
Derecho a la vivienda Victoria contra la Sareb: 16 familias consiguen firmar contratos después de años de lucha
Un bloque en lucha de Casarrubuelos (Comunidad de Madrid) consigue formalizar contratos con el banco malo, al que acusan de actuar “como un fondo buitre”. En Catalunya, diez ayuntamientos apoyan los reclamos de 62 hogares en huelga contra La Caixa.

Recomendadas

Culturas
Erika Lust y Sara Torres “El deseo tiene una potencia inagotable para transformar la realidad si lo liberamos de las normas”
Sexo, deseo o ética del placer son algunos de los temas que hilan la escritora Sara Torres y la productora de cine porno Erika Lust en ‘La abundancia del deseo’.