We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Biodiversidad
Enroque de las partes en la COP16 con apenas un día para su clausura
La XVI Conferencia sobre Biodiversidad de la ONU se celebra entre el 21 de octubre y el 1 de noviembre en la localidad colombiana de Cali y tiene como misión bajar a tierra el Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal (MMBKM), ratificado por 196 naciones en la COP15, así como poner cifras y planes concretos al mismo. El objetivo: proteger el 30% de las áreas marinas y terrestres del planeta para el año 2030. Por el momento, apenas una treintena de países ha presentado sus planes nacionales, los instrumentos clave para que el Marco sea implementado por los países encargados de proteger una biodiversidad que desaparece mil veces más rápido de lo que debería hacerlo de forma natural.
10:50
Maratón negociadora en Cali, con avances en varias áreas
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción @jaumegraulopez
Cuando pasan más de 4 h del límite marcado para cerrar la COP, la medianoche del viernes en Colombia, sigue el Plenario final de la cumbre.
Bajo la Presidencia de la Ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, la reunión final está avanzando, con lentitud pero cerrando gradualmente algunos documentos que estaban encallados. La prueba de las dificultades en las negociaciones está en que el plenario final, previsto para las 18h de este viernes, ha comenzado pasadas las 22h.
A esta hora de la madrugada, el resultado más destacado del día es la aprobación de la creación del nuevo Órgano Subsidiario sobre los Pueblos Indígenas. E inmediatamente después se ha aprobado también el papel de los pueblos afrodescendientes. Ambas decisiones suponen hitos históricos porque reconocen la importancia de los pueblos que durante siglos han vivido en las zonas más biodiversas del planeta en un gran equilibrio con el entorno natural, que hoy en día siguen actuando como guardianes de esta naturaleza de la que se saben parte indisoluble, pero que han estado poco o nada atendidos por los Estados en los que viven. Esto abre la puerta a su acceso directo a recursos internacionales y les otorga un papel importante, al margen de los aparatos de los Estados, para opinar y decidir sobre la gestión de sus recursos naturales.
Estos acuerdos han generado una cierta ola de euforia y grandes aplausos, por su significado político, entre todos los asistentes al plenario final.
También se han adoptado las resoluciones sobre Salud y biodiversidad, sobre especies exóticas invasoras, sobre gestión sostenible de las especies silvestres, o sobre conservación de especies vegetales, entre otras.
20:48
Se agota el tiempo en Cali, y los acuerdos no llegan
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción @jaumegraulopez
Conforme pasan las horas, las delegaciones en Cali comienzan a notar el desgaste de más de dos semanas de negociaciones infinitas. Y también los observadores. A lo largo de este jueves, en ambos Grupos de Trabajo han seguido bloqueados la mayoría de los temas. La sombra de una cumbre infructuosa se cierne sobre la COP16 a esta hora.
Así, en el Grupo de Trabajo 1, comenzaba a las 21h la que puede ser la última oportunidad de llegar a consensos antes del plenario final, con prácticamente todos los textos con corchetes, indicando discrepancia entre las partes. Algunos de los temas más espinosos apenas tienen un documento más o menos limpio (llamado CRP: Conference Room Paper), aunque se mantienen discrepancias en los párrafos clave. El Grupo de Trabajo 2 se reunió también durante toda la tarde para no cerrar prácticamente ninguna resolución.
Algunos documentos sí que están ya en manos del plenario, en forma de documentos “L”, que es la última versión que ha logrado casi consensuar el grupo de trabajo, aunque pueden mantenerse diferencias importantes que impidan cerrar acuerdos incluso en plenario. Así, las decisiones sobre Gestión sostenible de la flora y fauna silvestre, sobre la Conservación de la especies vegetales, sobre Especies exóticas invasoras, sobre Áreas Marinas de importancia biológica y sobre Salud y biodiversidad, están prácticamente listas para ser aprobadas formalmente.
En otros casos, los avances son mínimos. Esto pasa con la resolución sobre el papel de los pueblos indígenas en la Convención de la Diversidad Biológica: siguen enfrentados quienes defienden que se cree un órgano subsidiario, con más atribuciones (básicamente los países latinoamericanos), y quienes prefieren que quede apenas como un grupo de trabajo (los países del norte global). Si bien el Programa de Trabajo sobre los asuntos indígenas está prácticamente cerrado, el debate se encuentra estancado a causa del órgano subsidiario y no se ve una solución clara a la vista.
En cuanto al mecanismo para la Implementación y seguimiento del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal, hay un acuerdo casi cerrado sobre la relación de indicadores de seguimiento y sus fuentes de verificación, así como la metodología para desarrollar los informes de evaluación. Destacamos en este aspecto que prácticamente todas las partes rechazaron que estos informes analicen país a país el avance en la implementación y por el contrario pidieron que el análisis fuera mundial, con propuestas de mejora pero no propuestas de obligado cumplimiento. Ambos aspectos son cuestionables pues pueden erosionar la implementación efectiva del Marco Mundial y dejan su cumplimiento expuesto a la voluntad política de cada gobierno.
En el debate sobre Cambio climático y biodiversidad, un conjunto de países (Argentina, Brasil, Perú, Rusia, Arabia Saudita) tuvieron las negociaciones estancadas durante horas por su negativa a incluir la referencia que un aumento de la temperatura global de 2ºC representa amenazas mucho más serias para la biodiversidad mundial que si ese aumento quedase limitado a 1,5ºC. No hay ninguna certeza que el texto se pueda desbloquear para ser aprobado en la última jornada de hoy.
Por último, el otro gran tema de la Cumbre, el de la financiación, sigue gravemente encallado. Ninguno de sus documentos han sido remitidos aun al plenario final. El documento sobre la Estrategia para la movilización de recursos fue discutido extensamente y solo ayer, los copresidentes del grupo de trabajo lanzaron un poco a la desesperada una última versión con la esperanza de lograr el consenso. El otro gran documento de este tema es el mecanismo financiero. Todas las partes están de acuerdo que la financiación de las políticas de conservación de la biodiversidad para los países del sur que necesitan desarrollarse son totalmente insuficientes. Pero ahí acaba el consenso. Prácticamente todo el documento de trabajo sigue entre corchetes, con propuestas muy enfrentadas. Parece que se está abandonando la propuesta de crear un nuevo fondo específico para la aplicación del MMB-KM, y en su lugar algunos países reclaman una reforma integral del Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF) que analice por qué muchos países no pueden acceder a él, y que se dote ampliamente de fondos públicos. Otro apuestan por incrementar la financiación privada, mediante “mecanismos innovadores” que ya sabemos que pueden responder a mecanismos de mercantilización de la biodiversidad (créditos y compensaciones). También se ha propuesto que parte del Fondo se gestione a través de las instituciones financieras internacionales (las ultraliberales Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional). También, y mucho más interesante, países como Bolivia siguen reclamando que se adopte el enfoque de “acciones basadas en la Madre Tierra”, un enfoque ecocéntrico, también en el uso de fondos financieros para la biodiversidad. El documento es tan extraordinariamente complejo que planea la sombra de un aplazamiento hasta la próxima COP17. Si fuera el caso, se formularía el encargo para que los órganos subsidiarios del Convenio trabajaran en una nueva propuesta en el período entre sesiones de la COP (2 años) para volver con un documento nuevo, pero ello llevaría a un retraso considerable en la aplicación del MMB.
Por último, resulta destacable que ayer a última hora la plenaria consideró las propuestas de los países para acoger la próxima COP17 en 2026. La propuesta de Azerbaijan recogió 58 votos, mientras que la de Armenia obtuvo 65, quedando esta última designada como sede de la próxima Conferencia de las Partes.
15:44
Se agota el tiempo en Cali, y los acuerdos no llegan
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción @jaumegraulopez
Conforme pasan las horas, las delegaciones en Cali comienzan a notar el desgaste de más de dos semanas de negociaciones infinitas. Y también los observadores. A lo largo de este jueves, en ambos Grupos de Trabajo han seguido bloqueados la mayoría de los temas. La sombra de una cumbre infructuosa se cierne sobre la COP16 a esta hora.
Así, en el Grupo de Trabajo 1, comenzaba a las 21h la que puede ser la última oportunidad de llegar a consensos antes del plenario final, con prácticamente todos los textos con corchetes, indicando discrepancia entre las partes. Algunos de los temas más espinosos apenas tienen un documento más o menos limpio (llamado CRP: Conference Room Paper), aunque se mantienen discrepancias en los párrafos clave. El Grupo de Trabajo 2 se reunió también durante toda la tarde para no cerrar prácticamente ninguna resolución.
Algunos documentos sí que están ya en manos del plenario, en forma de documentos “L”, que es la ultima versión que ha logrado casi consensuar el grupo de trabajo, aunque pueden mantenerse diferencias importantes que impidan cerrar acuerdos incluso en plenario. Así, las decisiones sobre Gestión sostenible de la flora y fauna silvestre, sobre la Conservación de la especies vegetales, sobre Especies exóticas invasoras, sobre Áreas Marinas de importancia biológica y sobre Salud y biodiversidad, están prácticamente listas para ser aprobadas formalmente.
En otros casos, los avances son mínimos. Esto pasa con la resolución sobre el papel de los pueblos indígenas en la Convención de la Diversidad Biológica: siguen enfrentados quienes defienden que se cree un órgano subsidiario, con más atribuciones (básicamente los países latinoamericanos), y quienes prefieren que quede apenas como un grupo de trabajo (los países del norte global). Si bien el Programa de Trabajo sobre los asuntos indígenas está prácticamente cerrado, el debate se encuentra estancado a causa del órgano subsidiario y no se ve una solución clara a la vista.
En cuanto al mecanismo para la Implementación y seguimiento del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal, hay un acuerdo casi cerrado sobre la relación de indicadores de seguimiento y sus fuentes de verificación, así como la metodología para desarrollar los informes de evaluación. Destacamos en este aspecto que prácticamente todas las partes rechazaron que estos informes analicen país a país el avance en la implementación y por el contrario pidieron que el análisis fuera mundial, con propuestas de mejora pero no propuestas de obligado cumplimiento. Ambos aspectos son cuestionables pues pueden erosionar la implementación efectiva del Marco Mundial y dejan su cumplimiento expuesto a la voluntad política de cada gobierno.
En el debate sobre Cambio climático y biodiversidad, un conjunto de países (Argentina, Brasil, Perú, Rusia, Arabia Saudita) tuvieron las negociaciones estancadas durante horas por su negativa a incluir la referencia que un aumento de la temperatura global de 2ºC representa amenazas mucho más serias para la biodiversidad mundial que si ese aumento quedase limitado a 1,5ºC. No hay ninguna certeza que el texto se pueda desbloquear para ser aprobado en la última jornada de hoy.
Por último, el otro gran tema de la Cumbre, el de la financiación, sigue gravemente encallado. Ninguno de sus documentos han sido remitidos aun al plenario final. El documento sobre la Estrategia para la movilización de recursos fue discutido extensamente y solo ayer, los copresidentes del grupo de trabajo lanzaron un poco a la desesperada una última versión con la esperanza de lograr el consenso. El otro gran documento de este tema es el mecanismo financiero. Todas las partes están de acuerdo que la financiación de las políticas de conservación de la biodiversidad para los países del sur que necesitan desarrollarse son totalmente insuficientes. Pero ahí acaba el consenso. Prácticamente todo el documento de trabajo sigue entre corchetes, con propuestas muy enfrentadas. Parece que se está abandonando la propuesta de crear un nuevo fondo específico para la aplicación del MMB-KM, y en su lugar algunos países reclaman una reforma integral del Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF) que analice por que muchos países no pueden acceder a él, y que se dote ampliamente de fondos públicos. Otro apuestan por incrementar la financiación privada, mediante “mecanismos innovadores” que ya sabemos que pueden responder a mecanismos de mercantilización de la biodiversidad (créditos y compensaciones). También se ha propuesto que parte del Fondo se gestione a través de las instituciones financieras internacionales (las ultraliberales Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional). También, y mucho más interesante, países como Bolivia siguen reclamando que se adopte el enfoque de “acciones basadas en la Madre Tierra”, un enfoque ecocéntrico, también en el uso de fondos financieros para la biodiversidad. El documento es tan extraordinariamente complejo que planea la sombra de un aplazamiento hasta la próxima COP17. Si fuera el caso, se formularía el encargo para que los órganos subsidiarios del Convenio trabajaran en una nueva propuesta en el período entre sesiones de la COP (2 años) para volver con un documento nuevo, pero ello llevaría a un retraso considerable en la aplicación del MMB.
Por último, resulta destacable que ayer a última hora la plenaria consideró las propuestas de los países para acoger la próxima COP17 en 2026. La propuesta de Azerbaijan recogió 58 votos, mientras que la de Armenia obtuvo 65, quedando esta última designada como sede de la próxima Conferencia de las Partes.
31 oct 2024 10:26 , Cali, Colombia
Jornadas de intensas reuniones a todos los niveles
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
Este miércoles han seguido las negociaciones en la COP16, con múltiples Grupos de Contacto paralelos sobre los temas más espinosos de esta cumbre.
En la carpeta sobre biología sintética y de información sobre secuencias digitales genéticas, se acumulan ya ocho reuniones de trabajo sin que todavía se pueda vislumbrar un acuerdo definitivo. Las partes siguen enrocadas en sus posiciones y los negociadores de los países más favorables a las desregulaciones y la libertad de mercado se enfrentan a los más cautos y que abogan por el principio de precaución. En relación a la financiación, sigue el pulso entre los países más empobrecidos, sobre todo los africanos y algunas economías ricas del norte. Los africanos insisten en más financiación y un mecanismo para vehicular los fondos de desarrollo respetuosos con la biodiversidad que sea específico del Convenio de Diversidad Biológica, pero el resto de partes no parece que vaya a ceder y el documento se acerca a una situación de bloqueo que podría aplazar dos años la decisión final.
António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, ha tenido una agenda cargada de reuniones con los principales bloques de negociación, con el Secretariado del propio Convenio, además de actos públicos diversos. Entre otros, Guterres se ha reunido con una delegación de la sociedad civil compuesta por representantes de las organizaciones de mujeres, de pueblos indígenas y de ONG que participan en esta COP. Guterres ha mostrado una sintonía casi total con las reivindicaciones sociales, incluyendo la preocupación por la presencia apabullante de las empresas privadas en la cumbre. A última hora del día, El secretario general tuvo tiempo de publicar en la red X, apremiando a las partes a llegar a acuerdos ambiciosos en los últimos dos días.
Las organizaciones de defensa ambiental, organizadas alrededor de la Alianza de la CDB, mantuvieron encuentros con diversos responsables políticos europeos. Así, el jefe de la delegación del Parlamento Europeo en la COP16, César Luena (PSOE), se encontró con una decena de activistas para escuchar sus preocupaciones sobre asuntos ambientales europeos: la reducción de la protección del lobo, el Reglamento contra la Deforestación, la Ley de Restauración de la Naturaleza, la Directiva Hábitats o la necesidad de más fondos europeos para conservación y restauración. Así lo explicó en la red X.
Poco después, la eurodiputada del grupo de la Izquierda Europea, Carola Rackete, se encontró también con representantes de organizaciones europeas para intercambiar opiniones. Rackete planteó su gran preocupación por la ofensiva de las grandes corporaciones en la COP16, apostando por mecanismos de mercantilización de la naturaleza como los créditos y las compensaciones de biodiversidad, así como por los derechos humanos y de las poblaciones indígenas que son vulnerados en paralelo a la destrucción de la naturaleza. La Eurodiputada reconoció que con un Parlamento Europeo escorado a la derecha y la ultraderecha resulta extremadamente difícil defender una agenda verde europea, pero se comprometió a apoyar las reivindicaciones de los grupos ecologistas y de defensa de los derechos humanos.
Por último, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, en su calidad de máximo representante español en la cumbre, atendió la petición de realizar un encuentro que le formuló Ecologistas en Acción. En esta reunión, con todos los presentes consternados por la tragedia derivada de la DANA, Morán reconoció que en España hay un grave desconocimiento de la magnitud de la crisis de biodiversidad. Prueba de ello es la ausencia casi total de medios de comunicación españoles, y el hecho que la cumbre no haya aparecido en ninguna portada de ningún diario o televisión. Se comprometió, en función de sus posibilidades, a trabajar para que el conocimiento científico sobre la crisis tenga más alcance mediático y social. Morán también reflexionó sobre la necesidad de detener los flujos financieros que siguen impulsando la destrucción de la biodiversidad, tanto desde el ámbito público en forma de subsidios como desde las instituciones financieras privadas mundiales.
30 oct 2024 11:14 , Cali, Colombia
Gustavo Petro: “Se tienen que tomar las decisiones para una revolución mundial”
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
El segmento de alto nivel de la COP16 de Cali fue protagonizado este lunes por Gustavo Petro, presidente de la República de Colombia, quien realizó una intervención de alto voltaje como pocas veces se ve en las cubres internacionales. Petro, un político poco convencional, se caracteriza por combinar contundencia en sus discursos claramente de izquierdas, con unas formas respetuosas y mesuradas, muy alejado de algunos referentes clásicos de la izquierda latinoamericana.
El presidente colombiano, hablando ante 196 delegaciones que incluían seis jefes de Estado y numerosos ministros y ministras, comenzó alertando que la crisis ecológica actual no sitúa en una emergencia equiparable a 1933, cuando el partido nazi alcanzó el poder en Alemania, pero en este caso nos situamos frente a un auténtico apocalipsis global de la vida. “Lo que estamos viviendo es peor que el apocalipsis. Los tiempos de extinción traen tensiones y expresiones políticas distintas. Las crisis climáticas se reflejan en esas expresiones políticas”, señaló.
La emergencia requiere de soluciones que sean protagonizadas no por los líderes sino por los pueblos del mundo, puesto que la extinción de biodiversidad anticipa una extinción de la humanidad.
La cumbre se celebra en Cali, en una ciudad vibrante y alegre, porque es una de las capitales de la biodiversidad en Colombia y, por extensión, del mundo. Y Colombia quiere mostrar con esta COP16 sus ambiciones de mayor democracia, de pacificación de un conflicto armado en proceso de enfriarse, y de reconciliación con su naturaleza. Destacó el presidente que no quisieron organizar una cumbre en un lugar desértico ni aislado, puesto que es con el pueblo con que hay que contar.
“Se necesitan otros modos de producción para proteger la vida planetaria y la de la humanidad”, dijo Petro
La mayor parte del alegato fue para denunciar que la codicia de los poderosos es la principal amenaza a la vida en el planeta. Una codicia que desata las crisis climática y de biodiversidad, y que está por tanto contra la vida y contra la misma humanidad. La única prioridad, de las grandes compañías y las grandes fortunas, es maximizar la ganancia, aunque ello lleve a la destrucción. Por ello, Petro reclamó construir otra manera de producir, que esté en armonía con el planeta y la humanidad, evitando tanto afectar a la biodiversidad como la explotación de las personas. Y para ello hace falta más política. “Se necesitan otros modos de producción para proteger la vida planetaria y la de la humanidad. Debemos buscar un equilibrio entre producción, consumo y sostenibilidad en el planeta”, señalaba el mandatario.
El máximo dirigente del país, reclamó además decir las cosas por su nombre, sin ambigüedades, y por ello denunció la dictadura de petróleo, causa de la crisis climática y buena parte de la de biodiversidad, y sobre el cual apenas se habla en las COP de clima. La urgencia, sin embargo, es tal que no hay ni un momento que perder.
Tampoco perdió la oportunidad de criticar cómo el capital mundial (y los estados del Norte Global, aunque no los mencionó) desprecian la vida lanzando bombas que valen millones de dólares sobre la población civil de Gaza, solo por ser musulmanes y los habitantes originales de aquel territorio. Los mismos países que luego dicen no tener dinero para apoyar al desarrollo de los del sur.
Se está hablando ampliamente sobre financiación en esta COP y en este punto quiso Petro abrir un nuevo melón: el de la deuda externa. Denunció que los países del Sur global están atenazados por el pago de ésta, y que el principal dueño de esa deuda es ahora mismo China. Esta deuda impide el desarrollo de los países del sur, los cuales son “ordeñados y explotados” por un sistema que los penaliza con unas primas de riesgo exageradas, bajo la justificación que son “países de alto riesgo”. Ahí, Petro reclamó que se reoriente esa deuda —no llegó a pedir la condonación— garantizando unas primas mínimas que permitan respirar a las economías de esos países y así impulsar políticas publicas como la protección de la naturaleza.
Más aun, el presidente dijo que los países del Sur en general son quienes más y mejor cuidan la vida, pues son más biodiversos y, por tanto, más fiables porque han sabido vivir respetando la naturaleza, mientras que los países del norte, con la deuda más baja, son los que realmente implican un peligro por sus políticas históricas y actuales.
Acabó la intervención haciendo un alegato por cambiar las cosas de raíz. Dijo Petro que necesitamos una revolución, pero no una revolución contra la vida sino a favor de preservar la vida. “Los pueblos del mundo se tienen que tomar las decisiones para una revolución mundial que es lo que necesitamos en realidad”, señalaba Por eso han organizado la COP16 en Cali, ciudad afamada por el carácter abierto, festivo y alegre de su población. Y es que, sin alegría no hay revolución, djo Petro.
30 oct 2024 10:45 , Cali, Colombia
Los campeones ultraliberales, bloqueando la COP
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
A medida que avanza la COP16 en Cali, las posiciones se vuelven más encontradas. Se ha conformado un pequeño bloque de países con posiciones ultraliberales alineadas con las grandes corporaciones, integrado por Argentina, Brasil, Canadá y, eventualmente, Japón, Australia y Reino Unido, entre otros.
En una de las carpetas más importantes, la regulación de la Biología sintética y nuevas técnicas de ingeniería genética, este bloque se opone férreamente al control estricto, que se basa en el enfoque del principio de precaución y aboga por limitar este tipo de actividades a experimentos estrictamente en laboratorio, bajo la supervisión de un organismo científico independiente y sin conflictos de intereses, y con un plan de trabajo dentro de la Convención de Diversidad Biológica. En este asunto, también se está reclamando desde las organizaciones sociales la transferencia de conocimientos y la formación para que los países del Sur global puedan evaluar adecuadamente los riesgos sobre la salud y el medio ambiente de este tipo de nuevas técnicas genéticas, cosa que parece no interesar a los países bloqueadores, que defienden a ultranza este tipo de nuevas tecnologías.
Del mismo modo, en el debate sobre Cambio Climático y Biodiversidad, Argentina, Brasil y Canadá propusieron eliminar la referencia a las salvaguardas y alertas que sobre las acciones de geoingeniería (alteración artificial del clima mundial) han aportado los organismos científicos del Convenio de Biodiversidad y el Convenio de Cambio Climático, el IPBES y el IPCC respectivamente. En este asunto, el papel de la UE así como de países como Colombia o Bolivia, es coherente con el conocimiento científico, no aceptando la eliminación de esos párrafos del acuerdo, que sigue por tanto bloqueado.
En cuanto a la financiación, el debate evoluciona claramente hacia tres posiciones diferenciadas. Por un lado, el Grupo Africano reclama la creación de un Fondo específico para la Biodiversidad diferenciado del Fondo Mundial de Medio Ambiente (GEF), que no consideran eficaz ni confiable. Por otro, países que plantean que esto es inapropiado y atrasaría la transferencia de recursos, y por eso bloquean esta decisión. Es la posición de la UE, Reino Unido o Japón, entre otros. Por último, un tercer grupo plantea mantener el GEF pero estudiando qué se puede hacer para mejorar su eficacia, sin cerrar la puerta a crear ese nuevo fondo si el GEF no es reformable. Esta es la propuesta de Colombia, pero, de tomarse seta, atrasaría la decisión a la COP17 en 2026.
El debate sobre la implementación del Marco Mundial de Biodiversidad (MMBKM) también está encallado. Se ha desarrollado un conjunto de indicadores e instrumentos de verificación del cumplimiento del Marco bajo criterios tecnicocientíficos. Pero Brasil y Argentina pretenden que no se incluya el control y supervisión de la implementación del MMBKM dentro de los mecanismos multilaterales como la propia COP, cosa que bloquea el acuerdo en el documento sobre implementación y reportes de cara a la COP17.
La presidenta de la COP16, la Ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia, Susana Muhamad, al cierre del Segmento de Alto Nivel del lunes —que ha contado con la participación de decenas de ministros y ministras y jefes de delegación—, consciente de estas grandes dificultades para avanzar, ha hecho un llamamiento a todas las partes a trabajar con voluntad de acuerdo y generosidad para lograr acuerdos en los próximos tres días.
Efectivamente, algunos elementos que no están avanzando podrían quedar bloqueados y no llegarse a decisiones operativas en esta COP. Esto significaría aplazar algunos temas esenciales por dos años. Aunque es cierto que la Presidencia de la COP tiene el derecho de presentar las últimas versiones de los documentos de acuerdo al Plenario, forzando las cosas en el último momento. Sería deseable no llegar a ese punto.
---
Ecologistas en Acción participa en COP16 con un representante acreditado como observador oficial, Jaume Grau López. Mediante este espacio realizaremos un seguimiento diario del desarrollo de las negociaciones en dicha cumbre, así como una exposición de los grandes temas en debate y los acuerdos que se logren a su finalización
29 oct 2024 17:01
Escenario preocupante
“La situación actual plantea un escenario preocupante e ineficaz si no se adoptan medidas de monitoreo obligatorias y precisas sobre los compromisos adquiridos”. Este es el dictamen que realiza la organización ecologista SEO Birdlife respecto a la COP16, una cumbre que ven “en riesgo de fracasar” cuando solo quedan cuatro días para que finalice.
En un comunicado hecho hoy público, la ONG alerta de que se “repita el fracaso de las Metas de Aichi de hace quince años” y denuncia que los mecanismos para implementar y monitorear los objetivos aprobados hace dos años en la COP15 que se están negociando en Cali “son insuficientes, lo que amenaza con dejar los compromisos en simples aspiraciones voluntarias, difíciles de cumplir y aún más difíciles de evaluar”.
Especial preocupación muestra la organización por la integración de los objetivos de biodiversidad en las políticas sectoriales, conocidos como mainstreaming. “Es fundamental para abordar las causas de la pérdida de biodiversidad, como lo indica la última evaluación global de IPBES (Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas), que identifica sectores como la agricultura, pesca, minería y silvicultura como los principales impulsores de esta crisis”.
Si bien es cierto que en la COP15 de Montreal las partes disponían de un documento ambicioso que proponía integrar la biodiversidad en políticas sectoriales, la realidad es que este no llegó a discutirse ni a aprobarse”. “En la COP16, no solo el texto inicial era menos ambicioso, sino que se ha debilitado aún más en el proceso de negociación”, alertan, con países como Brasil y Argentina oponiéndose firmemente a éste y dificultando el establecimiento de compromisos claros que ataquen las causas de la pérdida de biodiversidad.
También alertan desde SEO los problemas en las negociaciones sobre los sistemas de seguimiento de los acuerdos sobre el Marco. “A pesar de la urgencia de contar con mecanismos sólidos de monitoreo, la mayoría de los desgloses propuestos se han mantenido como opcionales, limitando significativamente la precisión del sistema de evaluación”, lamentan.
29 oct 2024 16:28 , Cali, Colombia
¿Cuánto valen 20 jaguares o un humedal de 30 hectáreas?
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
Los fondos de inversión están desinvirtiendo en créditos de carbono y empezando a apostar masivamente en créditos de biodiversidad. No es un rumor, es una realidad de los mercados financieros de hoy, algo sin duda muy significativo.
El carbono sigue emitiéndose pese a los mercados de emisiones, y parece que no es un sector muy rentable para los inversores, mientras que se están abriendo grandes expectativas de beneficios en los mercados de biodiversidad. Ayer lunes, las ONG presentes en la COP16 organizaron una protesta frente a la sala de negociaciones plenaria, con pancartas y cánticos contra la mercantilización de la naturaleza, y por la defensa de la biodiversidad y los derechos humanos.
Pero, ¿en qué consisten los créditos de biodiversidad o los mercados de biodiversidad? Se trata de una serie de mecanismos con nombres diversos (sistemas de pérdida neta cero, sistemas de ganancia neta, bancos de hábitats, bancos de biodiversidad...), mediante los cuales se invierte dinero en acciones de conservación de hábitats o especies y sobre las cuales un organismo público otorga una unidad de valor llamado “crédito”. Estos créditos pueden ser entonces negociados, comprados y vendidos, en un mercado, a un precio libre pactado por las partes.
¿Y quién tendría interés en comprar estos “créditos”? Básicamente, las grandes empresas que realizan actuaciones con impacto directo sobre la biodiversidad (extractivas, petroleras, agroindustriales, químicas, etc.) a las cuales se les ofrecería la opción de “compensar” su impacto destructivo en un lugar mediante la compra de créditos de biodiversidad. Son, por tanto, mecanismos de flexibilidad mediante los cuales se pretende que el mercado regule las acciones con mayor impacto ambiental de las empresas que no pueden o no quieren evitar o minimizar.
En lugar de los créditos y compensaciones de biodiversidad, las organizaciones sociales reclaman que se adopten verdaderas medidas de conservación, reformando totalmente el modelo económico basado en el crecimiento permanente
En el marco de la Convención de la Diversidad Biológica, hay un potente lobby formado por corporaciones multinacionales y organizaciones empresariales (la CEOE o grandes bancos como el BBVA o el Santander tienen presencia en la COP16 en Cali), con el apoyo de numerosos países, incluida la UE, para promocionar este tipo de mecanismos en el corto plazo. Plantean que esta sería una estrategia para favorecer la “participación privada en financiar la conservación de la biodiversidad” y así alcanzar el objetivo de 200.000 millones de euros anuales en 2030.
Precisamente, la UE está siendo un agente activo, abanderado de este tipo de mecanismos de mercado. Este lunes mismo, los 27 han ofrecido un acto público para promocionar su enfoque y explicar el desarrollo de planes piloto en este sentido en países como Francia, Estonia o Irlanda. Repitiendo eslóganes como el “respeto por las poblaciones locales”, la “transparencia y participación” o los “enfoques innovadores para implicar al sector privado en la conservación de la vida”, pretenden hacer este tipo de medidas más amigables.
Pero las organizaciones sociales alertan de los peligros de estos enfoques de mercado.
En primer lugar, se trata de una cuestión ética: poner precio a la vida, sean especies o ecosistemas, es totalmente inaceptable, una visión terriblemente utilitaria y antropocéntrica.
En segundo lugar, hay graves problemas operativos que hacen inviable la propuesta. Quizás en términos de clima pueda existir una “unidad” clara y sencilla de medir (toneladas de carbono en la atmósfera), pero esto no sucede con los seres vivos. Para empezar, desconocemos todavía un altísimo porcentaje de las especies que habitan el planeta (se han descrito menos de un millón de los ocho millones que se estima que pueblan la Tierra), y más aún desconocemos los detalles de las complejas redes ecológicas tejidas por todos esos seres vivos. Por tanto, ¿cómo va a ser posible reproducir sistemas biológicos que esencialmente desconocemos? Incluso usando versiones simplificadas, en las que tomamos un número reducido de “especies paraguas” que nos parecen representativas de todo un ecosistema, ¿qué garantías tenemos que un hábitat “creado” en un lugar bajo la lógica de los créditos de biodiversidad vaya a funcionar adecuadamente y reproducir la riqueza del hábitat original?
En tercer lugar, el impulso a este tipo de mercados puede generar una presión para crear nuevos ecosistemas que contabilicen como créditos de biodiversidad, a costa de otro tipo de usos del suelo, que muy probablemente serán tierras agrarias y, con toda seguridad, en propiedad o gestionadas por pequeños propietarios o pueblos indígenas. Ello puede potencialmente derivar en la afectación directa e incluso expulsión de las poblaciones locales al ser incompatibles con la recreación del hábitat virgen que se pretende destruir en otro lugar. Además de la pérdida de tierras agrarias para el sustento de la población.
Hay que tener en cuenta las proyecciones de crecimiento de la actividad económica para los próximos años. Se pronostica que la agroindustria necesitará expandirse en 2.100 millones de hectáreas para 2050. Que el crecimiento de áreas urbanas será del 80 al 120% en comparación con el del año 2000. Que se construirán 25 millones de kilómetros de nuevas carreteras y 335.000 km de vías de ferrocarril para 2050. Que la extracción de minerales estratégicos se multiplique entre tres y siete veces respecto los niveles actuales, con algunos minerales como el litio multiplicando por 40 su demanda. O que la demanda de biomasa para agrocombustibles “limpios” se dispare con monocultivos de árboles y cultivos como la palma, la soja o la caña. ¿Cuánta superficie terrestre haría falta para “compensar” los impactos inevitables sobre los ecosistemas? ¿Dónde está la tierra disponible para esta “compensación”?
Adicionalmente, como puede observarse, en estos modelos de “compensaciones”, el dinero invertido por el sector privado en realidad no revierte en ninguna mejora de la biodiversidad sino, en el mejor de los casos, en evitar la pérdida neta de biodiversidad, cosa que en realidad ya hemos visto que es irreal. Por tanto, contabilizar estas inversiones privadas como financiación privada de la conservación (como parte de esos 200.000 millones al año en 2030) es una falsedad.
Este tipo de esquemas lo que permiten es que se mantengan las acciones que dañan y degradan la naturaleza, aplazando el necesario cambio de modelo económico
Por otro lado, están los aspectos sociales e intangibles. Aun en el hipotético caso que fuera posible reproducir con exactitud un hábitat perdido, o una población de una especie amenazada que mejora en el lugar A compensase la población destruida en el lugar B, ¿es acaso esto indiferente para las poblaciones que ven parte de su naturaleza devastada? A una comunidad que vive en relación harmoniosa con su río, bosque, laguna o prado, a menudo elementos sagrados para muchas poblaciones, ¿le compensa que se conserve un hábitat similar en otro sitio a cambio de destruir su territorio para, por ejemplo, abrir una mina de litio o plantar un monocultivo de soja o de algodón? La respuesta a estas preguntas es obviamente no.
En último término, este tipo de esquemas lo que permiten es que se mantengan las acciones que dañan y degradan la naturaleza, aplazando el necesario cambio de modelo económico. Se benefician las corporaciones, especialmente las del norte global que son quienes tienen la capacidad económica de pagar por destruir, así como los fondos de inversión que pueden diversificar su cartera a nuevos activos. Y además, corren el riesgo de fracasar en el sentido de incentivar económicamente cambios en las empresas hacia actividades menos impactantes, cuando en un mercado especulativo el precio de los créditos se hunda por un exceso de oferta o cambios políticos o regulatorios.
Es por todo ello que las organizaciones sociales de todo el mundo se manifiestan abiertamente en contra de la adopción de esta clase de mecanismos de mercado, calificándolos como “falsas soluciones para falsos problemas” dentro de una lógica neoliberal y mercantilista.
En lugar de los créditos y compensaciones de biodiversidad, las organizaciones sociales reclaman que se adopten verdaderas medidas de conservación, reformando totalmente el modelo económico basado en el crecimiento permanente como gran dogma (se invierten anualmente 2,5 billones de dólares al año en actividades destructivas de la naturaleza), se eliminen los subsidios perversos para la biodiversidad (anualmente se transfieren 500.000 millones de dólares de presupuestos públicos a actividades insostenibles) y se apueste por la restauración de ecosistemas degradados, con respeto a las poblaciones locales y pueblos indígenas y acabando con el neocolonialismo sobre el Sur Global.
---
Ecologistas en Acción participa en la COP16 con un representante acreditado como observador oficial, Jaume Grau López. Mediante este espacio realizaremos un seguimiento diario del desarrollo de las negociaciones en dicha cumbre, así como una exposición de los grandes temas en debate y los acuerdos que se logren a su finalización
28 oct 2024 16:29
Una financiación que no llega
“La COP16 podría lograr avances significativos en la protección de la naturaleza, pero estos se ven retenidos mientras los Gobiernos discuten sobre la creación de un nuevo fondo para el dinero restante que aún no ha llegado”. La frase de la experta en Políticas de Biodiversidad de Greenpeace Internacional, An Lambrechts, resume el principal problema al que se enfrenta la Cumbre sobre Biodiversidad de Cali cuando comienza su segunda semana.
Mientras desde la comunicación oficial de la presidencia colombiana de la COP se señala que la cita “continúa esta semana con la expectativa de que surjan compromisos y anuncios históricos en torno a financiamiento y biodiversidad”, lo cierto es que esos anuncios brillan por su ausencia.
Los compromisos actuales ni siquiera llegan al monto anual acordado en 2022 en la COP15 de Montreal: 20.000 millones de dólares anuales para financiar las medidas de conservación de la biodiversidad en el sur global. Mucho menos cerca de cumplirse están los compromisos posteriores, 30.000 millones anuales de 2025 a 2030, con unos flujos financieros totales hacia el Sur global de 200.000 millones en total.
Desde las organizaciones ecologistas, además, denuncian que “representantes bien pagados de la industria están haciendo lo posible por socavar el progreso para asegurar que puedan seguir lucrando de la naturaleza sin costo alguno”.
Para Estefanía González, directora adjunta de Campañas de Greenpeace Andino: “Cada día que pasa sin cumplir los compromisos acordados es una oportunidad perdida para proteger la biodiversidad. Los países con mayores recursos tienen tanto la capacidad como la responsabilidad de impulsar el cambio, cumpliendo con los objetivos acordados y apoyando a quienes enfrentan los mayores impactos de la pérdida de biodiversidad”.
26 oct 2024 12:30 , Cali, Colombia
Jugando a ser dioses: la amenaza de las nuevas técnicas de ingeniería genética
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
Los impulsores genéticos son organismos diseñados para propagar en la naturaleza modificaciones genéticas creadas en el laboratorio. El objetivo de su desarrollo es sustituir a las poblaciones silvestres por organismos modificados genéticamente, o incluso exterminarlas.
La biología sintética es un conjunto de tecnologías que se basan en crear nuevos organismos programables, es decir, crea seres vivos (de momento, microorganismos) a la carta que se comportan como máquinas bioquímicas para obtener un determinado beneficio.
Un grupo de organizaciones internacionales, de activistas y también de investigadores en justicia ambiental y en nuevas tecnologías, han elaborado un informe que analiza los riesgos de la biología sintética.
Más aún, este conjunto de tecnologías se están integrando en estos momentos con la Inteligencia Artificial, haciendo que sean las máquinas quienes diseñen nuevos organismos vivos, en teoría con un objetivo determinado que pueda generar beneficios y no riesgos. En las negociaciones de la COP16 se está abordando este tipo de tecnologías genéticas bajo una perspectiva excesivamente orientada a satisfacer a la industria y no a proteger a la naturaleza y la salud de las personas.
En este contexto, las peticiones de las organizaciones sociales son claras:
A.-Incorporar los principios y elementos del análisis de perspectivas, la supervisión y la evaluación, dentro de las propuestas para la formación y el desarrollo, el acceso a la tecnología y su transferencia y el intercambio de conocimientos.
—Garantizar que los esfuerzos de formación y desarrollo doten a los países en desarrollo de la capacidad para analizar perspectivas, supervisar y evaluar las tecnologías de biología sintética, de modo que no soporten de forma desigual la mayor parte de los riesgos.
—Garantizar que las tecnologías que se transfieran sean adecuadas a nivel local y respetuosas con el medio ambiente, mediante una evaluación tecnológica sólida, para evitar el “dumping tecnológico” injusto en los países en desarrollo.
—Preparar el plan de acción temático propuesto para apoyar la capacitación y el desarrollo, el acceso a la transferencia de tecnología y el intercambio de conocimientos.
B.-Proseguir el análisis de perspectivas amplia y periódicamente, el seguimiento y la evaluación de los avances tecnológicos más recientes en biología sintética de forma preventiva y multidisciplinar.
—Ampliar el proceso amplio y periódico de análisis de perspectivas, supervisión y evaluación.
—Acoger los resultados del Grupo de Trabajo Multidisciplinar Ad-hoc sobre biología sintética y reimpulsarlo en el próximo periodo.
—Encargar al Grupo de Trabajo Multidisciplinar Ad-hoc que lleve a cabo una evaluación en profundidad de los organismos vivos modificados que contengan impulsores genéticos de ingeniería, “vacunas autopropagables”, así como la integración de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático con la biología sintética.
—Garantizar que el proceso y el Grupo de Trabajo Ad-hoc sean de naturaleza multidisciplinar, incluyendo la participación plena y efectiva de los pueblos indígenas y las comunidades locales, las mujeres y los jóvenes.
—Actualizar la revisión bibliográfica para tener en cuenta consideraciones ecológicas, socioeconómicas, éticas y culturales.
El despliegue de tecnologías potencialmente arriesgadas, irreversibles, ineficaces o inadecuadas justifica la aplicación del principio de precaución. Es urgente analizar las perspectivas de lo que puede suceder en el futuro y evaluar en profundidad y de forma multidisciplinar sus posibles efectos sobre la biodiversidad, la salud humana y el bienestar.
Las organizaciones sociales reclaman al Gobierno español y a la Unión Europea que no renuncie a ninguno de estos puntos. Este viernes trasladaron sus inquietudes a la delegación española para que los eleve a la representación conjunta de la Unión Europea, si procede.
26 oct 2024 12:03 , Cali, Colombia
Los pescadores artesanales de América Latina reclaman que se les escuche
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
Cada mañana, las organizaciones presentes en la COP16 se encuentran para compartir información de las negociaciones del día anterior, exponer las prioridades de las organizaciones y compartir la agenda para el día, en una coordinación que permite fortalecer el trabajo de la red de organizaciones ambientales.
En la jornada de ayer, la joven Red Iberoamericana de Pesca Artesanal se unió al encuentro de ONG para presentarse y exponer sus prioridades. Se trata de una red compuesta por más de 20 millones de pescadores de América Latina, España y Portugal, que tienen en común ser trabajadores locales de pequeña escala y que explotan de manera sostenible y selectiva el recurso pesquero.
En el encuentro plantearon cómo han venido hasta Cali para reclamar que se les escuche. Son quienes llevan siglos viviendo del mar de una manera respetuosa, solo obteniendo lo que necesitan para su alimentación y para ganar su sustento, pero sin comprometer el futuro. Y se lamentan que hasta ahora las decisiones sobre la protección de la biodiversidad costera y marina no les han tenido en cuenta. Por eso, reclaman a las partes del Convenio que no imponga soluciones ni medidas generales, sino que se apliquen a cada territorio de acuerdo también a la población local.
25 oct 2024 13:58 , Cali, Colombia
El debate sobre financiación, estancado
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
Las partes en la COP16 han entrado en terreno pantanoso en el final de la primera semana en lo relativo a la carpeta de financiación. Se trata del documento Movilización de recursos y el mecanismo financiero, el tema 11 en la agenda.
Las negociaciones venían ya complicadas desde la anterior COP15 de Montreal. Allí se acordó que, en 2025, los países del norte debían haber puesto sobre la mesa 20.000 millones de dólares anuales para financiar las medidas de conservación de la biodiversidad en el sur global, permitiendo su desarrollo económico y salvaguardando la naturaleza. Esa cantidad aumentaría hasta 30.000 millones anuales de 2025 a 2030, con unos flujos financieros totales hacia el Sur global de 200.000 millones en total. Pero todo quedó a expensas de fondos voluntarios, sujetos a las decisiones políticas de cada estado.
El documento de negociación está prácticamente todo entre corchetes, lo que significa que no hay nada acordado y todo está en discusión. En un primer bloque plantea aprobar la Estrategia de movilización de recursos 2026-2030 (Anexo I), que debe servir para conseguir que el dinero comprometido llegue a estar efectivamente disponible, e invita a toda clase de actores —incluidos el sector privado y las fundaciones filantrópicas ligadas a grandes empresas— a que hagan donativos para cumplir con la estrategia. Ésta contiene un marco de trabajo orientado a obtener resultados para apoyar la aplicación del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal (MMBKM), y establece medidas y criterios para hacer operativa esta estrategia: eficacia, eficiencia, trazabilidad, transparencia y accesibilidad. Además, propone medidas para lograr incrementar el flujo financiero (Anexo II) e incorpora el planteamiento de animar a los actores privados, incluyendo empresas, fundaciones y otras, a hacer donaciones. También se plantean, bajo el eufemístico nombre de “mecanismos innovadores”, estrategias de mercantilización de la naturaleza, como los créditos de biodiversidad o las compensaciones. Se trata de un tipo de medidas de mercado priorizadas por los países que apuestan más por una política neoliberal, como Canadá, Australia y la Unión Europea, y que son enfrentadas directamente por Bolivia con la propuesta de estudiar enfoques no de mercado y basados en la Madre Tierra, expresión rechazada frontalmente por algunas Partes.
Un segundo tema clave es la reclamación para que se reduzcan los incentivos y subvenciones públicas perjudiciales para la biodiversidad, y se eliminen gradualmente hasta 500.000 millones de estos subsidios en 2030 (Anexo I). También hacer un seguimiento de la estrategia a través de un grupo de expertos, y que se evalúe la relación entre deuda externa y la aplicación del Convenio de Biodiversidad Biológica. Este último es un apartado que se ha discutido poco, seguramente porque ningún Gobierno quiere afrontar el coste político de recortar subsidios a sectores económicos clave (como la agricultura, la pesca, los combustibles fósiles, o la minería) de los que dependen millones de personas, pese a la evidencia científica que prácticas insostenibles en estos sectores están devastando la vida silvestre.
En un tercer apartado (Anexo III), algunos países del sur global (sobre todo Sudáfrica, República Democrática del Congo, Colombia e Islas Fiji) proponen que se cree un fondo financiero específico al servicio de financiar el Marco Mundial de Biodiversidad. En la actualidad, no existe un fondo así, creado específicamente para vehicular ayudas a la conservación de la biodiversidad pese a que la Convención, en su inicio y mediante su artículo 21, preveía su creación, sino que se decidió usar provisionalmente el Fondo para el medio ambiente mundial (GEF, por sus siglas en inglés), una herramienta que sirve de apoyo para varios convenios y tratados.
Con la aprobación del Marco Mundial de Biodiversidad en 2022, se constituyó dentro del GEF un subfondo dedicado a este Marco, pero bajo la estructura general. Los países críticos con este fondo GEF, y que reclaman un fondo específico y que dependa del Secretariado del CDB, argumentan que el GEF no está al servicio de la biodiversidad, es excesivamente burocrático y deja fuera a países y a poblaciones locales e indígenas. Por contra, un bloque de países del norte global (sobre todo Canadá y Japón, y con menos contundencia la UE), argumentan que es innecesario crear este nuevo fondo y que ello desviaría dinero para estructura y atrasaría las transferencias. Ambas posturas por ahora parecen irreconciliables. Es en este punto donde algunos países plantean textos para aplazar la decisión a futuras COP, afirmando que hace falta analizar mejor el GEF para identificar si funciona o no y por qué, estrategia calificada por Congo como “maniobra de dilación que busca atrasar una decisión”.
24 oct 2024 12:24
Los derechos del Amazonas
El Foro Social Panamazónico, un ente que aglutina a pueblos, movimientos sociales y defensoras de este pulmón amazónico, ha hecho entrega a la presidenta de la COP, Susana Mohamad, de la declaración de los derechos de la Amazonía.
Este documento reconoce a la Amazonía como “sujeta de derechos” y busca “la construcción de un marco legal robusto que defienda su integridad ecológica y respete los derechos de los pueblos indígenas y comunidad”.
Esta zona, la selva tropical más grande del planeta, hogar de un cuarto de la biodiversidad terrestre, está sujeta a serias amenazas. El 15% del bioma amazónico tiene concesiones mineras y contratos para extracción de petróleo y gas, según denuncia el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF). La deforestación y los fuegos supusieron la pérdida de 4.314 kilómetros cuadrados de vegetación solo en el área brasileña entre el 1 de agosto 2023 y el 31 de julio de 2024, con la agroindustria como principal agente deforestador. Los macrocultivos industriales, con la soja con un papel preponderante, están acabando con miles de hectáreas de selva.
Pero no todo son malas noticias. En el lado brasileño la deforestación en la Amazonía cayó un 45,7% hasta mediados de 2024. Además, desde 2018, la Corte Suprema de Justicia de Colombia reconoció a la Amazonía como “sujeto de derechos” y como “un ecosistema vital para la evolución global”. “En el Gobierno colombiano se trabajan en decisiones para reforzar la sentencia que declara la Amazonía sujeto de derechos y se espera que después de la COP16 se dé a conocer esa normatividad”, sostuvo la ministra Muhamad ante los medios de comunicación.
24 oct 2024 12:00
350 defensoras
La universidad ECCI de Cali acogió este miércoles el Foro Internacional de Mujeres y Biodiversidad, que contó con mesas centradas en el trabajo de las cuidadoras del territorio consolidaron y sus exigencias y recomendaciones.
El Foro, que contó con la presencia de la presidenta de la Cumbre, la colombiana Susana Muhamad, así como de la vicepresidenta del Gobierno del país anfitrión, Francia Márquez, estuvo formado por más de 350 mujeres “defensoras de la vida” entre activistas, académicas, investigadoras, emprendedoras y protectoras del medio ambiente de comunidades locales.
Las conclusiones del Foro fueron entregadas a las representantes del Gobierno para que sean incluidas en las negociaciones de alto nivel de la Cumbre sobre Biodiversidad.
“Gracias a todas las mujeres que decidieron incidir en la COP16, nos han entregado una declaración política, nos han estregado recomendaciones a la presidencia de la COP, nos han estregado una ruta para el plan de biodiversidad para involucrar a las mujeres, nos han entregado un documento de política pública”, señaló la Ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad.
24 oct 2024 11:44 , Cali, Colombia
Cómo las grandes corporaciones intentan influir en la COP
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
Las organizaciones sociales vienen denunciando la injerencia de las grandes empresas transnacionales en las reuniones de la Convención de Cambio Climático. Pero es menos conocido el mecanismo por el cual tratan de influir en la Convención de la Diversidad Biológica. Desvelamos aquí algunas de sus estrategias.
Hablamos de las corporaciones que dominan sectores como el bancario, la construcción o las materias primas; las tecnológicas; las energéticas o la industria química, entre otras, y que tienen grandes intereses en mantener el statu quo para que sus cifras de negocio sigan creciendo a cualquier coste.
La primera de las estrategias es la más evidente. Mediante su control de los medios de comunicación privados, y parte de los públicos, promocionan la ideología neoliberal y presentan el “libre mercado” capitalista como el único modo de organización socioeconómico posible. Para asegurarse que funciona, además, usan herramientas de control sociológico y psicológico (a través de la publicidad) para promocionar el individualismo y el consumismo, y atacar al concepto de servicios públicos y bienes colectivos.
En segundo lugar, sus tentáculos llegan al mundo académico. Cada vez más universidades y centros de investigación, también los públicos, tienen acuerdos de colaboración y financiación o “cátedras” financiadas por las fundaciones de estas corporaciones, condicionando en qué se investiga y dónde está el foco ideológico. Es el caso de Repsol, del Santander o de BBVA, entre muchas otras. Incidir en la academia es importante para luego poder sostener sus posiciones ante Gobiernos y ante la opinión pública con “estudios científicos”.
La tercera estrategia es más desconocida. Estas empresas no acuden directamente con su nombre y logotipo a las COP, pero en su lugar han creado unas organizaciones “paraguas”, bajo nombres de apariencia amistosa con la biodiversidad, que luego participan en las COP e interactúan con los países y las organizaciones públicas como Gobiernos o las Naciones Unidas, incluido el Convenio de Biodiversidad Biológica (CDB).
Exactamente esto es el Consejo Mundial de Negocios por el Desarrollo Sostenible (WBCSD, por sus siglas en inglés). Este organismo agrupa a más de 6.500 empresas con un volumen de negocio que supera los 3.000 millones de Euros al año, entre ellas algunas de las más contaminantes del mundo: Bayer, Acciona, Amazon, Apple, BP, Cargill, Chevron, Google, Microsoft, Shell, o Syngenta, entre otras. Son compañías que, mediante el WBCSD y sus aliados, se presentan como una red que impulsa la transformación de la economía para combatir el cambio climático, restaurar la naturaleza y combatir las desigualdades con eficacia. No es broma.
Pues bien, este tipo de plataformas empresariales tienen una amplia presencia mediante carpas y stands, y despliegan un amplio abanico de charlas, presentaciones y eventos para “mostrar” a los asistentes a las COP (sean ciudadanía o Gobiernos) cómo se pueden y deben impulsar cambios favorables a las empresas y a la naturaleza, según ellos. Además, formulan documentos y posicionamientos sobre temas en debate en el CDB e incluso participan como miembros de espacios de las Naciones Unidas, como la Alianza Global para la Edificación y la Construcción.
A menudo, en estas organizaciones “paraguas” adecuadamente revestidas de verde, participan empresas transnacionales de la mano de algunas organizaciones sociales de prestigio, incluidas organizaciones ambientales. De esa forma logran incluso más reconocimiento y mejorar su reputación. Es el caso de la Coalición Business for nature.
La cuarta estrategia consiste en convencer a determinados Gobiernos para que incluyan a personas de esas corporaciones como miembros de las delegaciones oficiales de los países en la COP, en calidad de asesores. Como miembros oficiales de una delegación, esos representantes empresariales tienen acceso a todos los espacios de la COP, incluidos aquellos restringidos para los observadores, y además resulta extraordinariamente difícil rastrear su presencia.
Reunión de ONG con la Secretaria Ejecutiva de la Convención
Las organizaciones sociales y ambientales que siguen la COP vienen denunciando el creciente papel de estas corporaciones en los procesos de Naciones Unidas, incluida la Convención de la Diversidad Biológica. Hoy mismo, la Alianza del CDB se ha podido reunir con la secretaria ejecutiva de la Convención, Astrid Schumaker, y le ha trasladado esta preocupación. Ante ella, Schumaker ha manifestado que comprende la preocupación y que desde su organismo tratan de evitar cualquier tipo de influencia y descompensación, a pesar de reconocer que la escasez de recursos económicos hace que la Convención tenga que estudiar todas las vías posibles de financiación.
En esta reunión, se han trasladado, asimismo, las preocupaciones de las ONG sobre algunos de los puntos clave de las negociaciones. Por un lado, que se está hablando continuamente de mecanismos de mercado mediante los cuales se legalizaría la destrucción de la biodiversidad a cambio de compensaciones u otros esquemas flexibles, cosa que rechazan frontalmente las organizaciones sociales. Por otro, la inquietud de que la negociación sobre el documento de la convención sobre Información Digital de Secuencias Genéticas acabe sin un texto fuerte que evite la biopiratería mediante la cual las empresas del norte global puedan robar el patrimonio genético y el conocimiento tradicional asociado que han sido atesorados por las poblaciones del sur, especialmente los pueblos indígenas. En ambas carpetas, Schumaker ha manifestado que comparte la preocupación pero que la Secretaría no puede intervenir en las negociaciones más que para guiar los debates y ejecutar los acuerdos.
Por último, resulta preocupante que un organismo internacional neutral y enfocado en el desarrollo de la Convención tenga una falta tan acuciante de financiación. La propia Schumaker manifestó que se desconoce dónde será la próxima COP17 de 2026, y si se podrá seguir apoyando la participación de los países con menos recursos del sur global, sobretodo de África y América Latina, que no pueden costear la participación de sus propios trabajadores a estas cumbres.
---
Ecologistas en Acción participa en la COP16 con un representante acreditado como observador oficial, Jaume Grau López. Mediante este espacio realizaremos un seguimiento diario del desarrollo de las negociaciones en dicha cumbre, así como una exposición de los grandes temas en debate y los acuerdos que se logren a su finalización
24 oct 2024 11:02
Las protectoras de la naturaleza indígenas y afrodescendientes reciben apenas el 1% de las ayudas
La tercera jornada de la COP16 estuvo marcada por la igualdad de género. La meta 23 del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal que está centrado la Cumbre de Cali señala como objetivo “garantizar la igualdad de género en la implementación del Marco mediante un enfoque con perspectiva de género en el cual todas las mujeres y las niñas tengan igualdad de oportunidades y capacidad para contribuir a los tres objetivos del Convenio”, entre otras cosas “reconociendo su igualdad en cuanto a los derechos y el acceso a las tierras y a los recursos naturales y su participación y liderazgo plenos, equitativos, significativos e informados en todos los niveles de acción, participación, formulación de políticas y toma de decisiones relacionados con la biodiversidad”.
Los recursos que llegan a manos de las mujeres afrodescendientes, indígenas y de comunidades locales, cuidadoras de la tierra, sin embargo, son inmensamente menores que los que gestionan los hombres. En el marco de la COP, la Iniciativa de Derechos y Recursos (RRI) y la Alianza de Mujeres en el Sur Global (WiGSA) hicieron pública una investigación en la que se afirma que, entre 2019 y 2022, hubo una disminución del 2% en la financiación de la Asistencia Oficial para el Desarrollo (AOD) para organizaciones centradas en los derechos de las mujeres y ONG centradas en cuestiones de género. En concreto, el monto total pasó de 891 millones de dólares en el período 2019-2020 a 631 millones de dólares en 2021-2022.
El estudio, titulado ¿Está llegando el financiamiento mundial a las mujeres indígenas, afrodescendientes y de comunidades locales?, remarca que la cifra relativa a 2021-2022 representa menos del 1% de la AOD total en ese período. A pesar de ello, entre 2011 y 2020 el dinero para apoyar cuestiones como los derechos de tenencia de la tierra o las tierras boscosas de los pueblos indígenas, afrodescendientes y comunidades locales aumentó, al contrario que la financiación de las ONG centradas en temas de género.
Como señalaba Omaira Bolaños, directora de Género y Justicia de RRI, “las mujeres han sido excluidas a menudo de la financiación debido a suposiciones sobre sus capacidades y dudas sobre su capacidad para gestionar proyectos. Sin embargo, incluso sin apoyo financiero, han estado protegiendo eficazmente sus bosques”.
23 oct 2024 12:04 , Cali, Colombia
La hora de los pueblos indígenas
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
Las poblaciones indígenas del mundo han alzado la voz. Aquellos pueblos originarios de los cinco continentes que sufrieron la conquista, el expolio, el exterminio y la marginación por las potencias coloniales pero que, pese a ello sobrevivieron en muchos casos, se han levantado para reclamar que se les tenga en cuenta en el escenario político mundial, en este caso en la COP de biodiversidad.
Hablamos de poblaciones tan diversas como los aborígenes australianos o los pobladores originarios de Nueva Guinea, de los inuit de escandinavia y los indígenas australianos o, en fin, de cientos de etnias precolombinas en centro y sudamérica y el Caribe. Pueblos que a menudo han sido marginalizados por sus propios Estados, con los cuales normalmente no se identifican, y que a menudo han sido víctimas silenciadas de la expansión de las industrias extractivas y los monocultivos industrializados, cuando no directamente desplazados violentamente, atemorizados, asesinados, desposeídos y ridiculizados como “atrasados”.
Se trata de pueblos que, de forma general, han mantenido un fuerte vínculo con la tierra y los elementos de la naturaleza a los que consideran sagrados y que han establecido a menudo un equilibrio con su entorno natural, conservando la biodiversidad mejor que los países “desarrollados” durante milenios, observándose además un vínculo entre diversidad cultural y diversidad biológica.
El Convenio de la Diversidad Biológica reconoce el papel de estos pueblos en la conservación, y les dedica un artículo (el 8j). En los últimos años, el trabajo para lograr el pleno reconocimiento de estos pueblos ha avanzado, y en esta COP se presenta una propuesta de acuerdo que establece un plan de trabajo hasta 2030. En concreto, se plantean medidas para incluir a estas comunidades en las medidas de conservación y restauración de la biodiversidad, en la utilización sostenible de la diversidad biológica, en la participación de los beneficios derivados del uso de los recursos genéticos así como los conocimientos tradicionales asociados, el fortalecimiento de la aplicación, la participación plena en las tomas de decisiones, o el acceso a recursos para la financiación de medidas de conservación de la biodiversidad, entre otros.
Este plan de trabajo está muy avanzado y probablemente podrá ser aprobado. Ahora bien, hay una fuerte controversia sobre si debe constituirse un órgano subsidiario (organismo dependiente del Convenio de Biodiversidad Biológica (CDB) que desarrolla funciones de asesoramiento y propone acuerdos para la COP, con cierta autonomía, o bien si debe mantenerse la figura menos fuerte y menos estructurada del “grupo de trabajo permanente” sobre el artículo 8(j). Es un debate enconado donde las posiciones de países con gran fuerte de poblaciones indígenas como Brasil o Colombia se enfrenta a visiones mucho más restrictivas como Rusia o Corea.
Este debate se produce al mismo tiempo que en el recinto de la COP, pueblos indígenas de toda América tienen una gran visibilidad, con sus vestidos tradicionales y adornos corporales. El propio Gobierno de Colombia ha alentado su presencia y ha creado espacios de encuentro y de visibilización.
Mientras esto sucedía dentro de la zona azul, en la calle las organizaciones sociales colombianas, como la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) concluían una marcha a pie hasta Cali para reivindicar el protagonismo de las poblaciones originarias y plantear que la Madre Tierra debe ser sujeto de derechos por ella misma.
---
Ecologistas en Acción participa en la COP16 con un representante acreditado como observador oficial, Jaume Grau López. Mediante este espacio realizaremos un seguimiento diario del desarrollo de las negociaciones en dicha cumbre, así como una exposición de los grandes temas en debate y los acuerdos que se logren a su finalización.
11:34
La importancia de compartir equitatativamente la información genética
“Las empresas que utilizan estos recursos ya no saben de dónde provienen, y no están pagando los beneficios que corresponden”. Las palabras de la ministra de Medio Ambiente de Colombia, y presidenta de la COP16, Susana Muhammad, pronunciadas este 22 de octubre en el pabellón del país anfitrión de la Cumbre de Biodiversidad, se refieren a uno de los temas menos mediáticos de los abordados por la comunidad internacional en materia de biodiversidad: los recursos genéticos.
El segundo día de la Cumbre se centró en esta problemática. El Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal establece entre sus objetivos que “los beneficios monetarios y no monetarios de la utilización de los recursos genéticos y de la información digital sobre secuencias de recursos genético [...] se comparten de manera justa y equitativa, y en particular, cuando corresponda, con los pueblos indígenas y las comunidades locales”.
Para Muhammad, que participó en el panel estratégico sobre el material genético de animales y plantas que se secuencia y se almacena en bases de datos digitales, existe una necesidad de democratizar este conocimiento. Al respecto, Colombia aboga por la creación de un fondo internacional con los datos obtenidos a partir de la información genética para que estos sean compartidos con los países de origen, impulsando la protección de su biodiversidad.
La regulación del acceso a toda esa información es uno de los temas cruciales. Como resaltó Silvia Restrepo, directora del instituto Boyce Thompson en la Universidad de Cornell, “lo que se busca es crear un fondo para la protección de la biodiversidad en los países que son ricos en ella”. La experta remarcó la necesidad de “equilibrar el acceso abierto a estos datos para fomentar la innovación con la justa redistribución de beneficios a los países de origen”.
Además, Restrepo apostó por la creación de un fondo de financiación para asegurar la protección de la biodiversidad en los países ricos en recursos genéticos para garantizar que los beneficios económicos derivados del uso comercial de estos recursos, como el desarrollo de medicamentos o tecnologías basadas en secuencias de ADN, sean compartidos con los países de origen. “Este mecanismo permitiría que actores comerciales contribuyan a la conservación de la biodiversidad, asegurando que las naciones que proveen estos valiosos recursos puedan protegerlos adecuadamente”, indicó.
Entre las preocupaciones de las organizaciones medioambientales se encuentran las llamadas nuevas técnicas genéticas peligrosas. Para Ecologistas en Acción, “deben adoptarse decisiones en el sentido de aplicar el principio de precaución, para controlar o directamente prohibir algunos nuevos desarrollos tecnológicos de alto riesgo, como la biología sintética, los impulsores genéticos, o el uso incontrolado e injusto para las poblaciones indígenas de la información digital sobre secuencias de recursos genéticos”.
22 oct 2024 11:54
Comienza la COP: todas las cartas sobre la mesa
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
La cumbre se inició ayer lunes con los parlamentos protocolarios del país anfitrión. Se destacó que esta es la COP con más periodistas acreditados, más participantes inscritos (más de 15.000 en la zona azul), y más eventos paralelos en la denominada zona verde (más de 1.000) además de miles de participantes adicionales. Ello demuestra el enorme interés que ha generado esta conferencia, pues se percibe como un punto de inflexión potencial. La presidenta de la COP y ministra de Medio Ambiente de Colombia, Susana Muhamad, fue explícita: “No podemos fallar”.
Siguieron las intervenciones iniciales de todos los bloques regionales de negociación: UE, Liga Árabe, países de Europa Central y del Este, Asia-Pacífico, GRULAC (América Latina y Caribe), Grupo Africano, Pequeños Estados Insulares, etc. Destaca la reclamación que manifestaron los países africanos, latinoamericanos, de pequeños Estados insulares y del Asia y Pacífico para que la financiación avance de manera prioritariamente. En la COP15 se asumió el compromiso de los países ricos de aportar 20.000 millones de dólares anuales para 2025 y 200.000 millones anuales para 2030 para financiar el desarrollo compatible con la biodiversidad de los países con menos recursos. La realidad es que estamos aún muy lejos de estas cifras. España contribuye con 10 millones de euros al año, más una parte, aun sin cuantificar, de las políticas de cooperación al desarrollo que se han reorientado a financiar la protección de la biodiversidad.
Varios países destacaron asimismo la importancia de que los convenios contra el cambio climático y por la biodiversidad coordinen adecuadamente sus acciones para evitar que las políticas contra el calentamiento global perjudiquen a la naturaleza, como ha estado sucediendo en el pasado.
Ya en los dos grupos de trabajo paralelos, se analizaron inicialmente algunas de las propuestas de acuerdo más relevantes. En cuanto a la integración de la biodiversidad en todas las políticas, no se pudo avanzar porque la propuesta de acuerdo vino con grandes objeciones cruzadas desde los órganos subsidiarios del Convenio de Biodiversidad Biológica, así que se decidió analizar en detalle el martes en un Grupo de Contacto específico. También el texto sobre biodiversidad y cambio climático está todo entre corchetes (lo que significa que se han formulado objeciones o enmiendas), así como buena parte de los documentos sobre biodiversidad marina y costera y de las islas, de estrategia de conservación de plantas y de biodiversidad y salud, que fueron también redireccionados a un Grupo de Contacto. Por contra, los documentos sobre valores diversos de la biodiversidad y sobre especies exóticas invasoras se tramitaron al plenario final sin dificultades.
----
Ecologistas en Acción participa en la COP16 con un representante acreditado como observador oficial, Jaume Grau López. Mediante este espacio realizaremos un seguimiento diario del desarrollo de las negociaciones en dicha cumbre, así como una exposición de los grandes temas en debate y los acuerdos que se logren a su finalización.
22 oct 2024 11:01
La anfitriona Colombia presenta su Plan de Acción de Biodiversidad
Como anfritriona, Colombia no podía faltar, aunque ha llegado por los pelos. El país que preside Gustavo Petro ha presentado su Plan de Acción de Biodiversidad al 2030, el instrumento nacional para que el país cumpla con su compromiso adoptado al adherirse al Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal (MMBKM).
El programa se centra en “seis metas nacionales” hasta 2030 que contienen a su vez 191 acciones para enfrentar la pérdida de vida y ecosistemas en la tercera nación que más biodiversidad alberga del planeta. Según el Gobierno colombiano, el Plan representa “un compromiso con la Paz con la Naturaleza, a través de la aceleración de la planificación territorial como proceso participativo; la protección de los defensores ambientales, la relación entre restauración ecológica y dinamización de las economías regionales para generar un nuevo renglón que aporte al PIB del país”.
Entre las seis metas citadas se encuentran acciones como aumentar hasta el 68% el tratamiento de aguas residuales, implementar acciones de reconversión productiva en tres millones de hectáreas y diseñar e implementar los 'Planes Decenales de Biodiversidad de los pueblos Indígenas, Afrocolombianos, Negros, Raizales, Palenqueros, Gitanos, Campesinos y Comunidades Locales'.
Con este anuncio, que Colombia ha hecho coincidir con la inauguración del Pabellón Colombia en la COP16, ya son 35 los países que han presentado sus planes nacionales para cumplir con el MMBKM. Ahora, la pregunta está en cuántos más los sacarán adelante en esta cumbre, y si en la cita las naciones del mundo serán capaces de ponerse de acuerdo para establecer mecanismos de seguimiento reales, así como una estrategia de movilización de recursos que permita a los países en desarrollo implementar el Marco adecuadamente.
21 oct 2024 14:43 , Cali, Colombia
Un posible hito en el desarrollo del Convenio de Biodiversidad Biológica
Por Jaume Grau López
Biólogo e integrante de Ecologistas en Acción, @jaumegraulopez
Petro tuvo un mensaje muy contundente, de corte anticapitalista, denunciando la avaricia infinita de las corporaciones multinacionales y de las mayores fortunas del planeta, a quienes responsabilizó en gran medida de las crisis de biodiversidad y climática. Pidió más Estado para controlar y regular los mercados, mayor fiscalidad hacia las grandes fortunas y mayor implicación de los bloques con mayor responsabilidad histórica en la crisis ambiental: Estados Unidos, la UE y China. El presidente colombiano defendió además la necesidad de un “plan Marshall” para reorientar la economía hacia la conservación de la naturaleza y atacó a los negacionistas de la crisis ecológica global.
Por su parte, António Guterres abogó por la implicación de los países para implementar el Marco Mundial de Biodiversidad, aunque también defendió un crecimiento verde que Ecologistas en Acción consideramos incompatible con los límites planetarios.
Esta COP16 puede representar un hito en el desarrollo del Convenio de Biodiversidad Biológica (CDB), como atestiguan las más de 15.000 personas acreditadas para participar en la zona azul, el espacio oficial de negociaciones, que se produce en paralelo a la cumbre de la sociedad civil, la zona verde. El gran interés despertado a nivel mundial, y la implicación de Colombia en su organización, auguran una conferencia caliente en un país convulso pero que atesora una inmensa biodiversidad y da pasos hacia la superación de sus conflictos internos mientras revaloriza a sus poblaciones originarias, las personas indígenas.
----
Ecologistas en Acción participa en la COP16 con un representante acreditado como observador oficial, Jaume Grau López. Mediante este espacio realizaremos un seguimiento diario del desarrollo de las negociaciones en dicha cumbre, así como una exposición de los grandes temas en debate y los acuerdos que se logren a su finalización.
21 oct 2024 12:00
El Plan Marshall para canjear deuda externa por acciones climáticas
La propuesta del Gobierno de Colombia en esta COP16 va en la línea de lo defendido en la Cumbre para un Nuevo Pacto Financiero Mundial celebrado en París en 2023. Gustavo Petro dejó bien claro que los mercados no pueden ser la herramienta de los Estados para luchar contra las graves consecuencias de una crisis climática que se ceba con los países del Sur global, incapaces de hacer frente a las inversiones para mitigación al tener gran parte de sus presupuestos comprometidos con los altos costes de la deuda externa, ahogando las posibilidades de realizar acciones climáticas.
Crisis climática
Plan colombiano Deudas que ahogan y un Plan Marshall contra la crisis climática
21 oct 2024 11:28
Petro: “Nuestra razón de ser es cuidar la vida y no destruirla”
Era uno de los discursos más esperados de la jornada inaugural de la COP16. El presidente colombiano, Gustavo Petro, se dirigió a los asistentes del Centro de Convenciones Valle del Pacífico de Cali, y no defraudó.
“Ilusos los que piensan que el mercado libre podrá llevar a la maximización del bienestar y que llevará a los seres humanos a ser portadores de la vida. Ilusos los que creen que no mirar hacia arriba o hundir la cabeza en la tierra, pasarán los hechos sin afectarle. Ilusos, los que niegan la extinción de la biodiversidad”, denunciaba el mandatario ante los representantes de 188 naciones.
El mandatario americano, para quien “nuestra razón de ser es cuidar la vida y no destruirla”, aboga por cambiar las relaciones económicas entre las naciones del planeta y establecer mecanismos de acción climática por deuda. “Necesitamos cambiar las finanzas mundiales, es el tema de este foro. Hoy están ligadas a la codicia, es decir, a la muerte. ¿Quién dijo que la vida planetaria se pone a salvo a través de proyectos bancarios, ligados a la tasa de interés, a proyectos que dan ganancias y llenan las hambres de la codicia?”.
En este sentido, Petro ha abogado por establecer un “Plan Marshall” enfocado a la acción climática. “Ligar la superación de la crisis climática o la regulación de la IA a la codicia solo nos lleva al abismo”, señalaba remarcando que seguir incrementando la deuda de los países más pobres solo pondrá más trabas para frenar la crisis climática y la pérdida de biosiversidad.
Ilusos los que piensan que haciendo "libre mercado" podrán controlar las causas de la extinción de la vida en el planeta pic.twitter.com/E6bI0kMCXG
— Gustavo Petro (@petrogustavo) October 21, 2024
21 oct 2024 11:24
Los insectos, el reino invisible que desaparece
Aunque los titulares se los llevan habitualmente los mamíferos, en el reino animal todos los grupos están amenazados. Los insectos, un grupo especialmente esencial en el equilibrio de la vida, no son una excepción, sino más bien lo contrario: el 41% de ellos están amenazados.
Biodiversidad
Biodiversidad Insecticidio, el ocaso de la flora intestinal del planeta
21 oct 2024 11:23
Sexta extinción masiva
¿Cuál es el nivel real de destrucción de biodiversidad que la llegada del ser humano, y especialmente de su civilización industrial, está produciendo en la Tierra? En este artículo abordamos algunas claves.
Biodiversidad
Homo sapiens, asesino ecológico en serie
21 oct 2024 10:55
Las claves de la COP16
La COP16 es la cita que tiene como objetivo hacer que los países salgan de la abstracción de las declaraciones institucionales y pongas cifras concretas a lo que se comprometieron en la COP15. El acuerdo final de la Cumbre del Montreal, aunque criticado desde el ecologismo por blando y poco concreto, supuso la histórica adopción de un marco global para proteger el 30% del planeta, lo que incluye tanto las tierras emergidas como los océanos.
El Marco Mundial de Biodiversidad de Kumming-Montreal, como se llamó al acuerdo, es a la protección de la biodiversidad lo que el Acuerdo de París es a la protección de clima. Sin embargo, como ocurre en el climático, la cantidad de letra pequeña y de cifras concretas a rellenar es tan amplia que sin ella el acuerdo no valdrá para nada. Cali es la cita que debe sentar las bases para que esto no ocurra.
Biodiversidad
Cumbre de biodiversidad COP16, una cita para salvar un millón de especies
Relacionadas
Consumo
Tóxicos Una investigación europea encuentra mercurio en todas las latas de atún analizadas
Biodiversidad
Cumbre de biodiversidad COP16, una cita para salvar un millón de especies
Biodiversidad
Lucy Rees “Los caballos salvajes forman una sociedad anárquica de verdad”
Pérdida absoluta de tiempo y recursos. Estos cónclaves capitalistas, la guinda del pastel de la hipocresía y el greenwashing, son absolutamente contraproducentes e inútiles.
Que se mande a un emisario desde una organización que se define como anticapitalista a semejante trampantojo es muy definitorio de la grave deriva de Ecologistas en Acción, que prefiere dedicar tiempo y dinero a estas futilidades antes de luchar de manera decidida y frontal contra el sistema, orígen de todas las crisis ecológicas que nos asolan. Otro asalariado más en la empresa ecologista que realiza una labor completamente prescindible, banal e hipócrita.
Una pena que El Salto se vea arrastrado a esta deriva, por su intrincada relación con EeA, cantando sus alabanzas y tapando sus miserias, como el caso de acoso de Santiago Martín Barajas a tres mujeres, de lo cual no se ha escrito ni una línea en este medio.
Hay otras formas de hacer ecologismo, radicales y honestas, sin deudas y dependencias con el poder y el stablishment, a las cuales no se les presta la atención que merecen.
El problema es el sistema, y la solución su exterminio.