Filosofía
Interseccionalidad reaccionaria

El contrapunto de los movimientos sociales con una perspectiva interseccional lo encontramos actualmente en una extrema derecha que construye su discurso a partir de la intersección entre xenofobia, misoginia, homofobia y nacionalismo.

Migrantes en la valla de Melilla
Migrantes en la valla de Melilla. Imagen de Mikel Oibar y Laura Tárraga / Disopress Mikel Oibar
Doctoranda en Filosofía e investigadora.
5 feb 2019 10:00

La teoría de la interseccionalidad llama la atención sobre la interrelación entre distintos ejes o sistemas de opresión. Desde este punto de vista, la base de la desigualdad social tiene un fundamento multidimensional y, por tanto, cualquier proyecto de transformación que pretenda lograr una mayor justicia social ha de tener en cuenta esta interacción entre distintas discriminaciones.

Originalmente esta teoría cobró fuerza en el contexto estadounidense y fue desarrollada por mujeres afroamericanas que buscaban poner de manifiesto la insuficiencia de los planteamientos emancipatorios que solamente tomaban en consideración –de manera unilateral— una estructura de dominación, como el género, la clase o la raza. Hasta nuestros días este análisis ha mostrado su potencial para repensar las injusticias de un sistema que además de capitalista es heteropatrirarcal, racista y capacitista. Por este motivo diversos movimientos sociales tratan –con mayor o menor éxito— de tener presentes las múltiple desigualdades, entrelazadas y articuladas entre sí, con el objetivo de subvertirlas.

La igualdad formal y el nacionalismo reaccionario

El contrapunto de estos movimientos sociales con una perspectiva interseccional lo encontramos actualmente en una derecha que también vincula el género, la orientación sexual, la etnia y los distintos orígenes nacionales, pero en un sentido completamente distinto. En el lugar en el que unos perciben privilegios, otros ven derechos. Unos derechos que, a juicio de la derecha más reaccionaria, son ahora vulnerables ante una dictadura particular: la dictadura de lo políticamente correcto.

Las luchas de las personas racializadas, migrantes, a favor de los derechos de minorías sexuales o de género, son vistas por los defensores de la incorrección política como represoras. A su juicio, promueven la censura y atentan contra libertades inviolables. Es más, consideran que atacan incluso a la verdadera igualdad, pervertida por estos movimientos. La igualdad genuina, según el planteamiento de la propuesta reaccionaria, es la igualdad formal, de la que deben disfrutar todas las personas, siempre que cumplan el requisito de tener el mismo origen nacional. No parece preocuparles que esta concepción de igualdad, que obvia las diversas condiciones materiales en las que viven las personas, refuerce de facto la desigualdad social.

Basta recordar una cita mordaz de Anatole France sobre la ley y la igualdad formal para vislumbrar el resultado de abstraer las diferentes posiciones de los sujetos a la hora de pensar la igualdad: “La ley, en su magnífica ecuanimidad, prohíbe, tanto al rico como al pobre, dormir bajo puentes, mendigar por las calles y robar el pan”. Si perseguimos exclusivamente una igualdad formal ante la ley, que no tenga en cuenta las desventajas de ciertos individuos o las prerrogativas que gozan las personas situadas en un lugar ventajoso, no podremos conseguir una sociedad sin desigualdades sino que, más bien, estaremos condenados a reproducir eternamente las mismas jerarquías entre aquellos individuos que disfrutan de todos los apoyos y condiciones para tener una vida digna y aquellos que están abocados a una existencia abyecta.

Si perseguimos exclusivamente una igualdad formal ante la ley, […] estaremos condenados a reproducir eternamente las mismas jerarquías entre aquellos individuos que disfrutan de todos los apoyos y condiciones para tener una vida digna y aquellos que están abocados a una existencia abyecta.

La estrategia de los nostálgicos de tiempos pasados consiste en presentarse como una minoría oprimida, que busca restaurar una igualdad pretérita. No obstante, pese a instrumentalizar la retórica de los oprimidos, condenan aquellos discursos que visibilizan las desigualdades a las que dan lugar los privilegios sociales. Para efectuar esta operación les basta con negar el privilegio presentando las jerarquías como resultado de las elecciones –más o menos afortunadas— que realizan los individuos a lo largo de su vida. Al proceder de este modo, invisibilizan el hecho de que nadie decide si nace hombre o mujer, con un determinado color de piel, en un territorio o en otro, en una familia rica o pobre,… y que, por tanto, no se puede responsabilizar a alguien de la situación que ocupa en la sociedad en virtud de estos hechos. El tener una nacionalidad, por ejemplo, no puede constituir un mérito o demérito, y por este motivo la situación de anomía o de afuera de la ley que puede experimentar un apátrida o un refugiado al que se le niegue el reconocimiento de derechos básicos de ciudadanía, no puede justificarse, sin más, atendiendo a sus elecciones personales.

La extrema derecha intenta pasar por alto las injusticias de su propuesta de excluir de una vida digna de ser vivida a una buena parte de la población promoviendo –con cualquier medio posible— la xenofobia, la misoginia, la homofobia y el nacionalismo. Atestiguamos como los bulos, la información sesgada o malintencionada sirven hoy para dotar de legitimación a un programa de transformación social que busca restablecer los privilegios sociales que están siendo cuestionados por movimientos sociales antirracistas, transfeministas y a favor de las personas migrantes.

No es casual que el nacionalismo cobre especial importancia en los defensores de la restauración del viejo orden social. Sabedores del hecho de que la población migrante sin papeles no posee el derecho al voto, ni goza de libertades básicas reconocidas en el marco jurídico para cualquier ciudadano nacional, como el derecho de manifestación (ya que al manifestarse se expone a la persecución policial y a una posible reclusión en un centro de internamiento de extranjeros) atizan el odio hacia las personas migrantes –sobre todo aquellas más pobres o desfavorecidas— con total impunidad. El uso de banderas, disfrazado de inofensivo orgullo nacional, busca aglutinar a personas de distintos estratos sociales bajo una misma simbología. El proyecto de conservar la unidad nacional, supuestamente amenazada por individuos que ponen en cuestión las costumbres precedentes, presenta a la homogeneidad de tradiciones como la solución a los diversos problemas que afronta la población. Los males sociales son así reflejados en el extranjero. La inseguridad, el tráfico de drogas, los robos o la violencia machista se proyectan en una figura de alteridad, creando de este modo una fantasía complaciente de completa inocencia entre los ciudadanos nacionales. Incluso se atribuye al foráneo la causa de la precariedad vital en la que se encuentran los sectores más desfavorecidos de la ciudadanía. Por un lado, este discurso permite eludir de su responsabilidad a las grandes fortunas patrias que evaden impuestos o mantienen a sus trabajadores en situación de explotación. Por otra parte, da rienda suelta a un espejismo de autosuficiencia que invisibiliza la dependencia de los países del norte global de la mano de obra extranjera y la extracción o expolio de recursos del sur global.

Frente a la ofensiva de la nueva derecha los movimientos tienen la tarea de contraponer al nacionalismo excluyente, al clasismo y a la defensa del orden heteropatriarcal, un reconocimiento de la interdependencia y abrir la posibilidad de pensar fórmulas de dependencia que no se traduzcan en dominación y explotación.

Heteropatriarcado y negación de la vulnerabilidad

Este delirio de completa independencia se entrelaza con una concepción masculinista y heteropatriarcal de los denominados Estados desarrollados. La insistencia de la nueva derecha en construir muros en las fronteras, o reforzar los ya existentes, persigue afianzar la concepción de los territorios nacionales como fortalezas invulnerables e impenetrables. La penetrabilidad y la vulnerabilidad –atributos tradicionalmente vinculados a lo femenino— se repudian como una ofensa a la integridad de los Estados. De este modo los saltos a las vallas o la incursión de migrantes a través de las fronteras se presentan como una violación inaceptable.

La interseccionalidad entre la defensa de lo nacional, la xenofobia, misoginia u homofobia, se pone de relieve en esta negación de la vulnerabilidad. La estrategia del capitalismo heteropatriarcal racialmente estructurado para permanecer incuestionado a lo largo de su historia ha consistido en proclamar como ideal la autosuficiencia e invisibilizar la dependencia de cuidados y apoyos que ciertos sujetos hegemónicos –por lo general hombres, blancos, heterosexuales, de clase alta y sin ninguna discapacidad— hacen depender de aquellos que habitan una esfera privada de la luz pública. El derecho a aparecer en el espacio público-político –la esfera del reconocimiento— sin miedo a la violencia o intimidación, ha sido tradicionalmente restringido para aquellos sujetos que más se acercaban al modelo de subjetividad hegemónica. La injusticia de este orden social, añorado por los sectores reaccionarios, consiste en reconocer ciertas vidas como merecedoras de ser salvaguardadas, cuidadas y recibir toda clase de apoyos, mientras condena a una mayoría a la falta de recursos necesarios para llevar una vida digna de ser vivida.

Frente a la ofensiva de la nueva derecha de reavivar la fantasía de la autosuficiencia, los movimientos que buscan instaurar una mayor justicia social tienen la tarea de contraponer al nacionalismo excluyente, al clasismo y a la defensa del orden heteropatriarcal, un reconocimiento de la interdependencia y abrir la posibilidad de pensar fórmulas de dependencia que no se traduzcan en dominación y explotación. El objetivo sería hacer de esa interdependencia, ineludible, una vida en común más habitable. Para ello se hace necesario el reconocimiento de que todas las vidas son vulnerables y si carecen de redes de los apoyo y de las infraestructuras necesarias, son invivibles.

Sobre o blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Música
Música Aprendiendo filosofía con el punk patatero de La Polla Records
Los cáusticos esputos lanzados por Evaristo en las canciones de La Polla Records contenían materia adecuada para hablar de filosofía política en el instituto. Así lo entiende el profesor Tomás García Azkonobieta, autor de ‘La filosofía es La Polla’.
Antiespecismo
Formación para docentes La Ética Animal llega a las aulas
Formación y recursos prácticos sobre ética animal para docentes y educadoras, promoviendo el respeto hacia los animales.
Filosofía
Alicia Puleo “El ecofeminismo nos recuerda la ayuda mutua de la naturaleza, que la vida buena es solidaridad”
La filósofa Alicia H. Puleo cuenta su historial personal con la filosofía y aborda, desde claves ecofeministas, temas como la sensibilidad de los animales no humanos, la desmesura neoliberal o la crítica de la Ilustración.
#30303
8/2/2019 23:10

Gracias por el artículo! Me ha gustado mucho! Sólo he echado en falta que incluyeras uno de los principales ejes de dominación: el extractivismo que se hace de la naturaleza, una de las raíces de los muchos mal vivires de millones de personas humanas y no humanas. En esta lucha necesitamos también contraponer frente a la lógica del crecimiento económico y la generación de empleo (a costa de lo que sea), un sentido que conecte nuestra interdependencia con nuestra ecodependencia y que ponga en el centro el cuidado de la T(t)ierra y sus gentes, superando la lógica mercantilista y consumista, y repartiendo el trabajo socialmente necesario.

4
0
#30141
5/2/2019 10:33

Otro fantástico análisis del alzamiento del fascismo en España, es cierto que apela a todos esos sentimientos e idearios, pero creo que en muchos se olvida del cómo lo está haciendo, es decir, el marketing publicitario que usa, y creo, que es el uso del egoísmo lo que está haciendo atractivos a este tipos de partidos, a reivindicar lo mío, mis derechos, mis frustraciones, sin importar el el de al lado, ese egoísmo que hace que se odie por igual a un catalán que a un inmigrante porque te quita lo tuyo, el egoísmo de la ley de violencia de género que hace culpable a un hombre por ser hombre y ataca a la masculinidad social, y ante esa ola de eogísmo en un contexto de precariedad, de agitación social y polarización mediática la izquierda tiene mucho que perder , y la verdad, no veo una solución para todo esto.

4
1
#30232
7/2/2019 14:47

La propuesta alternativa al neofranquismo y el neoliberalismo canibal, puede basarse en la conciencia creciente de que vivimos todas juntas de alquiler en un planeta donde cada acción individual (también al votar o dejar de hacerlo) contribuye a conformar nuestras vidas diarias.
Escapar de la precariedad laboral y la destrucción de las condiciones de vida, requiere distinguir lo que contribuye a que las personas conserven y amplien sus derechos, por encima del ruido de la ola fascista que conviene surfear sabiendo que, con la lucha y la resistencia, también pasará.

0
0
Sobre o blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas as entradas
Genocidio
Genocidio La ONU advierte de que un ataque sobre Rafah colapsaría la distribución de ayuda en Gaza
Turquía suspende todo el comercio con Israel. El fiscal del Tribunal Penal Internacional advierte de que no admitirá “amenazas” después de que trascendiera que imputará a Netanyahu y los suyos.
Memoria histórica
Memoria histórica Relatores de la ONU piden a España que actúe contra las leyes antimemoria de tres autonomías
Los relatores internacionales denuncian las posibles vulneraciones de derechos de dos normas en proceso y una aprobada por los Gobiernos de coalición de Partido Popular y Vox en tres comunidades autónomas.
Periodismo
Periodismo Desinforma, que algo queda
En la fecha que se conmemora el Día de la Libertad de Prensa, hay que analizar sus dimensiones, la opacidad en el reparto de la publicidad institucional, la necesidad de la alfabetización mediática y qué medidas concretas pueden llevarse a cabo.
Rap
Rap Viaje a los orígenes del hip hop en España: “Nadie esperaba ganar dinero con el rap”
El historiador Nicolás Buckley y el periodista Jaime Valero, exredactor jefe de HipHop Life, publican Maestro de ceremonias, un libro sobre la historia de la cultura hip hop en España.
Derecho a la vivienda
Elecciones catalanas El futuro de la regulación de los alquileres en Catalunya se juega el 12M
El decreto que regula los alquileres de temporada que lanzó el Govern era la pieza que faltaba para que funcionen los topes de los precios. Pero la norma debe ser revalidada con los votos socialistas y convergentes, que se han opuesto a la medida
Análisis
Análisis No dejemos de hablar de Siria
La situación humanitaria en Siria se endurece en un contexto de inestabilidad regional, mientras que la ayuda internacional que el país recibe es muy inferior a la necesaria.
Francia
1 de mayo La policía carga violentamente contra la manifestación de CGT en París y detiene a 45 personas
Las cargas policiales extremadamente violentas, de la unidad BRV-M, dejaron decenas de heridos. Según CGT en la manifestación participaron más de 50.000 personas.

Últimas

Poesía
Galiza Morre aos 92 anos a poeta, activista e revolucionaria Luz Fandiño
O falecemento foi anunciado publicamente pola súa amiga e alcaldesa de Santiago de Compostela, Goretti Sanmartín.
Obituario
Obituario | Luz Fandiño Ata sempre, comandanta!
Luz Fandiño era unha punky, inamovible nos seus ideais e no seu discurso. Unha muller que, a pesar de ter vivido as peores miserias, chegou ao final da súa vida coa súa enerxía adolescente e co seu espírito de loita intacto.
1 de mayo
1 de mayo La transición ecosocial y frenar el genocidio de Palestina, ejes de la clase trabajadora de Bilbao
En una ciudad acostumbrada a buscar consensos y apartar las siglas abrazando un eslogan común y caminar detrás de una sola pancarta, hoy es el día de sacar pulso, ondear bandera propia y tomar la Gran Vía, el Arenal y la plaza Santiago.
Reducción de jornada
Laboral Los convenios colectivos del País Vasco tienen la jornada anual más baja y los de Canarias, la más alta
La jornada anual varía muy lentamente desde que el Ministerio de Trabajo tiene una serie histórica, apenas 22 horas desde 2001. El País Vasco aventaja en 49 horas a esa media estatal en los convenios colectivos firmados.
Más noticias
Opinión
Opinión El debate europeo… contaminado
Hoy más que nunca necesitamos abrir un debate europeo que supere los lugares comunes y el regate corto porque es mucho lo que nos jugamos.
Educación pública
Educación a la madrileña Huelga de profesorado en Madrid o cómo organizar la protesta desde abajo
El profesorado madrileño convoca los próximos 8 y 21 de mayo dos jornadas de huelga para que se reviertan los recortes de la época Aguirre en una protesta que tuvo su génesis al margen de la mesa sectorial.
Genocidio
Genocidio Las acampadas por Gaza se expanden mientras Netanyahu espera noticias de La Haya
Desde que estudiantes de la Universidad de Columbia levantaran la primera acampada, iniciativas similares se están repitiendo llamando al fin del genocidio. En Gaza, Israel castiga a la población superviviente a una muerte silenciosa, denuncia MSF.
Tribuna
Tribuna Se trata de recuperar nuestra vida
Pese haberse demostrado que la productividad aumenta con la disminución de la jornada, seguimos teniendo la misma jornada laboral.
Represión
Represión La Policía detiene por segunda vez en 2024 al portavoz del SAT, Óscar Reina
La Policía Nacional ha detenido al Portavoz del Sindicato Andaluz de Trabajadores, Óscar Reina, durante la mañana del jueves en Navarra. El líder del SAT es uno de los sindicalistas que más detenciones acumula dentro del Estado español.

Recomendadas

Política
Política Redes clientelares, falta de autogoberno e consensos neoliberais: as claves do novo Goberno galego sen Feijóo
Políticas e analistas debullan a folla de ruta da primeira lexislatura galega da era post-Feijóo: reforzamento dos fíos de poder locais, falta de vocación autonómica, complexo de inferioridade e a axenda marcada polos grandes consensos neoliberais.
En el margen
Francisco Godoy Vega “El ojo del blanco es como el ojo de Dios: es abstracto, es superior y puede verlo todo”
Doctor en Historia del Arte, Francisco Godoy Vega forma parte del colectivo de arte colaborativo Ayllu. Este activista antirracista aborda las consecuencias del supremacismo blanco. En 2023 publicó el libro ‘Usos y costumbres de los blancos’.
Laboral
Laboral Xavier Minguez: “Ni la rabia contra la empresa ni el orgullo de éxito de una huelga son solo tuyos”
Xavier Minguez es profesor de psicología social y análisis de resolución de conflictos en la UPV/EHU y ha realizado para el sindicato ELA la investigación ‘Un acercamiento psicosocial a la huelga’.
Genocidio
Fairouz Qasrawi “En Alemania, si eres pro-palestino, harán todo lo posible por intimidarte”
Aliada incondicional de Israel, Alemania es uno de los países donde más se están persiguiendo las protestas contra el genocidio en Gaza. La palestina Fairouz Qasrawi, aporta una panorámica de cómo se vive la represión y la censura en el país.