Pensamiento
El desconcierto

El desconcierto es una indagación literaria, un ensayo sobre literatura que Begoña Huertas escribe desde y con el cuerpo.

Ajedrez
Ajedrez humano (1924)
@magoa_
28 ene 2018 21:32

Literatura y enfermedad

Vale la pena escribir porque hay momentos en los que nada puede consolarnos, momentos en los que se nos quitan las ganas de leer, donde la sensación es la de no tener nada que decir... Contra todo pronóstico, se escribe. Begoña Huertas lo ha hecho en El desconcierto, «un texto inesperado, que no contaba con escribir», según nos confiesa ya en la portada del libro. Un texto necesario, aseguramos quienes lo hemos leído.

El desconcierto, publicado recientemente por la editorial :Rata_, es una indagación literaria, un ensayo sobre literatura que Huertas escribe desde y con el cuerpo, una no ficción que nos muestra una realidad a la que la literatura raramente presta atención. Porque, a pesar de que los temas que desconciertan están en la literatura, la enfermedad no es frecuente (y, entre ellas, el cáncer –en concreto, el cáncer de colon diagnosticado a su autora– es de las que menos se habla). ¿Que esconde este silencio?

La indiferencia de la ficción ante la enfermedad del cuerpo no lo es en el caso de los males del alma. Personajes enfermos de ambición, de celos o de orgullo pueblan las novelas. Sin embargo, los padecimientos del cuerpo se ocultan. Ni siquiera los autores que han padecido enfermedades escriben sobre ellas. Tanto es así que, aún siendo la muerte uno de los temas literarios por excelencia, no sucede lo mismo con los pasos de degradación que una enfermedad puede ocasionar y, eventualmente, desencadenar ese fin fatídico. Un caso paradójico es el de Rimbaud, quien de joven se atrevió a hablar de un sufrimiento sobre el cual guardó silencio cuando en verdad lo padeció, siendo ya mayor. En ocasiones la enfermedad aparece, sí, pero lo hace a costa de una estetización del dolor y del sufrimiento, con exceso de romanticismo.

En realidad, es escaso el interés que la literatura muestra por el tratamiento de las enfermedades, salvo acaso la tuberculosis en La montaña mágica de Thomas Mann (Huertas nos recuerda aquí el gesto simbólico del intercambio de radiografías de dos enamorados enfermos de tuberculosis). Otra notable excepción es La muerte de Iván Illich, una de las novelas que más impactaron a Huertas en su proceso de búsqueda de referentes literarios en la materia.

el héroe cansado: Qué raro era ser «yo»

«Al enfermo de cáncer se le cuida, pero a veces a cambio del deber de la lucha y la exigencia del optimismo.», afirma la autora. Como ella misma reconoce, es complicado estar de buen humor si te duele algo. Lo es con el cansancio extremo que acompaña a un tratamiento tan exigente como el de un cáncer, que deja sin apenas la fuerza necesaria para poder sonreír.

El campo semántico de la heroicidad y el lenguaje bélico que se maneja tan despreocupada como injustamente en los medios de comunicación es otro de los asuntos que más incomodan a Huertas, como también incomodó a Susan Sontag. Pero si abandonásemos este contexto de guerra entonces la noticia de una muerte a causa del cáncer de ningún modo podría volver a ser tachada de rendición ante el cáncer, como a veces se ha hecho.

Una de las lecciones de El desconcierto tiene que ver con la enfermedad entendida como un problema de identidad, de desconexión del enfermo con el mundo cotidiano, donde a juicio de Huertas primeramente se ve involucrado un qué soy antes que un quién soy. Quizás por eso, enfrentarse con la enfermedad significa, en primer lugar, enfrentarse con una misma, con ese yo, que de pronto no se conoce. «Qué raro era ser «yo»», escribe la autora. 

Huertas llega a compartir su idea de querer transformarse en piedra, como una manera de diluirse, «y así endurecerme, disolverme y desaparecerme.» Encontramos aquí una de las expresiones de las contradicciones en que las que llega a verse un enfermo, quien puede tener ese pensamiento desolador de preparación para la muerte pero, al mismo tiempo, aceptar la medicación e iniciar las sesiones de quimio y radioterapia, es decir, intentar, en todo momento, curarse. 

El desconcierto, perfecto cruce de géneros, está escrito desde la literatura. A pesar de ser un libro sobre una enfermedad, el cáncer de colon, no es en ningún momento un libro de autoayuda. No es ése su lugar. Por el contrario, El desconcierto está escrito desde el afán de ordenar el caos de lo real, de construir un artefacto de sentido, propio de la literatura, en otras palabras, de pasar de lo intangible a lo tangible. Por eso, El desconcierto supone un esfuerzo de socialización de la enfermedad y un ejercicio de libertad: el que supone hablar de lo proscrito socialmente y de un tabú literario, para conseguir, de ese modo, ampliar el terreno en el que se expresa eso que llamamos imaginación y, por tanto, la literatura. 

Begoña Huertas reconoce abiertamente su tendencia a sistematizarlo todo, una característica propia de una mente analítica, pieza clave en el esfuerzo por restablecer el equilibrio perdido a causa de la enfermedad, que la autora hace coincidir con la escritura misma de El desconcierto, ayudada de una imagen de buena ajedrecista: «Después hago un esfuerzo y muevo pieza; el equilibrio se recompone y sigo mi camino.»

Y, nosotros con ella, cerramos el libro y volvemos a las cosas que nos rodean. Ninguna ha desaparecido, aunque alguna puede haber dejado de resultarnos tan molesta, quién sabe; otras, de pronto, pueden haber pasado a reclamar todo nuestro empeño en su modificación. Solo nos queda preparar una buena estrategia y dejarnos acompañar, si hiciera falta.

Arquivado en: Pensamiento
Sobre o blog
Un espacio de literatura, pensamiento y crítica social.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.
Juan
30/1/2018 14:54

Genial texto. Muchas gracias por escribirlo.

2
0
Sobre o blog
Un espacio de literatura, pensamiento y crítica social.
Ver todas as entradas
Fiscalidad
Impuestos El culebrón, más político que económico, de los impuestos energéticos
El impuesto a las grandes energéticas, el de producción eléctrica y el del diésel se convierten en los campos de batalla política con los Presupuestos de fondo.
Partidos políticos
Parlamento El 2025 del PP: seducción con Junts y apuesta total a la carta de la corrupción contra Sánchez
En Génova trasciende un sentimiento de optimismo al ver a un Gobierno debilitado, en permanente jaque parlamentario y con un carrusel judicial que irá a peor.
Punk
Def Con Dos César Strawberry: “Se ha encumbrado la estupidez a un nivel increíble y la izquierda también ha colaborado"
Def Con Dos publica un nuevo disco volviendo a sus orígenes punk-rap para “seguir ofendiendo a cuantas más personas mejor, de todo el arco parlamentario y de todas las ideologías”.
La vida y ya
Opinión Disfrazar la pobreza
Como si fuese fácil decir “mírame, llevo ropa barata, paso de las marcas, llevo el móvil más simple del mercado”.
Mercosur
Mercosur Ministro Carlos Cuerpo, no nos venda la moto del acuerdo UE-Mercosur
A uno y otro lado del océano, las organizaciones agrarias, ecologistas y sociales sabemos que el efecto de este tratado será devastador para la agricultura social.
Galicia
Galicia Nota de rectificación da CRTVG sobre a adxudicación dun plan de publicidade
En cumprimento da lei Orgánica 2/1984, de 26 de marzo, reguladora do dereito de rectificación, publicamos esta nota enviada pola CRTVG á redacción de O Salto.

Últimas

Obituario
Obituario Marisa Paredes, la estrella de la edad madura en la cultura de la transición
La protagonista de filmes como ‘La flor de mi secreto’ se posicionó políticamente en su vida personal, aunque su estallido como actriz protagonista tuviese lugar en un contexto de desmovilizaciones sociales.
Ni hablar
Ni hablar Si debo usar palabras...
La ocasión de ser crueles, incluso radicalmente partidistas en el arte, sirve de contrapeso a los discursos ambiguos, cómplices y perniciosos de muchos medios de comunicación e instancias políticas.
El Salto Radio
Que no te lo cuenten De vivienda y precariedad laboral
VV.AA.
En el último noticiero del año destacamos el boicot a la vivienda social en Barcelona y la difícil situación de los trabajadores del 112 andaluz.
Opinión
Sanidad pública Marciano Sánchez Bayle, in memoriam
Marciano Sánchez Bayle, pediatra hospitalario portavoz de FADSP, defendió la Atención Primaria como el que más, a base y a golpe de informes, que resultaban irrefutables.
Más noticias
Fútbol
Fútbol y política Rafael Louzán, un presidente condenado para el fútbol español que no pone fin a los escándalos
La elección de Rafael Louzán como nuevo presidente de la Real Federación Española de Fútbol depende de un recurso que resolverá el Tribunal Supremo en febrero.
Memoria popular
Memorias ahogadas Mª Ángeles Fernández y Jairo Marcos: “La historia sentencia y las memorias cuestionan”
María Ángeles Fernández y Jairo Marcos bucean en su libro “Memorias ahogadas” en el relato de un país de embalses, de vidas sumergidas y de narrativas populares resistentes frente al olvido.
Dana
dana La Albufera de València y la dana, crónica de un desastre anunciado
El gran lago de València, que nunca ha dejado de estar en emergencia, se enfrenta al reto de sobrevivir al desastre ambiental derivado de la barrancada.
Reducción de jornada
Derechos laborales Trabajo y sindicatos firman la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas en 2025
El Ministerio de Trabajo firma este viernes el acuerdo para reducir las horas de trabajo a 37 y media el próximo año; CC OO no descarta defender la literalidad del texto a pie de calle si los partidos tratan de modificarlo

Recomendadas

Personas refugiadas
Personas refugiadas Fútbol en Lesbos, o de cómo hacer equipo en el exilio
Vienen de Afganistán, Yemen, Sierra Leona o Haití, están temporalmente en el Centro de Acceso Controlado Cerrado de Mavrovouni, donde se les vigila todo el tiempo. El campo de fútbol donde entrenan juntos se convierte en una especie de refugio.
Personas refugiadas
Personas refugiadas El precio de Schengen lo pagan los sirios en Bulgaria
Las personas refugiadas sufren las consecuencias del chantaje que la UE ejerce sobre estados dispuestos a todo con tal de concretar su adhesión.
Contigo empezó todo
Contigo empezó todo Los obreros sevillanos que lograron trabajar seis horas al día
Poco antes del golpe militar de 1936, el Sindicato Único de la Construcción de Sevilla consiguió un acuerdo histórico con la patronal.
Análisis
Análisis Turismo de genocidio: La industria turística israelí y la normalización de la violencia en Palestina
El caso de Palestina ofrece un ejemplo único y urgente de las formas en que el turismo puede emplearse como herramienta para normalizar las realidades de la ocupación y la violencia.