Ni hablar
Los anuncios

Sabemos quiénes somos sociológica y antropológicamente, en inevitable fusión de lo íntimo con lo político, cuando atendemos a los anuncios.
Levis anuncio
Marta Sanz
25 jun 2024 06:00

Cada vez que voy al ambulatorio y comento con mi médica pequeñas desgracias corporales que nos van atenazando con la edad, mi móvil —mi R2-D2 de bolsillo— expresa su sincera preocupación lanzándome infinitas ofertas de seguros de decesos. Mi móvil, mi pequeño y vigilante cuidador, mi vampirito y mi fetiche para la supervivencia y el entretenimiento, es un sol de mayo y yo le agradezco que normalice, de manera cariñosa y burocrática, la angustia que produce la proximidad de la muerte. En realidad, no me estoy muriendo —según se mire—, pero mi móvil aún no es lo suficientemente sensible como para captar cierto matiz humano. No obstante, la publicidad está cada vez más personalizada y nos persigue como un dron o como esa mosca que volaba sobre la cabeza de Mastroianni en una maravillosa película cuyo nombre no consigo recordar, aunque conseguiré hacerlo sin teclear en mi memoria extracorpórea. Me estoy quitando. No tengo que acercarme a los anuncios porque son ellos los que se aproximan a mí de un modo brutal o cauteloso; en este sentido, prefiero los estilizados anuncios de colonias, sus universos paralelos de purpurina en la superficie lunar o en un barco frente a la costa amalfitana, que los sensatos publirreportajes: los publirreportajes, con su cientifismo de chichinabo, me parecen un género maligno. Con el paso del tiempo, no es que la publicidad se haya convertido en una de las Bellas Artes, sino que su espíritu de seducción y venta, sus tiempos, nutren música, literatura, cine… No soportamos canciones que excedan los tres minutos, leemos para conocer el final de las historias y consumimos —repito: consumimos— cine para sentirnos bien. Incluso hay un género que se llama “feel good movies”: Mamma mía!, Una rubia muy legal y tal y cual. Por otro lado, resulta pavorosa esa poliglotía que nos lleva a pensar en inglés sin saber del inglés ni una palabra.

En las piezas publicitarias se activan las mismas figuras retóricas que utilizamos, con distintos grados de conocimiento erudito, al escribir poesía

En las piezas publicitarias se activan las mismas figuras retóricas que utilizamos, con distintos grados de conocimiento erudito, al escribir poesía. Metáforas, metonimias, prosopopeyas. Rimas consonantes y símbolos conforman nuestro imaginario colectivo y calcifican en nuestra ideología invisible. Hay grandes artistas de la publicidad que pasan a convertirse en cineastas de éxito: Tony Scott, Isabel Coixet o Jonathan Glazer que ahora está en su zénit gracias a La zona de interés (2023). Recuerdo al Glazer que rodó un anuncio de pantalones vaqueros en el que un hombre y una mujer competían en una carrera salvaje que los llevaba a atravesar muros y tabiques con la potencia de sus cuerpos en acción. Imágenes vertiginosas, energéticas, tan inolvidables como un verso incisivo o como el estribillo de una canción. Cuando yo era niña, me encantaban los anuncios de la tele: me siento orgullosa de la niña que fui, porque esa preferencia significa que, sin haber perdido aún los dientes de leche, ya me gustaba la poesía.

Sabemos quiénes somos sociológica y antropológicamente, en inevitable fusión de lo íntimo con lo político, cuando atendemos a los anuncios: somos gente estreñida o con diarrea, gente muy preocupada por su dentadura y por la caída del cabello, gente con insomnio y que teme que ocupen su casa. Al final y, más allá de excepciones transgresoras, a menudo nos transformamos en el lastimoso anuncio de nosotras mismas, y es muy probable que tengamos que darles a nuestros móviles, versiones en coltán de un ángel de la guarda acariciador y represivo, toda, toda, toda —canta Jesulín— la razón.

Arquivado en: Opinión Ni hablar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Ni hablar
Ni hablar La clase obrera no va al paraíso
La explotación se aligera con el relato torticero de la explotación y de los héroes del capital, y con la asunción íntima de que capitalismo y democracia son conceptos sinonímicos.
Ni hablar
Ni hablar Si debo usar palabras...
La ocasión de ser crueles, incluso radicalmente partidistas en el arte, sirve de contrapeso a los discursos ambiguos, cómplices y perniciosos de muchos medios de comunicación e instancias políticas.
Ni hablar
Ni hablar Vieja y edadista
Soy edadista porque doy por hecho que las viejas estamos enfermas; también doy por hecho que las viejas usamos con menos agilidad las nuevas tecnologías.
Galicia
Galicia A Xunta aprobou a celulosa de Altri argumentando que a súa cheminea de 75 metros sería “icónica”
O Informe de Patrimonio Cultural, favorable á multinacional, emitiuse con base en dúas encargas externas, contratadas e pagadas pola empresa ao ex presidente e ao actual tesoureiro de Icomos-España.
Alemania
Alemania Friedrich Merz es elegido canciller alemán por la gran coalición tras una jornada de suspense
El nuevo canciller alemán supera una votación extraordinaria tras un sonoro fracaso en su primer intento. Los conservadores gobernarán con el partido socialdemócrata.
Israel
Israel Netanyahu acelera los planes de ocupación total de una Gaza diezmada por el hambre
El ejército israelí quiere movilizar a 30.000 reservistas para una nueva expansión de la ofensiva sobre Gaza. Las organizaciones dependientes de la ONU alertan de la hambruna y las enfermedades en un enclave en el que escasea el agua potable.

Últimas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Madres organizadas contra los arrancamientos piden una reunión con Infancia
Pamela L.C. ve a su bebé dos horas a la semana después de que se lo retiraran dos días después de su nacimiento. Ella y otras madres han decidido organizarse para pedir medidas que frenen los arrancamientos.
Madrid
Madrid Sareb amenaza con desahuciar el centro social La Animosa, en Hortaleza
Los colectivos que participan del centro social okupado, y que han dado vida a este espacio durante los últimos cuatro años, convocan a defender su permanencia aunque se ha retrasado la fecha de desalojo hasta el 26 de mayo.
Opinión
Opinión España ya roza el 2,5% en gasto militar
Según el autor, investigador del Centre Delàs, el gasto militar real del Estado español será de 40.457 millones de euros y representará respecto al PIB el 2,48%. A esto se sumarán las inversiones comprometidas en programas de armamento.
Comunidad de Madrid
Universidad pública El alumnado de la UNED denuncia el “modelo antipedagógico” tras la supresión de tutorías presenciales
El proceso de eliminación de clases se remonta a 2008, aunque ha sido este año, con el nombramiento Claudia Sevilla como directora de centros asociados de Madrid, cuando el gobierno de Ayuso “ha pisado el acelerador”.
Opinión
Opinión El rentismo es racismo
La posición de las personas migrantes y racializadas en el conflicto del alquiler nos coloca como sujetos esenciales e imprescindibles en la lucha por la vivienda.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Alemania
Alemania Ines Schwerdtner: “Los conservadores tienen esta estrategia de normalizar la AfD, pero eso ha salido muy mal”
De profesión periodista, Ines Schwerdtner ha sido una de las responsables del ascenso de Die Linke, un partido que pasó de no aparecer en las encuestas a superar el 8% en las elecciones de febrero.