Opinión
La excusa de la creación de empleo en las inversiones militares

Cuando se presentan los Presupuestos Generales del Estado, el ministro de Defensa de turno insiste en que el multimillonario gasto dedicado a la compra de armamento genera empleo. Pero, como apuntan los autores, una comparación de los puestos creados en lo militar y en otros ámbitos permite cuestionar el relato dominante.
Inauguracion Defensa S-80 1 ok
El rey y la Infanta Leonor en la botadura del Submarino S-81 'Isaac Peral' en mayo de 2021 en Cartagena (MurciaI) Imagen: Ministerio de Defensa

Las inversiones militares, habitualmente, se justifican por los puestos de trabajo que generan. Tenemos un último ejemplo en la base logística del Ejército de Tierra. Varios municipios competían para acoger la instalación y, finalmente, el Ministerio de Defensa decidió instalarlo en Córdoba, pues era la opción que ofrecía más ventajas. La elección de esta ciudad como sede de la base ha tenido el apoyo de todos los sectores políticos, económicos y universitarios de la ciudad. Incluso la izquierda política se ha sumado a la iniciativa municipal sin apenas debate. No se ha cuestionado la iniciativa, al menos públicamente.

La base forma parte del plan de Concentración de los Órganos Logísticos Centrales del Ejército de Tierra que pretende concentrar los actuales doce centros logísticos del Ejército de Tierra en tres. Se estima que la futura base cordobesa requerirá una inversión de 350 millones de euros. El Ayuntamiento de Córdoba aprobó una asignación de 28 millones de euros (con la correspondiente modificación del presupuesto municipal). La Junta de Andalucía se comprometió a aportar 100 millones en el proyecto. Todo ello con el objetivo, según dicen, de “crear ocupación”.

Es muy significativo que, en la nota de prensa de la Moncloa en que se anuncia la construcción de la base, un recuadro bien visible destaque que la base “contribuirá a la creación de más de 1.600 puestos de trabajo”.

Cuando se presentan los Presupuestos Generales del Estado, el ministro de Defensa de turno, sea del PP o del PSOE, insiste en que el multimillonario gasto dedicado a la compra de armamento genera empleo. También se apela a la creación de empleo para justificar las exportaciones de armas, incluso las más controvertidas. La industria militar, y quien la promueve, insisten en la generación de ocupación de su actividad. Todo ello, seguramente, para contrarrestar, acallar o atenuar el mayoritario rechazo que provoca entre la población civil la fabricación de armas. Lamentablemente, por regla general, lo consiguen.

Cualquier inversión industrial genera empleo. Si bien esto no es suficiente, en muchos casos, para justificar determinadas actividades, como por ejemplo aquellas que tienen repercusiones indeseables para las personas o el medio ambiente. En ocasiones, afortunadamente, algún proyecto se ha paralizado justamente por algunas de estas razones gracias a la denuncia y la presión de la sociedad civil organizada.

Una determinada inversión realizada en el sector sanitario genera un empleo 2,8 veces superior (¡casi el triple!) a la de la misma cantidad invertida en el sector militar.

Todo actor económico, también el militar, debería rendir cuentas a la sociedad de sus actividades. Y, si bien es cierto que las inversiones militares generan empleo, se debería incluir en su evaluación los efectos perjudiciales para las personas y el medio ambiente que provocan. No podemos olvidar los efectos directos de la utilización de las armas (personas muertas, heridas, inválidas, con secuelas físicas y psíquicas, etc. así como graves daños al medio ambiente). Pero, además, el impulso de la industria militar acrecienta la militarización de la sociedad, de manera que se fomenta la resolución de conflictos de manera armada y violenta, en lugar de la intermediación y la resolución pacífica de conflictos. Y estos efectos perniciosos, ¿cómo los evalúa la industria militar? ¿Sólo debe tener en cuenta los puestos de trabajo generados? Pero es que incluso esa tan esgrimida generación de empleo de la industria militar es cuestionable; veámoslo.

En un estudio elaborado por Heidi Garrett-Peltier, publicado por el Watson Institute de la Brown University se calculan los multiplicadores de empleo con la inversión de un millón de dólares en diferentes sectores, uno de ellos el sector militar. Los resultados son contundentes.

Así, por cada millón de dólares de inversión en el sector militar se generarían, según el estudio, 5,8 puestos de trabajo en la industria militar y otros 1,1 empleos indirectos que, mayoritariamente serian puestos de trabajo asociados a la cadena de suministro. Es decir un total de 6,9 puestos de trabajo por cada millón de inversión.

En cambio, si la misma inversión se realizase en el sector de las energías renovables, se crearían un total de 8,4 puestos de trabajo en el caso de la energía eólica y de 9,5 en el caso de la energía solar. La modernización para mejorar la eficiencia energética reportaría 10,6 puestos de trabajo por cada millón de dólares de inversión.

La inversión en infraestructuras (construcción de calles, carreteras, puentes, escuelas, edificios públicos, etc.) representaría la creación de 9,8 puestos de trabajo por cada millón.

La creación de empleo en los sectores de la educación y sanidad es aún mayor. Así, por cada millón de dólares de inversión se generarían 14,3 puestos de trabajo en el caso que la inversión fuese dirigida a la sanidad y de 19,2 si la inversión ser realizase en enseñanza primaria y secundaria.

Es decir, según el estudio que comentamos, una determinada inversión realizada en el sector sanitario genera un empleo 2,8 veces superior (¡casi el triple!) a la de la misma cantidad invertida en el sector militar.

Así pues, según este informe, si el objetivo de una inversión es la creación de empleo, las inversiones en el sector militar son la peor opción. Es sorprendente que en la discusión de las inversiones militares no se tenga en cuento este hecho.

En el Estado Español, la industria de las armas juega un papel importante. Durante las últimas décadas, España ha sido uno de los mayores exportadores mundiales de armas. Según datos del Sipri, España ha sido el séptimo mayor exportador de armas en el periodo 2016-2020. Pero su actividad exportadora en otros sectores no es tan relevante, según datos del Banco Mundial, España ocupa el lugar 16 de los mayores exportadores del mundo.

¿Por qué el Estado español ocupa un papel tan destacado en la exportación de armas mientras se sitúa en un puesto más rezagado en el conjunto de las exportaciones? La respuesta radica en el notorio apoyo que han realizado los diferentes gobiernos, sean del PP o del PSOE, a las exportaciones de armas. Apoyo que ha contado incluso con la intervención directa de la Casa Real. La industria armamentística es pues una cuestión de Estado. Seguramente, estar entre los principales exportadores de armas tiene, para España, un valor geoestratégico y le dota de prestigio internacional entre sus aliados. No se trata, pues, únicamente de generación de empleo.

Recordemos que algunas de estas exportaciones, como las realizadas a Arabia Saudí, son especialmente controvertidas y han sido denunciadas por varias organizaciones, pues creen que tendrían que ser consideradas ilegales si nos atenemos a la legislación española y europea sobre exportación de armas. Y no podemos olvidar la corrupción relacionada con el comercio de armas; citamos como ejemplo el caso de la empresa Defex (el 51% controlado por el Estado a través de la SEPI) de venta de armas a Arabia Saudí.

Las inversiones públicas deben perseguir el bien público y la mejora de la vida de las personas y la conservación (y reparación) del medio ambiente. Invertir en sectores como educación, sanidad, energías renovables, infraestructuras, satisfarían les necesidades y demandas de la población y generarían muchos más puestos de trabajo que la misma inversión destinada a la industria militar. Además las inversiones militares provocan un coste de oportunidad, es decir merman los beneficios que se obtendrían si la inversión se dirigiese a otros sectores que crearían mayor número de puestos de trabajo.

Además ¿realmente necesitamos tantas armas? La reciente pandemia ha puesto de manifiesto la debilidad del sector sanitario, asistencial y educativo en el Estado español. ¿No sería más beneficioso para la población invertir en estos sectores en lugar de en el sector militar? Teniendo en cuenta la situación actual, inmersos en una crisis social y ambiental, ¿no sería más oportuno invertir en la rehabilitación de viviendas, instalación de energías renovables, contratación de más profesorado y personal sanitario? De esta manera, además de generar más puestos de trabajo mejoraría la calidad de vida de las personas.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Opinión
Space X Los viajes al espacio y el efecto Katy Perry
El 2024 fue el año más caliente desde que hay registros, mientras que Katy Perry y un puñado de millonarias nos deleitaron con su viaje espacial cortesía de Jeff Bezos.
Opinión
Opinión La coherencia de las políticas de Trump
No se pueden entender los aranceles de Trump sin su lucha por el control de los recursos minerales, sin Groenlandia, Ucrania o la República Democrática de Congo.
Opinión
Laicismo Cementerios públicos, enterramientos y ritos religiosos
Que el Estado español se define constitucionalmente como aconfesional parece, más que una realidad, un objetivo que se antoja a muy largo plazo.
#92425
13/6/2021 12:52

El gasto en defensa en España es muy pequeño comparado con nuestros y vecinos. Y se invierte mucho mas en sanidad y en educación que en defensa.

0
0
Minería
Minaría Bruxelas cava fondo: litio galego para o novo militarismo europeo
No medio do rearme ordenado pola UE, Galiza entra no ámbito xeopolítico como potencial provedor de litio para a industria de defensa. Un enclave de alto valor ecolóxico en Doade (Ourense) converterase en canteira de baterías militares.
Economía social y solidaria
Tecnología Inteligencia Artificial y economía solidaria: ¿posibles aliadas?
¿Cómo debe relacionarse la economía solidaria con una tecnología que vulnera derechos humanos y ambientales constantemente? Cooperativas e investigadoras tecnológicas animan al movimiento a perderle el miedo y a utilizarla de manera crítica.
Multinacionales
Multinacionales Maersk y las rutas de complicidad con el genocidio israelí en Gaza
Crece la presión internacional contra la naviera danesa que está aprovisionando a Israel de armas para cometer el genocidio de Gaza en contra de las medidas cautelares tomadas por la Corte Internacional de Justicia.
Crisis climática
Crisis climática La UE se entrega al ardor guerrero mientras descuida la crisis social y la emergencia climática
Varios países de la UE ya están recortando drásticamente en servicios públicos y estado del bienestar para poder costear el aumento del presupuesto militar.
Historia
Historia Cuando la solidaridad antifascista reunió a musulmanes, judíos y cristianos en la España republicana
Marc Almodóvar y Andre Rosés rescatan a los combatientes árabes de la Brigadas Internacionales en el libro ‘Moros contra Franco. El antifascismo y la Guerra Civil española en el mundo árabe’.
Senegal
Senegal Una ‘Escuela de rehenes’ o cómo Francia usó la educación en África para transformar las mentes
La administración colonial francesa puso en marcha en 1855 un centro educativo que tenía el objetivo de formar a los hijos de los reyes locales mediante el borrado de su cultura.

Últimas

Estados Unidos
Estados Unidos La buena sintonía entre Trump y Meloni
Como era de esperar, los mandatarios mostraron afinidades políticas e ideológicas. La italiana insistió en la idea de “fortalecer Occidente”.
Series
Series Masculinidad hegemónica o plomo: la sátira contra los hombres en ‘The White Lotus’
La serie culmina de forma trágica, llevando al extremo la lógica neoliberal, y se cuestiona si es posible una transformación que no termine cooptada por el propio patriarcado.
Más noticias
Grecia
Grecia Frontex pone de nuevo la mirada en Grecia
En enero de 2025 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acusó a las autoridades griegas de llevar a cabo devoluciones forzadas de manera sistemática.
Valencià
València Duelo colectivo y brecha de género, las consecuencias de la dana en la salud mental
Más allá de lo material, el sufrimiento mental continúa golpeando las vidas de l´Horta Sud. Mujeres cuidadoras y colectivos vulnerables encabezan un luto que todavía no ha encontrado descanso.
Almería
Artes escénicas Almería reclama su (dancístico) lugar
A menudo relegada al olvido en los mapas culturales, esta provincia oriental sigue siendo una gran desconocida, a pesar de su riqueza histórica, su diversidad paisajística y su potencia creativa.
Palestina
Genocidio Israel sigue atacando hospitales, la ONU habla del peor momento en los 18 meses de asedio
No hay tregua en Gaza, donde Israel ha recrudecido las matanzas y sigue sin permitir el acceso de alimentos y productos de primera necesidad. La ONU denuncia asimismo el asesinato de más de 70 civiles en Líbano.

Recomendadas

Camboya
Camboya 50 años del inicio del genocidio en Camboya
El régimen de Pol Pot acabó con la vida de más de dos millones de personas. Solo tres integrantes de los Jemeres Rojos han sido condenados por crímenes contra la humanidad.
Comunidad de Madrid
Memoria histórica Contra la basura y el olvido: tras la pista de los cuerpos y de la memoria de los brigadistas internacionales
El Salto acompaña a un contingente internacional de políticos, políticas y activistas en una ruta en memoria de los brigadistas internacionales que acudieron a luchar a España contra el fascismo, en un ejercicio inspirador para el presente.
Poesía
Culturas Joan Brossa, el mago que jugó con la poesía para reinventar el poder de la palabra
Casi inabarcable, la producción creativa de Joan Brossa se expandió a lo largo —durante medio siglo XX— y a lo ancho —de sonetos a piezas teatrales, pasando por carteles o poemas objeto— para tender puentes entre el arte, la política y el humor.