Sanidad pública
Ni universalidad, ni equidad, ni blindaje de la sanidad pública

En el anteproyecto de Ley de Equidad, Universalidad y Cohesión del Sistema Nacional de Salud que acaba de aprobar el gobierno, encontramos demasiada propaganda y muy pocos avances.
29 jun 2022 05:00

El deterioro de nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS) no comenzó con la pandemia, llevaba décadas, si bien el SARS-CoV-2 lo puso de manifiesto de forma clara. Nos habíamos creído que teníamos uno de los mejores sistemas de salud y esto no era cierto. Los recortes presupuestarios más intensos desde el 2012 y con anterioridad las privatizaciones habían dejado los Servicios de Salud de todos los territorios en precario.

A pesar de que el derecho a la protección de la salud se recoge en la CE, la atención sanitaria que presta el Sistema Nacional de Salud (SNS) se ligó al aseguramiento de las personas trabajadoras al aprobarse el Real Decreto 16/2012, dejando excluidos a unas 800.000 personas sin derecho a la sanidad pública. Además con esta norma se crearon copagos que igualmente dificultaban el acceso a tratamientos de los colectivos con menores rentas.

Con la llegada del gobierno de coalición se llevaron a cabo unos acuerdos de gobierno en los que en materia sanitaria, entre otras cuestiones, se pretendía recuperar la situación previa al RD ley 16/2012, es decir la universalidad del SNS, y revisar la Ley 15/1997 que abría la puerta a la privatización del sistema. Aunque ésta ya permanecía abierta desde la Ley General de Sanidad.

Pues bien, las modificaciones que se han introducido en el anteproyecto recientemente aprobado por el consejo de ministros no cumplen con lo que había anunciado el gobierno.

Bien es cierto que el propio acuerdo PSOE-UP no era muy explícito en los puntos en que se trataba la universalidad o la privatización de la sanidad. En el primer caso se hablaba de “impulsaremos y adoptaremos las modificaciones normativas, legales y reglamentarias necesarias para garantizar la efectividad del derecho a la protección a la salud a través del acceso universal al Sistema Nacional de Salud”. Pero esto se decía cuando el PSOE ya había aprobado el Real Decreto 7/2018 que a pesar de reconocer el derecho a la protección de la salud y el acceso universal a la atención sanitaria, continuaba excluyendo y dificultando la obtención de la tarjeta sanitaria para algunos colectivos.

En el segundo caso, sobre la privatización, no bastaba con “revisar la Ley 15/1997”, sino que había por un lado que derogarla, y por otro modificar la Ley General de Sanidad en su artículo noventa, que incluía: “Las Administraciones Públicas Sanitarias, en el ámbito de sus respectivas competencias, podrán establecer conciertos para la prestación de servicios sanitarios con medios ajenos a ellas”.

Al final lo que recoge el anteproyecto del gobierno, que obviamente puede ser aprobado, rechazado o reformado en su curso parlamentario en el Congreso, es que “todas las personas no registradas ni autorizadas como residentes en nuestro país que se encuentran en España tienen derecho a la protección a la salud en las mismas condiciones que las personas con nacionalidad española”. Esto supone un avance porque incluye a determinados colectivos que antes no tenían derecho a la atención sanitaria dentro del SNS, como por ejemplo las madres o padres de personas españolas o con permiso de residencia. Sin embargo, no mejoran el derecho a la cobertura sanitaria gratuita para migrantes en situación administrativa irregular que no puedan presentar un informe de servicios sociales que acredite su voluntad de residir en España.

Y es que diversos colectivos encuentran obstáculos insalvables a la hora de llevar a cabo los trámites de empadronamiento o para obtener los informes de servicios sociales, que se requieren para obtener la tarjeta sanitaria

Hay que tener en cuenta que muchas veces no basta con legislar, sino que hay que tener en cuenta la realidad cotidiana de muchas personas, si lo que se quiere es mejorar su situación. Y es que diversos colectivos encuentran obstáculos insalvables a la hora de llevar a cabo los trámites de empadronamiento o para obtener los informes de servicios sociales, que se requieren para obtener la tarjeta sanitaria. A esto se suman las trabas que ponen algunas Comunidades Autónomas, como por ejemplo Madrid. Es por esto que reconociendo el avance, no soluciona el bloqueo a una atención sanitaria gratuita dentro del SNS como recogen y denuncian REDER.

Sobre la privatización de la sanidad pública

El anteproyecto del gobierno modifica la Ley General de Sanidad (LGS) pero no en el aspecto de cerrar el paso a nuevas privatizaciones en el Sistema Nacional de Salud, y por ende en los Servicios de Salud de las CCAA. Se habla de que "la gestión y administración de los centros, servicios y establecimientos sanitarios de protección de la salud o de atención sanitaria o sociosanitaria podrá llevarse a cabo directamente o indirectamente a través de la constitución de cualesquiera entidades de naturaleza o titularidad pública admitidas a Derecho”. Continuando en la misma línea se añade que “en el marco de la gestión del Sistema Nacional de Salud, la prestación y gestión de los servicios sanitarios y sociosanitarios se llevará a cabo preferentemente mediante la fórmula de gestión directa de carácter público. El recurso excepcional a otras fórmulas de gestión habrá de contar obligatoriamente con una memoria que justifique desde el punto de vista sanitario, social y económico la necesidad de acudir a ellas, teniendo en cuenta, con carácter previo, la utilización óptima de sus recursos sanitarios propios y demás criterios previstos en la presente Ley”.

El PSOE no pretende cerrar el paso a las privatizaciones en el SNS, sino encubrir con una nueva fórmula que se pueda seguir privatizando centros y servicios de la sanidad pública

Es decir, el PSOE no pretende cerrar el paso a las privatizaciones en el SNS, sino encubrir con una nueva fórmula que se pueda seguir privatizando centros y servicios de la sanidad pública, pues nada garantiza que no se pueda realizar una memoria que justifique que los recursos públicos son insuficientes, dado el deterioro al que se han sometido los diferentes Servicios de Salud, en los que ya la norma es entregar fondos públicos para la gestión privada de la sanidad. Porque de hecho eso también lo dice la LGS en el mismo artículo noventa que no derogan: “las distintas Administraciones Públicas tendrán en cuenta, con carácter previo, la utilización óptima de sus recursos sanitarios propios”, lo que no ha impedido que sin la utilización óptima de los recursos públicos, se realicen conciertos, convenios, concesiones, es decir, todo tipo de transferencias de dinero público para beneficio privado.

Por todo ello es previsible que los socios de gobiernos en el transcurso parlamentario traten de modificar el anteproyecto, pues de lo contrario la nueva ley no contará con sus apoyos. ¡Claro! Como en otras ocasiones, el PSOE puede buscar en la derecha los votos que le harán falta para sacar adelante una ley que sigue incluyendo al sector privado con ánimo de lucro en la gestión de la sanidad pública.

Sobre la equidad

No se puede hablar de equidad en el SNS mientras se mantiene a unos 2 millones de funcionarios/as con un régimen de mutalismo que usa mayoritariamente el sector privado y se abona con fondos públicos. No sólo la cuantía que se abona a la sanidad privada es importante (2.246 millones de euros liquidados en el año 2020), sino que supone que una parte de las rentas más altas no están incluidas en la sanidad pública. O lo que es lo mismo, no les afecta el deterioro del SNS, aunque algunos puedan tener responsabilidades en su deterioro.

Bien es cierto que se contempla crear el Fondo de Garantía Asistencial con carácter extrapresupuestario, destinado a compensar a las Comunidades Autónomas por la atención a personas en sus desplazamientos temporales, y “tiene también por objeto garantizar la cohesión y equidad en el Sistema Nacional de Salud”. Esperemos que las cantidades de que se dote este fondo sirvan para paliar tanto los costes de algunos lugares que reciben numerosas personas en la época estival, como para mejorar la inequidad manifiesta en recursos humanos e infraestructuras que se dan en numerosos territorios.

Los escasos avances que supone el anteproyecto, como el garantizar que no habrá nuevos copagos o la ampliación de la salud bucodental, no son suficientes para mejorar la raíz del deterioro de la Atención Primaria, de la Salud Pública o de las plantillas del SNS

Por último, los escasos avances que supone el anteproyecto, como el garantizar que no habrá nuevos copagos o la ampliación de la salud bucodental, no son suficientes para mejorar la raíz del deterioro de la Atención Primaria, de la Salud Pública o de las plantillas del SNS, y esto lo elude completamente el anteproyecto. No es suficiente con legislar, además hay que tener voluntad política para resolver los problemas reales de una sanidad pública descapitalizada y en vías de ser un nicho de negocio para las multinacionales de la biotecnología, farmacéuticas, del sector servicios y de los datos sanitarios de cuarenta y siete millones de personas.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Galicia
Sanidad Dimite un tercio de los médicos de urgencia del mayor hospital concertado de Galicia aupado por Fraga y Feijóo
El centro privado, defendido y premiado también por el PSOE gallego, atiende a una población de al menos 120.000 pacientes derivados de la sanidad pública que denuncian “las peores condiciones sanitarias” que han visto en una sala de Urgencias.
Sanidad pública
Sanidad Pública Acabar con la privatización sanitaria: el muro al que se enfrenta Mónica García
De activista de la Marea Blanca a nueva ministra de Sanidad, García debe encarar un reto: acabar con las colaboraciones público-privadas, aunque no se haga alusión a ello en el pacto de Gobierno.
Educación pública
Iglesia Semana Santa: negocios, procesiones en colegios, inmatriculaciones y fervor
Más allá de la expresión cultural, la Semana Santa tiene una esfera económica que genera millones de euros y otra social que le sirve a la Iglesia Católica para legitimar sus privilegios dentro del Estado español.
Memoria histórica
Marc Solanes “Mi bisabuela luchó en el frente y fue considerada una mala madre, pero lo hizo por sus hijas”
En ‘Las niñas de Elna’ (Pollen, 2024) el periodista reconstruye la historia de las mujeres de su familia resolviendo enigmas para resignificar la imagen de la mujer en la historia.
Palestina
Palestina Viaje al fondo del horror
El fotoperiodista Javier Bauluz cubrió la primera Intifada, la primera gran rebelión del pueblo palestino desde la creación del estado israelí.
Poesía
Poesía La generación beat sigue latiendo
La generación beat es la del ritmo, del golpe, la de superar, la del latido en el papel y fuera de él. La del sentimiento desgarrador que sale del individuo, pero llega a la sociedad.
Literatura
Literatura ‘La santita’ de Mafe Moscoso: para escribir sobre el fin del mundo
‘La santita’, libro de relatos de Mafe Moscoso, es el método pero también es el fin: pone a convivir lo precolonial con las formas de nuestro presente ultracapitalista, ultramuerte, sin exclusiones ni jerarquías.
Maternidad
Maternidades Reaprender la espera
El tiempo de gestación es largo y va a un ritmo distinto al que acostumbras: el ritmo natural al que desarrolla una playa, un monte, un océano. Y no estamos ya habituados a darle la mano a la pausa.
Momus Operandi
Momus operandi Todo es una narración
Nos dicen que las mentiras son la única realidad. Que aprendamos a mentirnos, que nos engañemos, que no nos importa la salud, ni los derechos laborales, ni las violencias estructurales.

Últimas

Industria
Transición industrial Mecaner, un cierre injusto o cuatro alternativas con mirada ecosocial para mantener la fábrica de Urduliz
ESK y LAB han presentado el ‘Plan de Transición Ecosocial’ que ha elaborado la cooperativa Garúa como una herramienta para la búsqueda de soluciones al ERE propuesto por la multinacional Stellantis.
Sidecar
Sidecar Crisis intratable en la República Democrática del Congo
Una y otra vez los actores externos han fracasado a la hora de contener la escalada de violencia en la República Democrática del Congo.
Más noticias
América Latina
Caribe Haití: el fracaso neocolonial y el “eterno castigo de su dignidad”
La crisis de gobernabilidad que vive Haití después del alzamiento paramilitar que liberó a más de 3.600 presos y expulsó al primer ministro es un capítulo más de una historia colonialismo y dependencia.
El Salto Twitch
El Salto TV Economía y titulares de guerra
En el programa en directo de Economía Cabreada del 26 de marzo se hizo un análisis de la deriva bélica de la Unión Europea, sus gobiernos y de los grandes medios con Tica Font y Miquel Ramos.
Sidecar
Sidecar Soluciones bonapartistas
Las turbulencias en el seno de los dos partidos estadounidenses dominantes refleja el problema más amplio de un sistema capitalista cada vez menos capaz de proporcionar ganancias materiales a la clase trabajadora.
Memoria histórica
Memoria histórica Las nuevas leyes de memoria histórica recuperan la “concordia” franquista
La ofensiva legislativa de gobiernos autonómicos como el de Castilla y León y el País Valencià, adoptan un enfoque revisionista que amenaza los avances en el reconocimiento memorialista.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda La PAH València clama por el derecho a una vivienda digna: “¿Duermen tranquilos?”
Centenares de personas protestan frente al palacio de la Generalitat para exigir que se haga efectivo el derecho a la vivienda ante la insoportable alza de los precios.

Recomendadas

Investigación
Investigación O Goberno galego repartiu 4.000 millóns de euros en contratos a dedo en só seis anos
Desde 2018, a Xunta asinou 1.034.964 contratos sen sacalos a concurso: algo máis do 30% do diñeiro do que dispón para o exercicio de 2024. Ademais, 35.362 deses contratos teñen un importe entre 14.000 e 14.999 euros, o límite legal.
Ríos
Radiografía fluvial de España La tierra que no amaba sus ríos
Los ríos ibéricos agonizan. Casi la mitad de las masas de agua está en mal estado. Presas, sobreexplotación, contaminación y crisis climática son sus principales amenazas, con la agroindustria como mayor agresora.
Cine
María Alché y Benjamín Naishtat “El cine puede proponer imágenes y reflexionar, y por eso Milei necesita destruirlo”
María Alché y Benjamín Naishtat dirigen ‘Puan’, una película optimista y amarga, entre la comedia y el cine social, que ofrece nuevas lecturas tras los primeros cien días de gobierno de Milei en Argentina.