Referéndum del 1 de octubre
Adrián Sas podría ser el primero en entrar en prisión por las protestas del primer aniversario del 1-0

La Audiencia Provincial de Barcelona le condenó a tres años y seis meses de prisión por atentado a la autoridad y lesiones. Tras la confirmación de la condena por parte del TSJ de Cataluña, el activista está a la espera de la resolución del Tribunal Supremo.
Adrián identificación
Adrián Sas es identificado durante la manifestación convocada el 19 de febrero por parte de diferentes grupos de apoyo y colectivos antirrepresivos bajo el lema "Tumbemos las leyes represivas". Foto: Xavi Hurtado
8 abr 2022 06:05

“El día de mañana, si se mantiene la condena, no me presentaré voluntariamente a la cárcel”, asegura a El Salto Adrián Sas, uno de los más de 3.300 represaliados por las movilizaciones por la independencia de Catalunya que se cuentan desde octubre de 2017, según las estimaciones del movimiento independentista. Este activista, de 32 años, ha sido la única persona que, hasta ahora, ha sido condenada por las protestas que tuvieron lugar el 1 de octubre de 2018 en Barcelona. En noviembre de 2020, la Audiencia Provincial de Barcelona le condenó a tres años y medio de prisión por un delito agravado de atentado a la autoridad y otro de lesiones. Después de que, en noviembre de 2021, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Catalunya confirmara la condena, Sas está ahora pendiente del recurso presentado ante el Tribunal Supremo.

Las protestas por el aniversario del Procés comenzaron ese día muy temprano en toda Catalunya. Desde las 7h, distintos CDR organizaron cortes de carreteras, los estudiantes se encadenaron en el edificio de la Bolsa de Barcelona y, por la tarde, a las 18.30, una manifestación bajo el lema “Recuperem l’1 d’octubre”, convocada por la Plataforma 1 de octubre, partió desde la Plaça de Catalunya para llegar a las inmediaciones del Parlament. Miles de personas secundaron las protestas para denunciar la represión sobre el movimiento independentista pero también para reclamar al gobierno de la Generalitat que llevara a la práctica el resultado de la consulta en una jornada pacífica hasta que los manifestantes llegaron al parque de la Ciutadella. Allí comenzaron las cargas policiales.

“Las protestas fueron totalmente pacíficas hasta que llegamos al parque de la Ciutadella, donde comenzaron a cargar indiscriminadamente contra los manifestantes”, recuerda Sas sobre ese día. Pero el activista independentista destaca una diferencia respecto a las anteriores manifestaciones: “Ese día, el pueblo, cansado de recibir los golpes de la policía, respondió de forma legítima, en autodefensa, a sus ataques”. Sas, sin embargo, no fue detenido ese día. Cuando la policía dio por concluida la convocatoria, se volvió a su casa, con el cuerpo lleno de moratones por los golpes de las balas de foam. “Pero no me identificaron ni me detuvieron”, señala a El Salto. Tampoco la policía le requirió en los días siguientes. Fue dos meses después, cuando su familia había acudido a verle a Vilafranca, donde él vive, desde Asturias, cuando varios mossos le interceptaron en la calle, mientras paseaba con su padre, para llevárselo detenido. 

“Ese día, el pueblo, cansado de recibir los golpes de la policía, respondió de forma legítima, en autodefensa, a sus ataques”

“Fui a dar una vuelta con mis padres en Vilafranca del Penedès, donde vivo, y unos mossos nos asaltaron”, recuerda Sas. Tras 24 horas en los calabozos en las que ni siquiera le quisieron decir el motivo de su detención, llegó su abogada y por fin supo la acusación a la que se enfrentaba: atentado a la autoridad, lesiones y desórdenes. Dos mossos le acusaban de haberles atacado con un palo de bandera, provocándole a uno de ellos una herida en la mano y un rasguño en el mentón, y al otro dolores en el cuello. La Fiscalía entonces pedía para él cinco años y medio de cárcel y la Generalitat, que se había personado como acusación particular, aún más: siete años, al incluir también una agravante en el delito de atentado por usar un objeto peligroso, el palo de la bandera. En noviembre de 2020, más de dos años después del primer aniversario del 1 de octubre, llegó la sentencia: tres años de cárcel por un delito de atentado a la autoridad agravado por usar un objeto peligroso, seis meses más por un delito leve de lesiones y dos meses de multa por lesiones leves. 

“Nosotros, desde un primer momento, consideramos que es un juicio político e hicimos una defensa política para denunciar la incongruencia de la propia Generalitat, que nos animaba a salir a las calle y se presentó como acusación particular”, explica Sas. “En el juicio, la agravante de objeto peligroso la presentó la Generalitat, cuando horas antes manifestó su intención de retirarse como acusación particular en mi caso y en los demás casos”. 

“Desde un primer momento consideramos que es un juicio político e hicimos una defensa política para denunciar la incongruencia de la propia Generalitat, que nos animaba a salir a las calle y se presentó como acusación particular”

Sas relata que, durante el juicio, la médico forense que acudió como perito señaló que las lesiones de los agentes que, según la acusación, les provocó golpeándoles con la bandera también podrían haber sido causadas en otras circunstancias. A pesar de ello, la Audiencia Provincial dio por probado que Sas fue su responsable y que el palo que portaba era un objeto peligroso que merecía una agravante, según aparece en la sentencia, a la que ha tenido acceso El Salto. “El juez lo ha considerado así, que puede causar daños graves y hasta la muerte de una persona, a pesar de que los policías van uniformados con armadura y hasta con casco, y las lesiones que tenían eran de muy poca gravedad”, añade el activista.

Tras la condena, Sas recurrió al TSJ. “Alegamos la incongruencia de los mossos, que en todo momento se vulneró mi presunción de inocencia y que tampoco se pudo probar la cadena de custodia de los vídeos que los mossos presentaron como prueba”, explica. 

Después de que, en noviembre del pasado año, el TSJ rechazara el recurso y confirmara la condena impuesta por la Audiencia Provincial de Barcelona, Sas ha recurrido al Tribunal Supremo, que aún no se ha pronunciado sobre su caso, aunque no se muestra muy positivo. Tampoco descarta, si el Supremo rechaza su recurso, acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos. “Estamos preparando los recursos, pero no tenemos ningún tipo de esperanza, sabemos que la solución no va a venir de la justicia ni dictada por instituciones”, afirma. “Pero eso no quiere decir que no vayamos a usar todas las vías legales y judiciales para buscar mi absolución”, añade. “Cuando el Supremo diga que no, recurriremos a Europa, con la diferencia de que yo ya estaré dentro de la cárcel”. 

Lo que sí descarta es pedir un indulto. “No lo haré porque no solo lucho por mí, sino que es una lucha conjunta; lo único que nos sirve y exigimos es una amnistía total. Una amnistía para todos y todas las presas políticas que llevan años encerradas en las prisiones del régimen. Ya que cualquier tipo de lucha que se utilice para derrocar a este Estado fascista e ir en contra del sistema capitalista es legítima”, concluye.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Catalunya
Violencia policial El juzgado rechaza amnistiar a cuatro policías que dispararon balas de goma en el 1-O y los procesará
El delito de lesiones por el que se investiga a los cuatro agentes no queda amparado por la amnistía de 2024. Uno de los investigados provocó presuntamente la pérdida de un ojo a Roger Español con balas de goma.
Referéndum del 1 de octubre
Represión El Tsunami de solidaridad que necesita el periodista Jesús Rodríguez
El redactor de La Directa lleva nueve meses en Suiza para escapar de las represalias de ser acusado de terrorismo por ejercer el periodismo.
Investigación
Investigación Varios refuxiados denuncian á ONG Rescate Internacional por explotación laboral e agresión sexual
A Garda Civil investiga o centro de Mondariz-Balneario tras varias denuncias por parte de voluntarios migrantes que aseguran traballar sen contrato a cambio de 50 euros semanais. A ONG xestiona 1.700 prazas do programa estatal de acollida.
Galicia
Galicia A Xunta aprobou a celulosa de Altri argumentando que a súa cheminea de 75 metros sería “icónica”
O Informe de Patrimonio Cultural, favorable á multinacional, emitiuse con base en dúas encargas externas, contratadas e pagadas pola empresa ao ex presidente e ao actual tesoureiro de Icomos-España.
Reducción de jornada
Laboral El ‘obstáculo’ catalán a la jornada de 37,5 horas semanales
Frente al ‘no’ de Junts, los sindicatos desmontan los argumentos de la oposición y la patronal a lo que consideran “un avance” en los derechos de los y las trabajadoras.
Yemen
Yemen Los hutíes de Yemen, única milicia en Oriente Medio que sigue bombardeando Israel “en solidaridad” con Gaza
El grupo armado ha lanzado decenas de misiles contra territorio israelí desde que el Gobierno de Netanyahu retomó el bloqueo total de ayuda humanitaria en el enclave a inicios de marzo.
Industria armamentística
Feria de armas Un grupo de activistas señala en IFEMA la complicidad de la industria de armas con el genocidio palestino
“Nuestras balas, nuestros muertos”: así gritaba un grupo de activistas en la mañana de este domingo en el recinto ferial IFEMA, en Madrid, donde entre el 12 y el 14 de mayo tendrá lugar una nueva edición de la Feria Internacional de Defensa.
Estados Unidos
Roberto Montoya “Nos dicen que hay que armarse contra Putin cuando el mayor peligro para el mundo es Trump”
Más Donald Trump que nunca, el multimillonario ha regresado para terminar lo que no pudo hacer en su primer mandato. El periodista Roberto Montoya bucea en el personaje y su contexto en el libro ‘Trump 2.0’ (Akal, 2025).
Palestina
Ocupación israelí Miles de personas se manifiestan en Madrid contra el genocidio en Palestina
La organización cifra en 50.000 las personas asistentes a la convocatoria unitaria de todas las organizaciones que forman la Rescop, a la que se han sumado cientos de colectivos ciudadanos con una voz común: Muévete por Palestina.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'Os Pecadores' loitan contra montruos reais e mitolóxicos no novo episodio de 'O Teleclube'
O dúo do director Ryan Coogler e o actor Michael B. Jordan estrean unha película sobre a experiencia afroamericana cunha ameaza sobrenatural engadida.
La vida y ya
La vida y ya Algo más que leer
“Cuéntale hasta cuándo estuviste trabajando”, le dicen a otra. “Yo trabajé hasta los setenta y pico”, comenta sin orgullo pero sin resignación.
Más noticias
Opinión
Opinión Cinco ideas decrecentistas frente al apagón
El autor de ‘La espiral de la energía’ (Libros en Acción, 2014) reflexiona sobre las lecciones que se pueden extraer del corte de suministro eléctrico del pasado 28 de abril.
Análisis
Energía El apagón de la liberalización: cómo el mercado eléctrico ha fallado a la ciudadanía
La liberalización no ha cumplido ninguna de sus promesas y ha generado riesgos estructurales para la economía, el medioambiente y la cohesión social
Laboral
Laboral Al borde de la huelga en la educación pública vasca
Los cuatro sindicatos convocantes denuncian que el Departamento de Educación vasco no se han sentado a dialogar hasta este viernes pocos días antes de los paros
Opinión
Opinión ¡A la mierda Europa!
Hay otra Europa que es víctima de la Europa neoliberal y belicista que apuesta por la industria de las armas a costa de los derechos sociales, es una Europa que se muere de vergüenza cada vez que ve imágenes de Gaza o Cisjordania.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Cine
Cine Colectivo y sin autor: breve historia de otro cine
La película ‘Una isla y una noche’, autoproducida y autodistribuida por el colectivo francés Piratas de Lentillères, es la puerta de entrada para recordar otros modos de hacer cine, alejados de la firma de autor y los grandes estrenos.
Historia
Historia El largo viaje de Pepe Díaz
Se cumplen 130 años del nacimiento en Sevilla de una figura carismática y trágica del movimiento obrero español.