Vecinos Russafa

Airbnb
¿Qué hacemos con Airbnb cuando se supere la pandemia?

Con la publicación del informe El fenómeno Airbnb en Valencia, reflexionamos sobre el desarrollo de la empresa, sus impactos y las oportunidades que el nuevo contexto ofrece para revertir sus efectos negativos.

Investigador de la Càtedra d’Economia Col·laborativa i Transformació Digital de la Universitat de València
17 nov 2020 09:40

La industria del turismo ha colapsado. En España, donde este sector aporta más del 10% del PIB y es el pulmón del ladrillo -la primera industrial nacional-, el golpe ha sido duro y probablemente lo será aún más. Aerolíneas rescatadas y hoteleros temblando ante fondos buitre que esperan hacerse con la industria a precio de saldo (como ya hicieron con el sector inmobiliario durante la crisis del 2008). Ante esta disyuntiva, el Estado tendrá un rol crucial para inyectar dinero público y facilitar políticamente un nuevo ciclo de expansión turística. En este contexto, ¿qué hacemos con Airbnb?

Airbnb lleva años anunciando que ha revolucionado el mundo del hospedaje. Defiende que su modelo permite a las clases medias obtener ingresos extra, contribuye a que la actividad económica se reparta fuera de los circuitos turísticos tradicionales, que ayuda al pequeño comercio y que genera un modelo de turismo más sostenible. Pero los discursos y el marketing de la empresa parecen no corresponderse con la realidad. Airbnb ha sido uno de los principales focos de conflicto en muchas de las grandes ciudades del mundo. Ahora, la pandemia ha detenido temporalmente el negocio (o por los menos las plusvalías previas) y es buen momento para debatir sobre el papel que queremos que Airbnb tenga en nuestras ciudades.

Las plataformas digitales de las denominadas economías colaborativas surgieron hace una década. Este concepto empresarial nace al albor de las innovaciones tecnológicas en materia de comunicación. Parte de la idea de que estas reducen los costes de transacción entre particulares, lo que facilitaría el intercambio de productos y servicios entre iguales, eliminando así a los intermediarios. En un contexto en que nuestras sociedades están repletas de bienes ociosos y valores de uso infrautilizados, Silicon Valley encuentra un nuevo nicho de negocio, que si bien no rompe con las relaciones de mercado, se diferencia de la economía tradicional porque supuestamente tiene toda una serie de impactos positivos. Introducir en el mercado bienes temporalmente infrautilizados que posee la población y que serán consumidos por un tercero desconocido. Este es el principio básico de las economías colaborativas. Cuando se habla de los efectos positivos de las economías colaborativas a distintos niveles: económico, medioambiental y social; estos derivan del hecho de que el recurso que se moviliza es un bien temporalmente en desuso.

En Valencia, Airbnb se trata principalmente de un modelo de hospedaje comercial, donde menos de un tercio de los anuncios cumplen los principios de las economías colaborativas

En el caso de Airbnb también se aplica este principio. Cuando una persona se va de vacaciones dos semanas, la vivienda se queda vacía y por tanto temporalmente en desuso. Ahora, por medio de Airbnb la puede alquilar y obtener unos ingresos extra para sus vacaciones. En términos mercantiles, esta actividad estaría generando toda una serie de impactos positivos. Ahora consideremos el caso de una persona que ha invertido en unas viviendas que lleva años alquilando en el mercado residencial. Estas viviendas no cumplen la función de recurso temporalmente infrautilizado, porque hay personas que viven en ellas. Pero el inversor decide no renovar el contrato, expulsarles de la vivienda y anunciarla en Airbnb. Este caso no cumple el principio de las economías colaborativas. Por lo tanto, no tiene sus supuestos efectos positivos, más bien al contrario: genera toda una serie de efectos negativos.

Lo primero que observamos de Airbnb en Valencia es que un 75% de los anuncios de viviendas y habitaciones pasan más de la mitad del año anunciadas en la plataforma. Más de 5.000 anuncios que no cumplen el principio de la vivienda o la habitación como recurso temporalmente infrautilizado. Esto hace que no se puede considerar que la plataforma haya impulsado un modelo de hospedaje colaborativo. Por el contrario, se trata principalmente de un modelo de hospedaje comercial, donde menos de un tercio de los anuncios cumplen los principios de las economías colaborativas.

Airbnb Valencia 1

En Valencia pasa como en muchas otras ciudades, porque esta es la norma general. No solo se trata de mercados que están dominados por anuncios comerciales, sino que también se ha producido una estructura de distribución de los anuncios muy vertical. Los multigestores, aquellas personas o empresas con más de un anuncio, representan al 28.34% de los anfitriones, pero en cambio controlan el 58.54% de los anuncios. Además, los anfitriones que controlan seis o más anuncios tienen casi un tercio de los anuncios de la ciudad. Por lo tanto, no solo estamos ante una actividad de hospedaje comercial, sino que además se trata de un mercado principalmente controlado por actores muy profesionalizados y empresas. Por ejemplo, en Valencia hay 15 usuarios que controlan 660 anuncios.

Airbnb Valencia 2

El resultado de este modelo es que reduce las posibilidades de redistribución económica que la plataforma pudiera tener. En Valencia, el 10% de los anfitriones que más ingresos obtienen perciben el 52.79% de todos los ingresos que produce Airbnb en la ciudad. En cambio, el 80% de los anfitriones que menos ingresos obtienen, perciben el 32.47% de los ingresos. Lejos de una actividad redistributiva, estamos ante una economía muy desigual, donde grupos relativamente pequeños de anfitriones y empresas perciben la mayor parte de los ingresos que se generan a través de la plataforma.

Airbnb Valencia 3

Aumentar las rentas inmobiliarias de las viviendas a través de Airbnb en las zonas turísticas. Este hecho parece ser la principal causa para explicar el desarrollo de Airbnb en Valencia. Ciutat Vella y Poblats Marítims . Zonas que concentran casi la mitad de toda la oferta de pisos turísticos de la ciudad (el 46%). En ambos distritos, alquilar un piso turístico y externalizar la gestión sobre una empresa especializada, genera unos beneficios de más de 12.000 euros al año en comparación a alquilar esa misma vivienda en el mercado residencial. Con una diferencia de renta tan elevada entre alquilar una vivienda en la plataforma frente a alquilarla en el mercado residencial, Airbnb ejerce una fuerte presión sobre inversores y multipropietarios para que conviertan en pisos turísticos las viviendas que alquilan en el mercado residencial.

Airbnb Valencia 4

El resultado de este modelo es que en algunas zonas de la ciudad el mercado residencial se está airbnbizando. Tomemos el caso de Ciutat Vella. Es el distrito donde los precios de los alquileres son más elevados, uno de los distritos con mayores subidas de los alquileres entre 2013 y 2019 y la zona de la ciudad donde convertir viviendas en pisos turísticos produce más beneficios e ingresos. También es el distrito que concentra más pisos turísticos y donde se observa una sobre especialización de los anfitriones más profesionalizados y comerciales (los que alquilan más de seis viviendas en la plataforma). En definitiva, Ciudad Vella es la zona de la ciudad donde el negocio de los pisos turísticos ha sido más pujante. El resultado es que los pisos turísticos representan casi el 40% del parque de vivienda en alquiler, lo que ejerce mucha presión sobre la oferta de vivienda en alquiler residencial, los precios de los alquileres y las expulsiones de la población.

Airbnb Valencia 5

Este modelo también reduce las posibilidades de la plataforma para redistribuir el turismo e impulsar el comercio local más allá de las zonas turísticas de la ciudad. En Valencia se observa que la forma en que se configura la oferta de Airbnb espolea la turistificación de las zonas ya turistificadas. En Ciutat Vella la plataforma puede hospedar hasta 6.165 turistas, lo que representa un 22.77% de la población que vive en el distrito. Se trata de una tasa de turistas muy elevada en relación a la población local. La significativa concentración de turistas hace que el turismo ejerza una fuerte presión sobre el comercio local, el espacio público, los servicios o los lugares de ocio. El resultado es que la demanda y las necesidades de los turistas, al estar tan concentrada, comienzan a superponerse a la demanda de la población local, lo que transforma los barrios. Cada vez más, estos barrios se configuran de acuerdo a los intereses y necesidades de los turistas en detrimento de los intereses y las necesidades de la población local. Se trata de un modelo que genera amplios beneficios para la industria turística, pero hace que algunos barrios sean cada vez menos habitables.

Airbnb Valencia 6

Nada más comenzar la pandemia, el negocio de los pisos turísticos se desplomaba. Las reacciones entre los propietarios están siendo diversas. Algunos abandonan el negocio y devuelven la vivienda al mercado residencial, mientras que otros alquilan por temporadas en portales inmobiliarios (muchos incumpliendo la ley). Pero esto no significa que estemos ante el final del negocio de los pisos turísticos. Antes o después, en cuanto el turismo se recupere, los pisos turísticos volverán. En ese momento resurgirá el negocio, porque se volverán a dar las condiciones de mercado que lo impulsaron durante los últimos años.

La recuperación del turismo pasada la crisis puede suponer el inicio de un nuevo ciclo de conversión de vivienda residencial en pisos turísticos. Si algo caracteriza a los procesos especulativos que se han desarrollado durante los últimos años a través de Airbnb en relación a los procesos de gentrificación clásicos, es la facilidad con la que aumentan las rentas inmobiliarias a través de la plataforma: basta con no renovar el contrato de alquiler a los inquilinos y anunciar la vivienda en Airbnb, sin ni siquiera tener que invertir en la vivienda. Este ha sido el motivo principal que ha hecho que los procesos de airbnbización del mercado residencial hayan sido tan rápidos y profundos. En muchos casos, la respuesta por parte de la administración ha llegado tarde o ni si quiera ha llegado. En otros casos, cuando se ha intentado regular, el fenómeno ya se había consolidado y era muy complicado dar marcha atrás.

Ahora que el negocio de los pisos turísticos ha entrado en crisis, se da una nueva oportunidad para comenzar de cero, regular y decidir el rol que deben cumplir estas plataformas en las ciudades. Un debate que trasciende a Airbnb y que se debería centrar en la función que tienen que cumplir las viviendas y el turismo en nuestras sociedades.

El informe El fenómeno Airbnb en Valencia será presentado el próximo 18 de noviembre a las 10 horas y se podrá seguir en la web de la Universidad de Valencia.
Alquiler
Airbnb, imparable en el distrito centro
Cada año se duplican las ofertas de Airbnb en Madrid, que ya alcanzan la cifra de 16.313 en la ciudad. Entre octubre de 2015 y enero de 2018 los anuncios han crecido un 219%, lo que supone 328 ofertas nuevas cada mes.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Ocupación israelí
Ocupación israelí Sionismo y gentrificación
Estas vacaciones, mientras turistas occidentales con nula empatía y conocimiento del mundo disfruten del agua que no pueden disfrutar los niños y niñas de Gaza; ciertas empresas de alquileres de casas de lujo llenarán sus arcas de sucio dinero.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda De piso turístico a alquiler de temporada, la penúltima mutación de la pandemia
Los alquileres de temporada se convierten en una de las principales vías para burlar la legislación vigente y aumentar los precios sin control.
Derecho a la vivienda
vivienda Nueva York ‘se libra’ de Airbnb a partir de septiembre con una ley que limita los alquileres de corta duración
La ciudad estadounidense solo permitirá estancias de menos de un mes en este tipo de plataformas si se comparte con el propietario y si se registra la vivienda en el Ayuntamiento. El objetivo es acabar con los alquileres ilegales.
#74672
18/11/2020 23:01

Bueno. Yo cuando viajo prefiero particulares que grandes cadenas que salen llorando en el telediario porque tienen perdiditas. Y cuando tenían ganancitas pagaban una mierda a las Kellys, en b a mas de uno y otro. Y ese b, nos lo quitan a todos los españoles. Asi que....

0
0
#74625
18/11/2020 10:13

La fatal arrogancia

0
0
#74579
17/11/2020 15:26

Pues volver a poner el piso en la plataforma que da dinero y asi recuperarnos antes de esta crisis

0
0
Racismo
Racismo Dipo Faloyin: “En África no hay solo historias de pobreza y sufrimiento, sino también de éxito”
En su libro ‘África no es un país’, el periodista Dipo Faloyin se interna en distintas realidades, debates y resistencias para dinamitar con un estilo agudo toda visión monolítica del continente.
Honduras
Reportaje Honduras, el país que sembró Berta Cáceres
Honduras heredó del narcogobierno de Juan Orlando Hernández la violencia que ejercen de forma estructural la Policía, el Ejército, las maras y los sicarios contratados por las empresas para matar a líderes ambientales.
O Salto medra contigo
Que non che conten películas Subscríbete a O Salto e leva seis meses de Filmin de agasallo
Este Nadal, fai posible que O Salto chegue máis lonxe cos seus contidos críticos e leva de agasallo medio ano de Filmin. E se xa tes Filmin, subscríbete e regala o acceso a esta plataforma a quen queiras.
Laboral
Laboral ¿Están mejorando los salarios de los trabajadores y las trabajadoras?
Es importante saber lo que ha pasado con los salarios reales, los que resultan de descontar el aumento de los precios.

Últimas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Metro de Madrid circula sin una ley de seguridad ferroviaria
Las normas de circulación de Metro de Madrid están reflejadas en una normativa interna que no es de obligado cumplimiento: ningún organismo supervisa la seguridad en el suburbano, tal y como revela una investigación del sindicato Solidaridad Obrera.
Israel
Según un informe Amnistía Internacional asegura que Israel “ha cometido y continúa cometiendo” un genocidio en Gaza
Israel trata a la población palestina de Gaza como un grupo infrahumano que no merece derechos humanos ni dignidad, según un informe de Amnistía Internacional.
Opinión
Madres protectoras Cuando la mayoría de medios decían que Juana Rivas había secuestrado a sus propios hijos
Los niños y niñas que están siendo arrancados de sus madres un día hablarán. Es entonces cuando el poder mediático y el poder judicial se darán de bruces con la realidad.
Palestina
Semana de Lectura por Palestina Literatura palestina toma el Metro de Madrid
Tuneando la campaña “Libros a la calle” activistas distribuyen poesía de autores palestinos en el transporte público madrileño en la semana de lectura por Palestina.
Literatura
Nerea Ibarzabal “En un bar me interesan más las conversaciones de cocina que las de barra”
Nerea Ibarzabal es una voz comprometida. “Siempre es el momento, pero ahora es imprescindible”, explica. 'Bar Gloria' es su ópera prima (Susa, 2022), traducida por consonni (2024), y fue la obra más prestada en las bibliotecas el año de su aparición.
Más noticias
Patrimonio cultural
Patrimonio La noria-mirador que pudo destrozar el Palmeral de Elche
Hace quince años la acción ciudadana fue clave para detener el despropósito urbanístico en este espacio patrimonio de la humanidad
El Salto Radio
El Salto Radio ¡Viva el mal!
Proyecto UNA, presentan “La viralidad del mal. Quién ha roto internet, a quién beneficia y cómo vamos a arreglarlo” en Señales de Humo.
Análisis
Análisis Los fantasmas de 1964 atormentan a la democracia brasileña
Con la Ley de Amnistía de 1979, la política del perdón hecha a costa de los perseguidos por la barbarie autoritaria no sólo consolidó el pacto de silencio, sino que estableció la banalización de las violaciones de los derechos humanos.
Isabel Díaz Ayuso
Fraude fiscal El Supremo cita a declarar a Miguel Ángel Rodríguez en el caso contra el Fiscal General
El caso sobre las informaciones que dieron a conocer el reconocimiento del fraude fiscal de la pareja de Isabel Díaz Ayuso evoluciona con la citación del jefe de Gabinete de la presidenta de la Comunidad de Madrid.

Recomendadas

En el margen
Thimbo Samb “Ganar el Goya con ‘Los cayucos de Kayar’ implicaría que el mundo del cine español valora historias diversas”
Cansado de los papeles que le ofrecen como actor negro, Thimbo Samb busca sus propias historias para mostrar de lo que es capaz, la última, un documental sobre su propia vida, que ha sido preseleccionado para los Premios Goya.
Palestina
Palestina “Es nuestra tierra”: colonos israelíes acampan en la frontera con Gaza para lograr un regreso permanente
Envalentonados, un grupo de ultranacionalistas israelíes están acampando cerca de la frontera con la Franja de Gaza para ser los primeros en establecer ahí su nuevo hogar.