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Banco Central Europeo (BCE)
Cómo los Bancos Centrales contribuyen al aumento de la desigualdad
El Banco Central Europeo (BCE) está decidido a continuar con su absurda política monetaria restrictiva para controlar la inflación, aunque ésta no tenga absolutamente nada que ver con las causas que sí requerirían de una restricción monetaria. El mismo BCE, a través de su kit de modelos econométricos, algunos de ellos basados en hipótesis al menos dudosas, ha analizado las consecuencias de la restricción monetaria en precios y crecimiento, concluyendo que el impacto de la subida de tipos de interés en el descenso de inflación es moderado, siendo mayor su efecto negativo en el crecimiento económico.
Entonces, si lo que ha provocado la inflación actual no tiene absolutamente nada que ver con las razones que sí justificarían una restricción monetaria, y no se ha hecho aún nada para corregir esas causas de fondo, ¿por qué están dispuestos a frenar la economía y afectar negativamente a empresas y familias, especialmente a las más vulnerables? ¿Van a actuar de esta manera cada vez que los mercados de derivados de materias primas formen burbujas especulativas? ¿No van a decir nada ante el aumento de poder de mercado de determinas corporaciones, en determinados sectores y su impacto fuertemente inflacionista?
Impacto de una subida de tipos de interés y reducción del balance
El 16 de febrero Philip R. Lane, miembro del Comité Ejecutivo del BCE, impartió en el National Institute of Economic and Social Research de Londres una conferencia bajo el título “The euro area hiking cycle: an interim assessment”, en Román Paldín, El ciclo de subida de tipos de interés en la zona del euro: una evaluación provisional.
Es cierto que la mejor forma de tomar decisiones de política monetaria es recurrir a un amplio conjunto de herramientas analíticas, siempre y cuando las causas del fenómeno que pretendemos analizar tengan que ver con las razones que justifican el uso de los mismos. Si es así, los modelos macroeconómicos nos pueden orientar sobre cómo un determinado ajuste de la política monetaria debería afectar a la economía y a la inflación, y cómo se desarrolla el proceso de transmisión, incluidos los retardos en la misma. Para seguir el impacto dinámico de un impulso de política monetaria hasta sus efectos finales, se necesita supervisar constantemente los avances y actualizar las evaluaciones sobre el funcionamiento del mecanismo de transmisión en las condiciones actuales, teniendo debidamente en cuenta la configuración específica de las condiciones financieras y económicas imperantes.
El kit de instrumentos presentados por Lane analiza el impacto de una subida de los tipos de interés sobre la inflación y el PIB. Todas las simulaciones se basan en un endurecimiento que tiene un efecto relativamente persistente sobre los tipos a corto plazo. Condicionado a un cambio de 1 punto porcentual en el tipo de interés, la inflación disminuye por término medio en torno a 0,3 puntos porcentuales y la brecha de producción en 1 punto porcentual en los picos de los respectivos impactos.
Sin embargo, la gama de estimaciones es amplia y el mecanismo de transmisión diferente según el modelo utilizado. Los modelos generan no sólo diferentes escalas de impacto de la política monetaria, sino también retrasos heterogéneos en la transmisión de la política monetaria a la economía y a la inflación. Las diferencias en los retardos de transmisión de la política monetaria entre estos modelos se derivan de los marcos de modelización específicos.
Además, Lane detalla que la política monetaria también se ve afectada por las políticas de expansión cuantitativa, es decir, por aquellas que afectan al tamaño del balance del Banco Central. Para este caso, el kit de modelos utilizados por el BCE sugiere que reducir la cartera de activos mediante una reducción acumulada normalizada de 500.000 millones de euros a lo largo de 12 trimestres contribuye a reducir la inflación en 0,15 puntos porcentuales y el crecimiento económico en 0,2 puntos porcentuales.
En contexto actual de la zona del euro, bajo este doble enfoque, subidas de tipos de interés y reducción del balance del BCE, se están endureciendo claramente las condiciones financieras, reduciendo el volumen de crédito y alterando el comportamiento de los hogares y las empresas, afectando sobre todo a los hogares más vulnerables, quienes sufrirán de nuevo un aumento en el número de desahucios. Además, muchas pequeñas y medianas empresas que sobrevivieron a la Gran Recesión, ahora sí se verán forzadas a echar el cierre.
Tribuna
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No se hace nada para corregir las causas estructurales de la actual inflación
La actual subida de tipos de interés oficiales por parte de los Bancos Centrales para frenar la inflación es un ejemplo de políticas distópicas. Sin embargo, no se han implementado aún ninguna de las medidas de política económica que sí podrían atajar las causas que han originado el episodio de inflación actual, iniciado en la segunda mitad de 2021, y exacerbado tras la invasión de Ucrania. Predicamos de nuevo en el desierto, pero ahí van, resumidas, las medidas que se deberían aplicar para evitar episodios inflacionistas como el actual.
Empecemos por la primera de las causas, la desregulación de los mercados derivados de materias primas entre finales de los 90 y principios del siglo XXI. El papel de los especuladores de índices de materias primas y sus consecuencias negativas fue detallado por Michael W. Masters en su testimonio ante el Subcomité Permanente de Investigaciones del Comité de Seguridad Nacional y Asuntos Gubernamentales el 20 de mayo de 2008. Masters respondió a la pregunta clave en su testimonio ante el Subcomité Permanente de Investigaciones del Comité de Seguridad Nacional y Asuntos Gubernamentales del Senado de los Estados Unidos: ¿Contribuyen los inversores institucionales a la inflación de los precios de los alimentos y la energía?“ Su respuesta inequívoca fue un rotundo ”sí". En este testimonio ofreció distintas medidas para evitar lo que ha acabado pasando (¡hablamos de propuestas de 2008 que los políticos obviaron!) Debe evitarse la práctica de la especulación con índices por parte de inversores institucionales: Las estrategias de réplica de índices de materias primas de alimentos y energía son inadecuadas para las inversiones institucionales, y deben ser prohibidas por el daño que hacen a los mercados de futuros de materias primas.
Hay que acabar definitivamente con el sistema marginalista actual, y volver a otro más aburrido, pero más saludable para empresas y familias
Respecto al segundo factor, el mercado eléctrico, hay que acabar definitivamente con el sistema marginalista actual, y volver a otro más aburrido, pero más saludable para empresas y familias, establecer administrativamente el precio como un “mark-up” sobre el coste medio. De nuevo no harán caso.
Respecto al tercer factor, el más importante en la actualidad, el aumento de poder de mercado de ciertas corporaciones, en determinados sectores, debería abrirse una amplia discusión sobre el papel de los organismos reguladores de la competencia, la composición de sus miembros, y la necesidad de dotarles con todos los instrumentos necesarios para su labor. Deben disponer de equipos amplios que identifiquen el aumento de poder de mercado, y tener la capacidad ya no solo para imponer multas acordes con el daño causado por prácticas oligopolísticas, sino, sobre todo, llegado el caso, trocear y vender negocios y unidades de empresas demasiado grandes para quebrar e imponer precios. No se preocupen, no lo harán. Las puertas giratorias trabajan sin descanso.
Mientras no se aborden ninguna de estas tres causas, volveremos a las andadas. Se reactivarán procesos inflacionistas, que forzarán a los bancos centrales a implementar restricciones monetarias, que hundirán cada día más a las familias y empresas más vulnerables, mientras las desigualdades alcanzarán cotas terribles e insoportables. Porque no duden ustedes que el no atajar las tres causas que hemos mencionado beneficia sobretodo a un grupúsculo de individuos y empresas muy limitado, el 1% más rico y poderoso. ¡Porca miseria!