Barrios
¿Qué farsa es esta?

Mi hija ve a la gente recorrer la ciudad con prisa. Ve el tiempo enajenado de los adultos. Intuye que no hay una relación clara entre lo que se trabaja y los recursos que llegan para la vida, aunque aún no sabe que hay gente que vive del trabajo de los otros. Algo sospecha.

Calle de Usera
Dos mujeres caminan por una estrecha acera en un barrio del sur de la capital. Olmo Calvo
Sarah Babiker
13 jun 2019 06:00

Iba pescando papeles por la acera, los levantaba y hacía que los leía, pero no entendía nada porque tenía aún cinco años. Un día se dio cuenta de que ya había recogido varias veces un folio con tipografía parecida. Y entonces me lo extendió, pensando que quizás era importante. ¿Qué pone aquí, mamá? “Compramos su casa. Aproveche esta oportunidad”, decía.

¿Por qué quieren comprar nuestra casa? ¿Y nosotras dónde vivimos, entonces? Me encogí de hombros, abrí el portal y después el buzón donde aún se amontonan decenas de folletos de inmobiliarias y papeletas póstumas. Bloque antiguo, razonablemente al sur de la M-30, inminente revalorización, gran negocio. ¿Viste, hija? Le mostré un abanico de publicidad inmobiliaria: toda esta gente quiere comprar nuestras casas. ¿Qué les pasa, no tienen?, intentaba entender ella. No quieren la casa en sí, quieren dinero. ¿Para qué? Para comprar otras casas y hacer más dinero. No sé si entendió los detalles, la idea por la cual los buzones obreros se llenan de panfletos de Remax y Tecnocasa, pero desde aquel día, si ve publicidad sospechosa la hace un burruño y me la entrega así, destrozada. Y es que le basta con ir del cole a casa para aprender del conflicto del capital contra la vida. Mira al papel, me mira a mí, piensa en su hogar y la imagino gritar dentro de sí qué farsa es esta.
A mi hija le basta con ir del cole a casa, para aprender del conflicto del capital contra la vida
Algo sospecha, ve a la gente recorrer la ciudad con prisa. Ve el tiempo enajenado de los adultos. Intuye que no hay una relación clara entre lo que se trabaja y los recursos que llegan para la vida, aunque aún no sabe que hay gente que vive del trabajo de los otros. No hemos podido librarla aún de esa admiración que nos inculcan tempranamente hacia príncipes y princesas, el culto primigenio a los parásitos que impregna los cuentos infantiles. Pero el día que me preguntó que qué era dios y le dije que, según mucha gente, es quien creó el mundo, me devolvió una mirada incrédula. ¿Tú quién crees que creó el mundo? El mundo todo no sabe, pero para su mundito propio, no tiene ninguna duda: ¡los trabajadores!, dijo, con esos superpoderes para identificar las verdades que aún tienen algunos niños. Y eso que ella aún no lee la prensa ni ve los telediarios. Ni lleva semanas viendo a seres electos jugar al que sí y al que no, al ahora no pactamos con fascistas y al luego veremos, para al final toparse con la piedra que todos divisábamos y saber que toca prepararse para cuatro años más de expolio y privatización —con plus de show ultramontano— en algunos lados. A cuatro años más de blablabla progresista y flojo control socioliberal de daños en el Estado todo.A cuatro año más de obviar lo central, lo vital, lo inaplazable: que no habrá casas, ni recursos, ni tiempo, ni horizontes, ni aire para respirar, ni ciudades que habitar, ni refugio, ni relato, ni plan ninguno, para todas nosotras. E imagino a mi niña de cinco años interior, acurrucada sobre la nube gris de mi desgana, presa de un hastío temeroso, volver las palmas al cielo y gritar. “¿Qué farsa es esta?”.

¿Qué farsa es esta? Diría mi hija si supiera que en esta democracia tan avanzada es casi tan imposible sacar a un dictador del monumento que obligaron a hacerle — a sangre y muerte— a sus víctimas, como rescatar a esas mismas víctimas de las cunetas de nuestra memoria. Que a la justicia se la puede tapar para siempre con tierra o con mármol, que el mejor pegamento para impedir que el aire sane nuestras heridas históricas es el olvido por decreto, olvido del pasado para aceptar esta farsa de presente.

Una farsa sexy para inversores y turistas, lentamente insostenible para el resto, asesina para sus periferias

Una farsa revestida de credibilidad de estado. Con honorabilidad y togas, y largos escritos legales y gente que se cree su relato, y gente sin tiempo para disputarlo, y gente en la cárcel por sus opciones políticas, y políticos cuyas opciones políticas son antidemocráticas en los escaños. Una farsa sexy para inversores y turistas, lentamente insostenible para el resto, asesina para sus periferias. Una farsa que en Europa se llama Nos salvarán los liberales de la barbarie del fascismo, como si la barbarie del capitalismo no mordiese nuestras existencias Europa adentro, no despedazara de Europa a afuera las vidas de los otros.

Por eso, después de deglutir durante semanas debates, artículos, imposibilidades, retrocesos, homicidas derrotas, lo que mi indigestión me pide es salir a las calles despojada de convenciones, inmune a la domesticada retórica, aporrear las puertas de los ministerios, asediar los estudios televisivos y las redacciones y desde lo más profundo gritar lo que intuye hasta una niña de cinco años: ¡qué farsa es esta!Y al menos, por un momento, callarles de una vez a todos.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda KKR y el negocio del ladrillo: de vender pisos en territorios ocupados a gestionar las viviendas de la Sareb
Desde 2022, el fondo proisraelí KKR es el encargado junto a Blackstone de gestionar la cartera residencial del banco malo. En verano vencen sus contratos y los fondos presionan para seguir sacando rédito del patrimonio público.
Opinión
Opinión No seas idiota (según los griegos)
Así se llamaba en la Atenas clásica a los ciudadanos que se desentendían de los asuntos públicos. No era un insulto a su inteligencia, sino a su falta de implicación.
Málaga
Derecho a la vivienda Salsa Inmobiliaria, propiedad de la familia Larios, desahucia a un octogenario con un menor a cargo en Málaga
El Juzgado núm.3 de Málaga ha ejecutado el lanzamiento a pesar de la denuncia que los residentes ha realizado a la compañía Salsa Inmobiliaria, propiedad de la familia Larios y el informe de vulnerabilidad de los Servicios Sociales.
#35834
14/6/2019 12:05

https://twitter.com/jonathanmartinz/status/1139440742030614534
"Y resulta también que la sucursal navarra de PP-C's-UPN no tiene empacho en apoyar la investidura de Pedro Sánchez a cambio del gobierno navarro."

3
0
#35815
13/6/2019 22:00

“El relámpago”,
por Italo Calvino (de su libro de relatos 'La Gran Bonanza de las Antillas').

Me ocurrió una vez, en un cruce, en medio de la multitud, de su ir y venir. Me detuve, parpadeé: no entendía nada. Nada de nada: no entendía las razones de las cosas, de los hombres, todo era insensato, absurdo. Y me eché a reír. Lo extraño para mí era que nunca antes lo hubiese advertido. Y que hasta ese momento lo hubiese aceptado todo: semáforos, vehículos, carteles, uniformes, monumentos, aquellas cosas tan separadas del sentido del mundo, como si hubiera una necesidad, una consecuencia que las uniese una a otra. Entonces la risa se me murió en la garganta, enrojecí de vergüenza. Gesticulé para llamar la atención de los transeúntes y «¡Deteneos un momento!», grité. «¡Hay algo que no funciona! ¡Todo está equivocado! ¡Hacemos cosas absurdas! ¡Este no puede ser el camino justo! ¿Dónde iremos a parar?» La gente se detuvo a mi alrededor, me observaba, curiosa. Yo estaba allí en medio, gesticulaba, me volvía loco por explicarme, por hacerles partícipes del relámpago que me había iluminado de golpe: y me quedaba callado. Callado porque en el momento en que alcé los brazos y abrí la boca, fue como si me tragara la gran revelación y las palabras me hubiesen salido así, en un arranque. –¿Y qué? –preguntó la gente–. ¿Qué quiere decir? Todo está en su sitio. Todo marcha como debe marchar. Cada cosa es consecuencia de otra. ¡Cada cosa está ordenada con las demás! ¡Nosotros no vemos nada de absurdo ni de injustificado! Yo me quedé allí, perdido, porque ante mi vista todo había vuelto a su lugar y todo me parecía natural, semáforos, monumentos, uniformes, rascacielos, rieles, mendigos, cortejos; y sin embargo aquello no me daba tranquilidad sino tormento. –Disculpad –respondí–. Tal vez me haya equivocado. Me pareció. Pero todo está en orden. Disculpad –y me abrí paso entre miradas ásperas. Sin embargo, todavía hoy, cada vez que no entiendo algo (a menudo), instintivamente me asalta la esperanza de que esta vez sea la buena, y que yo vuelva a no entender nada, a adueñarme de aquella sabiduría diferente en un instante encontrada y perdida.

4
0
#35813
13/6/2019 20:53

Gracias. Lo leímos en alto. Tú niña es muy lista! Enhorabuena!

4
0
#35787
13/6/2019 9:52

Aguda y tenaz como siempre, gracias por un relato tan sensible y veraz

7
0
La vida y ya
La vida y ya La primera vez
Nos confirmaron lo que ya intuíamos pero no supimos hacer. Lo única regla importante es romper el silencio.
Argentina
Argentina Argentina, un año y medio después de Milei
Este investigador profundiza en las claves de la victoria de Milei, las principales medidas de Gobierno, el sustancial apoyo que tiene y sus perspectivas a medio plazo.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda KKR y el negocio del ladrillo: de vender pisos en territorios ocupados a gestionar las viviendas de la Sareb
Desde 2022, el fondo proisraelí KKR es el encargado junto a Blackstone de gestionar la cartera residencial del banco malo. En verano vencen sus contratos y los fondos presionan para seguir sacando rédito del patrimonio público.

Últimas

Materias primas
Consumo España entra en déficit ecológico este 23 de mayo
El país ya ha consumido, a fecha de este viernes, todos los recursos naturales por año que le corresponderían en un reparto justo que permitiera al planeta regenerarse.
Opinión
Opinión Y ahora les duele Gaza: Europa ante el genocidio
Europa no ha dejado de vender armas a Israel, ni de recibir su tecnología militar; sin embargo, ahora no sabe cómo salvar al país de sus propios impulsos autodestructivos.
Madrid
Madrid Más de 200.000 personas salen a la calle contra el “abandono deliberado” de la sanidad pública madrileña
Madrid se enfrenta a la política sanitaria de Ayuso en una gran manifestación compuesta de cuatro columnas reclamando mejoras en Atención Primaria, en las urgencias extra hospitalarias, en los equipos de salud mental y exigiendo más pediatras.
Albania
Albania Albania: más de 30 años de democracia corrompida
El Partido Socialista de Edi Rama se mantiene en el poder gracias a un sistema de redes clientelistas y una desilusión que ha hecho que más de la mitad de la población se haya resignado.
Más noticias
Opinión
Opinión Sentido y senilidad
La senilidad que he estado viendo en la industria cinematográfica no se limita a la edad de ciertos directores. Es algo mayor que eso, se ha convertido en una manera de pensar, en un fenómeno cultural.
Comunidad de Madrid
Pseudomedios Ayuso y Almeida han inyectado más de 400.000 euros a ‘Periodista Digital’ en cuatro años
El medio de Alfonso Rojo que emplea al agitador Bertrand Ndongo ha recibido más dinero que medios con mucho más alcance como ElDiario.es mientras El Salto sigue siendo totalmente discriminado por el Partido Popular.
Opinión
Opinión La hidra de la lucha por la vivienda
Un sector del movimiento de vivienda pone el foco en los grandes propietarios y los fondos de inversión para entender la actual crisis de vivienda. Otro, a la clase media propietaria. Cada enfoque lleva a estrategias distintas.
Navarra
Opinión Diez años de corralito progre en Navarra
VV.AA.
En las elecciones municipales y forales del 24 de mayo de 2015 se propagó la confianza en un futuro en el que la hegemonía conservadora del corralito foral diera paso a algo muy diferente y mejor.
LGTBIAQ+
Sentencia El TSXG reconoce que el asesinato de Samuel Luiz fue un crimen de odio
El tribunal ha ratificado las penas de entre 20 y 24 años para los tres acusados y ha absuelto al joven condenado a diez años de cárcel como cómplice del asesinato.

Recomendadas

Pensamiento
Paulo Tavares “La imaginación es el primer acto político”
El arquitecto e investigador brasileño Paulo Tavares cuestiona las ideas fundacionales del pensamiento, el diseño y la ciudad occidentales en el marco de la crisis ecosocial.
Culturas
Bob Pop “Mis poemas son unas croquetas sabrosas y no congeladas”
Escritor y vedete intelectual, acaba de publicar ‘De cuerpo presente’, un poemario donde responde 27 años y un diagnóstico de esclerosis múltiple después a sus miedos ante la enfermedad en la juventud.
México
México Desenterrar el dolor: los desaparecidos de Jalisco
El colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, el mismo que descubrió el campo de exterminio de Teuchitlán, halla un punto de venta de droga activo del Cártel Jalisco Nueva Generación con varios cuerpos enterrados.