Migración
Migrantes en situación administrativa irregular: la vida de quienes nos facilitan la vida

Llegaron con esperanza. Hoy sobreviven en la sombra. Este texto entreteje literatura, testimonios y datos para dar voz a quienes sostienen nuestra economía mientras se les niegan derechos básicos.
Economistas sin Fronteras
21 mar 2025 15:00

Como cada mes de marzo, he celebrado con orgullo las conquistas de los derechos de las mujeres que tanto les ha costado a nuestras ancestras conseguir y he recordado lo que aún nos queda por luchar. También he leído la última novela de Lucía Asué Mbomío, Tierra de la Luz (Penguin, 2024), protagonizada por Ngolo, una mujer migrante en situación administrativa irregular. La protagonista llega siendo una joven con ilusión, sueños por cumplir, y con visado. Por circunstancias, este se expira y ella se ve obligada a sobrevivir como lo hacen quienes, como ella, se encuentran en situación administrativa irregular, que no ilegal, porque no está recogida en el código penal.

Aún con un resquicio de esperanza y muy consciente de la realidad y de la miseria en la que acaba sumida, no quiere que se romanticen ni sus penurias ni la tenacidad con las que las afronta, porque así se normalizan, se minimizan y su realidad se narra distorsionada. Este relato crudo que cuenta Lucía con bellas palabras expone la realidad de muchas otras mujeres fuera de la ficción narrativa. Mujeres que «viven» bajo plásticos en asentamientos chabolistas alrededor de los invernaderos donde trabajan por un salario ínfimo que no les hace justicia ni reconoce lo necesarias que son ahí, pero que les permite sobrevivir un día más.

Estas mujeres son incluso más vulnerables y susceptibles de sufrir cualquier tipo de agresión o abuso que los hombres con quienes comparten trabajo o asentamiento. Así lo describe Samuel Mendes, un hijo de la diáspora africana asentado en Almería. Samuel se vino a España en 2006 cuando su padre lo trajo de Guinea Ecuatorial junto con el resto de su familia por arraigo familiar. Cuando cumplió la mayoría de edad, comenzó a ir con su padre a trabajar en los invernaderos para contribuir a la economía familiar. Ahora es estudiante de derecho, trabajador pluriempleado y activista por los derechos y la dignidad de las personas migrantes en la Asociación Alcemos la Voz África. En línea con lo que narra Lucía, Samuel me ha respondido a una serie de preguntas en una entrevista disponible en Instagram, en Facebook, y en la web de la Asociación cultural afroandaluza Coraline Mbootay Sunu Gaal y cuya transcripción completa está publicada en la web de Economistas Sin Fronteras.

Tras más de 300 páginas Lucía, desde el realismo mágico, describe la realidad clandestina dentro de la propia clandestinidad cotidiana a la que las personas migrantes en situación administrativa irregular se enfrentan día a día con tal de sumar un día más para probar que «viven» en España.

Una realidad que no es nueva pero que está oculta, aunque, según afirma Samuel, «supera la ficción». Samuel nos habla de las altas temperaturas a las que esas personas tienen que sobrevivir en el mes de julio y nos pone ejemplos de su irremediable entereza. «Yo he visto gente desmayarse en el invernadero por golpes de calor. Y te sacan, te abanican y te dan agua, pero tienes que seguir. Y al día siguiente tienes que volver» nos cuenta Samuel con resignación. Y aprovecha para recalcar que estas personas no rechazan trabajar, sino que reclaman hacerlo en condiciones dignas. De hecho, menciona existen empresas hortofrutícolas que ofrecen trabajos con condiciones «decentes» y que estas son capaces de mantener sus objetivos de productividad.

Bajo esta premisa, se cuestiona por qué hay empresas y empresarios que no garantizan estas condiciones y por qué se les permite justificar su ausencia con la caída de su productividad. «Si no puede asegurar que su productividad sea compatible con unas condiciones laborales dignas, puede que el que no esté preparado para tener una empresa sea el empresario», concluye Samuel.

Una lectura difícil de digerir, aunque contada con palabras delicadas. Una historia que me ha dejado con los sentimientos revueltos, con respuestas a preguntas que nunca me atreví a preguntarme y experiencias vitales que ni siquiera habría podido imaginar. Estas historias materializan el concepto de «subhumanidad» colonial que describe Boaventura da Sousa. El ocultar «la condena de los otros» para que «nosotros» podamos ser más humanos. Da Sousa se refiere a este concepto como un mecanismo utilizado por Europa para «crear un mito romántico» que convertiría al continente en el lugar de defensa de los Derechos Humanos: ocultando, minimizando o incluso culpando a las propias personas migrantes de merecer condiciones laborales mínimas por estar habitando una tierra de manera irregular.

Nadie se cuestiona cómo es posible que en decenas de hectáreas de tierra productiva solo haya dos personas dadas de alta en la Seguridad Social. O, como denuncia Samuel, « ¿Cómo es posible que haya personas sobreviviendo durante más de 10 años sin ningún permiso de residencia y sin DNI en los asentamientos de Níjar, Atochares o El Uno, que lo han desalojado ahora en febrero? ¿Nadie sospecha que esta gente tiene que vivir de algo, que trabajan en algún sitio? El único mecanismo que se les aplica es el desalojo una vez haya denunciado el ayuntamiento de turno. ¿Y luego qué?». Samuel habla de un «círculo prácticamente mafioso» ya que «esto es imposible de entender sin pensar en que haya una connivencia para que ese sistema se perpetúe».

Lucía tiñe de magia sus palabras para relatar las desapariciones misteriosas de varias personas compañeras de faena. Y, al llegar a ese punto de la lectura, tu diafragma se relaja. Piensas que ese toque mágico alivia, al menos un poco, la carga emocional de todo lo trágico que has venido asimilando hasta ese momento. Pero entonces, enciendes la tele y la primera noticia que ves es la detención en Jaén del patrón sospechoso de la desaparición de un jornalero senegalés en 2021.

Tanto en la entrevista como en el libro se expone la situación de la mujer. En palabras de Samuel, doblemente perjudicada por su calidad de mujer y de migrante. Pone como ejemplo a las temporeras marroquís en Huelva, donde, en los años previos a la pandemia ya se denunciaban el acoso y abuso de poder al que se les sometía en el marco de los programas de «economía circular». Samuel concluye contundente: «Uno tiene que decidir entre lo malo y lo peor. Y nunca puede preservar su dignidad. Eso es lamentable y es lo que se supone que nosotros, como asociaciones, podemos abordar en institutos y universidades. Elementos clave para discutir estos temas porque son los que en dos o cinco años estarán en el mercado laboral, presenciándolo e incluso protagonizándolo».

Para finalizar y en lo que respecta a la sensibilización de la juventud en las aulas, asociaciones como Alzar la Voz África proporcionan cifras objetivas. No intentan convencer, solo exponer datos reales sobre lo que estas personas, estigmatizadas y cada vez más señaladas por discursos racistas y políticas reaccionarias, representan para la economía y la sociedad española [véase el desalojo violento del alumnado cuando protestaban por la presencia de Macarena Olona en la UGR esta semana].

Así, se observa que, desde el tercer trimestre de 2022 al 2024, el 40% del empleo creado ha sido ocupado por personas migrantes. Actualmente, hay unos 2,7 millones de personas migrantes con permiso de residencia que trabajan en el mercado laboral español. La tasa de actividad de las personas migrantes es del 70%, superior a la nacional. Samuel menciona las cifras del último informe publicado por el Observatorio de las Ocupaciones titulado 2024. Informe del Mercado de Trabajo de los Extranjeros Estatal Datos 2023, disponible en el enlace. Y también alude a las cifras del informe FUNCAS, exponiendo que la inmigración aporta el 84% del crecimiento de la población española.

______________________________________________________________________________________________

Economistas sin Fronteras no se identifica necesariamente con la opinión de la autora y ésta no compromete a ninguna de las organizaciones con las que colabora. 

Arquivado en: Migración
Sobre o blog
Economistas sin Fronteras Somos una Organización no Gubernamental de Desarrollo (ONGD), fundada en 1997 por un grupo de profesores y catedráticos universitarios, activamente comprometidos y preocupados por la desigualdad y la pobreza. Nuestro objetivo principal es contribuir a generar cambios en las estructuras económicas y sociales que permitan que sean justas y solidarias.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Almería
Derechos Humanos Junto al mar de plástico: más de 7.000 personas viven sin derechos en los asentamientos de Almería
Miles de trabajadoras y trabajadores que sostienen la agroindustria almeriense se someten diariamente a la vulneración de sus derechos básicos, abusos laborales y a pagar hasta 4.000 euros por un contrato de trabajo
Grecia
Grecia Frontex pone de nuevo la mirada en Grecia
En enero de 2025 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acusó a las autoridades griegas de llevar a cabo devoluciones forzadas de manera sistemática.
Sobre o blog
Economistas sin Fronteras Somos una Organización no Gubernamental de Desarrollo (ONGD), fundada en 1997 por un grupo de profesores y catedráticos universitarios, activamente comprometidos y preocupados por la desigualdad y la pobreza. Nuestro objetivo principal es contribuir a generar cambios en las estructuras económicas y sociales que permitan que sean justas y solidarias.
Ver todas as entradas
Gasto militar
Gasto militar ¿De dónde sacará Sánchez el dinero para financiar el incremento del gasto en defensa?
La promesa de aumentar las partidas presupuestarias militares necesita redirigir 10.471 millones de euros para alcanzar el 2% del PIB. Cumplirlo este año abre a su vez un grave problema para hacerlo en 2026.
Salud
El precio justo La nueva ley del medicamento o estrategias para bajar el precio de los genéricos (que son caros)
En España pagamos de media un 10% más por los medicamentos genéricos que consumimos que en el resto de la UE. Al mismo tiempo, nuestro gasto farmacéutico ha aumentado un 33% en la última década.
Israel
España El Gobierno español vuelve a romper su compromiso de no comprar armas a Israel
El Ejecutivo de Pedro Sánchez adquiere armamento israelí por valor de 6,6 millones de euros a pesar de haberse comprometido a un “embargo total”.
Israel
Israel Nuevos contratos de compra de armamento a Israel tensan la situación del Gobierno
El incumplimiento del compromiso al “embargo total” por parte del PSOE deja críticas de Sumar y la opción de romper la coalición por parte de Izquierda Unida. El Ejecutivo asegura que está buscando la manera de rescindir el contrato.
Gobierno de coalición
Carrera armamentística Izquierda Unida denuncia incumplimiento del PSOE y habla de “crisis de Gobierno”
El aumento del gasto en defensa y la compra de armas a Israel, a pesar del compromiso de no hacerlo, ha enfadado a tres pesos pesados de la coalición.

Últimas

There Is Alternative
There Is Alternative De redes, software, cacharritos y todo lo que no sea Elon Musk | TINA #1
Primer programa del podcast There Is Alternative de El Salto Radio sobre el lado oscuro de la tecnología y sus alternativas éticas y responsables.
Estados Unidos
Extrema derecha Los beneficios de Tesla caen un 71% y Musk anuncia que reducirá su colaboración con Trump
Las protestas contra Elon Musk funcionan y hacen caer los beneficios y el valor en bolsa de la compañía. El anuncio del millonario hace que las acciones de Tesla crezcan cerca de un 5% en apenas unas horas.
Comunidad de Madrid
Huelga de universidades públicas Con un gigantesco mural profesorado y alumnado exigen más inversión en las universidades públicas de Madrid
Después del encierro del pasado 7 de abril, una espectacular acción de la comunidad universitaria ha llamado la atención sobre el recorte de recursos que prevé el gobierno de Díaz Ayuso en su nueva ley de universidades.
Laboral
Laboral Tres nuevos días de huelga para parar el ERE en Bridgestone
Los sindicatos de forma unánime convocan paros los días 24, 25 y 26 de abril y no descartan ampliar las acciones de lucha para evitar el despido de 546 trabajadores.

Recomendadas

Medio ambiente
Medio ambiente Que papel xoga Abanca no proxecto da celulosa de Altri en Galiza?
A sociedade público-privada Impulsa Galica, que cimentou os primeiros plans da multinacional papeleira e Greenalia está participada fundamentalmente pola Xunta e polo banco que xurdiu da desastrosa fusión das caixas de aforro galegas.
El Salvador
El Salvador El caso Ábrego García destapa el turbio pacto de Trump con Bukele
El joven salvadoreño no ha sido condenado ni en Estados Unidos ni en su país de origen, pero es uno de los cientos de personas con la vida pendiente de un hilo por las políticas de Trump y Bukele.
Historia
Historia Miguel Martínez: “En Villalar, la izquierda arrancó los comuneros al franquismo”
Miguel Martínez, profesor de historia y literatura españolas en la Universidad de Chicago, analiza desde una óptica progresista la Edad Moderna, el momento histórico fetiche de las derechas españolistas.