Las manos de Víctor Jara (42 años de su muerte)

Se cumplen 42 años del asesinato de Víctor Jara, el cantor de la democracia chilena, ejecutado en el Estadio Nacional de Chile.
Funeral por Víctor Jara en 2009
Funeral por Víctor Jara en 2009. / Rodrigo Van Bebber Ríos
16 sep 2015 17:43

¿No os sucede que la mayoría de los días pasáis por alto las pequeñas cosas: la belleza de las calles y las aceras, del invierno, la cálida mirada de las limpiadoras del metro?... Luego aparecen los días perdidos en el bolsillo de un pantalón, recoges la casa y un disco te devuelve a la vida real. Tengo 41 años y me siento más joven cada día, quedan tantas cosas por hacer, por reír, por vivir... los mismos años que tenía él cuando le mataron.

Hace 40 años torturaron y asesinaron impunemente a una generación entera de chilenos. Lo recuerdas porque, en la vida real, los mismos que patrocinaron el golpe de Pinochet siguen invictos, aniquilando iraquíes, afganos o somalíes, y no entiendes muy bien cómo se puede liberar a alguien matándole antes o vendiendo armas a quien es un asesino.

Incluso parece gracioso que el mismo fastuoso general fuese aplaudido, amnistiado, por haber masacrado a infames como Víctor Jara que se atrevieron a cantar canciones al pueblo, a enarbolar la poesía como arma de futuro; por enseñarnos a amar esas pequeñas cosas que hacen que un país, una ciudad, sea una, grande y libre no por su petróleo, las empresas o los ridículos destinos imperiales, sino por su paisanaje.

Deberíamos pensarlo cada vez que subimos a un escenario, pensar que realmente estamos armados, las palabras son el espejo de la acción, decía Solón. Él mismo pareció presagiar su final en 1966 en su Canción del soldadoSoldado, no me dispares / soldado. Yo sé que tu mano tiembla / soldado, no me dispares. / ¿Quién te puso las medallas? / ¿Cuántas vidas te han costado? / Dime si es justo soldado / con tanta sangre, ¿quién gana? / Si tan injusto es matar, / ¿por qué matar a tu hermano?.

“Tú eres ese maldito cantante, ¿no?”, le dijo un suboficial al tiempo que lo golpeaba en la cabeza, lo derribaba y le pateaba el vientre y las costillas

“Tú eres ese maldito cantante, ¿no?, le dijo un suboficial al tiempo que lo golpeaba en la cabeza, lo derribaba y le pateaba el vientre y las costillas. Llamó a los guardias y añadió: No permitan que se mueva de aquí. Éste me lo reservo. Después, Víctor fue trasladado al sótano, donde se le ve fugazmente en un pasillo, el mismo en el que con tanta frecuencia se había preparado para cantar, ahora cubierto de sangre y tumbado en un suelo lleno de orina y excrementos.

Al día siguiente, viernes 14 de septiembre, Víctor, ligeramente recuperado, preguntó a sus amigos si alguien tenía lápiz y papel y comenzó a escribir su último poema. Víctor garabateaba a toda prisa e intentaba registrar parte del horror al que se estaba dando rienda suelta en Chile, a fin de que el mundo lo supiera.

Al borde de la histeria y perdido el dominio de sí, el oficial apodado El Príncipe le golpeó y le gritó: Canta ahora si puedes, hijo de puta. Después de cuatro días de sufrimiento, la voz de Víctor sonó en el estadio para cantar un verso de Venceremosel himno de la Unidad Popular.

A continuación, fue golpeado y evacuado a rastras para someterle a la última etapa de su agonía. Un grupo de guardias fue a buscarlo y él le pasó el papelito a un compañero, que lo escondió en el calcetín mientras se lo llevaban. Cada uno de los amigos intentó aprenderse de memoria el poema a medida que era escrito para poder sacarlo del estadio. No volvieron a ver a Víctor.

Luego le cortaron los dedos, la lengua y le machacaron las manos para que no pudiera tocar más su guitarra, ni trovar por los chilenos. Y su cuerpo apareció con 44 impactos de bala. ¿Cuánto odio?, demasiado para un pobre cantor que recorría los pueblitos cantando a los niños pobres.

Luego piensas de qué madera tendría que estar hecho un tipo que en medio de la tortura escribe un verso y canta para apaciguar a sus compañeros presos, y te sientes ínfimo, aunque feliz, fuerte por no perder la memoria y hacerle vivir.

Agradecido por hacerte recordar la esencia que nos hace humanos y no animales. Con ganas de gritar, de cantar: No me asusta la amenaza, patrones de la miseria, la estrella de la esperanza continuará siendo nuestra.

Aquel 16 de septiembre de 1973 Víctor Jara no murió, solo le cortaron las manos y ya no puede tocar su guitarra. Su voz sigue intacta.

Cargando valoraciones...
Comentar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cargando relacionadas...

CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
AGANTRO
O desprazamento forzoso en Chiapas: metáfora da vida núa
Conversamos coa investigadora América Navarro sobre o desprazamento forzoso en Chiapas.
Altri
Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Salto medra contigo
O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.
Orgullo
O Orgullo Crítico enche de diversidade e de humanismo Galiza: “Transfeministas con Palestina”
Crónica visual de como unha enorme multitude encheu de diversidade o centro da cidade de Vigo.
O Teleclube
'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria
O Teleclube
'O Teleclube' pecha a temporada cos supervivintes de '28 anos despois'
Danny Boyle e Alex Garland volven ao mundo dos infectados que inspirou o renacemento dos 'zombis'.

Recomendadas

Medio rural
A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Migración
A veciñanza mobilízase para acoller migrantes tras o peche de centros de Rescate Internacional en Galiza
Tras o progresivo desmantelamento de varios dispositivos de acollida, moitos refuxiados foron trasladados a outros puntos do Estado sen aviso previo. Outros son simplemente desaloxados trala denegación da súa solicitude de asilo.
Ourense
Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.
Comentarios

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...