Laboral
La oscuridad que iluminó las ocho horas de trabajo

El conflicto laboral de febrero de 1919 en la empresa Riegos y Fuerzas del Ebro, 'La Canadiense', duramente reprimido, acabó con la promulgación en el Boletín oficial del Consejo de Ministros de la jornada laboral máxima diaria de ocho horas.

Huelga de La Canadiense
El 3 de abril de 1919 se leía en el Boletín oficial del Consejo de Ministros: “La jornada máxima legal será de ocho horas al día o cuarenta y ocho semanales en todos los trabajos a partir del 1 de octubre”
3 abr 2018 05:46

No era su intención, pero el 2 de febrero de 1919 la empresa Riegos y Fuerzas del Ebro, conocida como 'La Canadiense' por el origen de su matriz —Barcelona Traction, Light and Power Company, Limited—, dio luz a la jornada de ocho horas de trabajo en España. Ese día fueron despedidos ocho trabajadores de la sección de facturación de esta empresa eléctrica de Barcelona por protestar por ver su sueldo reducido al ser hechos fijos, y por intentar organizarse sindicalmente.

Tres días después, los 117 empleados de la sección acudieron a su puesto de trabajo pero “rompiendo la pluma y tirando los tinteros”, en palabras de Manel Aisa, se negaron a trabajar hasta que volvieran sus compañeros. Acudieron al gobernador, que les prometió mediación. Sin embargo, al volver a la empresa la policía no les permitió el paso. Resultado: todos a la calle.

Los comités de la CNT asumieron la dirección del conflicto. El 7 de febrero, el seguimiento total en la empresa ya había supuesto 2.000 despidos. Coordinada por un comité, la huelga se extendió a los encargados de la lectura de contadores, dejando a La Canadiense sin ingresos. Solo un cobrador siguió trabajando, y fue tiroteado con resultado de muerte. Sus ejecutores nunca fueron descubiertos pese a la jugosa recompensa ofrecida por la compañía. También se formaron cajas de resistencia que recaudaron 50.000 pesetas de la época en una semana, para sostener a las familias.

El director general, Fraser Lawton, seguía sin negociar. El sector eléctrico paró en bloque. El suministro cesó el día 21, y el 23 no había energía eléctrica. Barcelona se sumió en “momentos de inquietud y oscuridad”, según recordaba el sindicalista Juan García Oliver en sus memorias, El eco de los pasos. El Gobierno militarizó las empresas, pero no se consiguió restablecer el servicio. El 26 de febrero se sumaron a la huelga las empresas de luz y agua.

El 5 de marzo se movilizó forzosamente a los trabajadores de la industria eléctrica y, ante su negativa a obedecer, el castillo de Montjuich pasó a albergar 3.000 prisioneros.

Una organización perfecta

La capacidad de reacción del bando patronal, con las fuerzas del orden como ariete, se daba una y otra vez contra el muro de la agilidad y disciplina sindical, pese a que los comités de huelga iban siendo detenidos uno tras otro, con el único resultado de dar paso a los sustitutos. Los bandos oficiales no aparecían en los periódicos porque el sindicato sectorial aplicaba la “censura roja”: el contenido contrario a la huelga no era publicado. Por ejemplo, el bando de movilización de los trabajadores eléctricos solo apareció en el Diario de Barcelona que, en consecuencia, tuvo que pagar la multa impuesta por los sindicalistas. 

Otra muestra de la amplia movilidad de los huelguistas, en este caso de las labores de inteligencia sindical, lo da García Oliver, quien en ese momento trabajaba en un hotel-restaurante y narró lo que le ocurrió el primer día que tuvo que llevar comida a dos ingenieros de la Armada, huéspedes de su hotel:

“Salí por la puerta de Pueblo Seco. Frente a la fábrica se hallaba estacionado un carro con toldo, tirado por un caballo. Al cruzar la calle salieron dos tipos, que parecían obreros, de un zaguán. Me abordaron.

—¿Sales de la eléctrica, eh? Pues monta al carro.

Otro que estaba dentro me tendió la mano y me ayudó a trepar.

—¿Para quién era la comida de las dos fiambreras?
—Para dos oficiales de la Armada— contesté.
—¿Eres de los nuestros?
—Todavía no, pero no creo que tarde mucho.
—Llevarles la comida a los oficiales es ayudar a los rompehuelgas, ¿no? ¿Quiénes trabajan dentro? ¿Solamente marinos o también hay esquiroles?
—No he visto ningún obrero civil. Todos son marinos.
—Bien, ahora vete. Pero no vuelvas a traerles comida de la fonda. ¡Que se chupen un dedo!”

En una situación insostenible, finalmente el Gobierno convenció a la empresa de que cediera. La Canadiense aceptó las reivindicaciones. Por su parte, el Gobierno del Conde de Romanones, de corta duración, levantó el estado de guerra, liberó a los presos y se comprometió a instaurar las ocho horas para todos los oficios. En la plaza de toros barcelonesa de Las Arenas una asamblea de más de 20.000 personas, encabezada por el dirigente de la CNT Salvador Seguí, aceptó el acuerdo (los conflictos volverían poco después, al no ser liberados todos los encarcelados).

El 3 de abril de 1919 se leía en el Boletín oficial del Consejo de Ministros: “La jornada máxima legal será de ocho horas al día o cuarenta y ocho semanales en todos los trabajos a partir del 1 de octubre”. España se convertía en uno de los pocos Estados que en ese momento daba reconocimiento legal a la legendaria reivindicación de los trabajadores y trabajadoras de todo el mundo.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Laboral
Laboral Yolanda Díaz asegura que el Gobierno tramitará el indulto a las Seis de la Suiza
La ministra de Trabajo reconoce sentirse “escandalizada” tras la reunión con las sindicalistas condenadas y asegura que no va a “aceptar retrocesos” en los derechos laborales
Laboral
Laboral Reivindicar los derechos laborales en microempresas, el reto de los sindicatos
Nuevas estrategias hacen frente a realidades como las de los falsos autónomos o los puestos en remoto, mientras el PP quiere restringir aún más los comités de empresa.
Comunidad de Madrid
Sanidad privada Inspección propone sancionar a un hospital de Quirón por exponer a la plantilla a sustancias cancerígenas
El organismo inicia un procedimiento administrativo sancionador por infracción grave. Tras una visita al Hospital Quirónsalud Sur, de Madrid, constataron deficiencias en la zona de almacenamiento de los productos farmacéuticos y en el mortuorio.
#12853
5/4/2018 13:36

Lo vergonzoso es que después de 100 años seguimos con las 8 horas (mínimo). Ahora toca luchar por las 6 horas.

7
0
Anónimo
4/4/2018 10:41

A Anónima. Los catalanofóbicos, son una estúpida minoría de cantidad despreciable. Quizá ellos quieran que Cataluña se separe porque "es el origen de todos los males". Lo que si existe son los "españofóbicos", que, efectivamente, piensan eso del resto de España y quieren extirparse de resto. Esos son igual de inconscientes e insolidarios, pero son sensiblemente MÁS.

2
7
#12828
5/4/2018 8:38

facha asqueroso de mierda

0
0
#12776
4/4/2018 12:03

Tranquilo, Sacristán.

1
0
Anónimo
4/4/2018 12:24

Alguien ha hablado de supuestas fobias entre pueblos a través de un derecho adquirido por trabajadores situados en Cataluña en una empresa Canadiense. De hecho esa persona distingue entre trabajadores catalanes y los demás desde una visión etnocentrista inventándose unos supuestos enemigos de los que le han contado que existen. Eso si me parece un sermón, el Sacristán es otro.

2
1
#12715
3/4/2018 14:23

Para todos los trabajadores del país que han caído en la trampa de la catalanofobia y que piensan que Cataluña es el origen de todos los males, que se den cuenta que la jornada laboral de 8 h no se hubiera conseguido sin los obreros catalanes (y muchos de ellos venidos de otras regiones) rebeldes que se jugaron el tipo, su libertad y su empleo.

27
4
#12833
5/4/2018 9:27

A pesar de lo que quieran vender los tóxicos.
Verdaderamente en el mundo laboral los catalanes siempre an apostado por la libertad !!!

2
0
#12831
5/4/2018 9:22

A pesar de lo que quieran vender los tóxicos.
Verdaderamente en el mundo laboral los catalanes siempre an apostado por la libertad !!!

1
0
#12699
3/4/2018 12:21

Pues actualmente si es verdad que los convenios pagan a razón de 8 horas pero hacen trabajar muchas más sin pagarlas , que poco hemos avanzado .

12
1
Manitu69
3/4/2018 11:27

Como hemos cambiado, :-(

13
1
Altri
Altri Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.
Medio rural
Medio rural A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Ourense
Ourense Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.
O Salto medra contigo
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
A Catapulta O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria
Medio ambiente
Medio ambiente A loita polo monte galego: lumes, eucalipto e ameazas á propiedade común
Galiza concentra un terzo dos incendios forestais rexistrados no Estado. Mentres a Xunta apunta aos montes veciñais, comuneiros e ecoloxistas denuncian unha estratexia política para favorecer a privatización e a expansión da industria madereira.

Recomendadas

Feminismos
Feminismo Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Culturas
Erika Lust y Sara Torres “El deseo tiene una potencia inagotable para transformar la realidad si lo liberamos de las normas”
Sexo, deseo o ética del placer son algunos de los temas que hilan la escritora Sara Torres y la productora de cine porno Erika Lust en ‘La abundancia del deseo’.