Opinión
Mejorar o no la vida de la gente

Ante unos presupuestos que se van a aprobar sí o sí, la pregunta es: ¿merece la pena hacer posible que se incorporen elementos que mejoran la vida de la gente?
Urkullu Iriarte
El Lehendakari Urkullu en una reunión con la parlamentaria de EH-Bildu, Maddalen Iriarte. Foto: Irekia
3 dic 2021 08:50

Vivimos en un escenario global lleno de incertidumbres. Hemos pasado de una época de cambios a un cambio de época marcado por la convergencia de la pandemia y la crisis climática, un serio correctivo para advertirnos que el neoliberalismo nos conduce al colapso civilizatorio y que nos acercamos peligrosamente a un punto de no retorno, si es que no lo hemos alcanzado ya. Seguir como hasta la fecha no es una opción. El reto para la izquierda es descomunal, la creación de un sentido nuevo, de un nuevo orden alternativo debe ser inherente a la agenda de cualquier movimiento político transformador.

Y una vez más, pero también una vez menos, asistimos en la CAV al trámite de unos presupuestos de corte neoliberal diseñados por un gobierno de derechas. Algo que sucede cada año cuando el Gobierno Vasco anuncia los mejores presupuestos de la historia. Entonces, comienza un trámite que apenas despierta interés entre la población, menos aún si las cuentas nacen aprobadas como consecuencia de la mayoría absoluta PNV-PSE. Aunque es obvio, esto significa que el resto de formaciones políticas en la cámara podemos manifestarnos enérgicamente y votar en contra, pero el resultado final no se verá alterado. Por lo tanto, el sentido del voto no es un elemento determinante, ni siquiera condicionante en términos aritméticos. Esta es la principal premisa a la hora de abordar este debate.

Los presupuestos expansivos de 2022, cuya aprobación, insistimos, tiene garantizada Urkullu, no son buenos: son continuistas, no suponen un cambio de dirección, destinan 1.430 millones de euros al pago de deuda y, si analizamos la serie histórica entre 2003 y 2022 del porcentaje de gasto destinado por el Gobierno Vasco a Salud y Educación, 2022 es el año en el que menor porcentaje del presupuesto se dedica a Salud (excepto 2016) y Educación (excepto 2018).

En este contexto de excepcionalidad y con la mayoría absoluta del gobierno, EH Bildu ha decidido abordar el debate presupuestario de la CAV desde la responsabilidad, incluso generando debate donde no lo había y ampliándolo más allá de lo estrictamente económico, terreno prohibido hasta la fecha. Entre otras cuestiones, y si de confrontar modelos se trata, esto ha visualizado las diferencias entre quien gobierna y quien aspira a gobernar: fiscalidad o modelo residencial entre otros que han quedado fuera del documento, porque tan importante como señalar lo acordado es tener en cuenta lo que ha sido imposible acordar. EH Bildu ha elaborado una propuesta política y económica con los retos más importantes que tenemos como país y con el claro objetivo de mejorar la vida de la gente, principio rector de su praxis política. Y lo ha hecho desde la confianza que da un objetivo tan nítido, algo que permite a cualquier movimiento transformador mantener posiciones políticas cimentadas en el sentido común, algo imprescindible en la creación de ese sentido nuevo y la construcción de un orden alternativo. Es ahí donde la decisión adquiere una gran relevancia, en el germen de un orden moral, cultural y simbólico en el que nuevos sectores de las clases populares se sientan representados, avanzando en la constitución de ese movimiento hegemónico que aspira a la construcción de un país de libres e iguales.

Por eso, ante unos presupuestos que se van a aprobar sí o sí, la pregunta es: ¿merece la pena hacer posible que se incorporen elementos que mejoran la vida de la gente?

Más personal médico y de enfermería en los ambulatorios, compromiso para que el SMI en convenios colectivos sea proporcional a la renta media de la CAV, un sistema de control de precios del alquiler, el impulso a la i+d vasca más importante de la historia, financiación para elaborar estrategias y planes de emancipación de las personas jóvenes, la mayor cantidad jamás destinada a las personas sin hogar, una subida que revierte recortes en las Ayudas de emergencia social para hacer frente al atraco de las energéticas, y mucho, pero que mucho dinero para proyectos de transición energética a entidades locales y subvenciones al autoconsumo y comunidades energéticas.

En el contexto disruptivo actual, no negociar para mejorar la vida de la gente por guerras banderizas no es una opción, y menos cuando se hace sin renunciar a bases y principios. Y esto genera contradicciones como consecuencia de pasar de la teoría: aspiraciones de gobernar construyendo hegemonía, a la praxis: aceptación del principio de realidad de la sociedad en la que vivimos y, en base a eso, hacer del gradualismo el camino idóneo para reforzar la estrategia para la consecución de tus objetivos. Por eso la hostilidad del pensamiento conservador, e incluso incomprensión de sectores de izquierda y sindicatos deben ser comprendidos y asumidos, es necesario vivirlos de manera natural, y sobre todo no deben ser denostados ni tapados; al contrario, debemos favorecer el debate para seguir construyendo un movimiento político hegemónico que le dispute el poder al régimen vasco instalado hace décadas en todos y cada uno de los ámbitos de nuestra sociedad. Seguir construyendo un bloque histórico capaz de articular y generar imaginarios que aúnen y movilicen a una mayoría social que abogue por una república vasca de libres e iguales. Por eso, lo conseguido en términos políticos a cambio de una abstención no condicionante adquiere una dimensión que va más allá de las cuentas de 2022. Seguimos.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Opinión
Industria militar a debate (I) Contra el aumento en la inversión militar que proponen el Gobierno Vasco y Zedarriak
Debemos sobre la mesa la posibilidad de poner fin a la industria de la defensa, convirtiéndolo a producción civil de utilidad social.
Tribuna
Tribuna Exigimos al Departamento de Educación una planificación justa y legal de la concertación de aulas
VV.AA.
Hace mes y medio nos remitimos al Departamento de Educación para exigir que la concertación de aulas en las escuelas privadas se adapte a la bajada demográfica y la ley vigente.
Economía social y solidaria
ESS Nace ASETT, un centro de investigación 'de vanguardia' para impulsar la economía social desde Donostia
El ‘hub’ nace en Donostia, pero aspira a conseguir proyección internacional. Cuenta con un centro de estudios dedicado al análisis de las empresas de la economía social o un instituto para avanzar las tendencias del sector.
CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
CRTVG A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
Altri A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
Altri A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
Altri
Altri Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
A Catapulta O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria

Recomendadas

Medio rural
Medio rural A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Feminismo Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Ourense
Ourense Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.