Opinión
Chile: la sabiduría de las olas del mar

Entristece y genera una rabia tan profunda saber que perdimos la oportunidad de lograr una constitución que otorgaba un Estado democrático y garante de derechos, de justicia y dignidad tan amplia.
Chile, pancarta apruebo
Pancarta reivindicativa en Santiago de Chile. Foto de Nicolás Lagos cedida a El Salto.

Doctora en Sociedad y Cultura, Activista feminista descolonial.

7 sep 2022 13:43

Un domingo triste: la constitución escrita por una asamblea democrática, plural y feminista fue rotundamente rechazada por la población en Chile. Días de silencio, de mirar el cielo, de entregarse al corazón roto y a la mente confusa. La pena, la rabia y la desolación se mezclan, fácilmente me pierdo en el divague de los sentipensamientos para buscar entender qué fue lo que pasó. En qué nos equivocamos. Reconocer cuáles fueron los obstáculos que se nos pusieron. ¿Por qué tan disonantes nuestras posiciones? ¿De verdad estamos tan lejos de encontrarnos y comprendernos? ¿Por qué se teme obtener y proteger nuestros derechos? ¿Qué fue lo que no hizo sentido? ¿No estamos buscando todas reivindicar y fortalecer los bienes comunes de nuestro territorio?

Me rehúso a pensar que haya sido academicista o alejada de la realidad por plantearse como una constitución feminista, plurinacional y ecologista

En unos días más conmemoraremos un nuevo 11 de septiembre, lloraremos como cada año la ausencia de Salvador Allende y la caída de su proyecto político revolucionario. Era lindo imaginar que brindaríamos con una nueva constitución que se encendía como un faro democrático para el resto del mundo, que le haríamos honor y memoria a la fuerza política de tantas personas que lucharon en tiempos oscuros y a lo largo de todos estos años. Sin embargo, al contrario, esta vez dolerá más, al saber que voluntariamente el pueblo de Chile ha elegido continuar con la constitución escrita en dictadura, la herencia material e ideológica de Pinochet y que aún no podemos erradicar. Este es uno de mis principales pensamientos rumiantes: me parece increíble no lograr exorcizar el fantasma del dictador en las vidas chilenas. Estuvimos tan cerquita de poder hacerlo. Pero no. Y debemos entonces tragarnos la indignación al ver su imagen en las celebraciones del Rechazo, a su séquito impune tocando la bocina arriba de sus autos, a la Escuela Militar aplaudiendo el triunfo de su presencia inmanente proyectando la bandera en su gris y emblemático edificio en Las Condes.

Deambulo entre el cuestionamiento a nuestras prácticas, a los errores, nuestras ingenuas ilusiones, pero sin abandonar la crítica aguda al escenario desigual en el que nos movimos durante la campaña. Me contradigo entre las ganas de incendiar desde la rabia y en querer imaginar maneras para reconstruir los tejidos con más y mayor autoformación política y educación popular para transmitirnos saberes y debatir conceptos complejos. Porque pienso que quizás la ciudadanía no simpatizó con formulaciones o planteamientos que se entienden de manera diversa y eso causó distancia con el texto. Pero me rehúso a pensar que haya sido academicista o alejada de la realidad por plantearse como una constitución feminista, plurinacional y ecologista. No debemos olvidar que la mayor parte del contenido de la propuesta provenía de iniciativas populares de norma que fueron impulsadas por organizaciones sociales que vienen trabajando estas temáticas desde hace años: derechos de la naturaleza, aborto libre, reconocimiento de los pueblos originarios. Cada una de las palabras que definirían al Estado de Chile no son teorías: fueron dichas y reclamadas a los cuatro vientos desde que Chile estalló el 18 de octubre del 2019, en las calles y en cada una de las marchas masivas y conversaciones en asambleas territoriales. La disputa del lenguaje es fundamental; no reconocer la relevancia de traducir las problemáticas sociales a palabras escritas para determinar el marco de acción del país me parece un absurdo.

Al leer en el diario La Tercera que los aportes monetarios de la campaña del Rechazo superaron por casi 200 veces a la del Apruebo, cómo no apuntar en el análisis a la inequidad de los medios como uno de los puntos claves

En Petorca ganó también el rechazo, una de las comunas en Chile más afectadas por la crisis del agua y que la nueva constitución hubiera ayudado a subsanar. Su alcalde dijo ayer en una entrevista que faltó información y que, probablemente, por eso ganó el miedo. Que llegaron textos al territorio y se les pudo entregar a la población, pero que no hubo “el diálogo certero”. El despliegue territorial de les constituyentes y de los comandos fue más allá de los límites posibles de los cuerpos. No me caben dudas con respecto a los esfuerzos humanos. Por eso debemos reconocer y nunca olvidar que la cancha de difusión fue desigual. Al leer en el diario La Tercera que los aportes monetarios de la campaña del Rechazo superaron por casi 200 veces a la del Apruebo, cómo no apuntar en el análisis a la inequidad de los medios como uno de los puntos claves.

La campaña feroz, mentirosa e inmoral de la derecha y centroizquierda, en conjunto con el empresariado de Chile y del Extranjero (hay fuentes disponibles que muestran que hay fundaciones internacionales que co-financiaron la campaña), además de medios coludidos (ni más ni menos que la editorial del día domingo del Washington Post, abiertamente y sin tapujos, llamaba a rechazar la propuesta constitucional porque EE UU requiere mayor apertura económica para explotar el litio). Se hace cada vez más urgente una ley de medios en Chile. Porque si no, ¿cómo luchar contra la ideología del capital cuando el despliegue material y de los medios es imposible de igualar? ¿Puede el trabajo voluntario y local de los movimientos sociales, desde las asambleas, conversatorios y a través de la educación popular hacer contrapeso a la maquinaria de producción hegemónica de información?

Chile
Proceso constituyente chileno Manuela Royo: “Las constituciones se escriben para 50 años, no para una legislatura”
El 4 de septiembre tiene lugar en Chile un plebiscito clave para el futuro del país: se vota la Constitución que un grupo de 154 cargos electos han escrito a lo largo de un año. La abogada ambientalista y defensora de los derechos humanos Manuela Royo es una de esas ponentes.


Entristece y genera una rabia tan profunda saber que perdimos la oportunidad de lograr una constitución que otorgaba un Estado democrático y garante de derechos, de justicia y dignidad tan amplia. No solo para las personas, sino que para todo lo que vive y coexiste en el territorio. Será muy difícil recomponer esta sensación de duelo.

En un poema de Gabriela Mistral, poeta chilena ganadora del Nobel el año 1945, ella pide al cielo: “dame la perseverancia de las olas del mar, que hacen de cada retroceso un punto de partida para un nuevo avance”. Las feministas, las personas que hacemos política y quienes somos de izquierda en esa larga faja al sur del planeta, sabemos de resistencias, de crear fórmulas para levantarnos y salir adelante. Hoy nos vemos obligadas a estar en un repliegue de fuerzas, decantando las energías puestas, reconociendo la derrota, escuchándonos y conteniéndonos en la comunidad transterritorial que somos para el proceso constituyente que continúa y que no vamos a soltar. Nunca ha sido fácil lograr justicia social para los pueblos; la batalla contra los privilegios y las lógicas del capital no claudican. Hoy el escenario se nos torna arduo, las cúpulas buscan reacomodar los poderes lejos de nuestro favor. Pretenden generar una rectificación de la política partidista-institucional cargada a la derecha y en contraposición a las demandas de los movimientos de base.

Sabemos cuánto se ha sacrificado en esta lucha. Sin embargo, Gustavo Gatica, luchador social que perdió sus dos ojos por disparos de carabineros en la revuelta del 2019, afirmó: “no renunciaremos a soñar un mundo mejor”. Por él y por todas las personas que han puesto su cuerpo y corazón a pesar de los tantos obstáculos que se nos presentan en nuestra trayectoria política, seguiremos avanzando con el foco puesto en aquel horizonte dibujado por Víctor Jara cuando cantó: “la estrella de la esperanza seguirá siendo nuestra”.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Educación
Educación La escucha activa en la propaganda de Educación del Gobierno Vasco
El Departamento, que nunca se pone en contacto con el profesorado, nos escribió una carta tratándonos como “compañeras y compañeros” a raíz de la convocatoria de huelga
Opinión
Opinión No es Poder Popular todo lo que reluce
VV.AA.
No hay alternativa capaz de cambiar este sistema que no hable claramente de socialismo y de clase trabajadora
Opinión
Opinión Monetizadores de la estupidez
Ser un chalado anticiencia puede llevar a pasearte por radios, televisiones y streamings porque eres rentable para gente sin un mínimo de ética periodística.
Turismo
Turismo Free tours: la atracción turística de la precariedad
La popularidad del 'free tour' para visitar las ciudades ha aumentado de manera vertiginosa, especialmente con la proliferación de plataformas intermediarias que se encargan de su comercialización.
Alemania
Alemania La izquierda alemana, esperanza al borde del precipicio
Die Linke deberá conseguir que quienes lideran su candidatura sean un poco menos desconocidos para el gran público cuando llegue el día de las elecciones. Las encuestas no le acercan al 5%, pero la formación sigue confiando en ganar tres distritos.
Desahucios
Escudo social Sanitarios y sanitarias de atención primaria se unen contra los desahucios, “un problema de salud pública”
Depresión, ansiedad, empeoramiento de enfermedades crónicas o surgimiento de nuevas afecciones acompañan a los problemas habitacionales. Lo denuncian médicos de Vallecas (Madrid) y lo refrendan los estudios.
Análisis
Análisis Making Europe Competitive Again: Ursula von der Leyen quema su propio Pacto Verde
La Comisión Europea antepone la desregulación a la descarbonización con el Partido Popular Europeo compitiendo con la extrema derecha en romper, diluir e impedir leyes de protección socioambiental.
Argentina
Argentina “Existen solo dos géneros: fascistas y antifascistas”: las luchas LGTBIQ+ aglutinan el rechazo a Milei
Una gran movilización recorrerá centenares de localidades en Argentina y en grandes ciudades del mundo este 1 de febrero en respuesta al discurso de odio del líder ultra.

Últimas

Estados Unidos
Extrema derecha Trump anuncia un campo de concentración para 30.000 migrantes en Guantánamo en el 80 aniversario de Auschwitz
La estrategia de llevar la detención de migrantes a territorios lejanos, opacos y sin garantías de derechos también ha sido la opción elegida por la Unión Europea en el último año.
Periodismo
Premio libertad de expresión Las periodistas de El Salto Aurora Báez y Susana Sarrión, premiadas por su trabajo sobre violencia sexual
La investigación que recoge la denuncia de nueve alumnas contra el director de una escuela de teatro por violencia sexual ha merecido el reconocimiento en los Premios de Periodismo de la Asociación de Periodistas de Granada.
Palencia
Agresión El Sindicato de Estudiantes denuncia una agresión fascista en Palencia: “Rojo de mierda”
Los hechos ocurrieron delante del profesor del aula, que no actuó para evitarlos. El estudiante ya ha denunciado lo sucedido ante la Policía y exige la expulsión inmediata de los agresores y una investigación a la directora del centro y al docente.
Entrevista La Poderío
Claudia GR Moneo “Intento observar desde el buen pensamiento. Rechazo el ‘piensa mal y acertarás’”
Claudia GR Moneo retrata lo bello que se escapa por las rendijas del día a día de su tierra. Es una periodista que ilustra con tino la sencillez que nos rodea, pero también una ilustradora de inevitable mirada periodística, gitana y andaluza
Extrema derecha
Extrema derecha La distorsión esperpéntica del discurso de Milei
La distorsión de estos tiempos, en los que la alienación pasa por la concentración de la propiedad internauta y la dictadura del algoritmo, se abre a las estrategias reaccionarias de ‘la neolengua’ y el vaciamiento de significados.
Salario mínimo
Pacto bipartito Trabajo y sindicatos acuerdan la subida del salario mínimo en 50 euros sin el apoyo de la patronal
Díaz anuncia un acuerdo con los sindicatos que llevará al Congreso de Ministros de forma “inminente” la propuesta del Ministerio de Trabajo. Los sindicatos proponían una subida de 66 euros y la patronal, de 34 euros.
Comunidad de Madrid
Sanidad a la madrileña Huelga indefinida de ambulancias en Madrid ante un nuevo concurso que consideran “fraude de ley”
Sindicatos denuncian que la empresa Santa Sofía ha impuesto sus condiciones para que ninguna otra empresa pueda presentarse al pliego. Temen que peligren la subrogaciones de parte de la plantilla.

Recomendadas

Laboral
Laboral Investigada unha rede empresarial que explotaba a 82 migrantes nunha granxa de Lugo
Polo de agora, tres persoas responsables da granxa de Begonte centran as investigacións da Garda Civil. As 82 persoas explotadas vivían nun hotel de Ordes (A Coruña) que non tiña sequera licencia de hostalaría.
Siria
Kurdistán Entre las bombas turcas y las negociaciones con el Gobierno: Rojava ante la construcción de la nueva Siria
La Administración Autónoma del Norte y Este de Siria presiona al nuevo Gobierno para crear un Estado que respete los derechos de las mujeres, descentralizado, tolerante y multiétnico.
Literatura
Letras Galegas Da Sección Feminina do franquismo ao Cancioneiro Popular Galego: o pobo é quen canta e baila
As cantareiras protagonizarán o Día das Letras Galegas de 2025. Beatriz Busto e Richi Casás fálannos delas, de Dorothé Schubarth, do Cancioneiro Popular Galego e da dificultade de acceder aos arquivos sonoros que conservan as súas voces.