Opinión
La política de los abusones

Cuando la política es entendida como el ejercicio de la intimidación, las demostraciones de dominio, demandas de sumisión o la toma de decisiones arbitrarias para imponer un discurso.

Abusones
Montaje fotográfico al hilo del tema.
Pablo Elorduy
3 oct 2018 06:46

Eric Hobsbawm explicó que, en el cambio que supuso la llegada del sufragio universal, se produjo un nuevo fenómeno: “En lo sucesivo, cuando los hombres que gobernaban querían decir lo que realmente pensaban tenían que hacerlo en la oscuridad de los pasillos del poder, en los clubes, en las reuniones sociales privadas, durante las partidas de caza o durante los fines de semana de las casas de campo donde los miembros de la élite se encontraban o se reunían en una atmósfera muy diferente de la de los falsos enfrentamientos de los debates parlamentarios o de los mítines públicos. Así, la era de la democratización se convirtió en la era de la hipocresía política pública, o más bien de la duplicidad”.

La duplicidad de la etapa inicial de la democracia universal renació en los sistemas políticos salidos de la II Guerra Mundial. Hasta el punto de que la llamada “clase política” —a izquierda y derecha— se distanció más y más del pueblo o la ciudadanía a la que se decía representar. La hipocresía se entendía como algo consustancial a la política. Un mal necesario. Con la crisis de ese sistema de representación que comienza en el periodo 2008-2013 en distintos puntos del mundo, resurgió un fenómeno presente siempre en la política de masas. Un fenómeno al que el poder realmente existente da el nombre de populismo y que genera importantes simposios y no menos importantes columnas en las que, casi siempre, lo que mejor se desvela es un elitismo que nunca desapareció del todo.

La definición de populismo no es tan importante como el hecho de que, como señaló Marco D’Eramo en un artículo publicado en New Left Review, “los términos políticos, más que instrumentos, son conquistas en la guerra de posiciones de la política”. Así, con el uso del término populismo, un sector de la élite política realmente existente, la de los partidos del llamado “extremo centro” o de Gobierno (conservadores y socialdemócratas mayormente), han pretendido mantener un territorio que consideran en disputa después de décadas de relativa calma. Un intento de embridar los conflictos, al estilo Mario Monti o Mariano Rajoy, que está cediendo ante las nuevas formas de hacer política.

El término populismo se empleó, especialmente desde 2008, como fórmula mágica para “hermanar movimientos aparentemente en las antípodas del espectro político”, en palabras de D'Eramo. Pese al estéril debate sobre la realidad de los populismos hoy, el intento de los pensadores prosistema por entender la nueva fase política —más a “cara de perro” que la anterior por el auge de nuevas formas de comunicación— no era gratuito.

Finalmente, ha surgido una definición más apropiada de la etapa política en la que se encuentra América que va un paso más allá de la intoxicada disputa terminológica ante el fenómeno de los híper liderazgos supuestamente al margen de la burocracia imperante. La vista oral del caso Kavanaugh —el juez que Trump ha propuesto para el Tribunal Supremo ha sido acusado de hasta tres casos de violencia sexual— ha sido la última muestra de lo que Robert Reich llama la “América de los abusones”.

Trump se ha convertido en el ejemplo número uno de la política llevada a cabo por los abusones, que se diferencia de la duplicidad del comienzo de las democracias liberales solo en cuanto se vanagloria de esconder menos sus ideas (cosa que no es cierta), de ser una solución transversal a la lucha de clases (idem.), y en que traslada al debate público actitudes que serían intolerables en reuniones privadas —cosa que hacen atacando a unos valores “políticamente correctos” que impedirían el desarrollo “natural” de actitudes sexistas, racistas u homófobas que, bajo su punto de vista, han existido siempre—.

Solo un ejemplo: pocas horas después de que saliese publicado el artículo de Reich, desde un atril, Trump volvía a ejercer de matón de la clase contra una periodista —“ya sé que no estás pensando, nunca lo haces”.

Política de abusones, versión europea

La crisis del sistema de representación en Europa y Estados Unidos ha alumbrado una nueva estirpe de políticos y mandatarios, y esto se ha trasladado a (se puede discutir si es que viene de) las redes sociales donde, al fin y al cabo, cualquiera puede ser una figura (al menos en su cabeza). Y en ese pantano chapotean columnistas que mandan a comer los huevos por detrás a otras personas (Espada), que desde su púlpito culpan a las feministas de sus privilegios perdidos (Marías) o que, simplemente, gritan e intimidan hasta que solo se les escucha a ellos.

Vuelve “el hombre”, dispuesto a cantar las verdades del barquero, a poner firme a la meliflua y correcta sociedad con un discurso que entienda “la gente de la calle”. El modelo sirve para casi cualquier tendencia política o partido y toma como constante la supuesta “revelación” de un discurso oculto entre la maleza del supuesto “discurso público” hegemónico, que a menudo no es otro que el que marcan las mínimas reglas de convivencia.

La clave no es tanto qué dice ese discurso oculto o silenciado, sino que se encuentra en el lugar desde donde se impone ese principio de autoridad —indefectiblemente el lugar del hombre blanco, burgués, adulto, hetero— y cómo se sirve del poder que otorga el sistema de liderazgo establecido en las democracias existentes y en las democracias internas (!) de los partidos para perpetuar esa posición de privilegio.

“A veces el bullying implica violencia física. Más a menudo implica intimidación, demostraciones de dominio, demandas de sumisión o decisiones arbitrarias sobre las vidas de quienes sienten que no tienen más remedio que aceptarlas”, escribe Reich.

A medida que esta definición se baja a la realidad material, encontramos más abusones. Desde el jefe de la empresa —hola, decisiones arbitrarias— hasta las demostraciones de dominación —desfile del 12 de octubre— y demandas de sumisión —artículo 155—.

Un breve listado de los grandes abusones de la política europea se quedará en eso, en un breve listado, habida cuenta de que es un estilo político extendido como el “vencedor” del ciclo político actual. Wolfgang Schäuble y Angela Merkel haciendo pasar a Grecia por las horcas caudinas; Tayyip Erdoğan, Victor Orban, Matteo Salvini, Boris Johnson, Juan Carlos Girauta o José María Aznar, cuentan con el añadido de su cara de pocos amigos.

Otros abusones no son tan obvios. Emmanuel Macron exigiendo respeto a un estudiante, Pablo Casado dando la mano a migrantes en Ceuta y criticando un etéreo concepto como el de “buenismo” para pedir que España deje de aplicar el derecho de asilo, o el rey Felipe VI poniendo hace un año las botas encima de la demanda de una mayoría del pueblo catalán, son otras muestras de un bullying al que solo hay que presuponer un rostro algo más amable que el de Trump.

En virtud de una supuesta autenticidad, los abusones de nuestro tiempo controlan la comunicación política desde la negación de cualquier autoridad distinta a la que ellos se han arrogado para sí. Al estilo de los líderes fascistas. La política no emana del pueblo sino de una reinterpretación —una más— del patriarcado, de su auctoritas, convertida en una mezcla de arranques de ira y de condescendencia, de publicidad y de miedo. La disidencia, interna o externa, se castiga. El diálogo solo puede existir después de la rendición de pleitesía.

Beatriz Romero planteaba en un texto  en febrero de este año la necesidad de despatriarcalizar y feministizar la política al mismo tiempo. Desenmascarar y señalar las actitudes de bullying en el discurso público y sacar definitivamente la política de las partidas de caza, los gimnasios exclusivos y los palcos de los estadios Bernabéu del mundo, es una tarea imprescindible para terminar con el tiempo de los abusones.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Opinión
Opinión Un alto al fuego hecho a la medida de Trump
El esperando anuncio del cese temporal de los ataques sobre Gaza responde a una estrategia de los EEUU de cambio de paradigma regional. El acuerdo es injusto e insuficiente para los gazaties, que han sufrido un genocidio aún impune.
Opinión
Derecho a la vivienda Cuando el cuñao eres tú: cinco bulos progresistas sobre la crisis de la vivienda
Ni la compraventa de vivienda la protagonizan los fondos ni las zonas tensionadas bajan los alquileres ni el PP es el único que no las aplica.
#23962
4/10/2018 15:42

"La eurodiputada de Izquierda Unida Marina Albiol presentó hoy su dimisión como portavoz de la formación en la Eurocámara por la supuesta inacción de la dirección a la hora de hacer frente a varios posibles casos de acoso por parte de otros diputados, a los que no nombra, confirmaron a Efe fuentes próximas a la política."
Para los comunes que mecen al fascismo, acoso es prestar mucha atención a alguien.

0
0
#23878
3/10/2018 14:46

Los miedos al extraño o al final del bienestar (consecuencias de los límites físicos del planeta) que enarbolan estos capitostes autoritarios explican, en parte, la sumisión de los miles de votantes que los aupan al grito de: ¡¡Primero lo mío!!

0
2
Vigo
Sanidade Unha multitudinaria manifestación enche Vigo contra a privatización sanitaria orquestrada desde a Xunta
Ducias de miles de persoas e os partidos da oposición acoden ao chamado de SOS Sanidade Pública para reclamar “a reconstrución da área sanitaria de Vigo”, empobrecida pola privatización de servizos e os sobrecustos do Álvaro Cunqueiro.
Vigo
Política A exdirectora financeira de Povisa perfílase como a nova líder do PP de Vigo
Luisa Sánchez Méndez foi entre 1999 e 2023 alto cargo do Hospital Povisa desde onde Alfonso Rueda deulle o pulo á sanidade pública, dirixindo os Recursos Humanos da Consellería de Sanidade na área sanitaria de Pontevedra e O Salnés.
Medio ambiente
Minaría A Xunta xestiona a reactivación de 51 minas en Galiza coa licenza caducada
O goberno de Alfonso Rueda publicou medio centenar de concursos de dereitos mineiros con permisos caducados que abrirán as explotacións unha vez conclúa unha fase de análise e investigación do solo.
Rap
Poetas Puestos “Tanto los medios como la política quieren que seas un tonto feliz”
Charly Efe y Teko, acompañados de una banda, publican el disco ‘Tontos felices’ donde mezlcan su carrera en el rap con ritmos rock para crear lo que han bautizado como rap‘n’roll.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Israel firma el acuerdo con Hamás, pero todavía tiene que votarlo el Gobierno
Los representantes israelíes en Doha validan el pacto para un cese temporal de las hostilidades y un intercambio de prisioneros. Este viernes se vota en el Gobierno israelí, donde dos partidos ultras se oponen.

Últimas

Groenlandia
Análisis Por qué Groenlandia es clave en la carrera por las materias primas
El anuncio de Trump parece salido de una precuela de la película 'Don’t Look Up', en la que los intereses geopolíticos y económicos no nos dejan ver el colapso inminente.
Historia
Descifrando a historia As cortes de Melide, así foi como o medo da nobreza galega tratou de frear novas revoltas como a Irmandiña
No ano 1520 en Castela, estala a Guerra das Comunidades. Esta revolta vai ter un carácter antiseñorial e tamén en contra o novo rei, Carlos I. En Galiza, tamén tivo o seu eco.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición El CIS vuelve a situar la vivienda como el principal problema de la población
Uno de cada dos votantes de las izquierdas sitúan la vivienda entre los tres grandes problemas que afronta el país. La encuesta del CIS muestra a los partidos de la izquierda en la misma situación de desinfle que el mes pasado.
Más noticias
Análisis
Análisis El PSOE intenta pescar en el río revuelto de la izquierda para acercarse al PP
Entre los votantes del PP sólo hay dos cosas que produzcan ilusión: el rechazo a Sánchez y su Gobierno e Isabel Díaz Ayuso. Feijóo, que no es una de ellas.
Galicia
Literatura Daniel Salgado reformula las claves de la poesía política en la contemporaneidad en 'Poemas realistas'
El discurso de este poemario convoca las dos ideas-fundamento que vertebran la poética de Salgado: la constatación de la ruina y la perseverancia en la posibilidad de un horizonte no clausurado.
Galicia
Galicia La exdirectora financiera del mayor hospital privado de Galicia se perfila como la nueva líder del PP de Vigo
Luisa Sánchez Méndez fue entre 1999 y 2023 alto cargo del Hospital Povisa desde donde Alfonso Rueda le dio el empujón a la sanidad pública, dirigiendo los Recursos Humanos de la Consellería de Sanidade en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés.

Recomendadas

Literatura
Letras Galegas Da Sección Feminina do franquismo ao Cancioneiro Popular Galego: o pobo é quen canta e baila
As cantareiras protagonizarán o Día das Letras Galegas de 2025. Beatriz Busto e Richi Casás fálannos delas, de Dorothé Schubarth, do Cancioneiro Popular Galego e da dificultade de acceder aos arquivos sonoros que conservan as súas voces.
Historia
Historia La segunda vida de Joaquín Maurín
Alberto Sabio reconstruye en “Excomunistas” la vida y el pensamiento del fundador del POUM: desde su politización en el republicanismo hasta su giro socialdemócrata y anticomunista durante la Guerra Fría.
Ocupación israelí
Expansionismo israelí El Golán sirio, radiografía de una joya natural diezmada por la ocupación israelí
Las actividades extractivistas del Estado israelí sobre los recursos hídricos o proyecto de parque eólico en las tierras colonizadas amenaza el sustento diario de las comunidades locales.
Represión
Represión Cómo descubrir a un infiltrado, el manual
Un grupo de afectadas por el espionaje policial publica un texto colectivo como herramienta y reflexión sobre este fenómeno.