Coronavirus
Celador dado de baja en el IFEMA: “Aún no he visto el contrato”

Un miembro del personal sanitario del hospital de campaña de Madrid resume su historia, insertada en un “caos burocrático”. Un día recibió un mensaje que le indicaba que había sido dado de baja de la Seguridad Social. “Aún no he cobrado", denuncia.

rostroscelador
El celador durante su trabajo en IFEMA.

Pablo- nombre ficticio- empezó a trabajar en el hospital de campaña montado en Madrid en IFEMA desde los primeros compases. Fue testigo del inicio, cuando describe que sólo había un EPI por persona para toda la jornada laboral y muchos “se quedaban sin hacer pis durante toda la jornada para no entrar en la zona limpia y tener que cambiarse”.

Luego, con esfuerzo y “entre nosotros mismos” organizaron el pabellón- el 9 en su caso- y crearon los controles. El suyo albergaba a alrededor de 50 camas, 4 médicos, 4 enfermeras, 2 TCAES (antiguas auxiliares de enfermería) y 2-3 celadores. Hoy atiende a El Salto desde su casa, pues ha tenido que darse de baja con síntomas del coronavirus. “Pero vaya, al darme de baja el médico se dio cuenta de que no estaba dado de alta”, asegura.

“El SERMAS- Servicio Madrileño de Salud- se ha convertido en una empresa de trabajo temporal. Me contrataron para todo lo que durara el estado de alarma. Pero no sé hasta cuando era porque aún no he visto ni el contrato”

La historia de Pablo se resume en un “caos burocrático” para gestionar unos trabajos temporales en medio de la crisis sanitaria. “El SERMAS- Servicio Madrileño de Salud- se ha convertido en una empresa de trabajo temporal. Me contrataron para todo lo que durara el estado de alarma. Pero no sé hasta cuando era porque aún no he visto ni el contrato”, afirma. 

Tras un tiempo trabajando en el IFEMA un día recibió un mensaje en el móvil que le indicaba que había sido dado de baja. “Escribí por email a gerencia de Atención Primaria que es quien me contrata y me dijeron que había un error”, asegura. Mientras sigue esperando que se subsane. “A mí todavía el mensaje de alta de la Seguridad Social no me ha llegado. Dicen que lo van a solventar, pero aún nada”, afirma.

“Estuvimos como cinco días sin planillas. La gente venía derivada de otros hospitales y estaban 15- 17 días sin librar”, denuncia. En cuanto a su estado de ánimo tras ejercer en estas condiciones es contundente: “Nos sentimos mal, nos estábamos jugando la vida. Es un trabajo precario, todavía no he cobrado desde el mes pasado ”, se queja.

EN SU CONTROL “SON UNA PIÑA”

El tono de su discurso cambia cuando piensa en sus compañeros y compañeras y en la “piña” que han creado en su control. “Tenemos un control muy majo, hemos hecho una piña. Los pacientes están muy agradecidos. Tenemos médicos y personal sanitario que no nos los merecemos, animan al paciente, se vuelcan con el” y pone un ejemplo de las estrategias que usan para combatir la soledad de las y los enfermos.  “Los niños les hacen dibujos y los pegamos alrededor de las camas para que no se sientan tan solos”.

“Cuando no había EPIs una de mis compañeras se tuvo que fabricar uno con una bolsa de basura. 15 días después hay gente contagiada”

Pablo lleva trabajando como celador desde 2016 con más de 13 nombramientos (contratos). Gracias a esta experiencia, se ha sentido más respaldado porque “ es su trabajo habitual”. Y lo describe con un conjunto de tareas que no son tan visibles pero que son indispensables. “Llevas a los pacientes a que se hagan las radiografías, les llevas al TAC, haces cambios posturales, llevas las pruebas analíticas al laboratorio…” Y, estos movimientos no están ausentes de riesgo. “Yo me muevo de un lado a otro, tengo contacto con el paciente, mando pruebas. En mi control ha habido un brote… y ahora estoy de baja”, resume.

Visión que refuerza el Movimiento Asambleario de Trajadores-as de Sanidad (MATS), quienes aseguran que el contacto que tienen los celadores con el paciente es directo. “Nuestro día a día contradice lo que expone el Ministerio de Sanidad en su “Procedimiento de Actuación para los Servicios de Prevención de Riesgos Laborales frente a la Exposición al SARS- COV-2”, en el que nos considera personal de bajo riesgo de contagio”, expone una celadora de este sindicato.

Mientras, Pablo quiere que transcienda su situación para que se tenga en cuenta que dentro del IFEMA hay compañeros “que se están jugando la vida”, por lo que reclama condiciones dignas. “Nos decían que habíamos ido a un hospital de guerra. Y que así estábamos. Cuando no había EPIs, una de mis compañeras auxiliares se tuvo que fabricar uno cortando un trozo de bolsa de basura. 15 días después hay gente contagiada”, concluye.

Sobre o blog
Ante estos días extraños en los que vivimos entre la tragedia y la esperanza, entre quienes afrontan un futuro incierto en un pasillo de urgencias y quienes unen sus manos para practicar el apoyo mutuo, es necesario poner voz y rostro a todas esas personas que no abren telediarios pero que están construyendo esta página de la historia. Abrimos 'Los rostros de la cuarentena' con el ánimo de dar luz a testimonios de gente desconocida que batalla contra el covid19 desde todos los frentes: tanto dentro de los hospitales y residencias, como en los descansillos de las comunidades, donde se amontona la compra traída a alguna vecina. Tanto en los balcones donde originales iniciativas permiten a las peques tener cine gratis, como en las habitaciones donde las impresoras 3D trabajan a todo meter y un grupo de 'makers' prepara mascarillas para su centro sanitario. Tanto de quienes cuidan de su familia y de otras personas del barrio, como de quienes no pueden tener contacto con sus familiares y viven su destino pendientes de una llamada. Si tienes una historia que contar, este también es tu sitio.¡Bienvenidas!
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Chernóbil
Cuba y Chernóbil Cuba, Chernóbil y COVID-19
Los médicos cubanos ya acudieron al rescate de los niños de Chernóbil.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Un rayo de esperanza tras cinco años de los protocolos de la vergüenza
A punto de prescribir los posibles delitos, un avance judicial abre la puerta a conocer quién decidió no derivar a hospitales a ancianos en residencias en la Comunidad de Madrid.
Sobre o blog
Ante estos días extraños en los que vivimos entre la tragedia y la esperanza, entre quienes afrontan un futuro incierto en un pasillo de urgencias y quienes unen sus manos para practicar el apoyo mutuo, es necesario poner voz y rostro a todas esas personas que no abren telediarios pero que están construyendo esta página de la historia. Abrimos 'Los rostros de la cuarentena' con el ánimo de dar luz a testimonios de gente desconocida que batalla contra el covid19 desde todos los frentes: tanto dentro de los hospitales y residencias, como en los descansillos de las comunidades, donde se amontona la compra traída a alguna vecina. Tanto en los balcones donde originales iniciativas permiten a las peques tener cine gratis, como en las habitaciones donde las impresoras 3D trabajan a todo meter y un grupo de 'makers' prepara mascarillas para su centro sanitario. Tanto de quienes cuidan de su familia y de otras personas del barrio, como de quienes no pueden tener contacto con sus familiares y viven su destino pendientes de una llamada. Si tienes una historia que contar, este también es tu sitio.¡Bienvenidas!
Ver todas as entradas
Comunidad de Madrid
Universidad pública El alumnado de la UNED denuncia el “modelo antipedagógico” tras la supresión de tutorías presenciales
El proceso de eliminación de clases se remonta a 2008, aunque ha sido este año, con el nombramiento Claudia Sevilla como directora de centros asociados de Madrid, cuando el gobierno de Ayuso “ha pisado el acelerador”.
Rumanía
Rumanía La ultraderechista Alianza para la Unión de los Rumanos de George Simion se destaca para la segunda vuelta
La extrema derecha rumana sale de nuevo reforzada pese a la eliminación de la carrera electoral de su otro representante, Calin Georgescu. La segunda vuelta de las elecciones será el 18 de mayo.
València
València Rechazada la querella por tortura contra Ramón, policía infiltrado en València
Un juzgado de València desestima el recurso presentado por Alerta Solidària contra la inadmisión de la querella criminal por torturas contra el agente que pasó dos años infiltrado.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'Os Pecadores' loitan contra montruos reais e mitolóxicos no novo episodio de 'O Teleclube'
O dúo do director Ryan Coogler e o actor Michael B. Jordan estrean unha película sobre a experiencia afroamericana cunha ameaza sobrenatural engadida.
Opinión
Opinión El apagón y la ofensiva nuclear de las derechas
El gran apagón se ha producido en medio de una auténtica guerra cultural de la derecha contra el plan de cierre de las nucleares.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición El PSOE se mira en el espejo de Canadá
La irrupción de un enemigo exterior poderoso como Trump ha provocado un giro rotundo en las elecciones del país norteamericano, catapultando a los progresistas tras estar al borde de una dura derrota.
Economía social y solidaria
Cooperativismo Economías tejidas por mujeres: feminismo y cooperativismo en Madrid, una genealogía por contar
La Economía Social y Solidaria feminista no ofrece fórmulas mágicas, pero sí un horizonte: uno donde lo productivo y lo reproductivo, lo económico y lo afectivo, dejen de estar enfrentados.
Más noticias
Huelva
Huelva Jornaleras de Huelva en Lucha interpone la primera denuncia por el despido de una temporera marroquí
La sección sindical, recién constituida, asegura que “abren la veda” para denunciar otros atropellos laborales similares en contratos fijo-discontinuos de trabajadoras contratadas en origen.
Artes gráficas
Andalucía Poevélez: Cuando poesía e imagen mezclan, funden y subliman
La muestra colectiva de diversos artistas del panorama nacional nos presenta ejercicios de poesía visual desde diversas disciplinas como el collage y la fotografía y se puede visitar en la Fundación Eugenio
Opinión
Opinión Sobre la guerra y la paz
Parece que los alemanes y el resto de europeos no aprenden con la historia que ellos mismos han protagonizado en los últimos 400 años. Ni siquiera con la historia del siglo XX, tan inmediatamente próxima y tan inmensamente trágica.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña e Ourense mercaron material policial a Israel por medio millón de euros en só catro anos
O alcalde ourensán, Gonzalo P. Jácome, adxudicou un contrato por 70.000 euros días despois do sete de outubro. Abel Caballero asinou outro de máis de 200.000 euros e a alcaldesa da Coruña seguiu a estela cun contrato de 170.000 euros.