El Salto nació en 2017, tras 12 años de experiencia del periódico Diagonal. Desde su inicio contaba con un objetivo claro: construir un gran medio que funcione con otras reglas: democrático, participativo, descentralizado, independiente, incorruptible…

Ocho años después, lo hemos conseguido en buena medida, aunque la derechización que ha experimentado la sociedad española ha hecho que nos volvamos a quedar pequeños, especialmente en comparación con lo que se nos viene encima.

Necesitamos llegar más lejos con nuestros contenidos críticos. Y te necesitamos para ello. Hasta el 15 de enero, hazte socio/a con el 25% de descuento y te enviamos, además de la última revista de El Salto, un cuaderno serigrafiado con el corazón palestino.

Muchas son las palabras que definen lo que hacemos en El Salto, los principios que defendemos, cómo funcionamos o que describen nuestras principales apuestas informativas. Estas son algunas de las más importantes.

A

• Apoyo mutuo. Las redes de apoyo mutuo surgidas en los primeros meses de la pandemia, en los primeros días de la dana de València o en las acciones barriales para detener desahucios ejemplifican el modelo de solidaridad en el que creemos en El Salto.

• Asamblea. Las decisiones más importantes de El Salto y de todas las partes que lo componen se toman en asamblea.

• Análisis crítico. La cobertura crítica de la actualidad política y social, posicionada y comprometida es la principal apuesta editorial de El Salto.

• Antifascista. Uno de los “anti” que mejor nos definen, sin olvidar otros clásicos de hoy y siempre como “antirracista”, “antimilitarista”, “antiautoritario” o “anticapitalista”.

C

• Calidad. La calidad periodística es uno de los tres principios que guió la creación de El Salto en 2017, junto con la independencia demostrable y la democracia interna.

• Colaboradores. Contamos con una red de miles de colaboradores distribuida en todo el mundo.

• Cercanía. Es en la información de cercanía donde creemos que hay mayor capacidad de incidencia. Por esto apostamos por una redacción descentralizada con nodos locales autónomos.

• Colectivo editor. Es el órgano asambleario que toma las decisiones más importantes del medio.

• Comentarios. Para evitar el ruido, desde hace años existe un sistema de moderación de los comentarios: es necesario registrarse para comentar y esperar a que los comentarios sean validados por la redacción. Las personas socias son de la casa: comentan directamente sin moderación previa.

• Corporaciones. Controlan la economía, los medios y cada vez más la política. Por eso no aceptamos ningún tipo de financiación suya para poder denunciarles con total libertad.

• Cooperativa. El Salto está editado por Cooperativa Editorial S.Coop, una entidad que forma parte de las redes de economía social y solidaria del Estado español. Se trata de una cooperativa mixta en la que los socios trabajadores cuentan con un 30% del voto; los socios colaboradores (gente de nodos y otras personas del Colectivo Editor), un 30%; y el conjunto de las personas socias, un 40%.

• Crisis climática. El mayor desafío planetario, imposible de tratar de forma periodística sin libertad para denunciar a las corporaciones. Ver Corporaciones.

D

• Democracia interna. Si pedimos democracia a los gobiernos y las instituciones, ¿por qué no exigirla también a los medios de comunicación? Ver Asamblea.

• Descentralizado. Los seis nodos locales de El Salto deciden de forma autónoma su línea editorial dentro de líneas generales aprobadas por todo el proyecto.

• Diagonal. Es el precedente de El Salto, nacido en 2005, con quien comparte parte de la plantilla y muchos de sus principios, formas de funcionamiento y objetivos. Dejó de publicarse en 2016, para lanzar El Salto junto con otros proyectos.

• Director/a. No tenemos.

• Desobediencia. El derecho a resistir y combatir las leyes y las imposiciones injustas es uno de los principios que guía la línea editorial de El Salto.

• Decolonial. La mirada transversal, antirracista, que busca desmontar las estructuras de dominación heredadas del colonialismo, está siempre presente en nuestro análisis y nuestra mirada del mundo.

• Descuentos para socias. Cientos de libros y otros productos de la Tienda de El Salto tienen un descuento del 5% para socias. Además, las personas socias cuentan con un 20% de descuento en talleres y formación, un 25% en productos solidarios y de promoción y un 40% en productos audiovisuales. También disponemos de descuentos para socias del 15% en Edita (servicios editoriales) y Publicidad.

F

• Feminismos. Uno de los temas claves de El Salto, que atraviesa de forma transversal los contenidos del medio.

• Financiación. Cerca del 75% del dinero de El Salto proviene de las personas socias. El 5% de la publicidad (siempre ética). Otro 5% de los servicios editoriales. Otro 5% de la Tienda. Y un 10% de proyectos y subvenciones.

G

• Gente. “El primer gran medio financiado por la gente”, fue el primer lema de El Salto, slogan que reflejaba un objetivo que está cada vez más cerca.

I

• Independencia. Creemos que no basta decir que un medio es independiente. Hay que tener un método para poder asegurarlo. El método de El Salto es contar con una serie de criterios éticos de financiación, que limitan el origen de la publicidad, de las donaciones y que hacen imposible que una empresa, un partido o un gobierno tengan influencia en lo que sacamos o en lo que dejamos de sacar.

• Investigación. En los últimos años, hemos desarrollado varias líneas de investigación de gran impacto: los intereses del fondo proisraelí KKR en los festivales de música españoles, los topos de la policía en los movimientos sociales o la financiación que reciben medios de ultraderecha por parte de gobiernos del PP.

• Igualdad salarial. Todas las personas de El Salto cobran el mismo salario. Solo existe un plus de 50 euros por hijo menor de 12 años.

L

• Líneas rojas. Para cambiar una línea roja de El Salto (financiación, funcionamiento, publicidad), hace falta un referéndum vinculante con todas las socias.

• LGTBIQ+. Defendemos cada una de las letras que aparecen en estas siglas. No aceptamos quitar ninguna.

• Libertades y derechos. Uno de los grandes ejes temáticos de El Salto, que cubre la defensa de los derechos de expresión y manifestación, los derechos digitales, las libertades individuales, así como la denuncia de la represión, el control social y el uso de la violencia por parte de las fuerzas de seguridad del Estado.

M

• Mailings. En la Zona Socias de la web, las personas socias tienen acceso a boletines personalizados por autores, temas y blogs. Todos los meses, el responsable de Política, Pablo Elorduy, envía solo a las socias el mailing Redactor en crisis. También enviamos a socias y personas registradas todos los viernes un repaso crítico a la actualidad con los mejores artículos de la semana.

• Movimientos sociales. Nuestra principales fuentes para nuestras informaciones no son los gobiernos ni las agencias de noticias sino que las organizaciones sociales y colectivos de base.

N

• Nodo local. Contamos con nodos locales en Andalucía, Extremadura, Galiza, País Valencià, Euskal Herria y Madrid. Cuando te haces socio/a desde estos lugares, más del 50% de cada nueva suscripción se queda en el territorio para la elaboración de contenidos de cercanía.

P

• Palestina. Ha sido desde 2023 el centro de la cobertura de la política internacional de El Salto. Creemos que en Palestina no solo están en juego los derechos y las vidas de la población palestina sino, como decía el analista Raúl Zibechi, lo que entendemos por humanidad.

• Participación. Las personas socias que lo deseen pueden consultar nuestra cuentas y participar en las Asambleas Generales de la cooperativa. Además, las socias pueden escribir artículos en la sección Opinión Socias y valorar artículos y comentarios.

• Periodismo. Somos un medio que apuesta por la transformación social. Nuestra forma de hacerlo es a través del periodismo.

• Plantilla. El Salto cuenta con una plantilla de 27 trabajadores y miles de colaboradores.

• Precariedad. Es uno de los temas principales de nuestros artículos y nuestros salarios nos obligan a vivir en ella.

• Presupuesto. El Salto supera con un presupuesto anual de un millón de euros, en su enorme mayoría proveniente de las cuotas de las personas socias.

• Principios. Creemos que la única forma de ser un medio diferente es funcionar de forma diferente. Para modificar cualquiera de estos principios sería necesaria una consulta vinculante con todos los socios y socias.

• Propiedad colectiva. No hay grupos de comunicación ni partidos ni personalidades detrás de El Salto. La propiedad del medio reside, según estatutos, en la plantilla, los socios colaboradores y las personas socias.

• Publicidad. En El Salto no pueden anunciarse las empresas que violan los derechos humanos, sociales o ambientales. El total de la publicidad no puede suponer el 20% del presupuesto.

R

• Radical. Es la sección de cultura de El Salto. Estuvo cerca de ser el nombre de este medio, pero ganó “El Salto” en votación.

• Radio. El Salto cuenta con una línea de producción radiofónica con una decena de programas. En los últimos meses la redacción del medio cuenta con su propia podcast de actualidad: Asalto.

• Redes sociales. Además de la web, las redes sociales son los principales escaparates de los contenidos del medio. Tenemos presencia en Instagram, Facebook, Bluesky, Mastodon, Threads, TikTok o Linkedin entre otros. También nos puedes seguir en Telegram y Whatsapp. En febrero de 2025 dejamos de usar Twitter/X.

• Revista. Cada trimestre, coincidiendo con las estaciones del año, publicamos la revista de El Salto, una publicación de 100 páginas con reportajes, columnas, pasatiempos y entrevistas. En Euskal Herria, Hordago cuenta con un suplemento de 16 páginas. En el último número inauguramos una colaboración con El Mundo Today.

S

• Sanidad. La denuncia de la privatización sanitaria, así como el abandono de la pública, es otro de los grandes temas del medio.

• Socias. Es la base económica (y política) de El Salto. A finales de 2025, había más de 10.300 personas socias.

• Sorteos. Cada mes realizamos un sorteo entre las personas socias de libros y entradas, así como de productos y servicios de la economía social y solidaria. Puedes consultarlos en la sección de la web “Solo para socias”.

• Servicios públicos. La defensa de la sanidad, la educación y el transporte público es una de las grandes apuestas temáticas de El Salto.

V

• Vídeo. Es una de las líneas estratégicas del proyecto. Contamos con dos personas empleadas en el Área de Vídeo y con decenas de colaboradores. Además de la realización de vídeos de coberturas, entrevistas y reportajes, colaboramos con otros medios europeos dentro del proyecto Sphera.

• Vivienda. La crisis de vivienda explica mucho de lo que ocurre en la actualidad política y social en España. El movimiento por la vivienda fue desde 2010 y sigue siendo uno de los más potentes en el Estado Español.

W

• Web. La web de El Salto es el principal escaparate de El Salto. Publicamos cerca de 100 artículos a la semana, que recibe cerca de dos millones de visitas al mes.

Z

• Zona socias. Es el área de las personas socias en la web. En ella, las socias pueden configurar su propia home en “Mi Salto”, elegir los boletines que desea recibir, leer la revista online en “Publicaciones”, escribir sus propios artículos o guardar artículos para leer después, entre una larga lista de ventajas.

¡Hazte socio, hazte socia!