Tecnología
Estados Unidos escala la guerra digital con Europa y prohíbe la entrada de cinco “activistas radicales”

El Departamento de Estado de Estados Unidos, dirigido por Marco Rubio, anunció en la noche del martes 23 de diciembre, la restricción de visados a cinco ciudadanos europeos por su papel “en la censura online”. La prohibición de produce en plena tensión entre Bruselas y Washington por la intención europea de monitorizar el contenido de las principales plataformas de redes sociales.

Sin duda, la más relevante de las cancelaciones ha sido la del excomisario europeo de comercio Thierry Breton. Este político se significó durante los últimos meses de su mandato por exigir a Elon Musk en una carta que siguiese la “debida diligencia” que obliga a X (Twitter) a moderar los contenidos de la plataforma. El contexto era el de la agitación racista que el propio Musk había agitado en el verano de pogromos en Reino Unido, en 2024.

En la Casa Blanca se considera que Breton es el cerebro de la Ley de Servicios Digitales (DSA), una de las normativas europeas que la administración Trump está decidida a fulminar, para lo que cuenta con la aquiescencia de la Comisión Europea de Ursula von der Leyen que, para su segundo mandato, decidió prescindir de Breton.

Sin embargo, la UE ha emitido en diciembre su primera sanción bajo la DSA, por la práctica de la red de extrema derecha X de engañar a sus usuarios con la compra de credenciales. Este hecho, que no tiene que ver con la moderación de contenidos, ha sido usado por la Casa Blanca y por el propio Musk para denunciar la censura a la libertad de expresión llevada a cabo por Europa. Las cancelaciones de visados de hoy se enmarcan en esa retórica.

Al margen de Breton, las otras cuatro personas señaladas por el Departamento de Estado sí son activistas y profesionales de distintas organizaciones contra los discursos de odio. Se trata del director ejecutivo del Centro para la Lucha contra el Odio Digital, al que Musk demandó después de que este centro publicara un informe sobre el aumento del discurso de odio en Twitter, en una demanda que el Tribunal desestimó por el derecho a la libertad de información del propio Centro para la Lucha contra el Odio Digital.

Además, se cancela la visa de las dos representantes de la organización alemana HateAid y la directora del Índice de Desinformación Global. En el caso de este índice, la reacción ha sido calificar el anuncio de Rubio como “un ataque autoritario a la libertad de expresión y un acto flagrante de censura gubernamental”. Por su parte, Breton ha reaccionado ironizando sobre la vuelta del senador McCarthy, responsable de la llamada “caza de brujas” anticomunista de mediados del siglo XX.

“Durante demasiado tiempo, ideólogos europeos han liderado esfuerzos organizados para coaccionar a las plataformas estadounidenses y castigar las opiniones estadounidenses a las que se oponen”, ha manifestado Marco Rubio, que se ha referido al uso “como armas” de las ONG para perseguir la libertad de expresión made in america.