Uber
Uber Files, ya lo sabíamos, y (parece que) todo sigue igual

Desde distintos campos, como el periodismo, la sociología, el derecho, la antropología, y otras disciplinas se vienen señalando este tipo de prácticas.
Uber en Madrid
Un vehículo de la plataforma Uber circulando por el centro de Madrid. David F. Sabadell
12 jul 2022 09:20

En estos días de extremo calor de julio que estamos pasando en la península Ibérica se ha hecho pública la filtración de 124.000 archivos internos de Uber correspondientes al periodo que va entre 2013 y 2017, los conocidos como los Uber Files. Parece ser que llegaron a la redacción de The Guardian y este periódico británico los ha compartido con el Consorcio Internacional de Periodistas de Información (ICJI, por sus siglas en inglés), para poder analizarlos con detalle, pues la información que contenía afectaba a numerosos países diferentes, haciendo referencia al momento de mayor expansión de Uber por Europa y Asia. La información recogida en estos archivos, y procesada por el ingente equipo de redactores integrado en el ICIJ, se está publicando en 29 países diferentes por parte de 44 medios de comunicación, en España son El País y La Sexta los medios donde se está distribuyendo.

Para quien no haya tenido tiempo de verlo, cabe destacar los siguientes puntos a extraer de lo publicado hasta la fecha. En los correos hay un reconocimiento explícito por parte de alguno de los directivos de la compañía de que son “jodidamente ilegales”. Es decir, su estrategia consiste en introducirse en los mercados locales ignorando deliberadamente la legislación vigente sobre diferentes aspectos, tanto en materia de transportes, competencia o legislación laboral. También se evidencia su política de lobby al más alto nivel como vía para conseguir que las decisiones provocadas por sus vulneraciones de la legislación pierdan efecto, además de tratar de conseguir que se redacten leyes a la medida de sus intereses. En los #UberFiles aparecen correos y conversaciones de wasap personales con políticos tan influyentes como Macron o Biden, entre otros, quedando especialmente mal parado el actual presidente de la Republica de Francia.

Para apoyar esta política de relaciones públicas al más alto nivel posible, en los archivos revelados se muestra cómo pagaron a académicos prestigiosos para obtener estudios favorables a sus intereses, en una de las versiones de ciencia militante más detestables que se puede dar, al servicio del mejor postor.

Además, se reclutó a personas influyentes en distintos ámbitos para que trabajasen a su favor. En este sentido cabe destacar dos personajes, a nivel europeo, Neelie Kroes, antigua Comisaria de Competencia en la Comisión Europea en 2004, pasando a ser en 2010 Comisaria de Agenda Digital en la misma institución. Kroes, que actualmente forma parte del Consejo Asesor de Políticas Públicas de Uber, según los archivos filtrados, parece ser que mucho antes de poder ejercer como lobista a favor de Uber, tras su salida de la Comisión, presionó a distintos altos cargos europeos, incluido el actual primer ministro neerlandés Mark Rutte, para que legislaran a favor de Uber o intervinieran en procesos judiciales iniciados en sus países a favor de la compañía.

En España ya era público que la actual presidenta de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Cani Fernández, había llevado la defensa legal de Uber ante el Tribunal Superior de Justicia Europea cuando ocupaba un alto cargo en el bufete Cuatrocasas, uno de los más importantes del país. Previamente había estado trabajando dentro de la máxima institución de justicia, donde al parecer conoció a Nadia Calviño, relación que podría haberle servido para ser nombrada asesora del Gabinete de Presidencia, antes de llegar a la CNMC.

Las personas que trabajan para Uber son tratadas como carne de cañón que se puede quemar en la hoguera cuando sea necesario, siempre que con ese fuego se alimente el crecimiento de la compañía

Junto a los movimientos al más alto nivel por parte de Uber para conseguir influir en el diseño de legislación favorable, o evitar las consecuencias legales de sus estrategias, otro aspecto que se pone de manifiesto en los #UberFiles es el uso que hace la compañía de sus trabajadorxs, a los que ni siquiera reconoce formalmente esta condición. Las personas que trabajan para Uber son tratadas como carne de cañón que se puede quemar en la hoguera cuando sea necesario, siempre que con ese fuego se alimente el crecimiento de la compañía o favorezca sus campañas de manipulación de la opinión pública difundidas por los medios, con repercusión en las instituciones, dirigidas a hacerse pasar por víctimas de la indignación de todos aquellos que fueron desplazados o perjudicados por sus lanzamientos ignorando la legislación.

Parece ser, según los archivos filtrados, que el propio director general de la compañía de entonces intentó provocar y prolongar los eventos violentos en contra de los coches usados por la plataforma por todo el mundo para sacar partido de las imágenes impactantes que obtenían con ello, demostrando el más absoluto desprecio por la integridad de sus conductorxs, a los que se llega a referir como “suministros”. A esto se suma el empleo de tecnologías diseñadas para hacerse invisible a las autoridades, poder ocultar información en caso de registro con orden judicial o espiar a posibles actores que se movilizan en su contra, taxistas, políticos o jueces, por poner algunos ejemplos.

Por desgracia, en nuestra sociedad que se mueve impulsada por impactos mediáticos puntuales, este tipo de filtraciones son necesarias para poner de manifiesto lo que muchas llevamos años denunciando, con datos y estudios rigurosos

Toda esta información que sale a la luz con los denominados #UberFiles es importante, sobre todo por el ejercicio que supone de poner orden y aportar alguna evidencia más a muchas cuestiones que las personas que llevamos años investigando las prácticas de este tipo de compañías ya conocíamos. Por desgracia, en nuestra sociedad que se mueve impulsada por impactos mediáticos puntuales, este tipo de filtraciones son necesarias para poner de manifiesto lo que muchas llevamos años denunciando, con datos y estudios rigurosos.

Desde distintos campos, como el periodismo, la sociología, el derecho, la antropología, y otras disciplinas se vienen señalando este tipo de prácticas. Innumerables fuentes en el panorama internacional, Mike Isaac, Alex Rosenblat, Vena Dubal, Juliet Schor, Steve Vallas…, por poner algunos ejemplos entre muchos que se podrían citar, representan a personas que llevan años trabajando estos temas, sin casi relevancia, denunciando el abuso continuo de poder ejercido por compañías como Uber, empleando datos de calidad que lo ponen de manifiesto, a veces, yendo a rebufo de movimientos sociales activistas levantados contra el poder que tratan de ejercer de manera ilegal este tipo de compañías. Por ello, aunque sea una buena noticia esta filtración masiva, es necesario destacar que buena parte de lo que contiene ya se sabía y era público, solo hacía falta buscarlo para encontrarlo.

Aunque pueda ser cierto que Uber intenta no trasladar la misma imagen agresiva de sus primeros años, el núcleo duro de su forma de operar sigue intacto, y se podría decir que no es exclusivo de Uber

La actual dirección de Uber se ha intentado desmarcar del contenido de estos archivos diciendo que ya iniciaron un proceso de revisión y limpieza interna y que actualmente sus prácticas se ciñen a la ley en todos los lugares donde operan. Sin embargo, esta es la típica respuesta que hay que rechazar de plano porque no se sostiene. Aunque pueda ser cierto que Uber intenta no trasladar la misma imagen agresiva de sus primeros años, -actitud que se puede entender como funcional para la fase expansiva, pero ya no tan rentable ni necesaria- el núcleo duro de su forma de operar sigue intacto, y se podría decir que no es exclusivo de Uber, aunque esta atraiga mucha más atención que algunos de sus rivales, sino que es el modus operante de las empresas centrales en la fase actual del capitalismo de plataforma en el que nos vemos inmersas.

En esencia, estas empresas se caracterizan por irrumpir en mercados regulados, o en sectores económicos poco rentables, ignorando la legislación, empleando para ello distintas aplicaciones que ofrecían sus servicios a bajo coste. Para poder desarrollar este impulso remitían a una retórica de innovación tecnológica imparable, pero lo que realmente permitía seguir el ritmo continuado de pérdidas es el ingente aporte de capital procedente de fondos de inversión de distinto pelaje. Con ello se permite el acceso del gran capital a sectores donde antes no había podido introducirse.

Como consecuencia de este modelo encontramos una total y absoluta precarización y desvalorización de la mano de obra, esencial para prestar este tipo de servicios sobre el terreno. En una situación de elevado desempleo y pérdida de seguridad asociada al trabajo, estas compañías, de Uber a Cabify, de Glovo a Deliveroo, de Gorillas a Getir, de Bolt a Lime…, enmascaran sus prácticas, corrosivas y depredadoras con el derecho del trabajo y el espacio público, bajo retóricas eco-friendly, colaborativas o favorables a la flexibilidad y la autonomía de sus trabajadoras. Sin embargo, la observación detallada de sus sistemas de gestión de la fuerza de trabajo o de uso del espacio público, dista mucho de parecerse a la que promocionan estas empresas. El no reconocimiento de la relación laboral, las resistencias y estrategias evasivas empleadas para incumplir legislaciones en este sentido, el uso arbitrario y opaco de algoritmos para la gestión del proceso de trabajo, la promoción de la competencia entre sus empleados, los obstáculos a la acción colectiva y la representación de sus trabajadoras y trabajadores, o la presión por debajo de la mesa para conseguir legislaciones favorables, son prácticas que siguen llevándose a cabo, no solo por Uber, sino por la totalidad de este tipo de empresas integrantes del sector más “austero” (Srnicek, 2018) del capitalismo de plataforma.

Economía colaborativa
Entrevista Nick Srnicek: “Debemos reconocer los servicios públicos de las plataformas, y después regularlas o expropiarlas”

El escritor canadiense Nick Srnicek ha publicado Capitalismo de Plataformas (Caja Negra), un ensayo que traza una sucinta e inteligente radiografía sobre las transformaciones en la estructura económica.

Para terminar ya, a modo de conclusión, aunque esta filtración masiva de archivos sea una buena noticia, conviene quedarse con la idea de que, esencialmente, esta forma de actuar que pone de manifiesto la filtración no es una cuestión anecdótica ni se limita exclusivamente a Uber. Por el contrario, es la forma principal de actuar de estas compañías del capitalismo de plataforma, que siguen operando a pesar de no haber encontrado aún la vía para obtener beneficios, gracias a enormes respaldos de capital riesgo, con el objetivo declarado de hacerse con el monopolio de aquellos sectores donde operan, para imponer unilateralmente sus condiciones de mercado, amenazando los derechos de las trabajadoras, la soberanía popular en lo referente a la transparencia de la toma de decisiones y el control asimétrico de ingentes cantidades de datos, poniendo en peligro la misma democracia, por ineficaz que ahora nos pueda parecer, haciéndola mucho más lejana y exclusiva para unos pocos privilegiados.

Frente a esta amenaza sería deseable que funcionasen controles automáticos que se activasen ante flagrantes violaciones del derecho en materias como el trabajo, el transporte público, los servicios en general o la transparencia en la toma de decisiones que afectan al uso del espacio público y a los derechos de los trabajadores y trabajadoras, además de prestar la suficiente atención a colectivos activistas y a integrantes de la academia cuando denuncian estas situaciones. SI esto hubiese sido así no habría sido necesaria una filtración masiva de datos para poner el foco en lo que muchas y muchos llevamos tiempo señalando, además de poner de manifiesto la necesidad de frenar ya las peores consecuencias de todo lo que se hace público en estos archivos filtrados.

Falsos autónomos
Uber tiene problemas y quiere que lo paguen sus trabajadores
En lugar de reconocer el tiempo que sus conductores pasan conectados a las aplicaciones como tiempo de trabajo, han creado unas apps propias para llevar el registro de jornada.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Aseguradoras
Sector taxi Los taxistas se rebelan contra las aseguradoras
El próximo 29 de enero será un día clave en la historia del sector del taxi. Miles de taxistas de diferentes partes del país se movilizarán para protestar contra una situación que llevan años denunciando.
Madrid
Taxi Con Ayuso, los taxistas nos hemos quedado huerfanos en Madrid
Dos años después de unas elecciones autonómicas que supusieron la desaparición de un espacio muy importante para la gente trabajadora en la Comunidad de Madrid, muchos colectivos como los taxistas seguimos desamparados.
Falsos autónomos
Riders La Ley Rider Europea sale finalmente adelante
Parecía complicado tras la oposición de Macron, pero finalmente la directiva de trabajo en plataformas digitales ha encontrado apoyos suficientes.
CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
Medios públicos A TVG, condenada a rectificar por difundir unha información falsa sobre o BNG
A xustiza condena tamén ao director do ente público, Alfonso Sánchez Izquierdo, pola nova onde se afirmaba erradamente que o BNG non enviara representantes a un evento organizado pola Xunta e mais a Fundación Castelao para dar inicio ao Ano Castelao.
OTAN
Europa Los líderes de la UE cierran filas con Zelensky en el contexto de derrumbe de la alianza con Estados Unidos
La cumbre de Londres del domingo 2 de marzo se cerró con una hoja de ruta para llevar a EE UU de nuevo la mesa de negociaciones con Ucrania. La UE apuesta por el rearme ante la amenaza rusa y el desfallecimiento de la Alianza Atlántica.
Huelga
Derechos laborales Los sindicatos en Renfe y Adif llaman a siete días de huelga por “incumplimientos” en el traspaso de Rodalies
Las organizaciones consideran que no se están cumpliendo los acuerdos que previnieron una primera huelga en 2023. El traspaso de competencias es un momento delicado y los sindicatos quieren asegurarse de que la plantilla no sale perdiendo.
Estados Unidos
Análisis Trump, la naranja mecánica
La rueda de prensa entre el presidente de los Estados Unidos y su homólogo ucraniano fue una muestra de una humillación pública al más alto nivel.
Mozambique
Neocolonialismo La expansión del eucalipto en Mozambique para la papelera europea
VV.AA.
La creciente demanda de celulosa en Europa está dando lugar a nuevos mercados y a la expansión de las plantaciones de eucalipto en Mozambique. Pero algunas comunidades rurales ahora quieren recuperar la tierra que han perdido.

Últimas

Guerra en Ucrania
Guerra en Ucrania Las izquierdas rusa y ucraniana, ante un posible acuerdo de alto el fuego en Ucrania
Una de las principales demandas de la izquierda rusa es la liberación de los presos políticos. La ONU ha alertado de que la aplicación por parte de Ucrania del tipo de “colaboracionismo” está siendo excesivamente amplia.
Feminismos
En primeira persoa Relato dunha furgoneta roubada e un embarazo que perdemos
Temos que saber que para ter a liberdade de sentir sen morrer sepultadas no propio silencio é necesario que sexan habilitados, considerados e acompañados todos os xeitos, todas as dores, todas as dúbidas e todos os laios en tódolos ámbitos da vida.
Sphera
Soberanía alimentaria Sembrar zanahorias, recolectar comunidad
Una comunidad que sostiene la agricultura es un grupo de personas que alquila tierra y contrata a agricultores para cultivar. Es la forma de obtener frutas y verduras de kilómetro cero.
Opinión
Pueblo gitano 3 de marzo, 526 años de persecución racista antigitana
Ni los Reyes Católicos ni toda su ralea, incluidos los Borbones que aún detentan la Corona, consiguieron su propósito.
Más noticias
Estados Unidos
Genocidio Trump aprueba un paquete de armas de 3.000 millones de dólares para Israel
El presidente estadounidense ha alegado una “emergencia” para eludir al Congreso y aprobar un envío de armas que no llegará a Israel hasta 2026.
Madrid
Madrid Inquilinas despliegan decenas de piquetes para ampliar la lucha antirrentista e impulsar huelgas de alquileres
Estos grupos agitativos territoriales, que se mantendrán a lo largo de los próximos meses, se han distribuido por distritos y barrios de Madrid como Villaverde, Lucero, Vallecas o Leganés.
Nicaragua
Salvador Marenco “Los crímenes de lesa humanidad no solo deben ofendernos a nosotros como nicaragüenses”
El abogado, activista y miembro de la colectiva Nicaragua Nunca Más habla sobre las sistemáticas vulneraciones de DDHH y el silencio mediático entorno al régimen de Ortega
Opinión
Opinión Vitoria 3 de marzo. El memorial que soñamos
Cuando se cumplen 49 años de una de las masacres que marcaron el periodo postfranquista, se ha avanzado poco en la creación de un Memorial que establezca el relato preciso de lo que sucedió en Vitoria y por qué luchaban quienes estuvieron allí.
Migración
México México, la última frontera
En la frontera sur, la presencia de migrantes está aumentando, entre otras razones, debido a la política del gobierno mexicano de devolver a los migrantes sin documentación desde el norte del país hacia el sur.

Recomendadas

Urbanismo
Urbanismo salvaxe Un pobo contra o asfalto: Bembrive e Mos rebélanse contra unha autovía que arrasará o seu pulmón verde
Veciñas e veciños conseguen presentar 25.000 alegacións contra unha estrutura de dez quilómetros, defendida xa só polo PSOE en Madrid e en Galiza, que partirá en dous unha poboación enteira e forzará a expropiación de decenas de vivendas.
Feminismos
June Fernández “Estoy abierta a reconocer modelos en los que haya personas cuyo rol sea gestar”
La periodista June Fernández publica ‘Sueños y vasijas’, un volumen sobre la gestación subrogada que no quiere sacar a nadie de su posición, pero sí sumar elementos para analizarla con perspectiva feminista.
Turismo
Turismo depredador Poca agua, mucho turismo: la crisis hídrica amenaza las islas Eolias en Italia
Las islas italianas del Mediterráneo están acusando especialmente las consecuencias de la turistificación, pero también de una crisis hídrica sin precedentes provocada por el cambio climático. Es el caso de las islas Eolias, en el norte de Sicilia.