Antigitanismo
La Justicia desprotege a las niñas gitanas de la violencia sexual con sentencias basadas en sus prejuicios

Feministas gitanas denuncian con la campaña #LasNiñasGitanasNiñasSon el aumento de sentencias fundamentadas en estereotipos sobre la cultura gitana usando una supuesta “sexualidad precoz” de las menores para rebajar las condenas a sus agresores.
Cortejo kalí en el 8 de marzo
Un grupo de mujeres gitanas se manifiesta en el 8m de 2018. Foto cedida por Paqui Perona.
31 jul 2024 11:18

El pasado mayo la Audiencia Provincial de León hacía pública una sentencia sobre un caso de violencia sexual: el agresor tenía 20 años, y la víctima 12. El tribunal consideraba que el hecho de que ambos fueran gitanos era un atenuante a la hora de establecer la condena del acusado: “Las relaciones antedichas fueron consentidas por Maite, ya que, según las costumbres gitanas, las niñas se casan a partir de los 12 años y un año antes había empezado a tener relaciones sexuales completas, sabiendo que se podía quedar embarazada y conociendo la repercusión directa de los actos de naturaleza sexual”, se lee en la sentencia.

Así, el juez aducía a la cultura gitana para justificar una rebaja en la pena de 21 años, ante el abuso sexual de una niña desde los once años. Una sentencia, que según la activista María Hernández, ex concejal del Ayuntamiento de León, “no había por dónde cogerla”. Al texto Hernández llegó después de conocer el caso en los medios de comunicación. Ella es una de las cuatro feministas gitanas que han puesto en marcha la campaña #lasNiñasGitanasNiñasSon, tras hacer un trabajo de recopilación de sentencias similares en las que han encontrado una constante, considerar la “cultura gitana”, como un atenuante cuando los abusos sexuales se dan contra niñas gitanas, incluso en casos donde el agresor es payo, una tendencia que las dejó indignadas pero también sorprendidas “ni siquiera nosotras que estamos pendientes de lo que pasa dentro de nuestra comunidad, nos habíamos enterado de esto”, explica Hernández.

“El razonamiento jurídico de la sentencia [de León] para aplicar estas atenuantes y eximentes es erróneo porque se basa en un hecho falso: la normalidad de este tipo de matrimonios extremadamente tempranos en la cultura gitana no es un valor al alza ni una característica de la cultura, sino la resulta deplorable de la marginalidad, de la exclusión social y vulnerabilidad económica que se da en sectores concretos, no es genérico al Pueblo Gitano en España”, se explica en un documento elaborado para la campaña, en la que se invita a particulares y colectivos a sumarse con su firma para denunciar lo que consideran una deriva antigitana de la justicia. Y es que, apuntan, el uso del atenuante —el art. 183 bis del Código Penal excluye la responsabilidad penal por delitos sexuales cuando el autor sea una persona próxima al menor por edad y grado de desarrollo o madurez física y psicológica— se usó sin practicar  “ninguna prueba pericial psicológica o de madurez a la víctima y al agresor como exigiría el rigor jurídico. El hecho mismo de que ambas personas pertenezcan a la cultura gitana y la supuesta ‘sexualidad precoz’ de la menor son suficiente para aplicar la atenuante”.

La sentencia de León, junto a las otras localizadas, aparece reseñada en este escrito, con el que se proponen “manifestar nuestra mayor repulsa a las decisiones judiciales arbitrarias, contrarias a derecho y destructoras del principio de igualdad real y efectiva que consagra nuestra Constitución, sobre las menores gitanas cuando son víctimas de abusos sexuales y de violencia de género”. En su texto las activistas incluyen los documentos remitidos al Consejo del Poder Judicial, y al Defensor del Pueblo, denunciando el carácter discriminatorio de las sentencias. Fue la reacción del primer órgano, de hecho, el que dio a estas feministas gitanas el impulso a movilizarse  interpelando a la opinión pública. Su campaña comienza en los días en los que se conmemora la Gran Redada, acaecida el 30 de julio de 1749.

Historia
Antigitanismo La Gran Redada de 1749: imaginando las identidades nacionales
La Prisión General de gitanos fue un intento sistemático de erradicar una forma de vida que desafiaba la visión ideal de una España que se había imaginado a sí misma moderna y homogénea culturalmente, absolutamente blanca; y únicamente paya.

Así lo recuerda Celia Montoya, otra de las activistas implicadas: “La sorpresa nos llegó por la prontísima respuesta negativa del Consejo Del Poder Judicial que dice literalmente que no tiene competencia para intervenir en aquellas reclamaciones basadas en discrepancias o desacuerdos con lo decidido por Jueces y Magistrados en el desarrollo de sus funciones jurisdiccionales o por los Letrados de la Administración de Justicia en sus resoluciones procesales, cuando precisamente le corresponde al Consejo General del Poder Judicial la función de Inspección de Juzgados y Tribunales”, explica esta activista de amplia trayectoria.

Se da el hecho, además, de que el Consejo del Poder Judicial, apunta, se encuentra en la calle madrileña Marqués de la Ensenada “el genocida del Pueblo Gitano Español, ideólogo en el año 1749 de la  Prisión general de gitanos, Gran Redada, Baró Istardipe en rromani, en la que pretendían, ‘la solución final’ para el Pueblo Gitano”, en estas fechas, apunta “queremos dar luz y memoria a esas personas  antepasadas, que resistieron y sobrevivieron porque gracias a ellas hoy nosotras respiramos  y está es nuestra forma de seguir sus huellas y no dejar que nada, ni nadie pise a nuestras niñas”, expresa Montoya.

Para Sandra Heredia, activista feminista y excandidata a la alcaldía de Sevilla por Adelante Andalucía, ha sido fundamental la alianza entre mujeres feministas gitanas para sacar adelante esta iniciativa: “nos conocemos desde hace muchísimos años. Nos hemos encontrado en diferentes momentos de la vida”, explica esta referente, quien considera que cada una de sus trayectorias complementa a la de las demás: “al final son estas alianzas las que nos permiten apoyarnos las unas a las otras y romper también con el diseño de políticas asistencialistas que incluso nos han marcado cómo, cuándo y dónde las mujeres gitanas nos tenemos que organizar”, es con estas redes de mujeres como consiguen “liderar estos cambios y estas denuncias”. 

Racismo frente a interés superior de la menor

En esta alianza, la abogada Séfora Vargas ha sido clave. Recuerda con firmeza que la edad de consentimiento está en los 16 años para todas las personas, más habiendo una diferencia grande de edad.  Vargas, que se ha encargado de dar soporte jurídico a la campaña, considera aberrantes las sentencias que ignoran este principio básico aludiendo a razones culturales. Se trata, considera, de una “falta de coherencia respecto a la Constitución y el ordenamiento jurídico”. Para esta jurista, las sentencias suponen “una actuación completamente discriminatoria que se sale del contexto democrático porque no encaja en los principios generales del Derecho. Y luego después utiliza esa supuesta atenuante de la cultura gitana, que no es ni más ni menos que una realidad distorsionada”, un imaginario racista que se impone a lo que debería prevalecer en todo caso, explica: “el interés superior del menor”. 

Las activistas consideran que lo que hacen las sentencias es confundir las consecuencias de la exclusión social y la marginalidad, resultado de siglos de estigma y persecución con rasgos identitarios o culturales, una confusión que deja desamparadas a estas niñas. Vargas además destaca la contradicción  de que se hable de una hipotética cultura gitana —“nuestras normas no están escritas, nadie puede decir que eso es una norma dentro de la cultura gitana”— como atenuante de la violencia sexual, al tiempo que se desconocen los matrimonios por el rito gitano, con las consecuencias que esto tiene en la vida de las personas. “Recuerdo el caso de una prima que se quedó viuda y que tuvo que llegar a Estrasburgo para que reconocieran su pensión de viudedad, porque el estado no reconocía el matrimonio gitano”, apunta en este sentido Hernández.

Para Sandra, las sentencias se entienden en un marco interseccional: “en este caso está más que patente la doble opresión y yo diría más que la doble, la múltiple opresión a la que se enfrentan las mujeres gitanas. Son múltiples factores que nos marcan y que se nos cruzan por el racismo institucional que sufrimos históricamente y estamos viendo en la actualidad”. Múltiples opresiones que, temen, se ceben, con las personas más vulnerables, las niñas: “Tenemos que defender a nuestras infancias y somos muchas las personas , no sólo mujeres gitanas, que sabemos que nos corresponde esa responsabilidad”, explica Montoya.

Pueblo gitano
Pueblo gitano ¿Caben los sueños de las niñas gitanas en los centros educativos?
Entidades gitanas apuestan por abordar el abandono escolar temprano a través de la escucha de las necesidades y metas de adolescentes y jóvenes en contextos marcados por la segregación.

Desde León, Hernández agradece a las feministas de allá que la contactaran cuando surgió la sentencia y hayan respetado los procesos y tiempos de las feministas gitanas. “Nosotros no permitimos que pase eso con los niños y con las niñas”, apunta, y es que las activistas recuerdan que el matrimonio precoz es una práctica que va cayendo en desuso, y cuya erradicación está en la agenda de las feministas gitanas. La activista recuerda un caso reciente en su entorno con una pareja de 18 y 17 años que formalizaban su noviazgo, y a quienes se les puso como condición acabar los estudios antes de casarse. Lamenta la estereotipación de su pueblo: “Es un desconocimiento total de lo que es la cultura gitana, que me resulta doloroso, teniendo en cuenta que el año que viene van a ser 600 años que llevamos en la Península Ibérica”. Recuerda leer recientemente en el Libro del Buen Amor, un pasaje en el que se hablaba de la llegada de “hordas de gitanos” a León, y de que debían estar “endemoniados porque hablaban cuatro idiomas y que eso no era posible”, siglos después, aún cuando hay fácil acceso a la información si se busca, y tantas y tantos activistas gitanos combaten las narrativas deshumanizantes, la ignorancia continúa, explica.

Para Hernández lo que hacen estas sentencias es gritar a las niñas gitanas que “no somos dignas de justicia, no somos dignos de reparación, no somos dignas de tener los mismos derechos que tiene el resto de niñas en este país”. Y cierra con una canción que ha estado escuchando en las últimas semanas: se llama Romper la maldición y es del grupo gitano estadounidense Gogol Bordello, “sabemos todo de vosotros, no sabéis nada de nosotros”; corea el solista, glosando la deshumanización sufrida por los Rroma del mundo a lo largo de la historia. Una deshumanización contra la que se alza la campaña: #LasNiñasGitanasNiñasSon.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Opinión
Opinión “¿Cómo se va usted con Errejón a su casa?”
El duro interrogatorio del juez Adolfo Carretero hacia Elisa Mouliaá, quien denuncia haber sido agredida sexualmente por Íñigo Errejón, demuestra que los avances del feminismo se siguen estrellando contra el bloqueo de las togas.
Violencia sexual
Violencia sexual Mouliáa no descarta durante el juicio por agresión sexual que Errejón le echara alguna sustancia en la copa
Este jueves se ha celebrado la vista tras la denuncia en la que se acusa al ex diputado de Sumar, Íñigo Errejón, de un delito de violencia sexual contra la actriz Elisa Mouliáa.
Paco Caro
31/7/2024 15:31

Racismo, machismo y banalización de la pederastia.

2
0
Paco Caro
31/7/2024 15:20

Vamos a ver. Las niñas de 12 años no se casan en España. Ni los ayuntamientos, ni los juzgados, ni las parroquias pueden hacerlo. Suponiendo que exista un rito gitano al margen de la ley (del que no tengo noticias), no tiene valor. Es abuso sexual y violación de una menor. Estas sentencias argumentan lo mismo que los pederastas: que los menores "consienten". Es falso. El menor de edad no tiene "consentimiento". El mayor de edad qeu se acuesta con un menor, es un criminal.

2
0
Laboral
Laboral Investigada unha rede empresarial que explotaba a 82 migrantes nunha granxa de Lugo
Polo de agora, tres persoas responsables da granxa de Begonte centran as investigacións da Garda Civil. As 82 persoas explotadas vivían nun hotel de Ordes (A Coruña) que non tiña sequera licencia de hostalaría.
Salario mínimo
Pacto bipartito Trabajo y sindicatos acuerdan la subida del salario mínimo en 50 euros sin el apoyo de la patronal
Díaz anuncia un acuerdo con los sindicatos que llevará al Congreso de Ministros de forma “inminente” la propuesta del Ministerio de Trabajo. Los sindicatos proponían una subida de 66 euros y la patronal, de 34 euros.
Madrid
Justicia El fiscal general del Estado, en el alambre, declara como investigado ante el Supremo
Álvaro García Ortiz acude al alto tribunal a explicar su versión de las filtraciones denunciadas por el entorno de la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Es la primera vez que un fiscal de su categoría declara como investigado.
Dana
Tres meses de la dana “Aquí no llovió casi nada”
VV.AA.
Un vecino de Benetússer explica cómo la riada arrasó y cambió para siempre las vidas de miles de personas.
Opinión
Opinión Monetizadores de la estupidez
Ser un chalado anticiencia puede llevar a pasearte por radios, televisiones y streamings porque eres rentable para gente sin un mínimo de ética periodística.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición Sánchez resucita el decreto ómnibus con más ayudas a los propietarios
El Gobierno anuncia un acuerdo con Junts para reflotar el decreto que permite revalorizar las pensiones con nuevos avales estatales para caseros. El presidente se compromete a convocar una moción de confianza.

Últimas

Crímenes del franquismo
Víctimas de la dictadura Admitida a trámite otra querella por los crímenes del franquismo en Madrid
Carlos Serrano Suarez denuncia que fue sometido a torturas por parte de cinco policías de la Brigada Político Social. El juzgado número 41 ha decidido abrir el caso, algo que desde CEAQUA califican como “excepcional”.
Galicia
Galicia La Xunta maniobra para ampliar la balsa de lodos rojos de Alcoa pese a los riesgos medioambientales
La conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, garantizó al comité de empresa de la planta de Alcoa en San Cibrao, situada en Cervo (Lugo), que ampliará su capacidad a pesar del riesgo medioambiental.
Madres protectoras
Justicia Colectivos feministas piden medidas para asegurar un juicio justo a una madre protectora acusada de secuestro
Las organizaciones piden que se tome en consideración la denuncia por abusos sexuales contra el progenitor, los intentos de la mujer por buscar medidas de protección en España y el arrancamiento de su hija.
Más noticias
Música
Música Apoteòsic Muguruza
Barcelona, Palau Sant Jordi. 24 de enero de 2025.
Militarismo
Militarismo Reloj, no marques las horas que quedan hasta el apocalipsis (marca los segundos)
El Boletín de los científicos atómicos lanza su anual advertencia sobre la proximidad del fin del mundo. Se trata un instituto fundado en 1945 por Albert Einstein, J. Robert Oppenheimer y los científicos del Proyecto Manhattan.
Opinión
Opinión Un monstruo camina sobre suelo urbanizable
El cojín socioeconómico y cultural que sostiene los sucesivos desfalcos del PP valenciano solo se entiende desglosando un ecosistema alimentado por la catalanofobia y las fiestas con toros.

Recomendadas

Medio rural
Reportaxe As mulleres rurais soñan con deixar de ser heroínas
A falta de servizos básicos no rural é a primeira pedra no camiño de quen quere vivir e desenvolver os seus proxectos fóra da cidade. Aínda así, o rural galego atópase á cabeza en canto a titularidade feminina respecto á media do Estado español.
Literatura
Letras Galegas Da Sección Feminina do franquismo ao Cancioneiro Popular Galego: o pobo é quen canta e baila
As cantareiras protagonizarán o Día das Letras Galegas de 2025. Beatriz Busto e Richi Casás fálannos delas, de Dorothé Schubarth, do Cancioneiro Popular Galego e da dificultade de acceder aos arquivos sonoros que conservan as súas voces.
Jaén
Andalucía Lopera no quiere que Greenalia especule con sus olivos
Decenas de pequeños olivareros de la Campiña Norte de Jaén podrían perder sus terrenos en beneficio de una empresa que quiere talar los árboles para instalar siete parques fotovoltaicos.