Antigitanismo
La memoria histórica del pueblo gitano sigue sumando incendios

El 2 de agosto, día en memoria de las víctimas del holocausto del pueblo gitano, llega en tiempos en los que el antigitanismo permea el debate público tras los hechos de Peal de Becerro.
Antigitanismo Jaen Peal de Becerro
Incidentes en Peal de Becerro, Jaén, en los que se quemó una casa y se volcaron coches tras una manifestación en protesta por la muerte de un vigilante de seguridad en un pub.
2 ago 2022 13:45

El 2 de agosto de 1944, a un año de que finalizara la Segunda Guerra Mundial, más de 4.000 personas gitanas fueron aniquiladas en un solo día en las cámaras de gas del campo de concentración de Auschwitz-Birkenau. La matanza forma parte de la memoria del Holocausto gitano, conocido como Porrajmos o Samudaripen y en el que se estima que perdieron la vida entre medio millón y un millón y medio de personas. La barbarie antigitana del nazismo alemán se inserta en un continuo histórico de odio y persecución contra el pueblo romaní que, en diversas intensidades, atraviesa la historia de Europa. Solo dos días antes, el 30 de julio, se conmemoraba en España la Gran Redada, también conocida como Prisión General, un episodio de persecución generalizada acaecido en 1749, que acabó con el encarcelamiento, muerte o esclavización de miles de personas.

Pueblo gitano
Persecución de gitanos en Brasil La caza de gitanos en Bahia y la memoria del genocidio gitano
Antigitanismo estructural, impunidad policial y un Jair Bolsonaro que cada vez esconde menos sus simpatías nazis son los factores detrás de la caza al gitano que ha sufrido el pueblo romaní en las últimas semanas en el Estado de Bahia.

La mirada retrospectiva a la memoria histórica del pueblo romaní ha estado viva en estos últimos días después de que el antigitanismo volviera a sacudir la opinión pública, tras el asesinato de un joven guardia de seguridad el pasado 17 de julio en Peal de Becerro, en Jaén, cuando parte de los vecinos del pueblo decidieran tomar represalias contra la población gitana del municipio, tras señalarse que los cuatro sospechosos detenidos eran gitanos.

Tras una manifestación en repulsa del asesinato fueron quemadas algunas casas en el pueblo, mientras se vandalizaron coches y aparecieron pintadas invitando a la expulsión de los y las vecinas gitanas. La ecuación que expande la responsabilidad de actos individuales a todo un colectivo por su etnia o procedencia no tiene nada de nuevo, se llama racismo. El antigitanismo, el racismo específico hacia el pueblo gitano tiene profundas raíces históricas pero también, como demuestran hechos como los denunciados en Peal de Berro, arraigo en la actualidad. 

Pueblo gitano
Agüero y Jiménez “Queremos que la población gitana que nos lea sepa de dónde venimos, que no somos lo que nos han contado”
Entre la crítica al antigitanismo contemporáneo y la recuperación de la historia del pueblo gitano, Agüero y Jiménez mapean la opresión contra las personas romaníes

Tomamos una noticia de un diario online de tirada nacional publicada el mismo 17 de julio. En su edición local reporta lo sucedido en el pueblo de Jaén. Los comentarios en respuesta a la noticia están en su mayoría llenos de presunciones racistas: mientras algunos especulan que los culpables son migrantes, otros ya apuntan a las personas gitanas —para quienes algunos usan el peyorativo término etniano cada vez más extendido en el discurso online antigitano— e  insinúan que merecen un castigo colectivo. Los mismos comentarios se pueden encontrar durante esos días en las redes sociales, especialmente contra quienes denunciaban el antigitanismo de los actos vandálicos perpetrados en el pueblo.

“He visto una lista de las casas de gitanos que han quemado en Jaén, con nombres de los habitantes y calle y número donde vivían. Es una pesadilla”, lamentaba en twitter la activista Noelia Cortés, autora de un artículo en Kamchatka, donde tiraba de los hilos de la memoria que unían los hechos de Peal de Berro a otros episodios de violencia antigitana, como el que provocó la expulsión de 36 familias gitanas del también jienense pueblo de Martos en 1986.



“¿Podemos los gitanos esperar una condena colectiva a lo que está sucediendo en Peal de Becerro estos días, si jamás la ha habido? En las casas asaltadas aparecen pintadas que dicen “GITANOS FUERA, GITANOS MUERTE”. Vecinos del pueblo lamentan en sus redes que los gitanos no estuvieran dentro al arder las casas, mientras niegan que nada de esto haya ocurrido aunque lean testimonios y vean fotografías”, denuncia Cortés en su artículo.

Las respuestas al tweet de Cortés y a otros denunciando antigitanismo en las redes, como el de Jose Antonio Jiménez, presidente de la Federación de asociaciones gitanas de la Rioja en el que se pregunta: “Nuevo pogromo, nuevo ataque racista contra los gitanos en un pueblo de Jaén, ¿qué está pasando?”, ponen en relieve todo un imaginario sobre el pueblo gitano, que acaba por justificar la represalia colectiva como algo legítimo para castigar un pueblo descrito como una amalgama que debe “pagar”, con la que no se puede convivir, o que hace falta “civilizar”.

“Delitos de odio”, así califica lo sucedido Fakali, la Federación de asociaciones de mujeres gitanas, que ya el 19 de julio interpuso una denuncia a la fiscalía provincial especializada en este tipo de delitos de Jaén. La organización, tras lamentar la muerte del joven guardia de seguridad, interpelaba a este órgano para que “inicie las investigaciones pertinentes para dirimir posibles responsabilidades penales que pudieran derivarse del accionar de un grupo minoritario de vecinos que (...) procedió presuntamente a atacar las propiedades de familias gitanas del pueblo, hecho que nos recuerdan acciones violentas del pasado que merecen nuestro más absoluto y contundente rechazo”.

Resonancias pasadas y presentes

La violencia antigitana, la invisibilización y la impunidad —“¿qué? ¿Ya han detenido a todos los payos racistas antigitanos que han participado en los destrozos de las propiedades de las familias gitanas de Peal del Becerro?”, denunciaba en un tweet el historiador y activista gitano Nicolas Jiménez— suponen una combinación que alimenta y perpetúa una historia con afán de repetición. Desde el Porrajmos, del que se tardaron décadas en hablar tras la Segunda Guerra Mundial, a la Gran Redada, cuyo principal artífice, el Marqués de la Ensenada, tiene monumentos y calles en su nombre en todo el territorio español, el silencio y la impunidad como antesala del olvido y la no reparación, marcan la memoria de un pueblo históricamente perseguido.

Pueblo gitano
Día de la resistencia romaní La realidad que se nos impone
Los Rromanies que con palos y piedras supieron frenar a las SS con fiereza en Auschwitz-Birkenau nos recuerdan que el racismo mata, que el antigitanismo mata. Como ocurrió con nuestro primo Eleazar García.

Y es que no es necesario remontarse al siglo XVII, o a la Segunda Guerra Mundial para seguir los hilos del antigitanismo. Tampoco indagar en fenómenos como el pogromo del verano pasado en Brasil o en los diversos asesinatos de personas gitanas acaecidos en el resto de Europa en los últimos tiempos. El antigitanismo ha dejado su sello en la impunidad judicial y el maltrato mediático, con los que se encontraron las muertes de Eleazar García, Daniel Jiménez o Manuel Fernández. A estas muertes se suman los casos de represión colectiva que registraba en redes sociales Helios F. Garcés, quien pone en cuestión el discurso de la convivencia en Andalucía —convivencia a la que aludía el alcalde de Peal de Becerro tras un comunidado posterior a la concentración que derivara en vandalismo antigitano— haciendo un recuento de diversos episodios de antigitanismo en esta comunidad autónoma: Torredonjimeno, 1984, Martos, 1986, Mancha Real, 1991, Castellar, 2008 y 2014, son algunos de los episodios que el autor desarrolla en su hilo, basado en su investigación sobre violencia étnica y destierro.

Muchas cosas han cambiado en los últimos años, la emergencia en el debate público de múltiples referentes del activismo gitano, la incorporación de una mirada decolonial al debate de la mano de colectivos como Kale Amenge, la alianza con un pujante movimiento antirracista, los esfuerzos de activistas gitanos que han entrado en las instituciones y vienen trabajando con el fin de conseguir un Pacto de Estado sobre Antigitanismo, habiendo logrado la inclusión del antigitanismo en el Código Penal dibujan un panorama de resistencia. Sin embargo, los avances legislativos, la posibilidad de escuchar cada vez más voces gitanas y las alianzas, deben confrontar una sociedad donde el racismo antigitano cala hondo en el sentido común y circula sin cortapisas en las redes sociales alentado por el tratamiento de los medios de comunicación.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Racismo
Racismo Gitanas a Escena: “Nuestra Lisístrata Montoya lucha contra el racismo”
Coco Reyes (directora y actriz) y Susana Muñoz (actriz) invitan a acudir al Teatro Bellas Artes de Madrid a ver su apropiación del mito feminista de la Grecia clásica escenificado por ocho mujeres gitanas.
Sevilla
Pueblo Gitano El Pueblo Gitano exige igualdad: una jornada en Sevilla para romper silencios y repensar discursos
La Fragua Projects impulsa un acto participativo con enfoque antidiscriminatorio para visibilizar la violencia estructural que atraviesa al Pueblo Gitano, con especial atención a las mujeres.
Pueblo gitano
Pueblo gitano A propósito del Año del Pueblo Gitano y los 600 años de negación del otro
El 8 de abril se celebra, como cada año, el Día Internacional del Pueblo Gitano. Pero no es este 2025 un 8 de abril como otro cualquiera, al menos, no en España.
Antonino
16/8/2022 21:26

Queridísima Sara:
Por favor, publiquen el anterior comentario envié ayer. Gracias

0
0
autodesplanifica
3/8/2022 15:21

1749 -> Siglo XVIII. Gracias por el artículo y la perspectiva crítica en un tema de racismo tan horrible.

0
0
LIBERTAD, VERDAD, DEMOCRACIA
2/8/2022 14:36

Es obvio que aquí en ESPAÑISTÁN existe racismo, clasismo, aporofobia, supremacismo, demofobia, autoritarismo, Estatalismo-Filofascismo, heterofobia (odio al otro, odio a la otredad), patriarcalismo, machismo y, obviamente también, XENOFOBIA EN CANTIDADES INDUSTRIALES.

No hablemos ya también de la CATALANOFOBIA EN CANTIDADES HITLERIANAS-INDUSTRIALES QUE EL RÉGIMEN HA INSTIGADO, BLANQUEADO Y HASTA PREMIADO.

Esta basura de RÉGIMEN DE PODER OLIGÁRQUICO-PARTITOCRÁTICO-ANTIDEMOCRACIA-USURPADOR-CORRUPTO-CORRUPTOR-MERCENARIO-SICARIO-PARAFASCISTA-ESTATALISTA-NEOLIBERAL-CORTIJERO-ANTINACIÓN·POLÍTICA-ANTISOCIEDAD·CIVIL-DEMOFÓBICO-LIBERTICIDA- ALIENADOR-GREGARIZADOR-CULTURICIDA-CLASISTA-EMPARANOIADOR-IDIOTIZADOR-IMBECILIZADOR-ETC.-ETC. también se dedica a ir llenando a la plebe --(((podríamos decir que la plebe es la parte menos cultivada democráticamente de la sociedad, la parte más dada a "soluciones" oligofrénicas, brutales y/o simplonas y/o mostrencas, etc., etc.)))-- de un odio sordo u estridente, según, pero siempre un odio bestial y hasta criminal que se ve imbuido de "justiciero" contra algo o alguien --(((generalmente contra ese algo o alguien que los MASS-MEDIA tipo NO-DO les ha señalado previamente hasta la saciedad, señalamiento que se hace incluso de manera poco disimulada, más bien burda y fascista o estalinista o franquista, lo mismo da)))--. Esta plebe tiene ansias de linchar a quien sea con tal de colmar o satisfacer sus miserias de todo tipo, como un calmante que debe tomar-ejercer de tanto en tanto.

En fin, así EL VIGENTE RÉGIMEN DE PODER OLIGÁRQUICO-ETC.-ETC.-ETC. intenta borrar y/u ocultar sus megacrímenes económicos, políticos, etc., etc.

0
0
Feminismos
Feminismo Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Medio ambiente
Medio ambiente Iberdrola proxecta un parque eólico que pon en risco un dos maiores xacementos fortificados de Galiza
A Xunta vén de declarar a utilidade pública para o parque eólico Castro Valente, a pesar de que a súa construción está suspendida cautelarmente polo Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
O Salto medra contigo
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.
Filosofía
Brais Arribas, filósofo “Non se trata de empoderar senón de disolver o poder”
Durante a conversa, o profesor reflexiona sobre a saúde da filosofía galega, o poshumanismo, as novas masculinidades ou a experiencia da pandemia.

Últimas

Alemania
Litigio climático Un tribunal alemán abre la puerta a que grandes emisores puedan ser responsabilizados de daños climáticos
El jurado descarta la demanda del agricultor peruano Saúl Luciano Lliuya por entender que el riesgo a su propiedad es demasiado bajo, pero esta misma argumentación podría llevar a condenas en otros casos.

Recomendadas

LGTBIAQ+
LGTBIAQ+ Unha casualidade, unha resposta masiva e un debate incómodo: a sentenza de Samuel Luiz en contexto
O 22 de maio, o TSXG ratificaba o veredicto do xurado popular e recoñecía que o asasinato de Samuel Luiz foi un crime motivado por LGTBIfobia. O caso supuxo unha mobilización sen precedentes.
Culturas
Erika Lust y Sara Torres “El deseo tiene una potencia inagotable para transformar la realidad si lo liberamos de las normas”
Sexo, deseo o ética del placer son algunos de los temas que hilan la escritora Sara Torres y la productora de cine porno Erika Lust en ‘La abundancia del deseo’.
Xunta de Galicia
Política A Xunta recibe ao embaixador de Israel en funcións mentres Gaza agoniza ao bordo da fame
O Goberno de Alfonso Rueda escenifica a súa boa sintonía coa Administración de Benjamín Netanyahu apenas unhas horas despois de que Israel bombardease unha escola que servía de refuxio e ordenase unha evacuación masiva en Gaza.