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Coronavirus
Expertos de la OMS no ven necesaria una tercera dosis de vacuna
“Los suministros actuales de vacunas podrían salvar más vidas si se usan en poblaciones no vacunadas previamente que si se utiliza como refuerzos en poblaciones vacunadas”. Esta es una de las conclusiones a las que ha llegado un nuevo estudio, publicado el pasado lunes en la revista Lancet, elaborado por expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de la agencia estadounidense del medicamento, la FDA, que afirma que la evidencia actual no parece mostrar la necesidad de impulsar una tercera dosis en la población general, “en la que la eficacia contra la enfermedad grave sigue siendo alta”.
Según este estudio, la vacuna contra el covid-19, aún descendiendo su efectividad, continua siendo útil contra la enfermedad grave, incluyendo la ocasionada por la variante delta. Para estos expertos, la tercera dosis sí puede ser apropiada para algunos individuos en los que la pauta completa administrada no haya inducido una protección adecuada, como, por ejemplo, las personas inmunodeprimidas. Pero no está claro si estas personas “se beneficiarían más de una dosis adicional de la misma vacuna o de una vacuna diferente que podría complementar la respuesta inmune primaria.”
Tras la presión de Pfizer y Moderna para vender terceras dosis entre los países de occidente, las agencias supervisoras no han encontrado hasta ahora una evidencia clara de la necesidad de administrarla entre el total de la población. Tanto la Agencia Europea del Medicamento (EMA) como el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), por el momento, solo se han posicionado a favor de esta para el colectivo de personas inmunodeprimidas.
Para justificar un posicionamiento claro al respecto, el pasado 9 de septiembre la EMA anunciaba que comenzaba a evaluar de forma acelerada si es efectivo inyectar una tercera dosis después de 6 meses de la segunda para personas sanas mayores de 16 años, después de que Pfizer presentase los datos que ha obtenido en su ensayo clínico en curso en el que 300 adultos sanos han recibido esta pauta.
“La evidencia no muestra la necesidad de un uso generalizado de refuerzo de la vacunación en poblaciones que han recibido una régimen de vacunación primaria eficaz”
“La evidencia no muestra la necesidad de un uso generalizado de refuerzo de la vacunación en poblaciones que han recibido una régimen de vacunación primaria eficaz”, concluye la investigación recientemente publicada, en la que se recuerda que la OMS pidió una moratoria en la administración de terceras dosis de manera generalizada, hasta que el 10% de la población este vacunada.
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Para este organismo es prioritario solucionar la inequidad en el acceso a la vacuna antes de comenzar con dosis de refuerzo en occidente. Según los datos de Our World in Data, mientras en países como España, Portugal, Dinamarca o Canadá ya hay más de un 70% de la población vacunada con la pauta completa, en otros como Tanzania, Nigeria o Etiopía apenas se alcanza el 1%.
“Cada tercera dosis en el brazo de una persona de un país rico es una dosis que no se pone a una persona sin vacunar de países pobres”.
“El factor más importante que está impulsando a los países ricos a comprar terceras dosis para sus poblaciones, es el comercial”, asegura a El Salto Fernando Lamata, experto en Salud Pública y Políticas de Salud, quien insiste que una tercera dosis tendría un efecto “criminal” y habla de “miles de muertes evitables” en los países que no están teniendo acceso a la vacuna.
“Si hubiera vacunas de sobra, a precios justos, no habría problema con poner una tercera o cuarta dosis, en caso de que se demostrara que es necesaria. Pero no es así. Cuando algún político dice que no hay dilema entre la tercera dosis y la vacunación de los países de rentas bajas, miente. Porque, por culpa de los monopolios, no se están fabricando vacunas suficientes”, añade Lamata. “Cada tercera dosis en el brazo de una persona de un país rico es una dosis que no se pone a una persona sin vacunar de países pobres”, concluye.