Corrupción
Alfredo de Miguel era la punta del iceberg: así controla el PNV el organigrama de la fundación Hazi

Hazi se define como una entidad instrumental del Gobierno Vasco cuya “función es coordinar y catalizar proyectos estratégicos para impulsar la competitividad y la sostenibilidad de la cadena de valor alimentaria y forestal, así como dinamizar el medio rural y litoral de Euskadi”. En esta entidad pública hay alrededor de 192 empleados. De ellos, 86 cuentan con más de 20 años de antigüedad y 28, se engloban como trabajadores en la “categoría A”, cobrando más de 62.000 euros de salario bruto anual. Hasta el 16 de marzo, una persona condena en firme por haber cometido media docena de delitos relacionados con la corrupción, Alfredo de Miguel, era uno de ellos.
Pendiente de una orden de entrada en prisión, el Gobierno Vasco desoyó un informe que avalaba su despido cuando fue condenado en 2019 por la Audiencia Provincial de Araba, sentencia ratificada por el Tribunal Supremo este enero de 2023. Pero el exteniente de Diputado General de Araba no ha estado solo en Hazi. El paraguas laboral del PNV abierto en esta entidad para De Miguel, detenido en 2010 por integrar una trama de comisiones ilegales junto a exaltos cargos del oasis vasco, también ha servido para colocar en Hazi a otros conocidos del partido. Hordago-El Salto ha localizado en el organigrama de Hazi a exburukides, altos cargos públicos, candidatos de las listas electorales del PNV y familiares de destacadas personalidades del Partido.
La punta del iceberg
Alfredo De Miguel es la punta del iceberg de los jeltzales colocados en Hazi. El propio director general de la Fundación, Peli Manterola, integró la candidatura para la alcaldía de Dima que lideraba Josune Gorospe en 2011, diputada por el PNV en el Congreso desde 2019, miembro del Bizkai Buru Batzar (BBB) entre 2016 y 2019, que además está casada con un exalto cargo del Gobierno Vasco condenado por el “caso De Miguel”.
Por su parte, Asier Arrese, exdirector general de Hazi y primo del Diputado General de Gipuzkoa Markel Olano, es ahora director de Territorio en Hazi tras cesar como director de Patrimonio Natural y Cambio Climático en el Gobierno Vasco. Arrese, exmiembro de la lista electoral del PNV en Beasain, dirigía la Fundación Naturgintza cuando esta entidad fichó como gerente a uno de los condenados por el “caso De Miguel”. El salario bruto anual de Arrese en su anterior etapa como director general de Hazi ascendía a 77.263 euros más 7.119 en concepto de antigüedad.
En la reciente rueda de prensa de ESK, el sindicato ha denunciado que la política de promoción en Hazi poco tiene que ver con la valía profesional y mucho con el lugar que se ocupe en el partido.
De un lado, Iñaki Gerenabarrena, presidente del Araba Buru Batzar (ABB) cuando Alfredo de Miguel era burukide alavés, es responsable del área forestal de Hazi. De otro, Bittor Oroz, Viceconsejero de Agricultura y Desarrollo Rural del Gobierno Vasco desde 2012, exalcalde del PNV en Ataun y exmiembro del consejo asesor de Naturgintza, compaginó en 2012 su cargo de coordinador del área de proyectos y servicios de apoyo en Hazi con su actividad como miembro del Gipuzku Buru Batzar (GBB). Por último cabe mencionar a Xabier Arruti, director general de Agricultura y Equilibrio Territorial en la Diputación de Gipuzkoa desde 2015, que compaginó entre 2011 y 2015 su cargo de técnico de Desarrollo Rural en Hazi con su actividad como miembro de la ejecutiva orgánica del PNV de Gipuzkoa.
Hazi es un ejemplo de las redes clientelares tejidas por el PNV en torno a la Administración y las sociedades públicas, un sistema clientelar que premia lealtades políticas. Es el caso de Lander Arregi, edil del partido en Bergara con responsabilidades en el área de Formación Agroalimentaria de Hazi, y fundador de la entidad Denokinn, parte del entramado empresarial que rodeó a los fiascos de Epsilon y Hiriko, por cuya quiebra fue condenado el exedil del PNV en Gasteiz Iñigo Antia.
Cortijo familiar
No iba desencaminado el sindicato LAB cuando denunció en 2012 que el nacimiento de Hazi se urdió en el marco de la gestión con dinero público de cortijos familiares. Un ejemplo de ello es Ángel Rocha, director de Comunicación en Hazi y primo del exburukide del Gipuzku Buru Batzar Juan Mari Juaristi.
Entre otros familiares de personalidades del PNV colocados en Hazi figura Begoña Isasi, responsable de la Secretaría Técnica en la entidad y prima del exdiputado del PNV Iñaki Txueka, en su momento asociado al grupo constructor Amenabar.
Además, Txus Gómez, gerente de un organismo que opera con Hazi, ADR Enkarterrialde, es cuñado del Vicelehendakari Josu Erkoreka.
En esta gestión más propia de un batzoki que de una entidad pública, algunos miembros de candidaturas electorales del PNV también ostentan responsabilidades en Hazi. Es el caso de Juanan Gutiérrez, responsable de Prospectiva y Redes en Hazi que integró la lista del PNV por Aretxabaleta en 2007, y el de José Antonio Merino, representante sectorial en Hazi que fue candidato del PNV a las Juntas Generales de Araba en 2019 y al Ayuntamiento de Gasteiz en 2015. No son casos aislados, la coordinadora de proyectos estratégicos en Hazi, Anuska Ezkurra, exresponsable de Comunicación de la Viceconsejería de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno Vasco, es a su vez concejal del PNV en Arrasate.
Giratorias de ida y vuelta
El PNV vota reiteradamente en contra de crear una oficina anti-corrupción y tumba iniciativas para incrementar los controles en torno a las puertas giratorias. Mientras, Alfredo de Miguel ocupaba la plaza de diputado de Koldo Goitia, jeltzale que saltó de Hazi a la alcaldía de Lekeitio. En mayo del 2022, Goitia anunció su retirada de la candidatura para las elecciones de mayo del 2023 y su intención de reincorporarse a Hazi. Como en el caso de Goitia, en los últimos cuatro años se han reincorporado a Hazi dos exdiputados del PNV que habían trabajado en la entidad.
Por un lado, el exdiputado alavés Andoni Erkiaga fue recolocado en 2019 en el área de Proyectos de Innovación y Transformación Digital, Erkiaga. Había sido técnico en Proyectos Estratégicos de Hazi entre los años 2011 y 2015 y fue compañero de trabajo de Alfredo De Miguel en la entidad pública IKT antes de su fusión con Hazi en 2012.
Por otro lado, la exdiputada vizcaína Elena Unzueta volvió a su puesto de técnica de Desarrollo Rural en 2021, una responsabilidad que ya ostentó entre 2002 y 2013, aunque en la actualidad trabaja en el área de Innovación de la entidad. En la vuelta de Unzueta la acompañó su exasesora, Miren Maite Peñacoba, directora general de Agricultura del Departamento de Sostenibilidad y Medio Natural de la Diputación de Bizkaia hasta 2021 y ahora técnica de Desarrollo Rural en Hazi.
En este sentido, cabe señalar que un informe del Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) advirtió que Hazi ha venido realizado varias contrataciones sin garantizar el cumplimiento de los principios de libre concurrencia, igualdad, mérito, capacidad y publicidad. Mientras este organismo reprochaba la reiterada contratación temporal en Hazi, las puertas giratorias de un cargo a otro en la administración pública alcanzaron buena parte del organigrama de la entidad.
Esta modalidad de recolocación fue elegida por Elena Gutiérrez, responsable del área de innovación denominado Katilu en Hazi, quien viene de ocupar la dirección de Desarrollo Rural y Litoral y Políticas Europeas en el Gobierno Vasco. También es el caso de cargos como Pilar Santamaría, directora de PAC y Programas Institucionales en Hazi, anteriormente directora de Agricultura y Ganadería en el Gobierno Vasco, y Goio Manrique, director de Organización y Transformación Digital en Hazi que fue consejero de Lurranek, entidad creada para impulsar las obras del Tren de Alta Velocidad en Euskadi.
Según el sindicato ESK, las redes clientelares que el PNV teje alrededor de las administraciones y empresas públicas son muestra de un modelo de gestión que nada tiene que ver con la vocación de servicio público. Recuerda el sindicato que estos no pertenecen al PNV, son de la ciudadanía y a ella debe rendir cuentas.
La historia de Hazi se remonta al 25 de julio del 2012, fecha elegida para validar su creación como resultado de la integración de Itsasmendikoi, Fundación Kalitatea e IKT, en esta última trabajaba Alfredo De Miguel. En 2007, un informe de la Universidad del País Vasco (EHU) ya había cuestionado la utilidad del “entramado” de empresas de la Consejería de Agricultura y Pesca agrupadas en torno a IKT. El informe aseguraba que era “imposible estimar” el total de recursos que se gestionaban a través del entramado empresarial. El lehendakari José Antonio Ardanza había impulsado en 1989 la creación de IKT, dependiente de la Consejería de Agricultura y Pesca. Cinco años después, el diario Egin destapó que un cuñado de Ardanza había sido colocado a dedo en una plaza del Servicio de Estructuras Pesqueras.
Relacionadas
Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.
Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!