Educación
Racismo en la escuela: asignatura pendiente

El bullying relacionado con el color de piel aumenta en las estadísticas mientras en los colegios se sigue minimizando. La ausencia de protocolos específicos hace más dura la batalla de madres, hijos e hijas que sufren este acoso.

Mamá, me he dado cuenta de que la gente va a utilizar mi color de piel para hacerme daño, pero no les voy a dejar”. Camila, de mirada intensa y templada, lleva soportando expresiones malsonantes que hacen alusión a su cantidad de melanina, como “negra de mierda”, desde que cumplió tres años. Sentada en una mesa, escucha aparentemente ausente cómo su madre describe estos nueve años de acoso vividos en el CEIP Cardenal Herrera Oria de Madrid. Y, aunque pareciera entretenida en otras cosas, está atenta y sonríe cuando su madre parafrasea las sabias conclusiones a las que ha llegado con tan solo 12 años: “Camila es una niña muy fuerte y nos ha dado muchas lecciones. A pesar de lo vivido, ya está bien y ahora ya puede escuchar esta historia”, explica Petra Ferreyra, mamá de esta pequeña.

A los siete años, una anécdota relacionada con un trabajo hecho en cartulina fue el detonante. Camila había realizado la tarea por encima de la media. Fue entonces cuando el acoso se hizo más visible. “Un grupo de unas siete niñas la acorralaban en el recreo, le tiraban balones a la tripa en gimnasia. Se metían con su pelo, con su forma de vestir”, describe Petra, quien no dudó en contactar con el colegio cuando la cosa ya era más que evidente. “Camila llegaba a casa con ansiedad. Empezó a comer mucho. Engordó siete kilos”, relata. Así llegó el primer protocolo de acoso, abierto en enero de 2017. Un protocolo que se archivó tras un acto de petición de perdón bidireccional. Tras este “cierre en falso”, en junio se abrió otro protocolo, pues el bullying, lejos de aplacarse, siguió. “La niña era tratada como un trapo, se veía anulada completamente. Comenzó a dejar los exámenes en blanco. Empezó a suspender. Somatizó los problemas, le dolía la tripa, la cabeza”.

El bullying que sufren los hijos e hijas de emigrantes ha aumentado en casi tres puntos entre 2015 y 2017, y roza ya el 10% del total de los casos de acoso escolar

Finalmente, y tras exámenes psicológicos que concluyeron que Camila tenía secuelas de estrés postraumático bastante graves, con “falta de confianza, inseguridad, incapacidad para relacionarse con sus iguales y depresión”, ha tenido que cambiar de colegio. Ante la inacción del antiguo centro, su madre ha escalado el caso hasta la Dirección de Áreas Territoriales (DAT) de la Comunidad de Madrid. Llegó a escribir a la propia Cristina Cifuentes —entonces presidenta del gobierno regional madrileño—, quien reconoció deficiencias en los protocolos de acoso en una carta a la que ha tenido acceso El Salto.

Panorama racismo en las aulas Entrevistas Álvaro Madre hija
Petra Ferreyra ha llevado el caso de acoso escolar de su hija Camila (de espaldas) hasta los tribunales Álvaro Minguito

“El objetivo del protocolo es proteger a la víctima, cosa que no se hace”, explica Ferreyra. Tal y como dicta la Guía de Actuación contra el Acoso Escolar en los Centros Educativos, el centro está obligado a llevar a cabo una serie de actuaciones, como nombrar a dos profesores que deben tomar declaración a los testigos, realizar entrevistas y reunirse con las familias. Además, deben mantener en todo momento informada a la familia que ha activado el protocolo, “cosa que no se cumple, no tuvimos ningún tipo de información”, se queja Ferreyra mientras describe que la actuación emprendida contribuyó a culpabilizar a la víctima. “Se reúne a la niña y se hace que pida perdón por ser acosada, por ser agredida”, expresa.

Esta madre ha dado un paso más y ha abierto la vía judicial contra la Comunidad de Madrid. “La impotencia y la sed de justicia nos llevan a investigar la vía judicial. No hay legislación con respecto a acoso escolar en España, lo que sí se estima es la responsabilidad civil de los centros educativos ante un daño probado y constatable”, asegura. Ferreyra acaba de recibir la noticia de que la apertura del juicio oral será en octubre y de que, en el proceso, el juzgado citará a multitud de testigos, entre ellos a la propia Cristina Cifuentes. 

sIN PROTOCOLOS

La madre de Camila denuncia que, en todo este proceso, “el racismo es una palabra tabú. La única que hace alusión a ello es la directora de la DAT, Coral Báez, para mandar a un centro de sordos a mi hija”, explica. “Ella, en un gesto de generosidad, nos recomienda un centro que está especializado en alumnos sordos, muy concienciado con la integración, pero mi hija no es sorda. Es decir, equipara una discapacidad al hecho de que mi hija sea negra”, asegura. 

No en vano, los expertos coinciden en que en España no existen protocolos específicos contra casos de racismo en los colegios. Sin embargo, las cifras de acoso escolar apuntan que el bullying que sufren los hijos e hijas de emigrantes ha aumentado en casi tres puntos entre 2015 y 2017, y roza ya el 10% del total de los casos de acoso escolar. También aumenta en tres puntos el número de víctimas de otras nacionalidades, que ya son el 6% del total. Los datos, extraídos del III Estudio sobre el Acoso Escolar y Ciberbullying, de la fundación ANAR, que detectó 590 casos durante 2017, nos permiten acercarnos a esta realidad, aunque no dan una panorámica completa, ya que por ejemplo muchos afrodescendientes son hijos e hijas de españoles. El estudio muestra que este tipo de acoso es el que más se ha incrementado en estos últimos años.

Sin embargo, los episodios de racismo en la escuela tienden a “minimizarse”, tal y como explica Lila Parrondo, psicóloga y coordinadora de Adoptantis, asociación de atención a familias adoptivas. “En general, cuando son peques, la respuesta que muchas veces el ambiente educativo da es que son cosas de niños. El niño se siente mal porque le están tratando mal. No son cosas de niños, ni son tonterías”, avisa y traslada la responsabilidad tanto a profesores como a la familia de los acosadores. “Yo he visto cómo en un colegio, en segundo de Primaria, a niños de cuatro años que les decían a otros que se tenían que marchar porque esto era un cole solo para españoles. Esto un niño de cuatro años no lo elabora. Esto es un mensaje que se ha escuchado en casa, o a un monitor o profesor en el cole, y no se reporta como tal”. “Estamos a años luz y no será porque no tenemos una sociedad multicolor y variada, pero los cambios sociales no llegan tan a tiempo como la necesidad de las personas que están padeciendo estas opresiones”, concluye.

Panorama racismo en las aulas Lapices amenazantes

Minimización de las opresiones

Encarnación Ngale lucha contra esta minimización del acoso racista. Ngale, nacida en Guinea Ecuatorial y establecida en Poblete (Ciudad Real), batalla contra el racismo que su hijo de 12 años ha vivido en el colegio del pueblo, La Alameda. Por el momento lo único que ha conseguido es que se prohíba su entrada en el centro y que buena parte de la comunidad educativa se posicione en su contra. “El 15 de febrero fui a recoger al niño al colegio y estaba con la cara descompuesta. Rompió a llorar y me dijo que le habían pegado diez niños de su clase. El profesor le había castigado a él”, asegura. Ngale intentó hablar con el maestro, quien le habló de “piques entre niños” y lo mismo le dijo el director. “Me hacían ver que mi hijo provocaba. El director me lo llegó a pintar como un monstruo. Las agresiones grupales seguían y mi hijo empezó a tener miedo de ir al colegio”.

Esta madre no quiso dejar pasar estos episodios y comenzó a visitar dependencias públicas —alcaldía, servicios sociales, inspección educativa— y a explicar todo en redes sociales. Fue tocando puertas hasta que la orientadora del colegio se decidió a entrevistarse con su hijo. Abrieron un protocolo de acoso escolar durante el que Ngale obtuvo información de sus compañeros. “Un compañero confirmó que le decían ‘puto negro de mierda’, ‘vete a tu país’, ‘me das asco’. Confirmó también que mi hijo no respondía a las agresiones y se callaba”. Y, pese a estas declaraciones, el protocolo se cerró en blanco. “Me dieron el resultado de la investigación de forma verbal. Concluyen que mi hijo nunca ha sufrido acoso. Me decían que mi hijo había insultado igual que los demás niños. Yo me enfado. Estamos hablando de acoso y de racismo. Hay once niños que no le tratan porque los padres les dicen que no se acerquen a mi hijo. Los padres incitaban a esta situación”.

El 8 de abril Ngale recibió un burofax para prohibir su entrada en el colegio. “Me dijeron que había vulnerado la autoridad de los profesores y, si quería volver a entrar al colegio, debía pedir perdón”, denuncia. Este año su hijo empieza el instituto, pero no cree que la situación vaya a cambiar mucho. Afirma que el acoso en el colegio se ha trasladado a las calles. Hace poco tuvo que poner una denuncia ante la Guardia Civil porque uno de los agresores le pegó en el colegio y le buscó en la calle para continuar. “Se junta un grupo y le buscan para pegarle por el pueblo. Mi hijo estuvo dos semanas con miedo de salir a la calle. No podía salir a la calle porque le estaban buscando”.

Racismo ¿inexistente?

“A mi hija mayor, con tres años, ya le han dicho en el patio ‘negra de mierda, no juegues con la pelota que la ensucias, no toques los lápices porque los ensucias’. Pedí una reunión y me dijeron que esto no pasaba, que siempre trabajan la integración y la diversidad. En todas las escuelas te dicen lo mismo, que aquí la integración funciona… pero no es verdad. No se abrió un protocolo de acoso, nunca se abren”. Amanda Colom, que tiene dos hijos negros de origen marroquí, sabe bien de lo que habla y compara el trato que se le da al racismo con el que se le da a la transfobia, ya que su hija mayor es transgénero. “En Catalunya hay una unidad para la no discriminación de las personas LGTBi y hay un protocolo de actuación para menores trans. Puede estar peor o mejor, pero puedes acogerte a él. Puedes ir al Área de Igualdad y el Área de Igualdad habla con Educación y con la Inspección. Las cosas más o menos se resuelven”, afirma Colom. Situación pareja se vive en Madrid, donde la Guía de Actuación contra el Acoso Escolar en los Centros Educativos recoge un capítulo específico con siete páginas para paliar la LGTBifobia. Mientras, la “discriminación por raza o etnia” apenas se menciona una vez, utilizando estos términos y de forma anecdótica.

“En la mayoría de los casos, los protocolos contra el acoso escolar se desestiman. Se ponen excusas como que no ha existido un conflicto importante o que el menor viene de una familia desestructurada”, expresa Petra Pereyra, quien en este camino de lucha se ha hecho experta a la fuerza en la materia colaborando con la Asociación Madrileña Contra el Acoso Escolar (AMACAE). “La propia directora del Área Territorial me confirmó que solo tenía tres carpetas de acoso escolar”, añade mientras acuna una carta de disculpas, señal de los nuevos tiempos. Pertenece a un niño que ha insultado a su pequeña. En el nuevo colegio un insulto racista se paga: el agresor debe de mandar una carta de arrepentimiento a la víctima. “Para nosotras, esta carta significa mucho”, asegura Petra mientras Camila exhibe una sonrisa tímida y esperanzada.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Opinión
Opinión La berlusconización de Mazón
Es evidente que el presidente de la Generalitat no ha asumido la agenda de la ultraderecha por convicción, sino por supervivencia política y judicial, en una estrategia no muy diferente a la que empleó Silvio Berlusconi.
Opinión
Opinión Vox y los negros
Que la extrema derecha no es única depositaria del racismo en nuestras sociedades es una obviedad que el movimiento antirracista no se cansa de señalar. En su obra ‘Infiltrado en Vox’, el periodista Moha Gerehou aborda esta evidencia con desparpajo.
Editorial
Neofascismo La peste en Euskal Herria
Cada vez que el régimen de acumulación capitalista se enfrenta a una crisis estructural es el momento de los chivos expiatorios y del disciplinamiento duro del trabajo.
Maria mena afromena@yahoo.com
10/9/2019 0:05

Vivo en Colombia y soy parte del elenco de personas que no se queda quieta ante las agresiones a los niños y niñas. Sí desean podemos entrar en contacto para compartir la dinámica que nos permite movilizarnos contra el racismo escolarizado

9
15
Comunidad de Madrid
Fin a la privatización Un tsunami marcha por Madrid por la gestión totalmente pública de los servicios a la ciudadanía
La plataforma Tsunami por los Servicios Públicos nace este domingo para aglutinar a decenas de organizaciones sociales que quieren hacer frente al “modelo neoliberal de destrucción masiva de los derechos humanos y sociales”.
Medio ambiente
Medio ambiente Milleiros de persoas enchen A Pobra do Caramiñal para berrar contra a celulosa de Altri e a mina de Touro
Unha grande multitude por terra e centos de embarcacións por mar esíxenlle ao Goberno de Alfonso Rueda que “recúe” ante o potencial desastre ambiental que sobrevoa Galiza.
Tribuna
Tribuna Carta aberta a José Soares de Pina, CEO de Altri: “Paren este proxecto que Galicia nin quere nin necesita”
Os argumentos para apoiar o que dicimos son moitos. Situaríanse nun terreo no bordo da ZEC Serra do Careón; provocarían un novo ciclo de plantación masiva de eucalipto ou de importación de países do Sur; e o máis importante: non teñen licenza social.
Gobierno de coalición
Consejo de Ministros Ángel Víctor Torres anuncia que tiene cáncer, pero seguirá al frente del Ministerio de Política Territorial
Reducirá su agenda como titular de Política Territorial en las semanas previas a una operación a finales de abril. Fuentes ministeriales dicen que la enfermedad “va bien” y “tiene solución”.
Tribuna
Tribuna A celulosa e a mina son o modelo industrial do Partido Popular
É fundamental que tezamos unha rede social transversal na sociedade, capaz de unir a sectores diferentes que sexan quen de aglutinárense nun movemento social arredor dun denominador común: a defensa do noso territorio.

Últimas

Medio ambiente
Medio ambiente Galiza volve á rúa contra Altri, Greenalia e a celulosa da Xunta: o desastre natural en cifras
Espérase que centos de embarcacións e decenas de miles de persoas participen nunha manifestación este sábado na Pobra do Caramiñal, un dos concellos da ría de Arousa, onde desemboca o río Ulla, o máis afectado pola fábrica de celulosa.
Palestina
Genocidio Salah al Bardauil, miembro del comité político de Hamás, entre los 23 asesinados por Israel esta madrugada
Israel ha matado a 634 personas desde la ruptura del alto el fuego el pasado martes. Un ataque del Estado sionista hacia suelo libanés este sábado ha dejado siete muertos.
Tribuna
Tribuna Carta abierta a José Soares de Pina, CEO de Altri: “Paren este proyecto que Galicia ni quiere ni necesita”
Los argumentos para apoyar lo que decimos son muchos. Se situaría en un terreno en el borde de la ZEC Serra do Careón; provocaría un nuevo ciclo de plantación masiva de eucalipto o de importación desde países del Sur; y no tiene licencia social.
Contigo empezó todo
Contigo empezó todo El comunismo libertario de Hildegart Rodríguez
La joven madrileña, a quien se recuerda por morir a manos de su madre, contribuyó con sus ideas a la política revolucionaria durante la II República.
Opinión
Opinión La berlusconización de Mazón
Es evidente que el presidente de la Generalitat no ha asumido la agenda de la ultraderecha por convicción, sino por supervivencia política y judicial, en una estrategia no muy diferente a la que empleó Silvio Berlusconi.
Más noticias
La vida y ya
La vida y ya Para vivir bien
“Para vivir bien hacen falta plantas, profe”, dijo una alumna. Esa frase es una forma de recordar que para vivir bien no es suficiente con levantarte cada mañana y meterte en el metro con los ojos pegados al sueño de estar en otra parte.
Turquía
Contra Erdogan Turquía en las calles: cae el muro del miedo a las movilizaciones
La detención del principal rival político de Erdogan ha provocado protestas masivas en todo el país que amenazan con convertirse en movilizaciones generales de descontento contra el gobierno.
Derechos sociales
Derechos laborales La legislación protege a los trabajadores ante alertas metereológicas
El Ministerio de Trabajo y los sindicatos recuerdan que hay previstos permisos retributivos, reducción de jornada o cambios en la misma para evitar los desplazamientos peligrosos al puesto de empleo.

Recomendadas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Un rayo de esperanza tras cinco años de los protocolos de la vergüenza
A punto de prescribir los posibles delitos, un avance judicial abre la puerta a conocer quién decidió no derivar a hospitales a ancianos en residencias en la Comunidad de Madrid.
Medio ambiente
Oliver Franklin-Wallis “La industria de los residuos deja una cicatriz enorme en nuestro planeta”
El periodista británico Oliver Franklin-Wallis recorre en ‘Vertedero’ (Capitán Swing, 2024) las prácticas ocultas de la industria de residuos, exponiendo el papel de las grandes corporaciones, en connivencia con autoridades e instituciones públicas.
Siria
Siria Siria, de la euforia por el fin del régimen al examen de la transición
Las matanzas en el litoral sirio y las dudas acerca de las nuevas autoridades dejan atrás la alegría por la caída de al Asad y enfrían el aniversario de la revolución, el primero tras la huida del dictador.
México
EZLN Genealogía del “común” zapatista, política de la liberación
El EZLN celebró junto a sus bases de apoyo unas jornadas conmemorando el 31 aniversario del levantamiento en Chiapas, en el que se hizo reflexión sobre los retos que vive el movimiento. En abril, preparan el encuentro (Rebel y revel), de arte.