We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Industria armamentística
Muchos de los países que han castigado a la UNRWA son también los principales vendedores de armas a Israel
Más de una decena de gobiernos han cancelado su financiación a UNRWA, la agencia de Naciones Unidas que ayuda a los más de cinco millones de refugiados de Palestina que viven en distintos lugares de Oriente Próximo. Esta retirada de fondos, que se está produciendo un efecto dominó entre diversos países, comenzó cuando Israel aseguró que varios trabajadores de la Agencia estuvieron implicados en los ataques de Hamás del pasado 7 de octubre.
La acusación, que se basa en supuestas confesiones obtenidas mediante interrogatorios, tuvo lugar justo un día después de que el Tribunal Internacional de Justicia (TIJ) le exigiese a Tel Aviv tomar medidas para evitar el genocidio de los palestinos en Gaza y garantizar la entrada de ayuda humanitaria en la Franja. Inmediatamente, la ONU despidió a algunos miembros del personal de UNRWA y declaró que abriría una exhaustiva investigación.
Genocidio
Genocidio El TIJ exige medidas cautelares para detener el genocidio pero no pide un alto al fuego
Estados Unidos, principal aliado y benefactor de Israel en la región, se apresuró a comunicar que deja de transferir dinero al organismo, un movimiento que en los últimos días han replicado otras naciones como Canadá, Alemania, Italia, Reino Unido, Francia, Países Bajos, Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Australia y Japón, aunque algunas han matizado que cierran el grifo hasta que se obtengan resultados en dicha investigación.
“Dos millones de civiles en Gaza de la asistencia que proporciona la UNRWA para su supervivencia diaria”, declaró António Guterres
Naciones Unidas insiste en que, anulando los fondos a UNRWA, estos países están violando la orden judicial emitida por el Tribunal Internacional de Justicia que busca asegurar la llegada efectiva de ayuda humanitaria a Gaza y detener el genocidio contra los palestinos. “Dos millones de civiles en Gaza de la asistencia que proporciona la UNRWA para su supervivencia diaria”, declaró este fin de semana el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, que añadió que tras la retirada de la financiación los niveles de presupuesto ya no son suficientes ni para afrontar el mes de febrero.
Contratos millonarios de los que se benefician miembros de la UE
Además de ser el primero en cancelar la financiación de UNRWA, Estados Unidos también es, de largo, el mayor vendedor y proveedor histórico de armas a Israel. Según datos recabados por la organización británica Campaign Against Arms Trade (CAAT), en los últimos 15 años más del 70% de las armas totales que compró Israel se las vendió EEUU, que en los últimos años ha entregado más de 5.000 millones de euros en armas y contratos de armamento.
Tal y como reflejan las cifras del Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI), Estados Unidos le ha vendido armas a Israel todos los años desde 1961, y eso que el Instituto únicamente contabiliza las armas convencionales, ya que reconoce la dificultad de rastrear este tipo de contratos y la opacidad que los rodea.
Opinión
Estados Unidos Nancy Pelosi difama a los manifestantes que piden un alto el fuego en Gaza
En Europa, varios Estados miembros hacen caja con la venta de armas a Israel. En cabeza está Alemania, cuyas ventas representan en torno al 25% de todas las armas que ha comprado Israel en los últimos tres lustros, tan solo por detrás de EE UU.
Alemania ha surtido a Israel de submarinos Dolphin y corbetas Sa’ar, y en octubre el propio canciller, Olaf Scholz, admitió que su país le había ofrecido ayuda militar a la administración Netanyahu
Aunque en Alemania los datos sobre la entrega de armas no son públicos, sí lo son las licencias expedidas. En base a ellas, entre 2015 y 2020, Alemania vendió armas a Israel por 1.400 millones de euros.
SIPRI va más allá en el análisis, que demuestra cómo el estado alemán ha estado suministrando material bélico a Israel asiduamente desde los años 60 e ininterrumpidamente desde mediados de los 90. Conforme detalla el Instituto sueco, a lo largo de la última década, Alemania ha surtido a Israel de submarinos Dolphin y corbetas Sa’ar, y el pasado mes de octubre el propio canciller, Olaf Scholz, admitió que su país le había ofrecido ayuda militar a la administración Netanyahu.
El siguiente en la lista europea de proveedores es Italia, cuyas exportaciones de armas convencionales a Israel desde 2010 suponen casi el 6% del total del armamento que compró el país en ese período. En los últimos años, Italia se ha embolsado cerca de 350 millones de euros con la venta de material militar.
Anteriormente, Italia ha suministrado piezas para aviones y helicópteros de entrenamiento y de combate. En 2021, numerosos trabajadores de la Unione Sindicale di Base se movilizaron para tratar de impedir que las armas y los vehículos de guerra embarcasen rumbo a Israel, convocando protestas en apoyo al pueblo palestino tanto dentro del puerto como en las calles de ciudades como Génova o Livorno. A diferencia de Alemania, Roma no le ha prometido apoyo militar a Israel en la actual reactivación del conflicto con Hamás, pero el Ejecutivo italiano sí se ha posicionado al lado de Netanyahu en el ataque contra Gaza.
España también se ha lucrado vendiendo armas
A diferencia de los países de la UE mencionados al inicio, de momento España se ha desvinculado de la cancelación de fondos a UNRWA. No es el único, en los últimos días Irlanda también remarcó su intención de continuar aportando dinero a la Agencia de Naciones Unidas y contribuir a frenar el drama humanitario de millones de palestinos.
“No modificaremos nuestra relación con UNRWA, aunque seguimos de cerca la investigación interna y el resultado que pueda arrojar por los actos de una decena de personas de las alrededor de 30.000 [que trabajan para la agencia]”, declaró en rueda de prensa a principios de esta semana el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares.
A lo largo de 2023, España realizó contribuciones voluntarias a UNRWA por un total de casi 20 millones de euros, incluidos los 10 millones que aprobó el Congreso en diciembre, cuando se decidió triplicar la ayuda en cooperación humanitaria destinada a Palestina.
No obstante, y tal y como documenta CAAT, entre 1998 y 2020 España le ha vendido armas a Israel por valor de casi 30 millones de euros, y en ese tiempo ha aprobado 500 licencias de exportación de bienes militares. Si se analiza el desglose de los envíos predominan los dispositivos explosivos (por valor de ocho millones de euros), munición (tres millones de euros) y una categoría "desconocida” por valor de otros tres millones de euros. SIPRI también deja constancia de que ha habido intercambio comercial habitual de armas entre España e Israel desde los años 50.
En contra del derecho internacional
En total, los Estados miembros de la UE que le vendieron armamento a Israel entre 2015 y 2019 —España entre ellos— se embolsaron casi 700 millones de euros. Sin embargo, el envío de equipo militar a un país como Israel va en contra de la propia legislación de la Unión, que exige que el país que recibe las armas debe respetar tanto los derechos humanos como el derecho internacional humanitario, requisitos que Israel no cumple. Sobre esto último, los artículos 6 y 7 del Tratado sobre el Comercio de Armas prohíben la comercialización de armas cuando exista riesgo de que puedan usarse para cometer o facilitar una violación grave del derecho internacional humanitario.
Desde que el 7 de octubre de 2023 se lanzó al ataque de la Franja de Gaza escudándose en su derecho a defenderse, Israel ha asesinado a más de 150 empleados de UNRWA. Casi cuatro meses después del comienzo de esos ataques, las fuerzas de combate israelí han asesinado a más de 25.000 palestinos y herido a más de 63.000 en la Franja.
Relacionadas
Crisis climática
Análisis ¿Cómo contribuye el sector militar a la crisis medioambiental?
Cádiz
Genocidio en Palestina El Puerto de Algeciras espera la llegada de dos buques con armamento para Israel
Industria armamentística
Genocidio Interior anula el contrato de compra de munición con la filial israelí Guardian Defense & Homeland Security
Así todo queda más claro, como en Ucrania: lugares para obtener grandes beneficios manchados de la sangre de otros. Además, el dinero público de los países OTAN -tanto en Norteamérica como en Europa-, destinado a los presupuestos militares y compra-ventas de armamento, podrían resolver los graves problemas de vivienda y demás problemas sociales sin cometer genocidios.