Soberanía alimentaria
La alimentación como vínculo con la tierra

La crisis del Mar Menor muestra los extremos que deben alcanzarse para que una sucesión de agresiones llegue a la opinión pública y se tomen medidas.

Profesor de veterinaria en la Universidad Autónoma de Barcelona

Revista Soberanía Alimentaria
6 dic 2019 07:00

La industrialización de la alimentación nos proporciona imágenes muy elocuentes para ilustrar la ruptura de nuestro vínculo con la tierra. Aviones fumigando enormes extensiones de cultivos, imágenes de satélite de regiones totalmente cubiertas de plástico de invernadero o granjas de animales hacinados con su ciclo de vida minuciosamente controlado.

La crisis del Mar Menor muestra los extremos que deben alcanzarse para que una sucesión de agresiones llegue a la opinión pública y se tomen medidas. El colapso de la fauna acuática de la laguna es la punta visible del iceberg, como lo son la desaparición de las abejas o la rebelión de las trabajadoras contra los empresarios de la fresa. Los medios de comunicación llevan la noticia a primera línea, pero muchas veces el debate que se genera no deja de ser superficial y parece zanjarse cuando se toman medidas para salir del paso. La raíz del problema, ese iceberg que es la explotación de las personas y de la tierra, continuará allí.

En el caso del Mar Menor, como en muchas otras situaciones, subyace una escena en común: el momento en que dos hombres con poder deciden, con el privilegio de la intimidad, ponerse de acuerdo para poner sus propias reglas. Regantes, empresarios, técnicos, políticos. Da igual. Existen todas las combinaciones. Esos pactos, más allá de su materialización concreta, tienen como objetivo el lucro personal y la protección mutua. Quien pierde son las trabajadoras, las consumidoras, el territorio.

Aunque la cultura basada en la explotación de bienes naturales tiene consecuencias en otros sectores como la minería o el turismo de masas, los impactos sobre el sector alimentario tienen un enorme poder simbólico

Vivimos en una cultura basada en la explotación de bienes naturales y las consecuencias se ven también en otros sectores como la minería o el turismo de masas. Sin embargo, los impactos del sector alimentario tienen un enorme poder simbólico. La agricultura y la ganadería han sido las actividades que han hecho que, independientemente de la cultura o región del planeta, el ser humano estableciera un diálogo con la tierra. Cultivar, pastorear, cocinar, requerían observación del entorno, planificación colectiva y creatividad, y, por otro lado, la transmisión de conocimientos de generación a generación. Esto último incorpora al vínculo con la tierra el componente comunitario, entendido como el repositorio de los saberes, la memoria y los sentimientos colectivos. La histórica relación entre tierra y comunidad tenía como objetivo la reproducción social, pero a diferencia de hoy en día, existía una conciencia del límite: se tenía muy presente la necesidad de cuidar esos bienes naturales en los que todo se sostenía.

Industria alimentaria
Cuando la comida devora el planeta

El sistema de producción y distribución de alimentos impone unas normas que no priorizan la salud ni la justicia, sino sus propios intereses. Los procesos de gentrificación alimentaria desplazan a la población y ahondan en las desigualdades sociales a través de la comida. Del reto de concebir la alimentación como derecho, y no como mercado, depende que la población tenga acceso a alimentos saludables y asequibles.


Hemos perdido esa conexión, ese sentido común. La mirada urbana predominante carece de él. Ahora los alimentos son una mercancía más cuyo objetivo es el lucro empresarial y para que éste no cese, la prepotencia tecnológica pone a nuestra disposición todo tipo de productos en cualquier época del año. No vemos nada raro en ello porque no conocemos los productos locales y mucho menos sus temporadas, así que no cuestionamos este modelo alimentario. No tenemos herramientas para hacerlo.

Pero este modelo alimentario, que es parte del modelo económico capitalista, está matando el planeta y a las especies que lo habitamos. Reconstruyamos el privilegiado vínculo con la tierra que nos ofrece la alimentación y reactivemos esa conciencia crítica imprescindible para descubrir la base del iceberg y cambiar radicalmente el sistema. “La tierra cuando le das dos labrás en verano mata todos los bichos. Eso la limpia y sin abono se producen auténticas maravillas”, cuenta Antonio, jubilado de la huerta murciana, que aboga con sus recuerdos por otras fórmulas que durante muchos años fueron suficiente. 

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Opinión
Agroecología Trump y la posibilidad de una soberanía alimentaria europea
Trump ha acelerado la llegada de una encrucijada que tenía que llegar. Europa ahora ha de decidir su sistema alimentario, se trata de una diatriba, si me apuran civilizatoria.
Alimentación
OPINIÓN Larga vida a los mercados de abastos
La campaña «Los mercados se mueren» denuncia el declive de este servicio público, a la vez que propone impulsarlos dándoles un papel clave en las políticas alimentarias locales.
Galicia
Movimientos sociales El movimiento por la soberanía alimentaria se reúne para fortalecer su estrategia contra la agroindustria
El movimiento Nos Plantamos celebra un encuentro por la soberanía alimentaria en Allariz para construir una agenda colectiva que impulse y apoye modelos de agricultura, ganadería y consumo agroecológicos.
#44188
6/12/2019 10:49

La izquierda tiene que dejar de mirar a lo organico como una creencia, la humanidad tiene que alimentar a 9 millones de personas sin destruir el planeta. La tecnologia nos ayuda a utilizar la menor cantidad de tierra posible, intenta producir trigo de forma organica a nivel mundial y no nos quedara un arbol que cortar.

Somos como católicos rechazando los preservativos porque no son "naturales". Dejemos las creencias volvamos a la ciencia

0
4
#44404
10/12/2019 7:01

Pues destruyendo la tierra y el agua con pesticidas y abonos minerales, no sé cómo vamos a alimentarnos en breve....

3
0
#45110
26/12/2019 16:43

Como se alimentaban nuestros abuelos, de manera sobria, se tira más comida de la que haría falta para alimentar a la gente que pasa hambre.

0
0
#44300
8/12/2019 9:45

La triste realidad es que los cultivos se han intensificado no para "ayudar" a la tierra usando la menos cantidad de espacio posible. Se ha hecho buscando el mayor beneficio económico. Los monocultivos son sistemas ineficientes, su nula biodiversidad lo convierte en un medio nada resiliente: como venga una plaga, a tomar por culo la cosecha entera. Esto es algo que siempre se ha sabido, pero a día de hoy renta más no complicarte la vida sembrando diferentes plantas, y tener un buen seguro que te pague por las pérdidas que vengan se un acontecimiento como este. Mazo bien. Por otro lado, el uso de insecticidas y herbicidas como quien riega con agua se está cargando el suelo y provocando una disminución en las poblaciones de invertebrados (lo que afecta al conjunto de los ecosistemas). Hemos aprendido a restaurar muchos tipos de sistemas naturales,y en ese proceso hemos visto que la tierra, el suelo, no es recuperable a escala humana, y sin embargo aquí estamos, drenando nutrientes e intercambiándolos por químicos que no deberían estar allí.
Creo que a nadie se le escapa que la industria alimentaria, igual que muchas otras, produce a lo bestia, derrochando. No sé si habrás trabajado alguna vez en el campo en algún cultivo intensivo, pero si es así estarás de acuerdo conmigo en que la cantidad de alimento que queda tirado o que se desprecia por no "ser bonito" es muy preocupante. Eso por no mencionar la cantidad de alimento que tiran día tras día los supermercados.
Tenemos que pensar también en términos energéticos, la cantidad de energía que se consume pa' que nos comamos un jodido aguacate es ridícula. Estamos importando a lo bestia mientras los puebls se vacían y los antiguos cultivos se abandonan, porque es más barato (solo en términos económicos) irse a algún otro país a hacer macrocultivos y pagarles una miseria.
Si esto te parece un sistema eficiente y sustentable, apaga y vámonos, colega.
Desde luego que ciencia sí, pero una cosa no quita la otra. Si solo enfocamos la ciencia en intensificar los cultivos y no en buscar maneras sustentables de cultivar, no estamos ayudando a la tierra por usar la menor cantidad de tierra posible. Necesitamos sistemas eficientes, de qué me vale que ocupe menos espacio si nos va a obligar a utilizzr todos los espacios por haberlos ido destruyendo?

2
0
#44354
9/12/2019 10:32

Porsupuesto que el objetivo tiene que ser hacer la agricultura lo más sostenible posible,
Respecto a la destrucción dela biodiversidad, muchos estudios prueban que se proteje mejor la biodiversidad si se quita menos espacio a la naturaleza, que si se hacen cultivos organicos que necesitan más espacio,
Y lo mismo respecto al desecho de alimentos, lo pijos que compran tomates organicos tambien quieren que se vean bonitos

0
1
Genocidio
Genocidio El TPI emite la orden de detención contra Netanyahu y Gallant por crímenes de guerra
La Sala de Cuestiones Preliminares del TPI rechaza las impugnaciones de competencia formuladas por el Estado de Israel y emite órdenes de arresto contra Benjamin Netanyahu y Yoav Gallant.
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Los sindicatos denuncian a la Comunidad de Madrid por exponer a sus sanitarios a “gravísimos” riesgos
Solicitan la mayor indemnización económica pedida contra una administración por no contar con un verdadero plan de prevención de riesgos laborales para atención primaria.
COP29
Cumbre del clima La COP29 encara su última jornada con un final agónico sin acuerdo en los temas clave
Los borradores de los textos de negociación sobre la mesa quedan muy lejos de un acuerdo sobre financiación climática en línea con las necesidades para que el planeta no rebase los 1,5ºC de calentamiento medio.
Ocupación israelí
Ocupación israelí El Congreso de EE UU vota la “ley más peligrosa para las libertades” desde la Patriot Act
En Gaza, Cisjordania y Líbano, nuevos ataques israelíes dejan más de un centenar de muertos. En Washington, el Congreso vota una ley que permite quitar fondos a ONG, universidades y colectivos sin pruebas ni un proceso transparente.
Barcelona
Derecho a la vivienda El hartazgo por la vivienda impagable se da cita este 23 de noviembre en Barcelona
El amplio movimiento por la vivienda catalán, sindicatos y organizaciones vecinales, sociales y soberanistas demandan soluciones urgentes ante una crisis de vivienda sin solución a la vista

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Opinión
Opinión Non sempre ter moitas luces é sinónimo de intelixencia
Que impacto ecolóxico e social produce a iluminación do Nadal de Vigo? A cidade sofre máis aló da masificación, o caos de tráfico, as molestias á veciñanza, o malgasto ou os recortes en orzamentos de emerxencia social.
Más noticias
Crisis climática
Informe de Unicef El cambio climático multiplicará por tres la exposición de los niños y niñas a las inundaciones para 2050
Es la proyección que hace Unicef en su informe 'El Estado Mundial de la Infancia 2024'. La exposición a olas de calor extremas será ocho veces mayor para 2050 respecto a la década del 2000. “El futuro de todos los niños y las niñas está en peligro”, advierte la agencia de la ONU.
Memoria histórica
Memoria histórica Museo del franquismo, ¿eso dónde está?
España sigue ajena a la proliferación mundial de espacios museísticos dedicados a dictaduras y resistencias democráticas.
Unión Europea
Unión Europea La ultraderecha europea, ante la victoria de Trump
El triunfo de Donald Trump da alas a todas las formaciones ultraderechistas de Europa y del resto del mundo, que han visto cómo el millonario republicano ha conseguido volver a ganar las elecciones sin moderar un ápice su discurso.
Tribuna
Tribuna Vivienda: es hora de organizarnos
La situación de crisis inmobiliaria nos exige leer el momento para acertar en las batallas que debemos dar ahora, reflexionar sobre los modos de acción colectiva y lograr articular una respuesta política amplia.

Recomendadas

Galego
Dereitos lingüísticos Miles de persoas desbordan a praza da Quintana para mudar o rumbo da lingua galega
A Plataforma Queremos Galego, que convocou esta mobilización, sinala unha nova data para outro acto protesta: o vindeiro 23 de febreiro na praza do Obradoiro, en Santiago de Compostela.
València
Exclusiva El Gobierno de València contrata 12,9 millones en obras de la dana a una constructora investigada por pagos al cuñado de Barberá
La Generalitat Valenciana ha hecho el encargo a Ocide, una empresa cuya matriz está siendo investigada en el caso Azud por pagos “de naturaleza ilícita” al abogado José María Corbín a cambio de contratos adjudicados por el Ayuntamiento de València.