Tecnopolítica
Sueños

Nunca hemos dormido menos. Durmiendo no somos productivos para el sistema, no trabajamos, no consumimos.
John William Waterhouse 1912 Sweet summer
Sweet summer, John William Waterhouse (1912) Wikimedia Commons

Historiador y Doctor en Derechos Humanos y Desarrollo

1 ago 2021 06:00

Nuestros sueños reescriben el mundo, alientan revoluciones, otros mundos posibles, señalando las opresiones y traumas que no nos atrevemos a nombrar durante el día.

“Corre alta Severina noite

De baixo do lençol que te tateia a pele fina

Pedras sonhando pó na mina

Pedras sonhando com britadeiras

Cada ser tem sonhos a sua maneira”

(Noite Severina, Lula Queiroga y Pedro Luis)

Blade runner (Ridley Scott, 1982), una película en la que se confunden un cuento de Philip K. Dick (Sueñan los androides con ovejas eléctricas, 1968) con el título de una novela de William Burroughs (1977), nos habla de un futuro que es ya pasado. Los Ángeles, noviembre de 2019… Este ejercicio combinado de retrofuturismo nos permite pensar, no sólo en cómo décadas atrás era imaginada esta década, sino en cómo, desde esta década, podemos pensar aquel final de los setenta y comienzos de los ochenta del pasado siglo, en el que se diseñaron los planos del mundo en el que estamos, así como en las nefastas consecuencias de dicha planificación, que hoy sufrimos.

Nuestro paisaje es ya un pasado cercado por alambradas de espino, en la mentira de la gran fábrica neoliberal cuya producción principal es la muerte de todo lo vivo

Como sabemos, la ciencia ficción no habla de futuros, sino de presentes, de las posibilidades del presente en relación al pasado, impeliéndonos hacia adelante, obligándonos a mirar siempre atrás, a las ruinas de aquello a lo que llamamos progreso, como diagnosticara Walter Benjamin en su XI tesis sobre la Historia.

Sea el Angelus Novus (el Ángel de la Historia) de Benjamin, sean los ángeles de El cielo sobre Berlín (Wim Wenders, 1987) anticipando la caída del muro, sean los replicantes de la ciudad de Los Ángeles —‘nada es por acaso’, dicen sabiamente en Brasil—, cuyas lágrimas se perdieron en la lluvia en un futuro cercano ya pasado, uno de los hilos que trama estas historias con nuestra condición presente tiene que ver con los sueños, con aquello que llamamos soñar despierto. La influencia que la vigilia tiene sobre nuestros sueños, nuestras pesadillas, el poder de cuanto en ella sucede, la vida pública, sobre nuestra intimidad más profunda. La mercantilización de la vida interior y del deseo, su fragmentación e inserción en dispositivos que se apropian de nuestro sueño, así como de nuestra posibilidad de soñar -por ende transformar- esa vida pública desde esos sueños, esas pesadillas.

Nuestro paisaje es ya un pasado cercado por alambradas de espino, en la mentira de la gran fábrica neoliberal cuya producción principal es la muerte de todo lo vivo. Como Giorgio Agamben o Achille Mbmbe han señalado, la biopolítica se ha transformado en tanatopolítica; tecnotanatopolítica podemos decir. Apenas soñamos y nuestros sueños reproducen el tiempo-sin-tiempo que vivimos durante la vigilia, fragmentados como las historias sin destino que pueblan las redes sociales de Internet.

Sexo, amor, libido y actividades humanas de toda índole han sido mercantilizadas a través de dispositivos de control en el capitalismo cognitivo tecnoneoliberal

Hay dos libros recientemente publicados en español, cuya lectura cruzada permite captar esta situación a la perfección. El Tercer Reich de los sueños, de Charlotte Beradt y 24/7. El capitalismo al asalto del sueño, de Jonathan Crary.

En el primero de ellos se narran los sueños de gente corriente coincidiendo con la llegada del nazismo al poder en 1933; sueños angustiantes que reflejan lo que la vigilia y el naciente orden normativo vedan. Los muros de los hogares tienen ojos y oídos a merced del nuevo estado, que penetra a través de estos en las vidas privadas. Sólo el que sueña tiene vida privada en Alemania, profirió el jerarca nazi Joseph Lay en un discurso tras la llegada de Hitler al poder. Los sueños recogidos por Beradt y publicados en la década de los sesenta del pasado siglo con el apoyo de Hannah Arendt, hablan de extraños dispositivos de control y dominación soñados en aquel entonces, que poco o nada distan de los dispositivos conectados de nuestro tiempo presente. Pesadillas cibernéticas de vigilancia que inventan sistemas que forman parte de nuestro paisaje doméstico cotidiano y que utilizamos con nuestro consentimiento. No olvidemos que cibernética y gobierno tienen la misma raíz etimológica; Kibernum: llevar el timón, dirigir.

En 24/7, Jonathan Crary, muestra cómo jamás hemos dormido menos en la historia, capturados por dispositivos que, paradójicamente, o quizá no tanto, laten durante las horas del sueño programados en modo sleep, aunque no desconectados. Sexo, amor, libido, creatividad, amistad, las relaciones, pulsiones y actividades humanas de toda índole han sido mercantilizadas a través de dispositivos de control, vigilancia y dominación en el capitalismo cognitivo tecnoneoliberal. El capital acelerado en nuestras pulsiones como cocaína, del que hablaba Deleuze, como la norma. En otro momento nos ocuparemos de la relación entre drogas psicoativas, opiáceos y la (in)comunicación digital, aunque su centralidad en la relación entre el sueño y la vigilia es estratégica.

Producir, estar despiertos, lo que no significa estar conscientes. Dormir es el crimen. Soñar, el único acto que escapa al extractivismo que transforma cuanto hacemos en plusvalía con nuestro consentimiento. Aun así, nuestro sueño y nuestros sueños se resienten. Son ingentes los fondos destinados a investigar cómo reducir el tiempo de sueño; cada vez más hábitats son iluminados artificialmente, muchos de ellos bajo la imposición de la ideología de la seguridad descrita por Michel Foucault. El consorcio farmacéutico-militar-industrial diseña poderosos fármacos que alteran los ciclos naturales del sueño y la vigilia con el objetivo de producir y consumir las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana. El título del libro juega con la práctica BDSM (Bondage y Disciplina, Dominación y Sumisión, Sadismo y Masoquismo) 24/7.

Pero el sueño modela nuestra vigilia y viceversa, cada vez más esta última se apropia del primero. Desconectar, dormir, soñar otra vigilia, defender el último espacio negado al tecnocapitalismo cognitivo neuronal es resistir. Dormir es resistir, paradójicamente, a pierna suelta, lejos de los móviles y las tabletas, con toda la noche por delante. Un sueño profundo que pulverice y catalice las opresiones cotidianas de la vigilia. Dormir, soñar. En nada, despunta el alba trayendo un nuevo día.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Kabilas de mesa camilla
Kabilas de mesa camilla ¿Ramadán mubarak? o ¿ramadán digital?
La omnipresencia hace que las pantallas lo ocupen todo, incluso ese vacío que deja la abstinencia de comida y agua, y donde se supone que cada criatura se encuentra con lo que emana de sí misma.
Kabilas de mesa camilla
Kabilas de mesa camilla ¿Por qué lees a Nawal El-Saadawi?
¿Sabéis a quien no leo? A la Europa islamófoba que usa la vivencias de las mujeres como argumentos falaces en debates amarillistas que no aportan nada y que para colmo son tan machistas, o más, como el islam del que quieren salvarnos.
Entrevista La Poderío
Entrevista La Poderío “Existe una mirada en el cine que antes no existía, porque antes no estábamos”
Nofuentes tiene los pies en Málaga, pero vuela a Latinoamérica, donde estuvo viviendo muchos años y se curtió. Película en la que curra, película que resuena, como ‘Incanxul’, que ganó el Oso de Plata en Berlinale.
Teresa G
1/8/2021 15:05

Sobre el potencial revolucionario de los sueños:
Hacia una experiencia del dormir no enajenado https://gruposurrealistademadrid.org/vicente-gutierrez-hacia-una-experiencia-colectiva-del-dormir-no-enajenado

https://www.pepitas.net/libro/de-la-materia-del-sueno

0
0
Galicia
Galicia A Xunta aprobou a celulosa de Altri argumentando que a súa cheminea de 75 metros sería “icónica”
O Informe de Patrimonio Cultural, favorable á multinacional, emitiuse con base en dúas encargas externas, contratadas e pagadas pola empresa ao ex presidente e ao actual tesoureiro de Icomos-España.
República Dominicana
República Dominicana El Gobierno de Abinader desafía a la ONU expulsando mujeres embarazadas y recién paridas desde los hospitales
La campaña contra las migrantes haitianas del Gobierno de República Dominicana ha llegado a las maternidades. Decenas de mujeres embarazadas o con sus bebés en brazos han sufrido esta política.
Reducción de jornada
Trabajo El Gobierno aprueba el proyecto de ley para reducir la jornada laboral a 37,5 horas
La norma pasará al Congreso donde no cuenta con los apoyos necesarios de todos los socios de Gobierno, por lo que la Ministra de Trabajo ha apelado a la responsabilidad del Partido Popular para que esta nueva jornada laboral salga adelante.
Israel
Israel Netanyahu acelera los planes de ocupación total de una Gaza diezmada por el hambre
El ejército israelí quiere movilizar a 30.000 reservistas para una nueva expansión de la ofensiva sobre Gaza. Las organizaciones dependientes de la ONU alertan de la hambruna y las enfermedades en un enclave en el que escasea el agua potable.

Últimas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Madres organizadas contra los arrancamientos piden una reunión con Infancia
Pamela L.C. ve a su bebé dos horas a la semana después de que se lo retiraran dos días después de su nacimiento. Ella y otras madres han decidido organizarse para pedir medidas que frenen los arrancamientos.
Madrid
Madrid Sareb amenaza con desahuciar el centro social La Animosa, en Hortaleza
Los colectivos que participan del centro social okupado, y que han dado vida a este espacio durante los últimos cuatro años, convocan a defender su permanencia aunque se ha retrasado la fecha de desalojo hasta el 26 de mayo.
Opinión
Opinión España ya roza el 2,5% en gasto militar
Según el autor, investigador del Centre Delàs, el gasto militar real del Estado español será de 40.457 millones de euros y representará respecto al PIB el 2,48%. A esto se sumarán las inversiones comprometidas en programas de armamento.
Comunidad de Madrid
Universidad pública El alumnado de la UNED denuncia el “modelo antipedagógico” tras la supresión de tutorías presenciales
El proceso de eliminación de clases se remonta a 2008, aunque ha sido este año, con el nombramiento Claudia Sevilla como directora de centros asociados de Madrid, cuando el gobierno de Ayuso “ha pisado el acelerador”.
Opinión
Opinión El rentismo es racismo
La posición de las personas migrantes y racializadas en el conflicto del alquiler nos coloca como sujetos esenciales e imprescindibles en la lucha por la vivienda.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Alemania
Alemania Ines Schwerdtner: “Los conservadores tienen esta estrategia de normalizar la AfD, pero eso ha salido muy mal”
De profesión periodista, Ines Schwerdtner ha sido una de las responsables del ascenso de Die Linke, un partido que pasó de no aparecer en las encuestas a superar el 8% en las elecciones de febrero.