Tribuna
La batalla de Lesbos

En espacios fronterizos como el de Lesbos se está disputando el futuro de Europa y la agenda reaccionaria lleva la delantera. O tomamos partido urgentemente o perderemos la partida definitivamente.


Lesvos - 6
El campo de refugiados de Moria, con capacidad para 3.500 personas, rodeado por campos informales que triplican su tamaño en donde viven 18.000 personas más. Hibai Arbide-Muzungu coop
Eurodiputado y militante de Anticapitalistas
6 mar 2020 06:00

Estamos a principios de 2015. El joven gobierno de Syriza intenta sacudirse el corsé austericida que impone la UE y que ahoga a un pueblo griego que lleva años sufriendo recortes sociales. Un ejército de hombres de negro del Comando Troika desembarca en Atenas para dar una lección política a toda la izquierda europea: no se puede. Un golpe de Estado financiero tan veloz, efectivo y plagado de recursos como los rescates a los bancos.

Estamos a finales de 2015. Las guerras, el hambre y el cambio climático llevan años expulsando a miles de personas de sus lugares de residencia. Algunos intentan llegar a Europa. La Unión Europea (UE) entra en pánico. Esa pretendida súper potencia mundial dice ser incapaz de lidiar con unos cientos de miles de personas que huyen de la muerte. De repente, por sus cuatro costados a Europa le sangran las fronteras y le brotan las alambradas. Se suceden las reuniones de alto nivel, las propuestas y las bonitas palabras. Pero nada llega, solo los muros y el dinero para militarizar el Mediterráneo y subcontratar policías de fronteras en países alejados de los focos bienpensantes. Tanta velocidad y recursos despliega esta UE para rescatar a bancos, como lentitud y racanería para rescatar personas. Y así pasan los años, mientras el mensaje dominante pasa del Refugees welcome a aquel Do not come to Europe expresado por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, justamente en Grecia, poco antes de firmar el “acuerdo” de la vergüenza entre la UE y Turquía.

Saltamos en el tiempo y volamos al presente. Estamos en marzo de 2020. La guerra en Siria sigue abierta. Los recortes en Grecia siguen haciendo estragos sociales. Quienes huyen de la muerte siguen intentando llegar a Europa. Pero esta vez las instituciones europeas no titubean: en lugar de convocar la enésima reunión de urgencia que termina en nada, los presidentes de la Comisión, el Consejo y el Parlamento Europeo vuelan a la frontera greco-turca. Allí la policía griega está gaseando y disparando a quienes intentan cruzar, familias y menores incluidos.

Fronteras
Huir de la guerra en Siria para recibir disparos en la frontera griega

Esta semana, las miles de personas que intentan alcanzar territorio griego tras la apertura de fronteras de Erdogan se han topado con grupos de ultra derecha, legitimados desde el gobierno, la suspensión del derecho internacional y el respaldo de la Unión Europea a una Grecia que blinda su frontera a tiros. 

Muy cerca, en la costa, los guardacostas se niegan a rescatar a quienes flotan a la deriva, acusándoles y provocando naufragios mortales. En las playas, grupos fascistas amenazan a quienes intentan desembarcar y apalean a quienes lo consiguen. Cuando se cansan, queman locales de ONG solidarias, realizan checkpoints en las carreteras parando a todo aquel que no parece griego y persiguen a periodistas para que no den testimonios incómodos. Las autoridades europeas dan todo su apoyo a la respuesta del Gobierno griego, que acaba de anular de facto el derecho al asilo. La prioridad absoluta, dicen desde Bruselas, es “defender las fronteras europeas”. Ni una palabra ante la violación de los Derechos Humanos o el auge de la institucionalización de la xenofobia.

Donde hace unos años había hombres de negro, hoy hay aplausos. Donde entonces había una injustificable violación del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, hoy hay silencio ante la suspensión del Derecho Internacional Humanitario. Estos días niños han muerto en las costas griegas, pero ya no sabremos si se llamaban Aylan, porque no llenan portadas.

Donde había una injustificable violación del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, hoy hay silencio ante la suspensión del Derecho Internacional Humanitario

Este miércoles estuvimos en Lesbos. No podíamos quedarnos sentados viendo la barbarie. Intentamos visitar oficialmente el campamento de refugiados de Moira, pero nos negaron la entrada, así que tuvimos que recorrerlo guiados por sus propios moradores. Quizás la negativa buscaba evitar que viésemos que una parte ha sido reconvertida en un centro de internamiento semi-clandestino para las deportaciones que contempla la nueva legislación griega denunciada por vulneración de derechos por parte de organizaciones de abogados/as. O para que no fotografiásemos unas instalaciones ya precarias para acoger a 3.500 personas en las que hoy malviven 27.000. Solo tres médicos para todo el campo. Una letrina por cada 500 personas. Y por todos lados basura acumulada y niños corriendo.

Parece un basurero. Pero un basurero de derechos. Las ONG que aún aguantan tienen miedo: diariamente son amenazadas por milicias fascistas, algunas llegadas desde toda Europa para reforzar esa Internacional Reaccionaria en ascenso. La población local está cansada de ver cómo la UE es incapaz de aportar ninguna solución y les dejan solos entre la solidaridad con quienes llegan del mar y los recortes que llegan de Atenas. Ya nadie habla de cuotas de reubicación y el dinero solo va para comprar más barcos de Frontex. El caldo de cultivo de la guerra de los últimos contra los penúltimos; la pelea por recursos cada vez más escasos. Poner a los de abajo a competir por migajas hasta que vean el enemigo en quienes llegan de fuera con las manos vacías y no en quienes les expolian desde arriba con las manos llenas.

La extrema derecha gobierna hoy la UE desde el extremo centro. Aquella dicotomía tramposa ha mutado en un neoliberalismo autoritario de nuevo cuño

Hace unos años, en plena secuencia electoral que culminó con la segunda vuelta de las Presidenciales francesas entre Macron y Le Pen, se hablaba de una dicotomía entre el neoliberalismo europeísta y el nacionalismo reaccionario. Algunos ya decíamos entonces que aquello era una falacia, una trampa que ocultaba más sinergias que diferencias, un pretendido binomio funcional a un relato pluralista que convenía a ambas partes pero que escondía dos caras de una misma moneda. Hoy al menos ya no hay trampa: Macron, las instituciones europeas y todos los ministros del Interior que el miércoles se reunían de urgencia en Bruselas aplauden a los gobiernos de Grecia y Hungría, que están simple y llanamente aplicando las propuestas que defendía Le Pen en aquella campaña electoral o Salvini cuando aún era ministro italiano. La extrema derecha gobierna hoy la UE desde el extremo centro. Aquella dicotomía tramposa ha mutado en un neoliberalismo autoritario de nuevo cuño. La Internacional Reaccionaria ya no necesita ganar las elecciones para que sus medidas electorales sean programa de gobierno.

Hasta hace poco hablábamos de la “lepenización de los espíritus” como la peligrosa capacidad creciente de la ultraderecha para marcar la agenda social y política. Hoy Europa vive una lepenización acelerada. Y la barbarie de Lesbos, el sumidero de derechos de Moria, las muertes en el Egeo o las patrullas fascistas en Mitilene solo son su cara más visible. Viejos fantasmas recorren de nuevo Europa. Y la UE los abraza ya sin miramientos. Nos estamos jugando el presente y el futuro. Y la crisis política y de derechos que se vive en las fronteras y en los CIE solo es la punta del iceberg. La pelea por determinar quién tiene derecho a tener derechos ha entrado en una fase determinante. Ellos están organizados, tienen un programa y toda la determinación. Si no estamos a la altura, puede que dentro de muy poco simplemente ya no estemos. O tomamos partido urgentemente o perderemos la partida definitivamente.

Fronteras
Crónicas del espanto

Hay muchas formas de ocultar o negar la humanidad del otro: todas están siendo aplicadas magistralmente en estos tiempos. Una deshumanización sistémica, programática, está configurando lo que se viene. 

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Grecia
Grecia Frontex pone de nuevo la mirada en Grecia
En enero de 2025 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acusó a las autoridades griegas de llevar a cabo devoluciones forzadas de manera sistemática.
Fronteras
Fronteras El Gobierno de Mauritania alerta de que ya son más de cien cadáveres hallados en sus costas en 2025
Desde 2023 Mauritania es el principal punto de salida de embarcaciones hacia las Islas Canarias. El Gobierno reconoce el hallazgo de cuerpos. Mali reclama un trato humanitario a las personas que permanecen varadas en el país vecino.
Fronteras
Fronteras 24 horas en un albergue de Tijuana: “Que no se olviden de nosotros”
Unos 80 migrantes siguen con preocupación la política de cerrojazo y militarización de la frontera de Donald Trump desde sus casas de nylon.
Max Montoya
Max Montoya
28/7/2024 0:10

«Poner a los de abajo a competir por migajas hasta que vean el enemigo en quienes llegan de fuera con las manos vacías y no en quienes les expolian desde arriba con las manos llenas». Eso es. Exactly. Genau. Guau. Wow.

0
0
#48766
8/3/2020 16:00

Se equivoca usted, caballero. Lo más reaccionario fue la cristianización de Europa y sus cruzadas, origen de los conflictos con oriente medio. No necesitamos ningún Isis que les diga a nuestros gobernantes que financien la educación católica, experta en segregación.

Y, por si los católicos fueran poco, en otros lugares atacan los evangelistas.

No, hombre no, no dan miedo los integristas islámicos: dan miedo las religiones.

2
2
#48895
10/3/2020 20:57

a mí quién me da miedo es el Erdogan, muy mala gente

1
0
#48633
6/3/2020 11:03

La internacional reaccionaria, pero la de verdad, va viento en popa. O sea que no se preocupe Urbán, que va a seguir habiendo barrios enteros donde las mujeres tienen que ir tapadas, con patrullas de la sharía, reclutamiento para el ISIS y demás. Y en París va a seguir habiendo un 70% de nacimientos de origen árabe o africano. Lo más reaccionario concebible, la islamización de Europa planeada por Soros and company, algo que deja al fascismo de Mussolini como un ejemplo de feminismo y libertades civiles, sigue su marcha. No os preocupéis los reaccionarios de verdad, en serio.

5
10
#48800
9/3/2020 11:54

La internacional fascista y conspiranoica a la que representas no sabéis ni por dónde os caen las tortas. Con vuestros mitos de defender la oligarquía europea y la estatización a sangre y fuego de los territorios de Europa sois el vívido reflejo de su éxito para seguir haciendo pasta a cosa de vuestras neuronas. Tus únicas soluciones para el futuro es que todos se hagan polícias o verdugos, vamos, una sociedad de mercenarios y sicarios.

0
3
Investigación
Investigación Varios refuxiados denuncian á ONG Rescate Internacional por explotación laboral e agresión sexual
A Garda Civil investiga o centro de Mondariz-Balneario tras varias denuncias por parte de voluntarios migrantes que aseguran traballar sen contrato a cambio de 50 euros semanais. A ONG xestiona 1.700 prazas do programa estatal de acollida.
Galicia
Galicia A Xunta aprobou a celulosa de Altri argumentando que a súa cheminea de 75 metros sería “icónica”
O Informe de Patrimonio Cultural, favorable á multinacional, emitiuse con base en dúas encargas externas, contratadas e pagadas pola empresa ao ex presidente e ao actual tesoureiro de Icomos-España.
Educación
Educación Protocolos éticos en espacios educativos: ¿qué dicen sobre el abuso de poder?
La asociación de referencia para las escuelas gestalt acaba de aprobar un protocolo para detectar y abordar del abuso de poder. Otros ámbitos educativos cuentan con documentos éticos sobre este asunto.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'Os Pecadores' loitan contra montruos reais e mitolóxicos no novo episodio de 'O Teleclube'
O dúo do director Ryan Coogler e o actor Michael B. Jordan estrean unha película sobre a experiencia afroamericana cunha ameaza sobrenatural engadida.
Madrid
Movimiento estudiantil Vuelve la acampada universitaria por Palestina y contra el asedio de Gaza por parte del Estado de Israel
Los estudiantes vuelven a acampar en el campus de la Universidad Complutense en protesta y contra el genocidio palestino que “ha continuado y se ha intensificado”. Acusan de “inacción” al Gobierno español y exigen detener el rearme europeo.
LGTBIAQ+
Informe Estado del Odio Las agresiones físicas y verbales a personas LGTBI+ se han duplicado en el último año
El informe Estado del Odio: Estado LGTBI+ 2025 revela que el 20,3 % de las personas LGTBI+ encuestadas ha sufrido acoso. La discriminación en ámbitos como el empleo, el acceso a servicios o la vivienda, alcanza al 25,25 % del colectivo.
Más noticias
Personas sin hogar
Personas sin hogar “No todos somos conflictivos”: la otra cara de los sintecho en Barajas
Las personas que “viven” en el aeropuerto de Barajas, como en tantos otros, son el reflejo de un problema de fondo: el aumento constante del sinhogarismo ante el encarecimiento del acceso a la vivienda.
Eléctricas
Eléctricas Aagesen descarta el ciberataque y sitúa la desconexión que llevó al apagón en Granada, Badajoz y Sevilla
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica explica en el Congreso que siguen investigando, pero avanza que no fue un problema de cobertura ni de reserva. El Ejecutivo no ha detallado qué tipo de energía fue la que falló.
València
València La instrucción de la dana determina que Pradas y Argüeso cometieron una “grosera negligencia”
La magistrada Ruiz Tobarra resalta en un auto la inoperancia de la ex consellera y el ex secretario de emergencias, y califica como “absurdas” sus explicaciones sobre el retraso del sms.
Opinión
Opinión Por qué es vital que el mundo (y Europa) se desarme
Mientras buena parte de los políticos mundiales nos hablan de las amenazas que suponen los Otros, la conclusión en el campo de la ciencia climática es que los problemas del siglo XXI son consecuencia del modo de vida desmesurado del mundo occidental.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Uruguay
Muere Mújica Muere José Mujica: el descanso del guerrero
La muerte de Pepe Mujica hará aumentar sin duda la leyenda que rodeó durante tantos años al viejo guerrillero tupamaro convertido en presidente de Uruguay, pero no todos serán elogios.
Pensamiento
Michael Hardt “La respuesta a Trump no debe ser volver a la normalidad”
Pensador estadounidense y colaborador de Antonio Negri en algunas de sus mejores páginas, el filósofo Michael Hardt ha seguido dedicando su trabajo a la idea y a las prácticas del común.