Jorge León Casero

La responsabilidad individual siempre ha sido un dispositivo de poder orientado al control de la conducta y el mantenimiento del 'statu quo'

El conocimiento científico-técnico producido en común es automáticamente privatizado mediante el sistema de publicación de los resultados

La actual primacía de la política sociosimbólica exige fomentar el nihilismo ante cualquier discurso, tal y como hizo la contracultura radical punk.

El carácter libertario o autoritario que tome la gestión posterior a la crisis dependerá de cómo articulemos la movilidad a todos los niveles.

En un régimen biopolítico, la declaración de un estado de alarma por riesgo de epidemia identifica quién es el auténtico soberano político

El aceleracionismo apuesta por una apropiación común de la ciencia y la tecnología de plataforma como única forma de subvertir el sistema capitalista.

“Desarrollo sostenible” es el oxímoron con el que Occidente legitima un proyecto civilizatorio colonialista en el corto plazo, y suicida en el largo.

Antes que el empoderamiento de la población más vulnerable, la concepción europea del urbanismo participativo promueve graves procesos de gentrificación.

Más allá de una mera gestión colectiva de los bienes, lo común es un modo de auto-organización social completamente alternativo al derecho occidental.

Frente al universalismo abstracto de los Derechos Humanos, Deleuze propone una jurisprudencia situacional basada en la inter-conexión de fuerzas.

Los Derechos Humanos no se oponen a las políticas neoliberales. Su misión consiste en deslegitimar el derecho promulgado por los Estados.

El objetivo de la prestación de servicios públicos no es la redistribución de la riqueza, sino la satisfacción de las necesidades empresariales.

La prioridad del derecho a la propiedad frente al derecho a la subsistencia fue uno de los hitos fundamentales en la construcción liberal de los DDHH

La tecnología ha puesto en crisis la eficiencia política de las Humanidades como garante de la autoridad sociosimbólica hasta un punto de no retorno.

La cibernética no es políticamente neutra y predetermina tanto al sujeto como al modo de organización de la actividad anti-sistema.

Identificar un sujeto antagónico del actual tecno-capitalismo requiere profundizar en el análisis de las fuerzas materiales que sustentan la economía.

Las filosofías sociosimbólicas son herederas de una filosofía idealista reaccionaria que ha cambiado el concepto de “espíritu” por el de “fantasma”

La Filosofía Política platónica sustituyó el concepto presocrático de gobierno basado en la tecnología y la administración de las cosas

Contra el fin normalizador de la ética del trabajo, lo que se debería garantizar es el acceso a lo que permita satisfacer las necesidades básicas.

Una Política centrada exclusivamente en la toma de poder del Estado está abocada al fracaso debido a la actual sumisión del Derecho ante la Técnica.

El concepto nación forma parte de una estructura libidinal basada en el acceso al goce de “la Cosa” y el miedo al robo del mismo por parte del otro.

El sujeto político hegemónico debería construirse a partir de un análisis actualizado de la organización capitalista del trabajo.