Coronavirus
El cierre temporal de la producción en época de pandemia

El debate sobre la paralización de la producción sigue abierto. Los intereses empresariales y el mantenimiento de la actividad deben quedar supeditados a evitar el colapso hospitalario y garantizar la salud en el trabajo, a pesar de las patronales y el Gobierno vasco

Cuarentena Iruñea
¿ Volverán las obras a funcionar el 13 de marzo ? Mikel Urabaien Otamendi

El Gobierno español decretó el pasado domingo el cierre por dos semanas de las actividades  no esenciales. El colapso de los hospitales en algunas comunidades autónomas, y su proximidad en otras, exige la parada cuasi general de la producción. El precedente italiano de paralización tardía y la cercanía de la Semana Santa han servido para adelantar la decisión. Muchas vidas humanas pueden perderse por demorar decisiones en favor de intereses económicos. La prioridad es frenar la pandemia y el esfuerzo que está realizando la población confinada le corresponde también al mundo empresarial, con ocho o siete días de “permiso retribuido recuperable”. Muchos consideran que esa paralización debía haberse acordado antes, sin especular sobre una evolución positiva del número de contagios detectados, mientras lo peor en términos de desborde sanitario y drama social está por llegar con el posible aumento los próximos días de los decesos diarios.

Coronavirus
Cuáles son los servicios considerados esenciales que se quedan fuera del “retribuido recuperable”

Los repartidores de Amazon y los empleados de Correos seguirán trabajando. El real decreto publicado en el BOE recoge la regulación de los llamados “permisos retribuibles recuperables” y la lista de servicios esenciales que no pueden acogerse a él.

En Euskalerria la exigencia de cierre total la han realizado los partidos y sindicatos abertzales, contra la posición del Gobierno vasco que sigue defendiendo que la industria debe seguir funcionando, mientras el Gobierno navarro ha reclamado “flexibilidad” en la aplicación de la medida. A pesar de las dificultades derivadas del confinamiento, convocaron una jornada de protesta el viernes 27 de marzo para exigirlo, bajo el lema “Haserre Gaude”.

“Mientras que la reducción drástica de la movilidad es clave para contener la propagación de la pandemia, el Gobierno vasco se ha opuesto con contundencia a la paralización de los sectores productivos no esenciales”

Así mismo, más de 1.600 sanitarias vascas realizaron una petición con firmas al Gobierno vasco para la paralización de las actividades no esenciales, con el objetivo de reducir la presión sobre el sector hospitalario y que pueda mejorarse su seguridad ante el contagio. Conviene no olvidar que la falta de material de protección ha derivado en 1.145 trabajadoras del servicio vasco de salud positivas por coronavirus a fecha 31 de marzo, lo que ha supuesto una decisión judicial que insta, tras la solicitud de ELA, a que Osakidetza lo provea de forma inmediata. Las patronales, en la misma línea que el Gobierno vasco, han criticado la decisión del parón cuasi total de la producción.

Efectos de un mes de parón cuasi total

La industria vasca, privatizada y desmantelada en las últimas cuatro décadas, no produce lo esencial del material sanitario que se está revelando fundamental para combatir la pandemia en curso. Las instituciones públicas vascas no han sacado lecciones del pasado para orientar la industria, como si lo han hecho varios países asiáticos. Todavía hoy se guían por la maximización del beneficio a corto plazo de capitalistas e inversores, por encima de la utilidad social de lo producido, el mantenimiento del empleo y la búsqueda de retornos locales. Ahora, mientras que la reducción drástica de la movilidad es clave para contener la propagación de la pandemia, el Gobierno vasco se ha opuesto con contundencia a la paralización de los sectores productivos que no sean esenciales para la salud, la alimentación y otros servicios que se concretaron en el RD Ley 10/2020 del 29 de marzo. No hay que olvidar que Euskalerria es uno de los focos principales de Europa en intensidad de personas infectadas por cada 100.000 habitantes.

Hasta la aplicación esta semana de la nueva norma, los sectores que podían estar en funcionamiento abarcaban un número de actividades notablemente más amplio que en Italia, aunque existe una pugna constante entre empresas, patronales y gobiernos para abrir lo máximo posible, por un lado, y sindicatos por otro para reducir la posible extensión de la pandemia en los centros de trabajo, que cifran en una de cada tres personas infectadas.

En la Comunidad Autónoma Vasca los cálculos realizados por el profesor de la UPV/EHU Joseba Garmendia indicaban que, antes del cierre cuasi total, estaban trabajando aproximadamente 320.000 personas. Un número muy importante, que se debía reducir de forma sustancial para aplicar una “Terapia de Choque”, paralizando la producción para cortar la cadena de contagios. Lo que es cierto es que los primeros resultados del parón están provocando un incremento del desempleo en marzo -casi 11.000 personas- con un total de 128.213 paradas registradas en Lanbide, cuyo repunte empieza el 12 de marzo, con una caída de la afiliación a la seguridad social -26.300 personas- desde mediados de mes y un incremento de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo, con afectación a 153.000 personas en Bizkaia, Gipuzkoa y Araba, más de 34.000 en Navarra.

Las previsiones que se realizan por diferentes organismos son de una caída importante de la actividad económica y el empleo en el segundo trimestre del año, con cierta recuperación en el tercero y el cuarto, cerrando el año 2020 en negativo, con una recuperación prevista para 2021. Según el cálculo del CEPREDE para las comunidades autónomas, si la interrupción del consumo y el cierre parcial de la producción se limitara a cuatro semanas, más de 15.000 empleos desaparecerían en Bizkaia, Gipuzkoa y Álava, y menos de 5.000 en Navarra. Estos efectos se duplicarán con un periodo de suspensión de ocho semanas, 30.000 en la CAPV y 10.000 en Navarra para final de 2020. La Dirección de Economía y Planificación del Gobierno Vasco por su parte estima una destrucción de 17.000 empleos en 2020. Ambas previsiones son optimistas en relación al probable escenario de confinamiento más largo del actualmente decretado y al cierre cuasi total de la producción actualmente aplicado.

“No es cierto que una paralización temporal de la producción conduzca necesariamente al cierre de las empresas. Lo que esta crisis evidencia es la necesidad de una reconversión profunda y radical de la actividad económica”

Es muy pronto para establecer una relación de causalidad precisa entre la amplitud de esa paralización y la evolución de la pandemia. En todo caso, la comunidad científica insiste en la importancia decisiva de limitar los contactos entre personas para contener la propagación del virus. Mientras que la generalización de los test no tenga lugar, por las presiones en el mercado mundial para disponer de ese y otro material sanitario, será inevitable el confinamiento y paralización cuasi total de la producción. Ayer mismo Pedro Sánchez ha hecho público que se prorroga el confinamiento “puro y duro” de la población, así como que la paralización de la producción “no esencial” no se prolongará después de Semana Santa, cediendo así a la presión de la patronal y, entre otros, del Gobierno vasco.

El mundo cambia con el Gobierno vasco a la contra

La voluntad del Gobierno vasco es seguir produciendo lo máximo posible, a la vez que se alarga el confinamiento en los hogares. Su posición ha sido expresada por el Lehendakari Urkullu y la Consejera Económica Tapia. Su justificación se basa en dos argumentos: el riesgo de “coma económico” y la posibilidad actual de garantizar la salud en el trabajo.

En primer lugar explican, quienes se oponen a la medida aplicada estas dos semanas, la necesidad de evitar el “coma” de la economía y así permitir una mejor recuperación cuando finalice la crisis sanitaria. En alguna ocasión han concretado ese elemento en la importancia de no perder clientes por inatención de pedidos, obviando que es fruto de la extensión de la pandemia a nivel mundial por encima de medidas concretas en cada país, debiendo estar la economía subordinada a la garantía de la salud en el trabajo.

No es cierto que una paralización temporal de la producción conduzca necesariamente al cierre de las empresas. En todo caso, lo que esta crisis evidencia es la necesidad de una reconversión profunda y radical de la actividad económica, su orientación hacia actividades socialmente necesarias, de desarrollo ecosocial anclado en el territorio, aunque no sean las de mayores beneficios de las empresas. Avanzar hacia una sociedad que garantice el pleno empleo mediante una reducción sustancial del tiempo de trabajo. Los actuales acontecimientos están generando un consenso de que se deben desarrollar las actividades públicas dirigidas a la salud y cuidado de las personas, apoyar la rehabilitación de las viviendas, transformar la educación y la cultura, adaptar la industria a los imperativos ecológicos y, en definitiva, realizar una política basada en el interés superior de sostenibilidad de la vida, tal y como señala Jaime Pastor en su propuesta de decrecimiento selectivo.

Lanaren Ekonomia
Kalte ekonomiko eta sozialak gutxitu behar ditugu
VV.AA.

Koronabirusaren pandemia globalak ekarritako osasun larrialdi egoeraren kalte ekonomiko eta sozialak gutxitu behar ditugu, erabaki publiko eta ekintza kolektibo egokiak bultzatuz.

El debate sobre la la recesión que se avecina ha puesto de manifiesto las carencias en coordinación y cooperación entre los Estados miembros de la Unión Europea. Es verdad que se ha producido un aplazamiento de la austeridad de gasto, así como una política de expansión monetaria por parte del BCE para sostener la deuda pública en los mercados. Aún así, algunos países se resisten a hacer un frente común que organice de forma solidaria la respuesta a la crisis sanitaria en beneficio de las mayorías sociales, como proponen Manuel Garí y Fernando Luengo, así como Michel Husson. Las políticas de expansión fiscal imprescindibles deben adoptarse a nivel europeo para ser realmente eficaces. La vía de los “coronabonos” y un programa europeo de prestaciones de desempleo y subsidios mínimos son las dos medidas ahora más factibles, aunque sería necesario una implicación más directa de la política monetaria y fiscal a nivel europeo.

También existen dos riesgos internacionales. El primero que, de forma independiente del parón de la economía, haya una evolución negativa y descoordinada de la demanda externa europea y mundial que más pesan para Euskalerria (Francia, Alemania, Italia, Reino Unido, Argentina, México, Estados Unidos y China). El otro que en este contexto el papel de la Comisión Europea y el BCE, con la presión del capital financiero, sea impostado. Aún se tiene que concretar si se flexibiliza definitivamente la doctrina neoliberal del gasto, déficit y deuda, ya que en un futuro próximo se pueden volver a imponer los recortes, como pasó en 2010-2011. Para ello es necesaria seguridad jurídica, modificar la constitución española y las leyes de estabilidad, blindando las posibilidades de realizar la reconstrucción que anuncia el Gobierno español.

No hay aún garantías de salud en el trabajo

El segundo argumento del Gobierno vasco para oponerse al cierre temporal de la producción se basa en que el mantenimiento de la actividad productiva es compatible con la salud en el trabajo. Es una argumentación falaz, porque en la gran mayoría de las actividades productivas no se pueden cumplir por ahora las recomendaciones sanitarias en cuanto a distancia entre personas, higiene y protocolos anti-contagio. Más aún con la trayectoria incumplidora de un gran número de empresas en materia de seguridad y salud laboral. Además, la reorientación a actividades esenciales es minoritaria por parte de las grandes empresas, concierne más bien a personas solidarias, centros de formación y otras entidades. En los casos en que sea real por parte de las empresas nadie la cuestiona, por supuesto.

“El mantenimiento de la actividad productiva no es aún compatible con la salud en el trabajo. En la gran mayoría no se pueden cumplir por ahora las recomendaciones sanitarias en cuanto a protocolos anti-contagio”

En cualquier caso los trabajos esenciales y no esenciales, sobre todo si implican la vuelta a la actividad presencial dentro de una semana, deben realizarse reforzando los protocolos de seguridad y salud laboral, sistematizando la toma de temperaturas y la realización masiva de test como única forma de continuar la producción evitando los contagios. En caso de no ser posible, la paralización de toda actividad productiva no esencial es imprescindible. En este sentido sindicatos y organizaciones sociales se han manifestado estableciendo lo que consideran las prioridades sociales ante el coronavirus y la crisis del sistema”. Hay que entender el contexto actual dónde no hay suficiente inspección de trabajo para controlar las condiciones de salud laboral e imponer el necesario cierre de las empresas que las pongan en riesgo. Además existe una política de seguridad clasista a favor del empresariado, orientada al “orden público” para hacer cumplir las restricciones civiles del estado de alarma, pero que no interviene convenientemente ante los riesgos de salud laboral e incumplimientos en las empresas, como ha sucedido en Sidenor Basauri.

Llama la atención el contraste de la flexibilidad que se propone para la actividad empresarial con la rigidez de un confinamiento que prohíbe actividades como el paseo y el deporte al aire libre, aunque fuese con garantías y durante un corto espacio de tiempo, medidas adultocéntricas que se extienden incluso a las niñas y niños. Algunos países con sistemas públicos más fuertes y, por tanto, menor riesgo de colapso aplican un confinamiento más suave, como Francia y Alemania. Pasado lo peor, algunas medidas de relajo se han empezado a aplicar en Hubei y, más recientemente, en Italia, pero no está justificado aplicar una dureza a toda la población, y especialmente a la infancia, mientras se permite que la producción se mantenga de forma parcial sin garantizar todas las medidas de seguridad y salud en el trabajo. Veremos los medios y datos de los que disponemos a la vuelta de Semana Santa, mientras tanto, a descansar una semana más, sin cesar en la exigencia de medidas de protección a la mayoría social en peligro de degradación.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Análisis
Análisis Neoconservadurismo, multipolaridad y la decadencia de las democracias occidentales
Occidente, en su obsesión por dominar, ha fracasado en su intento de moldear el mundo a su imagen, dejando tras de sí Estados fallidos, migraciones masivas y un Sur Global cada vez más resentido.
Bitcoin
Bitcoin El FMI aprieta a El Salvador: el nuevo acuerdo le prohíbe acumular más Bitcoin y emitir Bonos Volcán
El gobierno de Nayim Bukele está en una situación financiera contra las cuerdas y la institución le ha enviado un nuevo acuerdo en el que le exige disminuir riesgos y exposición a la criptomoneda.
#57455
18/4/2020 3:54

Nosotros nos descansaron sin goso de sueldo y somos destajista pero si estamos a segurados y no nos dicen nada y no sabemos que hacer o con quien ir la empresa es de Monterrey y nosotros estamos en México

0
0
#55401
5/4/2020 12:52

Jamás ha habido una Huelga General tan grande, prolongada y con tanta participación en Euskalherria.
La banda de Confebask/PNV están desesperados por reabrir su 'oasis vasco' y retornar a una supusta 'normalidad' que no existe porque desde su posición de privilegio no puede explotar la furza de trabajo para seguir amasando/extaríendo riqueza y recursos.
No aceptaremos más casos Zaldibar, afortunadamente los sindicatos están fuertes (especialmente ELA), no hay nazis (ni verdes, ni naranjas, y los azules son residuales en peligro de extinción) y existe una sociedad suficientemente politizada, organizada y consciente ecologicamente como para hacer palanca de transformación social.
La banda de las boinas de ala ancha están desesperados y eso es una esperanza. El tiempo es un aliado. Hay esperanza para sembrar en el futuro que ya estamos.

5
2
Feminismos
Feminismos As mulleres galegas ocupan o segundo posto de menor retribución por hora de todo o Estado español
A súa precariedade maniféstase na contratación temporal, oportunidades limitadas de promoción e acceso limitado a postos de dirección. A desigualdade estrutural afecta especialmente ás traballadoras do sector primario, onde permanecen invisibles.
Análisis
Análisis ReArm Europe, el triunfo del capitalismo verde militar
El plan que acaba de presentar la presidenta de la Comisión Europea vuelve a utilizar la mágica cifra de los 800.000 millones, ahora con el objetivo declarado de transformar el modelo de defensa europeo.
La vida y ya
La vida y ya Reparadoras de grietas
Piensa, sobre todo, en quién se fijará en los vínculos que rompieron las bombas. Quién se dará cuenta de todo lo que se quebró.

Últimas

Feminismos
En directo Los feminismos salen a la calle por el 8M
Más de 1.200 convocatorias en todos los rincones del estado muestran la vitalidad de un movimiento que hoy tendrá el handicap de las fuertes lluvias en buena parte del territorio.
Argentina
La calle contra Milei Pensionistas argentinos salen a las calles para hacer frente al ajuste y la represión de Milei
Cada miércoles, jubilados y jubiladas se movilizan alrededor del Congreso en Buenos Aires exigiendo el aumento de sus haberes, la continuidad de la moratoria jubilatoria y el acceso a medicamentos esenciales.
Opinión
Opinión La pesadilla que no acaba
El funcionamiento de los servicios que deberían proteger a los menores de edad no alcanzan en forma y tiempo, y dejan familias rotas por el camino.
Reducción de jornada
Seguidismo de la patronal Junts traslada a Yolanda Díaz su “no” a la reducción de jornada y peligra su posible aprobación
La negativa de Junts a apoyar la reducción de jornada (al menos por el momento), junto con el no del PP, suman suficientes votos en contra como para tumbar la ley de bajada de horas una vez llegue al Congreso.
Gasto militar
Industria militar España deberá aumentar el gasto militar otros 20.000 millones de euros para cumplir con el rearme de la UE
Los 27 aprueban el plan de la Comisión Europea para aumentar el gasto en armamento en 800.000 millones de euros. Solo este año, España debería aumentar la partida de defensa en 3.500 millones de euros, según Geshta.
Sevilla
Komando G “Sin las mujeres, el barrio se pararía”
El Komando G es una red feminista ubicada en el Polígono Sur de Sevilla en la que participan vecinas y mujeres representantes de entidades sociales que busca ser un espacio de cuidados y reivindicación para todas las mujeres del barrio.
Gasto militar
Industria militar Europa y su alternativa a Trump: aumentar el gasto militar
La Comisión Europea anuncia el aumento del gasto militar en 800.000 millones de euros. "Estamos en una era de rearme”, dice la presidenta de la Comisión Europa, Ursula von der Leyen.

Recomendadas

Urbanismo
Urbanismo salvaxe Un pobo contra o asfalto: Bembrive e Mos rebélanse contra unha autovía que arrasará o seu pulmón verde
Veciñas e veciños conseguen presentar 25.000 alegacións contra unha estrutura de dez quilómetros, defendida xa só polo PSOE en Madrid e en Galiza, que partirá en dous unha poboación enteira e forzará a expropiación de decenas de vivendas.
Fronteras
Fronteras Sombras en el acuerdo de cesión de competencias pactado por el PSOE y Junts
El acuerdo sobre transferencia de las competencias en materia de migración entre PSOE y Junts encuentra el 'no' de Podemos y de organizaciones de migrantes y el 'sí' con matices de la izquierda independentista y de Sumar.
República del Sudán
Belkis Wille “En Sudán hay milicias practicando violaciones a gran escala contra mujeres y niñas”
Belkis Wille, investigadora de Human Rights Watch, denuncia los abusos de grupos armados como las Fuerzas de Apoyo Rápido en el conflicto sudanés, donde se registran crímenes tanto de esclavitud sexual como de sometimiento mediante violaciones.
Salud mental
Sesgos en medicina Mujeres y consumo de psicofármacos: la medicalización de sus vidas
Las mujeres consumen el doble de psicofármacos que los hombres. Además de una mayor prevalencia de depresión o ansiedad, las especialistas avisan de sesgos de género en los diagnósticos.