Filosofía
Con ojos de Estado II. Resistencia y legibilidad

El politólogo y antropólogo estadounidense James C. Scott ha realizado contribuciones sustantivas para el estudio de las dinámicas estatales, las relaciones de poder y los procesos de dominación y resistencia. Segunda parte del análisis de su libro 'Lo que ve el Estado. Cómo ciertos esquemas para mejorar la condición humana han fracasado', publicado en 1998 en inglés y traducido al castellano en el 2022.
Panóptico
La lógica de la vigilancia expresada en el modelo panóptico (Foucault)
Depto. de Cs. Antropológicas-FFyL, Universidad de Buenos Aires, Argentina
17 mar 2023 09:00

El presente texto ha sido elaborado por Julieta Gaztañaga, Brenda Canelo, Laura Berisso, Avelina Brown, Carla Gerber, Hebe Montenegro, Facundo Gaitán, Lisandro Orlando, Anabel Pavone y Paloma Posadas (Depto. de Cs. Antropológicas-FFyL, Universidad de Buenos Aires, Argentina)

Como mencionamos en la parte de I de este ensayo, en el año 2022 tuvimos la fortuna de tener dos obras de James Scott traducidas al castellano. En esta segunda parte, profundizaremos en algunas cuestiones del libro Lo que ve el Estado poniéndolas en relación con otras contribuciones del autor que tienen una vigencia fundamental para nuestros tiempos.

Esta obra que nos ocupa viene a complementar otra que, en nuestras latitudes sociolingüísticas de habla hispana, había recibido la mayor atención. Nos referimos a Los dominados y el arte de la resistencia: discursos ocultos (México: Ediciones Era, 1990), traducido al castellano por Jorge Aguilar Mora cinco años más tarde que su publicación original.

En Lo que ve el Estado. Cómo ciertos esquemas para mejorar la condición humana han fracasado, Scott se centra en el problema de la legibilidad. Es decir, el problema de cómo el Estado, a través de sus instituciones y agentes, logra simplificar, reducir, desterrar y transformar ciertas praxis sociales en estatales. ¿En qué sentido? Pues transformando lo que eran prácticas locales excepcionalmente complejas y por lo tanto “ilegibles” en términos estatales, en plantillas, campos de visión aptos para la lectura y la intromisión estatal. Este proceso atañe en especial a las prácticas relativas a la tenencia de la tierra y a la denominación de las cosas.

La legibilidad adquiere fuerza y dinamismo propio cuando el Estado [...] crea una cuadrícula estándar, simplificada y uniforme. Esta cuadrícula es capaz de permitir registrar y monitorear de manera centralizada a la totalidad que en ese movimiento así ha sido creada. Una verdadera magia estatal.

La legibilidad adquiere fuerza y dinamismo propio cuando el Estado, a través de un extenso funcionariado de saberes diversos unidos en el arte de ordenar y nominar, crea una cuadrícula estándar, simplificada y uniforme. Esta cuadrícula es capaz de permitir registrar y monitorear de manera centralizada a la totalidad que en ese movimiento así ha sido creada. Una verdadera magia estatal.

Para construir la analítica de la legibilidad, Scott examinó otros problemas ligados de maneras más o menos directas al proceso por el cual el Estado construye esa técnica, campo y forma de visión. Referiremos sucintamente a tres: 1) la relación entre legibilidad y el arte de gobernar; 2) la relación entre legibilidad y soberanía y 3) la relación entre legibilidad y la biopolítica o la inscripción de la legibilidad en los cuerpos y sus espacios.

La relación entre legibilidad y el arte de gobernar

Scott propone ver a la legibilidad como un problema central en el “arte de gobernar”. Tal como lo desarrolló Michael Foucault (2006), entre el siglo XVI y el XVIII se fue conformando un nuevo arte de gobernar que difería de la visión maquiavélica, basada en proteger la relación entre el príncipe y su principado, y que apuntaba a las habilidades y saberes prácticos del soberano concentrado en gobernar el territorio y la población que lo habita. El desarrollo de un nuevo arte de gobernar orientado al “fin oportuno” de las cosas que deben gobernarse (a disponer las cosas en lugar de meramente imponer la ley), estuvo ligado a un conjunto de transformaciones del aparato administrativo de las monarquías, de saberes específicos como la estadística, y de intentos de racionalizar o economizar el ejercicio del poder; surge, por ejemplo, la economía política como estudio de las relaciones entre población, riqueza y territorio. Pero, sobre todo, emerge la idea de que los seres humanos conformamos una colectividad natural de seres vivos, con características diferentes a las voluntades individuales. Este es el “problema de la población”, que fue resuelto o abordado en el lenguaje de las regularidades estadísticas, y proporcionó la evidencia de que había efectos económicos diferentes a los de la agregación familiar como modelo de gobierno. A partir de allí, las poblaciones son entendidas con saberes específicos y gobernadas a través de técnicas particulares: campañas directas o indirectas para estimular el aumento del índice de natalidad, movimientos poblacionales, doctrinas de “razón de estado” que intervienen en los hábitos y actividades de las personas (Rose, 2007).

El análisis desde la legibilidad le permite a Scott complementar este largo y complejo proceso en el cual la población pasa a ser fin e instrumento del gobierno. En su trabajo, enfatiza en la importancia de romper con la teología de la eficacia estatal y, en cambio, considerar el papel crucial de los desaciertos, cegueras, errores y planes fallidos. En este sentido, el “estado premoderno” era parcialmente ciego; sabía muy poco sobre sus súbditos, su riqueza, sus propiedades y rendimientos, su ubicación, su propia identidad. Carecía de algo parecido a un “mapa” detallado de su terreno y su gente. No contaba con una métrica que le permitiera “traducir” aquello que sí conocía en un estándar común necesario para armar un cuadro sinóptico, sistemático de las cosas y la gente en relación con las cosas. Como resultado, sus intervenciones fueron a menudo crudas y contraproducentes.

Un autor que ha abordado este problema de una manera que permite completar el nexo entre ambos aportes es David Graeber. En la literatura especializada sobre el poder, señala, abunda la cuestión sobre la “visibilidad” y la “invisibilidad”, expresada en conceptos como “panóptico” y “la mirada del poder” (Graeber, 2018: 163-4). Su uso remite, en su mayor parte, a la obra de Michel Foucault, especialmente Vigilar y castigar (1975). Se trata de que mientras que en el sistema feudal el poder era lo que se veía y su lugar eran las catedrales, los palacios y el cuerpo del rey (mostrado de manera constante en festividades y espectáculos reales), hacia el fin del Estado feudal, a comienzos del siglo XVIII, los términos del poder se invirtieron. En el feudalismo, sólo los poderosos eran individualizados, dignos de existencias materiales y particulares, sus rostros se exhibían en pinturas y monedas y sus genealogías y hazañas se convertían en la historia oficial del Estado; mientras, los no poderosos eran espectadores sin rostro. En cambio, en los “sistemas disciplinarios”, el poder pasó a ser ejercido por burocracias sin rostro, invisibles, que inspeccionan, examinan y evalúan a sus sujetos. Se trata de una lógica de la vigilancia, consagrada en las nuevas instituciones como la fábrica, la inspección en los hospitales, los exámenes escolares y la revista militar. Dentro de esas instituciones, no sólo quienes ejercen el poder se vuelven abstracciones despersonalizadas, sino que los objetos de vigilancia se individualizan: cada uno es pasible de ser inspeccionado, juzgado y clasificado de acuerdo con criterios formales específicos (Foucault, 1975).

La relación entre legibilidad y soberanía

Otro elemento que subraya la obra de Scott es la importancia de lo local como construcción política clave que evidencia los límites, además de los alcances territoriales, de los procesos de centralización y la universalización de las funciones estatales. En este sentido, el propio Foucault señaló que la soberanía y la disciplina no dejan de existir al erigirse el gobierno como modo de poder. Y aunque a veces la analítica foucaultiana los presenta como un quiebre entre regímenes, es claro que ambas modalidades de poder coexisten, tal como muestra Scott en su análisis de la legibilidad estatal. Subrayar esta coexistencia es crucial porque si aplicamos la propuesta foucaultiana de una ontología del poder no esencialista (que va más allá de nociones de orígenes y centros de poder, o de la continuidad de sus formas culturales usualmente atendidas por lxs antropólogxs) a todo lo que respecta al poder soberano estatal, encontramos efectos contraproducentes.

Como argumentan Hansen y Steputtat (2006) la visión del poder foucaultiana impregnó y guio toda la reinvención de la antropología política y del Estado desde la década de 1990. Pero la hegemonía de cierta visión dispersa y capilar del poder por sobre otras resultan problemáticas. Si el poder está disperso en toda la sociedad, en instituciones, disciplinas y rituales en los que se produce a sí mismo, ¿cómo explicar la proliferación del discurso legalista, la idea popular generalizada del Estado como centro social, la persistencia de la visión del Estado como legislador central y como árbitro? En términos de Scott, ¿qué decir de la legibilidad incorporada y la impuesta de pronto y coactivamente, su rechazo y su deseo, su evitación y reclamación? ¿Cómo entender las ideas de la corrupción como un mal que emana de ciertos centros, personas o dominios ocultos? (Gupta, 2005) ¿De qué manera interpretar que la violencia destruye los lazos sociales, pero también produce autoridad informal? Así como el camino usual ha sido recurrir a la obra de Agamben para repensar la relación entre la soberanía y las modalidades disciplinarias de poder (Das y Poole, 2008); consideramos que el trabajo de Scott y su minuciosa atención a las formas locales que desafían la soberanía como poder unificado es igualmente crucial. El poder soberano existe en los estados modernos junto a, y entrelazado con, las racionalidades biopolíticas que apuntan a reproducir vidas y sociedades como posibilidad permanente de perder la ciudadanía y los derechos, incluso de quedar reducido a una forma puramente biológica.

Si el poder está disperso en toda la sociedad, en instituciones, disciplinas y rituales en los que se produce a sí mismo, ¿cómo explicar la proliferación del discurso legalista, la idea popular generalizada del Estado como centro social, la persistencia de la visión del Estado como legislador central y como árbitro?

El trabajo de Scott complementa los análisis de las mentalidades y de los proyectos de los funcionarios con las indagaciones sobre cómo se configura el gobierno y el poder soberano en la práctica y en la vida cotidiana. Por ejemplo, como examina Nikolai Ssorin-Chaikov (2003) en los paradigmas de conocimiento y gobierno, imperial y soviético en Siberia, algunos estados coloniales eran “estados etnográficos” que empleaban la recopilación y categorización de datos científicos para generar una realidad gobernable susceptible de intervenciones.

La relación entre legibilidad y la biopolítica

Las “tecnologías políticas gubernamentales”. Antes de profundizar en el concepto de biopolítica, Foucault examinó ciertas tecnologías que operaban como condición de posibilidad de aquel biopoder. La analítica de la gubernamentalidad no parte de la unidad del Estado, sino de situarlo como un punto de objetivación de prácticas gubernamentales que tienen por finalidad conducir las conductas de otros (Castro-Gómez, 2010). El propio Scott, antes de focalizar en la legibilidad, se interesó en comprender por qué el Estado siempre parece ser el enemigo de la gente que se desplaza y por qué sus proyectos siempre parecen destinados a inmovilizarlos (sedentarizarlos, confinarlos, localizarlos).

En esta dirección, cabe recordar aquel señalamiento de David Graeber (2004) quien, retomando la obra de Yann Moulier Boutang, un historiador en la línea del autonomismo, argumentaba que la historia del capitalismo es la historia de los intentos de resolver el problema de la movilidad de los trabajadores, incluyendo la creación de regímenes especiales de contratos laborales y las formas de control de las fronteras. De lo contrario, los trabajadores deberían ser “libres” para vender o no vender su fuerza de trabajo.

Los esfuerzos de sedentarización son parte del intento de hacer una sociedad legible, de ordenar a la población y simplificar las funciones estatales clásicas de impuestos, reclutamiento y prevención de rebeliones. La propuesta de Scott de pensar a la legibilidad de las poblaciones y los territorios como un proyecto estatal de largo alcance y que se construye a lo largo de varios siglos, nos permite incluso pensar problemas específicos que han sido abordados por diversxs autores, dentro y fuera del marxismo, y con otros enfoques. Es decir, la legibilidad como categoría analítica es fértil yendo más allá de la obra de Scott. Podemos pensarla como una herramienta para diferentes problemas o fenómenos del Estado y contra el Estado, o para desmenuzar las perspectivas y aristas de los procesos concretos que configuran y moldean las visiones estatales.

Por ejemplo, en los trabajos de Henri Lefebvre, y especialmente en La producción del espacio (1974), se examinan los modos en que el espacio urbano se encuentra constantemente disputado, entendiéndolo como una dimensión fundamental de la lucha de clases. Allí opera una “trialéctica” de categorías: el espacio concebido, el espacio percibido y el espacio vivido. Esta última se refiere a la dimensión simbólica del espacio, a los sentidos e imaginarios que las personas construyen sobre él. El espacio percibido se refiere a las prácticas cotidianas de lxs sujetxs sobre un territorio, refiere a los diversos usos que se le da al espacio urbano, particularmente al espacio público. Mientras que el espacio concebido es propuesto como el espacio del poder, el de la planificación urbana, y de la norma por la norma, del deber ser. Un ejemplo de estas dos últimas categorías que podemos pensar en nuestra cotidianidad son los semáforos: en la planificación urbana, cuando está en rojo no se puede cruzar, sin embargo, muchas personas en sus prácticas cotidianas igual lo hacen. El espacio concebido propone una cosa, y el espacio percibido otra diferente. Desde Scott, el proyecto estatal de la legibilidad se expresa en la construcción de semáforos que regulan y organizan el tránsito urbano, tanto de personas a pie como en autos. Sin embargo, las prácticas de lxs sujetxs nunca se condicen al 100% con las propuestas estatales y, a su vez, adquieren siempre sus particularidades locales.

Referencias bibliográficas citadas

Castro-Gómez, S., 2010. Historia de la gubernamentalidad. Razón de Estado, liberalismo y neoliberalismo en Michel Foucault. Bogotá: Siglo del Hombre.

Das, V. y Poole, D., 2008. “El Estado y sus márgenes. Etnografías comparadas.” Cuadernos de Antropología Social, 27, 29-52.

Fernández Álvarez, M. I., 2017. La política afectada. Experiencia, trabajo y vida cotidiana en Brukman recuperada. Buenos Aires: Prohistoria.

Foucault, M., 1975. Vigilar y castigar: nacimiento de la prisión. México, D.F.: Siglo Veintiuno Editores.

Foucault, M., 2006. “Clase del 1 de febrero de 1978”. En: Seguridad, territorio, población. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica.

Gledhill, J. E., 2000. El poder y sus disfraces. Perspectivas antropológicas de la política. Barcelona: Bellaterra.

Graeber, D., 2004. Fragments of an Anarchist Anthropology. Chicago: Prickly Paradigm Press.

Graeber, D., 2009. Direct Action: An Ethnography. Oakland: AK Press.

Graeber, D., 2014. The Democracy Project: A History, a Crisis, a Movement. Londres: Penguin Books.

Graeber, D., 2018. Hacia una teoría antropológica del valor. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica.

Gupta, A., 2015. “Fronteras borrosas: el discurso de la corrupción, la cultura política y el estado imaginario”. En: Abrams, P., Gupta, A. y T. Mitchell (eds): Antropología del Estado. México: FCE.

Hansen, T. y Stepputat, F., 2006. “Sovereignty Revisited”. Annual Review of Anthropology 35(1), 295–315.

Lefebvre, H., 1974. La producción del espacio. Madrid: Capitán Swing.

Manzano, V. y Ramos, A., 2015. “Introducción. Procesos de movilización y de demandas colectivas: estudios y modos de abordar ‘lo político’ en la vida social.” Identidades, 5, 1-25.

Roca Martinez, B., 2017. “Pensar con James Scott: Dominación, conocimiento, resistencia”. Araucaria. Revista Iberoamericana de Filosofía, Política y Humanidades, 19(37), 91-113.

Rose, N., 2007. “¿La muerte de lo social? Re-configuración del territorio de gobierno.” Revista argentina de sociología, 5(8), 111-150

Rose, N., 2007. The Politics of Life Itself: Biomedicine, Power, and Subjectivity in the Twenty-First Century. Princeton: Princeton University Press.

Roseberry, W., 2007 [1994]. “Hegemonía y el lenguaje de la controversia”. En: Lagos, M. L. y Calla, P. (comps.) Antropología del Estado. Dominación y prácticas contestatarias en América Latina. La Paz: PNUD.

Scott, J., 1976. The Moral Economy of the Peasant: Rebellion and Subsistence in Southeast Asia, Yale Press.

Scott, J., 1985. Weapons of the Weak: Everyday Forms of Peasant Resistance. Yale Press.

Scott, J, 1990. Domination and the Arts of Resistance. Yale Press, traducido como Los dominados y el arte de la resistencia: discursos ocultos (México: Ediciones Era), traducido por Jorge Aguilar Mora al castellano.

Scott, J., 1998. Seeing like a State: How certain schemes to improve the human condition have failed. Yale Press, traducido como Lo que ve el Estado (Fondo de Cultura Económica, 2022).

Scott, J., 2009. The Art of Not Being Governed: An Anarchist History of Upland Southeast Asia, Yale Press.

Scott, J., 2012. Two Cheers for Anarchism. Princeton: Princeton University Press.

Scott, J., 2017. Against the Grain, A deep history of earliest States. Yale Press, traducido como Contra el estado (Trotta, 2022),

Ssorin-Chaikov, N., 2003. The Social Life of the State in Subarctic Siberia. Stanford: Stanford University Press.

 


Sobre o blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

El Salto Radio
El Salto Radio La tribu judicial, una tribu patriarcal
Entrevistamos a la antropóloga Caterina Canyelles: con ella conversaremos sobre su libro Machismo y poder judicial
Feminismos
Conflicto vasco Andrea García González: “No callar ni olvidar supone desvelar las violencias para eliminarlas”
La antropóloga aporta al relato sobre ETA sus propios apuntes feministas en ‘Calla y olvida’, un libro para poner palabras al conflicto en el País Vasco y mirar a todas las violencias, también las que son invisibles.
AGANTRO
AGANTRO Antropologia, vida e terra: apontamentos acerca de uma agenda de pesquisa.
Acredito que antropologia: vida e terra, possa ser uma forma de enunciação de pautas que se estão impondo às pesquisas antropológicas em diferentes contextos contemporâneos, já seja na América Latina ou na Europa.
Sobre o blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas as entradas
Educación pública
Iglesia Semana Santa: negocios, procesiones en colegios, inmatriculaciones y fervor
Más allá de la expresión cultural, la Semana Santa tiene una esfera económica que genera millones de euros y otra social que le sirve a la Iglesia Católica para legitimar sus privilegios dentro del Estado español.
Urbanismo
Urbanismo La nueva Ley del Suelo va al Congreso bajo la acusación de fomentar pelotazos urbanísticos
Sumar y Podemos no garantizan el apoyo a la ley, que limita las posibilidades de declarar nulos los planes urbanísticos, así como la acción ciudadana contra las irregularidades urbanísticas.
Memoria histórica
Marc Solanes “Mi bisabuela luchó en el frente y fue considerada una mala madre, pero lo hizo por sus hijas”
En ‘Las niñas de Elna’ (Pollen, 2024) el periodista reconstruye la historia de las mujeres de su familia resolviendo enigmas para resignificar la imagen de la mujer en la historia.
Palestina
Palestina Viaje al fondo del horror
El fotoperiodista Javier Bauluz cubrió la primera Intifada, la primera gran rebelión del pueblo palestino desde la creación del estado israelí.
Poesía
Poesía La generación beat sigue latiendo
La generación beat es la del ritmo, del golpe, la de superar, la del latido en el papel y fuera de él. La del sentimiento desgarrador que sale del individuo, pero llega a la sociedad.
Literatura
Literatura ‘La santita’ de Mafe Moscoso: para escribir sobre el fin del mundo
‘La santita’, libro de relatos de Mafe Moscoso, es el método pero también es el fin: pone a convivir lo precolonial con las formas de nuestro presente ultracapitalista, ultramuerte, sin exclusiones ni jerarquías.
Maternidad
Maternidades Reaprender la espera
El tiempo de gestación es largo y va a un ritmo distinto al que acostumbras: el ritmo natural al que desarrolla una playa, un monte, un océano. Y no estamos ya habituados a darle la mano a la pausa.

Últimas

Industria
Transición industrial Mecaner, un cierre injusto o cuatro alternativas con mirada ecosocial para mantener la fábrica de Urduliz
ESK y LAB han presentado el ‘Plan de Transición Ecosocial’ que ha elaborado la cooperativa Garúa como una herramienta para la búsqueda de soluciones al ERE propuesto por la multinacional Stellantis.
Sidecar
Sidecar Crisis intratable en la República Democrática del Congo
Una y otra vez los actores externos han fracasado a la hora de contener la escalada de violencia en la República Democrática del Congo.
Más noticias
América Latina
Caribe Haití: el fracaso neocolonial y el “eterno castigo de su dignidad”
La crisis de gobernabilidad que vive Haití después del alzamiento paramilitar que liberó a más de 3.600 presos y expulsó al primer ministro es un capítulo más de una historia colonialismo y dependencia.
El Salto Twitch
El Salto TV Economía y titulares de guerra
En el programa en directo de Economía Cabreada del 26 de marzo se hizo un análisis de la deriva bélica de la Unión Europea, sus gobiernos y de los grandes medios con Tica Font y Miquel Ramos.
Sidecar
Sidecar Soluciones bonapartistas
Las turbulencias en el seno de los dos partidos estadounidenses dominantes refleja el problema más amplio de un sistema capitalista cada vez menos capaz de proporcionar ganancias materiales a la clase trabajadora.
Memoria histórica
Memoria histórica Las nuevas leyes de memoria histórica recuperan la “concordia” franquista
La ofensiva legislativa de gobiernos autonómicos como el de Castilla y León y el País Valencià, adoptan un enfoque revisionista que amenaza los avances en el reconocimiento memorialista.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda La PAH València clama por el derecho a una vivienda digna: “¿Duermen tranquilos?”
Centenares de personas protestan frente al palacio de la Generalitat para exigir que se haga efectivo el derecho a la vivienda ante la insoportable alza de los precios.

Recomendadas

Investigación
Investigación O Goberno galego repartiu 4.000 millóns de euros en contratos a dedo en só seis anos
Desde 2018, a Xunta asinou 1.034.964 contratos sen sacalos a concurso: algo máis do 30% do diñeiro do que dispón para o exercicio de 2024. Ademais, 35.362 deses contratos teñen un importe entre 14.000 e 14.999 euros, o límite legal.
Ríos
Radiografía fluvial de España La tierra que no amaba sus ríos
Los ríos ibéricos agonizan. Casi la mitad de las masas de agua está en mal estado. Presas, sobreexplotación, contaminación y crisis climática son sus principales amenazas, con la agroindustria como mayor agresora.
Cine
María Alché y Benjamín Naishtat “El cine puede proponer imágenes y reflexionar, y por eso Milei necesita destruirlo”
María Alché y Benjamín Naishtat dirigen ‘Puan’, una película optimista y amarga, entre la comedia y el cine social, que ofrece nuevas lecturas tras los primeros cien días de gobierno de Milei en Argentina.