Entrevista La Poderío
El pulso estético de Lula Amir: “Lo singular sobrevive siempre que le bajemos el volumen al miedo”

Ver moverse a Lula Amir es puro poderío. No solo sobre las tablas de un escenario, también en defensa de La Casa Invisible, que este año ha cumplido sus 17 primaveras de resistencia en un centro de Málaga cada día más gentrificado, o a través de intervenciones para denunciar violencias machistas.
Lula Amir - La Poderío 01
La coreógrafa Lula Amir durante la pieza de “Maldito Bolero” | Foto cedida por David Burgos
La Poderío
16 mar 2024 06:00

Lula Amir (Montevideo, 1985) es mucho más que alguien que ama la danza contemporánea. Esta migrante afincada en Málaga defiende la cultura desde la periferia y la necesidad de tejer espacios desde la capital de la Costa del Sol, como Málaga danza, colectivo que se enfrenta a la dinámica individualizadora y precaria que nos atraviesa para repensar juntas diversas problemáticas. Desde hace doce años, la artista participa de distintos procesos creativos y culturales en la ciudad andaluza, como demostró hace unas semanas en la II edición del festival Autóctonxs, en la que creadoras locales mostraron sus propuestas en uno de los pocos espacios habilitados para ello en Málaga.

La pieza programada en Autóctonxs, “Maldito Bolero”, mezcla siempre la pasión por el arte sin miramientos y la denuncia social, ¿de dónde surgió esa pieza?
“Maldito Bolero” es un ritual de paso, una ceremonia, una trasmutación. Lo primero que pujó creativamente fue jugar con el imaginario y la estética que entrañan los boleros. Hay algo en esa estética que es muy atrayente, no soy original en esto, creo que nos pasa a muchas. Lo que compone la dramaturgia de los boleros es absolutamente plástico, tiene texturas, temperaturas, un clima. Tiene un hombro desnudo, unas flores en la basura, tiene unos labios con rush, una despedida, calles vacías, atardeceres, tumbas.

Dentro de los temas recurrentes sobre los que versan los boleros (amor no correspondido, traición, mujer hermosa que muere, hombre bueno que sufre) hay un imaginario riquísimo, quiero decir, es infinita la paleta de colores que ofrecen, los escenarios.

Acompañé este primer pulso estético poniendo a rodar ideas en torno a lo que habilita la poética cliché. Me gusta pensar que la narrativa de los boleros, las telenovelas y otras joyas abren una “zona cero”, un espacio donde es legítimo lo miserable, lo patético, el despecho y el desbarre. Me pregunto si retratan modos de ser, amar y vivir o los edifican. Y entre estas ideas e imágenes nació un primer boceto.

Durante la obra provocas que el público se sienta incómodo, riéndose o quedándose boquiabierto frente a situaciones sumamente tensas en un mundo en el que cada vez más nos rechina enfrentarnos con lo que no nos gusta, ¿crees que este tipo de herramientas nos ayudan a dialogar con lo diferente?
Sí, lo creo y creo que pasa en general con las artes. Nos permiten tomar contacto con ideas, pensamientos, creencias o afectos desde un lugar sensible y sensitivo. Quiero decir, lo que nos gusta, nos conmueve e impacta, no lo hace, necesariamente, en el plano de lo lógico, de lo que pasa por la razón. Somos capaces de resonar con sensaciones producidas por una imagen, por el color o por el clima de una escena. 

Cuando se dice que algo nos pasa por el cuerpo, creo que es esto, que otros lenguajes y herramientas nos facilitan entender algo sin entenderlo, sin intelectualizarlo

Cuando se dice que algo nos pasa por el cuerpo, creo que es esto, que otros lenguajes y herramientas nos facilitan entender algo sin entenderlo, sin intelectualizarlo. Lo verdaderamente importante cuando vemos una obra de cualquier disciplina artística no es capturar el sentido literal que tiene para quien la compuso, sino que en algún lugar de esa creación nos sintamos acogidas.

 También utilizas redes sociales para entablar un diálogo con las personas que asisten a la pieza en tiempo real. ¿Cómo se articula lo que te plantea cada persona en redes sociales a través de un lenguaje corporal?
La verdad es que en esto soy absolutamente intrusa, no manejo las redes apenas, ni en general la tecnología, pero me parecía la forma más eficaz y ecológica de tener un feedback del público en directo. La idea no es tanto articular en escena las propuestas que me lanzan, sino más bien tener una instantánea del imaginario colectivo. Qué está viendo la gente de lo que yo estoy mostrando.

En relación con la pregunta anterior, pienso que este juego apunta la idea de que dos personas puedan tener viajes completamente diferentes viendo la misma obra, eso es genial. Una experiencia artística puede ser muy rica si nos desprendemos de la necesidad de entender todo y dejamos que nos pase algo, ese algo tendrá que ver con nuestras experiencias, gustos, deseos, creencias, no está bajo ningún dominio. Esto también vale para quienes creamos.

A veces en los procesos creativos, de entre todos los pánicos que aparecen, el de “esto ya se hizo y mejor” te toma, pones en duda tu capacidad de contar algo de manera singular. Está buenísimo no olvidar que siempre la magia está en el cómo y no en el qué de lo que hacemos, no olvidar nunca que lo singular sobrevive siempre que le bajemos el volumen al miedo. Eso es poderosísimo. 

Una de las fortalezas de Autóctonxs, que muchos de sus participantes destacan en las dos ediciones, es el poder de la transformación compartiendo saberes y experiencias durante el tiempo que dura ese festival. ¿Cómo se podrían fomentar este tipo de experiencias en el tiempo?
No es en absoluto complejo. Se fomenta apoyando con financiación, infraestructura, material, personal, promoción, etc. Para que programaciones arriesgadas sean sostenibles, necesitan apoyo, de otra manera son siempre la denostada escena off. Digo arriesgadas en tanto que, compuestas por creadoras locales, muchas sin repercusión aún en la escena contemporánea, que apuestan por nuevas dramaturgias y lenguajes escénicos. Las gentes que promovemos la cultura y nos organizamos en torno a ella tenemos muchísima energía, imaginación, nos reinventamos sin parar, golpeamos puertas sin parar, sabemos mil maneras de solventar cuestiones logísticas sin un duro, lo que necesitamos son duros e infraestructuras.

Las grandes programaciones ofrecen, en general, un contenido con el que está asegurado que no habrá queja, ni pérdida

Hace falta que los grandes teatros y salas abran su programación a nuevos contenidos y relatos, el público se hace a ello, pero viéndolo. Las grandes programaciones ofrecen, en general, un contenido con el que está asegurado que no habrá queja, ni pérdida; en general, digo.

Un festival de las características de Autóctonxs, como otros, facilitan que se genere tejido, vínculos entre las que nos dedicamos a las escénicas, esto es fundamental para enriquecer la escena, para diversificarla y generar sinergias.

Lula Amir - La Poderío 02
Lula Amir durante una de sus obra | Foto cedida por David Burgos

Frente a posturas fuertemente academicistas y clasistas, defiendes que toda persona tiene una opinión válida frente al arte. ¿Por qué crees que a todas nos atraviesa de una forma distinta la danza?
Creo que en la danza hay mucha más capacidad expresiva que comunicativa, la nomenclatura del movimiento es infinita, no se puede capturar en conceptos. La danza, como otros lenguajes, goza de lo abstracto, es fácil para la danza no ser representativa, literal, no presentar una única línea de sentido. Como hablábamos antes, creo que estando frente a una misma obra de arte podemos tener percepciones y reflexiones muy diferentes.

En la danza hay mucha más capacidad expresiva que comunicativa, la nomenclatura del movimiento es infinita

Hace poco me pasó concretamente al ver una pieza de danza, tenía un contexto histórico detrás que yo desconocía por completo. Al acabar charlando con mi compañera de butaca, la que sí estaba puesta en ese contexto histórico, nos maravilló que realmente habíamos visto dos obras distintas. La información que añadimos a lo que estamos viendo, completa el relato de manera absolutamente subjetiva, es subjetiva entonces la mirada. Pensado así, la obra nunca estaría acabada, se termina en cada cuerpo que la ve. Ninguna mirada es más completa ni acertada, simplemente cada mirada responde a los conocimientos, vivencias y sensibilidades de quien mira.

Tienes un firme compromiso con la construcción desde la periferia. ¿Cuál es el panorama de la danza en Andalucía para una coreógrafa que trabaja tanto aquí como en el extranjero?
Para las artes escénicas en general siempre el panorama es precario. Es un sector que padece de muchas carencias. Es un tópico en nuestra profesión el tener que irse, estar programada fuera más que en casa, es casi una condición.

No quiero marcarme el pisto al hablar de que quedarse es una resistencia. Soy, de hecho, una persona migrada afincada en España, lo de movernos buscando oportunidades, un territorio mejor, menos hostil donde sea posible desarrollarnos como personas y profesionalmente es inmanente al ser humano, aunque esté criminalizado. Y migrar por el deseo de encontrarnos con otras en otros escenarios es legítimo y nos enriquece, la contradicción es que el motor casi siempre es la carencia y no el deseo.

En Málaga, particularmente, la escena contemporánea lo tiene difícil; faltan espacios de desarrollo, producción, investigación, formación, registro, encuentro y pensamiento. En mi deseo de permanecer aquí, de que este sea mi hogar, intento dinamizar junto a otras compañeras ese tipo de espacios donde se entrecruce la producción artística y lo político. Hace un tiempo conformamos el colectivo Danza Málaga con el fin de poner en común problemáticas y necesidades de nuestro sector para generar estrategias en comunidad. El encuentro nos permite trascender los malestares personales, la inmovilidad que provoca el ahogamiento económico, pensarnos juntas siempre es una potencia, nos da una visión estructural, salimos del “a mí no” para entrar “en esto que pasa, nos pasa”.

Algunas de las coreografías más conocidas de los movimientos feministas en Málaga tienen parte de tu impronta. ¿Cómo se articulan discursos corporales en colectividad?
No sé si te refieres concretamente a intervenciones que hemos realizado en la calle en torno a convocatorias feministas. Eso ha pasado y ha tenido mucho sentido. Hay muchas maneras de procesar, de asimilar lo que nos pasa.

Cuando las violencias se ejercen sobre los cuerpos, a veces entenderlas en el plano del logos no es suficiente

Cuando las violencias se ejercen sobre los cuerpos, a veces entenderlas en el plano del logos no es suficiente. Entender algo, el porqué pasa un algo, no necesariamente facilita su procesamiento.

Aquí el trabajo corporal tiene muchísimas herramientas que ofrecer. Nos cuesta, porque la hegemonía de lo intelectual corta el paso, pero creo que es muy necesario aunar las dos vías, la de lo que se piensa con la de lo que nos pasa por el cuerpo para poder elaborar.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Entrevista La Poderío
La Poderío Celia de Molina: “Todo lo que se considera universal no tiene nada que ver con nosotras”
Celia de Molina, nacida en Linares y con el corazón en Málaga, es guionista y directora con mucho poderío. Su cine busca transformar el mundo, como demuestra su corto 'Cuarentena', nominado a los Goya. En su último proyecto, 'No soy universal', desafía el concepto de “universal” desde una visión feminista y personal.
Entrevista La Poderío
Entrevista La Poderío Jihan, ¿quién pudiera ser gitana?
Jihan es toda ella sensibilidad y coraje. Escucharla cantar te sobrecoge. Ella es un ser construido de la mezcla del pueblo rumano, del sirio y del español y con una querencia que invade todos sus sentidos, el flamenco.
Entrevista La Poderío
Claudia GR Moneo “Intento observar desde el buen pensamiento. Rechazo el ‘piensa mal y acertarás’”
Claudia GR Moneo retrata lo bello que se escapa por las rendijas del día a día de su tierra. Es una periodista que ilustra con tino la sencillez que nos rodea, pero también una ilustradora de inevitable mirada periodística, gitana y andaluza
Palestina
Genocidio Israel sigue atacando hospitales, la ONU habla del peor momento en los 18 meses de asedio
No hay tregua en Gaza, donde Israel ha recrudecido las matanzas y sigue sin permitir el acceso de alimentos y productos de primera necesidad. La ONU denuncia asimismo el asesinato de más de 70 civiles en Líbano.
Crisis climática
Balance climático El Mediterráneo se consolida como zona especialmente vulnerable al cambio climático
Las víctimas de la dana suponen dos tercios de las muertes por fenómenos extremos en Europa en 2024, según un informe conjunto de Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial que hace un balance climático del continente el pasado año.
Barcelona
Barcelona Activistas de los derechos humanos piden la retención de un barco dispuesto para armar a Israel
La naviera Maersk está transportando estos días componentes para los cazas F-35. El Estatuto de Roma sobre genocidio contempla acciones legales contra las empresas que favorecen las masacres.
Partidos políticos
CIS de abril La ultraderecha recorta votos al PP arrastrada por el efecto Trump
El barómetro de abril vuelve a situar al PSOE como fuerza más votada. La izquierda española sigue su contienda por todo lo bajo.

Últimas

El Salto n.78
El Salto 78 Nueva revista, viejas injusticias: hablemos de Violencia Institucional
En el último número de la revista de El Salto dedicamos la portada y nuestro “Panorama” a una de las violencias que sufren las mujeres solo por el hecho de serlo, la que aún a día de hoy emana de un sistema irracional y patriarcal.
Ayuntamiento de Madrid
Huelga de basuras Huelga indefinida de basuras en Madrid desde el 21 de abril tras romperse las negociaciones
Los representantes sindicales fuerzan el paro para obligar a las empresas subcontratadas por el Ayuntamiento a escuchar sus propuestas. El Ayuntamiento fija servicios mínimos del 50 %.
Más noticias
València
València CGT denuncia graves incumplimientos del plan de inundaciones en la dana de València
Un informe incorporado a la causa judicial señala la falta de seguimiento de los propios protocolos autonómicos en el día de la tragedia y la víspera.
Palestina
Palestina La UE apoya a Palestina con 1.600 millones de euros más pero sin entrar en la situación de Gaza
Los ministros de Exteriores europeos, que se han reunido en la mañana del 14 de abril con la Autoridad Nacional Palestina en Luxemburgo, no aumentan las sanciones contra Israel.
Fronteras
Fronteras El Gobierno de Mauritania alerta de que ya son más de cien cadáveres hallados en sus costas en 2025
Desde 2023 Mauritania es el principal punto de salida de embarcaciones hacia las Islas Canarias. El Gobierno reconoce el hallazgo de cuerpos. Mali reclama un trato humanitario a las personas que permanecen varadas en el país vecino.
Andalucía
Memoria histórica La inanición de la memoria andaluza
Las políticas públicas de memoria en Andalucía se encuentran en un estado de paralización que pone en duda la voluntad de la Junta por la reparación efectiva.

Recomendadas

Poesía
Culturas Joan Brossa, el mago que jugó con la poesía para reinventar el poder de la palabra
Casi inabarcable, la producción creativa de Joan Brossa se expandió a lo largo —durante medio siglo XX— y a lo ancho —de sonetos a piezas teatrales, pasando por carteles o poemas objeto— para tender puentes entre el arte, la política y el humor.
República del Sudán
Sudán Cara a. Un Sudán en guerra
Se cumplen dos años de una guerra que ya deja más de 13 millones de personas desplazadas y más de ocho millones de sudaneses al borde de la inanición.
Galicia
Galicia La TVG se gasta 839.772 euros en un programa de Miguel Lago y lo saca de parrilla tras hundirse en audiencia
El programa ‘O novo rei da comedia’ apenas llegó a los 36.000 espectadores de media en su estreno y cayó en picado en su hasta ahora última emisión al 3,4% de cuota de pantalla en una cadena que tuvo de cuota media en marzo un 8,1%.
Globalización
Crisis del multilateralismo El terremoto Trump sacude las instituciones del orden mundial y la “globalización feliz”
Muchas de las instituciones que marcaron la vida internacional desde la caída del Muro han entrado en crisis. ¿Todas? No, especialmente aquellas que intentan regular los derechos humanos, de los pueblos y de la naturaleza.