Feminismos
Las feministas racializadas alzan la voz

El discurso de las feministas racializadas se impone ante el feminismo blanco en las quintas Jornadas Feministas de Euskal Herria, que durante tres días reúne a 3.000 mujeres en el municipio de Durango.

Mujeres racializadas en Jornadas Feministas Euskal Herria
Leocadia Bueriberi, de la Red de mujeres racializadas de Euskal Herria, durante su intervención en Salda Badago. Teresa Villaverde

Las feministas racializadas pusieron ayer en evidencia al feminismo blanco y hegemónico en las quintas Jornadas Feministas de Euskal Herria, que se celebran durante este puente de noviembre en el municipio de Durango bajo el título Salda Badago (Hay caldo, en castellano) y cuentan con la presencia de 3.000 mujeres.

Cuando llega el otoño, la mayoría de tabernas vascas cuelga el cartel de Salda Badago, caldo cocinado a fuego lento durante horas en pucheros de grandes dimensiones repletos de buenos ingredientes, como este encuentro histórico que define la agenda del feminismo para los próximos diez años. Se comentaba antes de las jornadas, y se oía si querías escucharlo, que la mesa de decolonialidad se presentaba potente y que iba a dar guerra.

No defraudó y la temperatura del caldo servido en las jornadas subió a ebullición durante las dos horas en las que los colectivos de mujeres racializadas tomaron la voz y cuestionaron desde la presencia de una mujer blanca sentada en la mesa hasta los privilegios que ejercemos sin ser conscientes, pero no por ello menos opresivos, las feministas autóctonas.

Gran parte de las asistentes se sintieron interpeladas. Pero tras escucharlas, muchas se arrancaron a aplaudir y a ovacionar su discurso, que incide en una cuestión semántica para ellas de vital importancia: “No es lo mismo alianzas que nos instrumentalizan que tender puentes entre nosotras”. Lo dijeron alto y claro: las feministas racializadas vascas no quieren sentirse parte de una cuota, ni ser tuteladas, ni mucho menos lideradas, por el feminismo blanco. Ellas tienen su propia voz y nosotras debemos aprender a callar y a escuchar.

Y aún así, aún habiéndolo reivindicado, dos de las intervenciones en el tiempo de preguntas estuvieron destinadas a cuestionarlas. Primero, una asistenta que habló de las bondades de España. La segunda insistió en la colonización que vive Euskal Herria. Ambas fueron abucheadas por la mayoría de las presentes, mientras desde la mesa les recordaron que no es lo mismo la opresión que sufre Euskal Herria de España que la que sufren sus países de origen, y fueron más allá: "Las empresas vascas internacionales nos explotan no solo aquí, sino también en nuestro país de origen". Aplausos, aplausos y aplausos.

La voz que más incomodó, por su discurso tajante y sin fisuras, fue la de Leocadia Bueriberi, de la Red de mujeres racializadas de Euskal Herria. Tras la mesa, indicó que “era de esperar que íbamos a incomodar, pero me lo he pasado bien”. “Al final he sido un poco hostil, pero hay que serlo, sino no se remueve nada”. Fue ella la que pronunció la metáfora que hizo cambiar la perspectiva de quienes la escuchaban: "La secretaría de un sindicato no la puede ocupar un patrón. Ni los hombres liderar el feminismo. Simplemente, las blancas deben mantenerse al margen de nuestro discurso".

Su compañera Jesenia Hernández, del colectivo Raizes, remató la idea al recordar que "la mujer blanca, heterosexual y burguesa sigue siendo la representante de discursos categóricos e intenta homogeneizar y universalizar trayectorias diversas. Señora, ¡esto es colonizar! ¿Por qué no hablamos más de la colonialidad del ser o del discurso?", preguntó.

Una de las portavoces de las jornadas, Itizar Gandarias, valoró que “hemos empezado con dos debates muy fuertes y la mesa de la decolonialidad nos ha impactado. Ahora lo tenemos que digerir. Nos hemos sentido interpeladas y eso es positivo”.

La mañana transcurrió más tranquila en la mesa destinada a poner las vidas en el centro, pero con dos discursos que sobresalieron. El primero el de Txef Roco, del colectivo de Trabajadoras No Domesticadas, quien ya alertaba a su manera de lo que iba a llegar a la tarde. “Cuidado con el debate de la izquierda entre la reforma y la revolución. Cuidado, compañeras. Para nosotras el trabajo interno es el esclavismo del siglo XXI”, advirtió. Y recordó que en las componentes de su colectivo, las cuales trabajan o han trabajado como cuidadoras del hogar, “se cruzan las grandes opresiones: capitalismo, clasismo, machismo y racismo. Si las conseguimos ganar, cambiaremos el mundo”.

El segundo discurso que emocionó a las asistentes fue el de agrofeminismo, del colectivo Etxaldeko Emakumeak, quien su portavoza, Amets Ladislao, insistió en que “la soberanía alimentaria es nuestro objetivo y es un objetivo político para que todas podamos vivir mejor. Y el esfuerzo lo tenemos que hacer entre todas, nosotras solas no podemos cambiar el sistema entero”. Las baserritarras apuestan por una agricultura y ganadería ecológica y por un sistema ecofeminista que permita la sostenibilidad, tanto de las personas como del planeta.

Tras las dos mesas, hubo un total de 18 talleres y 11 debates que se celebraron en las aulas del instituto del pueblo. Renta básica, prostitución, cuerpos, migración y cultura fueron algunos de los temas abordados ayer viernes primero de noviembre. Las jornadas continuarán hoy con las mesas de Cuerpos y sexualidades y Construyendo vidas libres de violencias. La última mesa se celebrará el domingo y lleva por título Observando las entrañas del  movimiento feminista.

Estas son las quintas jornadas feministas. Las primeras se celebraron en Leioa en 1977, después en 1983 y 1994. Las  anteriores tuvieron lugar en 2008, en Portugalete. Rosa Pintor, de la Asamblea de Mujeres de Bizkaia, ha asistido a tres de ellas. “Se van complejizando, como lo hace el mundo, y los sujetos cambian. Ahora hay más pluralidad y este año era el turno de las mujeres racializadas y su discurso”, resume.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Violencia machista
25 de noviembre Con el lema “Juntas, el miedo cambia de bando”, el movimiento feminista llama a organizarse este 25N
En un año en el que ha vuelto al primer plano el debate público sobre la violencia patriarcal sistémica que siguen padeciendo las mujeres, la marcha del 25 de noviembre vuelve a las calles el próximo lunes.
Música
Festival de Valdencín Música y reivindicación: así fue el II Festival Tejiendo Redes en Valdencín
Reivindicando el espacio de las mujeres en la música, Valdencín (Cáceres) se convirtió el 9 de noviembre en el escenario de una celebración que trascendió lo meramente musical: la segunda edición del Festival Tejiendo Redes.
Ciencia
Ciencia ¡No más genios! Por una ciencia colectiva
Al no incluir a las mujeres en la historia de la ciencia, no se ha materializado una realidad que depende del trabajo colectivo y relacional
#45984
16/1/2020 23:45

Una 'mujer racializada", largando sobre' la opresión de Euskalerria".Pobre izquierda, sea esto lo que a estas alturas sea

1
1
Gartzi
6/11/2019 1:47

Bonito dicurso, todo ello en un idioma colonizado. Aplausos, aplausos, aplausos.

1
1
Gartzi
6/11/2019 1:47

Bonito dicurso, todo ello en un idioma colonizado. Aplausos, aplausos, aplausos.

1
0
#42439
4/11/2019 9:28

Misandría en su máximo esplendor

7
9
#42438
4/11/2019 8:24

Si, el privlema de las mujeres son las mujeres “ blancas” que deben por lo visto aprender a callar.. de que me suena eso? Apuesto a que entre les racializadEs había penes femeninos.

16
16
#42562
6/11/2019 4:05

Y yo apuesto que además de una BLANCA mierdera eres una terfacha/transmisógina cuya actitud nunca debería tener cabida en los espacios de activismos, la gente como tú es tan enemiga como los nazis de mierda pues tenéis más en común con ellos de lo que piensas

5
2
Genocidio
Genocidio El TPI emite la orden de detención contra Netanyahu y Gallant por crímenes de guerra
La Sala de Cuestiones Preliminares del TPI rechaza las impugnaciones de competencia formuladas por el Estado de Israel y emite órdenes de arresto contra Benjamin Netanyahu y Yoav Gallant.
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Los sindicatos denuncian a la Comunidad de Madrid por exponer a sus sanitarios a “gravísimos” riesgos
Solicitan la mayor indemnización económica pedida contra una administración por no contar con un verdadero plan de prevención de riesgos laborales para atención primaria.
COP29
Cumbre del clima La COP29 encara su última jornada con un final agónico sin acuerdo en los temas clave
Los borradores de los textos de negociación sobre la mesa quedan muy lejos de un acuerdo sobre financiación climática en línea con las necesidades para que el planeta no rebase los 1,5ºC de calentamiento medio.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Estados Unidos aprueba la “ley más peligrosa para las libertades” desde la Patriot Act
En Gaza, Cisjordania y Líbano, nuevos ataques israelíes dejan más de un centenar de muertos. En Washington, el Congreso aprueba una ley que permite quitar fondos a ONG, universidades y colectivos sin pruebas ni un proceso transparente.
Barcelona
Derecho a la vivienda El hartazgo por la vivienda impagable se da cita este 23 de noviembre en Barcelona
El amplio movimiento por la vivienda catalán, sindicatos y organizaciones vecinales, sociales y soberanistas demandan soluciones urgentes ante una crisis de vivienda sin solución a la vista

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Opinión
Opinión Non sempre ter moitas luces é sinónimo de intelixencia
Que impacto ecolóxico e social produce a iluminación do Nadal de Vigo? A cidade sofre máis aló da masificación, o caos de tráfico, as molestias á veciñanza, o malgasto ou os recortes en orzamentos de emerxencia social.
Violencia machista
25 de noviembre Con el lema “Juntas, el miedo cambia de bando”, el movimiento feminista llama a organizarse este 25N
En un año en el que ha vuelto al primer plano el debate público sobre la violencia patriarcal sistémica que siguen padeciendo las mujeres, la marcha del 25 de noviembre vuelve a las calles el próximo lunes.
Crisis climática
Informe de Unicef El cambio climático multiplicará por tres la exposición de los niños y niñas a las inundaciones para 2050
Es la proyección que hace Unicef en su informe 'El Estado Mundial de la Infancia 2024'. La exposición a olas de calor extremas será ocho veces mayor para 2050 respecto a la década del 2000. “El futuro de todos los niños y las niñas está en peligro”, advierte la agencia de la ONU.
Memoria histórica
Memoria histórica Museo del franquismo, ¿eso dónde está?
España sigue ajena a la proliferación mundial de espacios museísticos dedicados a dictaduras y resistencias democráticas.
Unión Europea
Unión Europea La ultraderecha europea, ante la victoria de Trump
El triunfo de Donald Trump da alas a todas las formaciones ultraderechistas de Europa y del resto del mundo, que han visto cómo el millonario republicano ha conseguido volver a ganar las elecciones sin moderar un ápice su discurso.
Tribuna
Tribuna Vivienda: es hora de organizarnos
La situación de crisis inmobiliaria nos exige leer el momento para acertar en las batallas que debemos dar ahora, reflexionar sobre los modos de acción colectiva y lograr articular una respuesta política amplia.

Recomendadas

València
Exclusiva El Gobierno de València contrata 12,9 millones en obras de la dana a una constructora investigada por pagos al cuñado de Barberá
La Generalitat Valenciana ha hecho el encargo a Ocide, una empresa cuya matriz está siendo investigada en el caso Azud por pagos “de naturaleza ilícita” al abogado José María Corbín a cambio de contratos adjudicados por el Ayuntamiento de València.
Galego
Dereitos lingüísticos Miles de persoas desbordan a praza da Quintana para mudar o rumbo da lingua galega
A Plataforma Queremos Galego, que convocou esta mobilización, sinala unha nova data para outro acto protesta: o vindeiro 23 de febreiro na praza do Obradoiro, en Santiago de Compostela.