Memoria histórica
Olatz Gorrotxategi: “El teatro documento trabaja desde la verdad”

Olatz Gorrotxategi (Bilbao, 1982) empezó a hacer teatro a los 12 años y hoy es actriz, dramaturga, docente y coordina ACT Festival. Ha escrito y dirigido distintas obras sobre memoria histórica, entre ellas, Coordenadas y 43º 13′ 44”N

Olatz Gorrotxategi Entrevista
Olatz Gorrotxategi. Ione Arzoz
12 mar 2019 11:09

Olatz Gorrotxategi (Bilbao, 1982) tiene grabado el olor a frío del pueblo costero donde se mudó a los 11 años, la humedad y “la oscuridad de cuando había solo dos farolas”. Se levantaba a las 6.30h para coger el autobús a la ikastola. Cuando se decidió a estudiar artes escénicas, le motivó pensar que sería una profesión en la que no tendría que madrugar tanto. Eso, y que había empezado a hacer teatro a los 12 años. Estudió en Bizkaiko Antzerki Ikastegia y en Leeds Beckett University. Pensó que nunca iba a vivir de ello, pero hoy es actriz, dramaturga, docente y coordina ACT Festival. Ha escrito y dirigido distintas obras, entre ellas, Coordenadas, seleccionada por Nuevas Dramaturgias de Donostia Kultura 2016, y 43º 13′ 44”N, gracias a una residencia artística de Bilbaoeszena.

Coordenadas es una pieza sobre memoria histórica para la que estuviste dos años recopilando testimonios y documentos. ¿Alguno que recuerdes especialmente?
Muchísimos. Hay una carta de un señor a un ayuntamiento que cuenta cómo hizo la mili, le tocó el bando nacional, tuvo que ir allí y fusiló a ocho personas. Antes de morir quería decir dónde estaban para que pudieran exhumarlos. Hubo un momento en el que me obsesioné con las cartas. Ahí están los sentimientos de una persona. Había muchas escritas antes de las sacas. Les sacaban de la cárcel, les llevaban a la iglesia y les obligaban a confesarse y rezar para dejarles escribir. Luego les fusilaban. Todas repetían lo mismo: no os enfadéis, no seáis vengativos, olvidadlo, sed felices, cuidaos los unos a los otros. No sé si hoy, si nos fueran a matar, seríamos tan listas. A una atea le dijeron que, para poder escribir la carta, tenía que confesarse. Hizo todo el paripé y, luego, las carceleras le dijeron: “¿A quién se la vas a mandar? Tus dos hijos que estaban en la cárcel están muertos”. Se quedó desamparada, completamente sola. Y era mentira.

Después escribiste 43º 13′ 44”N, también sobre memoria histórica pero más íntima.
El título son las coordenadas de mi casa porque estoy llamando a Domingo Gangoiti para que vuelva. Es el hermano de mi aitite. En mi casa había oído que su hermano era facha. Le pregunté dónde estaba enterrado, si en el Valle de los Caídos. Me dijo que no. Le dije si entonces estaba en el cementerio de Mungia; respondió que no sabían, que creían que estaba en el monte Bizkargi. “¿Cómo no sabéis? ¿No era del bando nacional?”, le pregunté. “No. Vinieron a cogerle a casa para que luchara”. A raíz de conocer esta historia, la siguiente vez que fui a visitar a mi aitite le grabé. De manera muy rudimentaria, con mi tablet, sin encuadrar… aprovechando el formulario que había hecho para el resto de víctimas.

En la obra utilizas las fotos que decoran tu salón, ¿por qué son tan importantes?
Esta es de la boda de mis aitites, que se hicieron las fotos un año después. Se casaron de negro, estaba de moda. Me interesan mucho los documentos en general. Hay una parte estética, pero no es tanto por lo emocional, porque para eso basta una sola foto, sino por la profundidad. Creo que tendría el mismo valor si me encontrara en la calle un álbum de fotos y lo pusiera en casa. El documento, de cualquier tipo, me parece que tiene mucho valor en teatro porque puedes trabajar desde la verdad. Si quieres que el público empatice, tienes que contar cosas pequeñas.

¿Cómo es tu proceso creativo?
Me siento un poco caótica. Parto de algo pequeñito, que es la base. Alrededor hay orbitando millones de ideas que no tienen nada que ver: momentos, miniescenas… e intento hacer un collage, algo que al final tenga una coherencia total.

¿En qué obras estás trabajando ahora?
Dirijo una pieza infantil de la compañía Eidabe, escrita por Galder Pérez, Mari eta galleta fabrika, sobre tres generaciones de mujeres y sus luchas. La abuela es trabajadora de una fábrica de galletas de una ribera de Euskal Herria, no puedo decir cuál. También he escrito un musical sobre el rock radical vasco que debería revisar porque no me convence.

¿De dónde surge tu interés por la memoria histórica?
Cuando era adolescente lo vivía como una injusticia política. Que, de repente, un fascista crea que tenía derecho a hacer un alzamiento, matar a tanta gente, hacer que salgan con armas a la calle, 40 años de dictadura, un idioma perdido, Europa que no hace nada… Me hervía la sangre. Es algo que siempre he tenido ahí. Luego se ha convertido en otro tipo de interés. He profundizado más.

¿Por eso te afiliaste a CNT?
Fue por justicia universal. Ni siquiera era por practicidad sindicalista. Siempre he creído en la lucha de los trabajadores y las trabajadores, en la emancipación del pueblo y en la revolución social [sonríe]. Soy una romántica.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

En el margen
Thimbo Samb “Ganar el Goya con ‘Los cayucos de Kayar’ implicaría que el mundo del cine español valora historias diversas”
Cansado de los papeles que le ofrecen como actor negro, Thimbo Samb busca sus propias historias para mostrar de lo que es capaz, la última, un documental sobre su propia vida, que ha sido preseleccionado para los Premios Goya.
Teatro
En defensa del teatro Extremadura Teatral, contra el cierre de la Sala Trajano de Mérida
El sector de las artes escénicas denuncia que la Junta de Extremadura deja fuera de sus presupuestos a uno de los espacios escénicos y culturales referentes de la región.
El Salto Radio
El Salto Radio Podcast | Franco ha muerto, casi seguro
Eugenio Merino y Darío Adanti presentan en Señales de Humo “Chistes contra Franco” y Manuela Perles Liáñez la Plataforma de familiares de víctimas del franquismo de Huelva
lacritica.xyz
18/3/2019 11:52

Verdaderamente, el teatro documental está en auge, pero no todo está igual de publicitado. Estas dos pintan muy bien. A ver si hay suerte y pasan por Barcelona...

3
0
Memoria histórica
Memoria histórica Cultura, exilio e loita das bibliotecarias galegas na Segunda República: a vida de María de los Ángeles Tobío
Durante os primeiros anos trinta, as bibliotecas tornaron en espazos de traballo ideais para un modelo de muller que aspiraba ser independente e que manifestara un claro compromiso político. A Guerra Civil remataría con todas as súas aspiracións.
Xunta de Galicia
Sanidade A Xunta de Feijóo, condenada por negar as visitas a unha muller falecida de cancro por ter covid-19
A xuíza di que a situación requiriu medidas de prevención “flexibilizadoras”. Faleceu a principios de 2022 no Hospital Álvaro Cunqueiro durante os últimos meses de administración do xefe do PP con Julio García Comesaña como conselleiro.
Madrid
La burbuja del alquiler Sumar, Podemos y sindicatos de inquilinos presionan para convertir en indefinidos los contratos de alquiler
Sumar lanza una propuesta legislativa para transformar en indefinidos los contratos de alquiler, una de las principales demandas de la manifestación por la vivienda del 5 de abril. Una moción de Podemos, rechazada en el Congreso, pedía lo mismo.
Cine
Kamal Aljafari “Palestina está en la raíz de la situación actual del mundo”
Kamal Aljafari lleva toda su carrera trabajando con materiales de archivo, indagando en las imágenes e interviniendo en ellas para preservar memorias en desaparición y para oponerse al proyecto colonial sionista y su falseamiento del pasado.

Últimas

Historia
Descifrando a historia Así foi a rebelión antifiscal galega de 1790 contra a burocracia española
A monarquía española quixo implantar a Contribución Única, algo que provocou fortes protestas. A máis coñecida foi o motín da Ulloa, chamado así porque se produciu nas zonas desta comarca. Foi a maior revolta antifiscal do Antigo Réxime en Galiza.
Opinión
Opinión ¡Que vivan los aranceles!
Que Trump propugne aranceles no debe hacernos caer en la trampa de defender los intereses de los grandes oligopolios.
Paterna
Paterna Vandalizan el muro de Paterna donde el franquismo fusiló a 2.238 personas
El paredón amaneció este viernes con grandes letras pintadas con spray negro donde se podía leer “Sagredo eres maricón y tarado”, en referencia al alcalde del municipio.
Más noticias
Opinión
Derecho a la vivienda Flex Living: el caballo de Troya de la precarización del alquiler
No es una respuesta moderna a las nuevas formas de habitar la ciudad. El ‘flex living’ no es más que la última jugada del sector inmobiliario y los grandes fondos de inversión para maximizar beneficios a costa del derecho a la vivienda.
Opinión
Opinión La unidad del anarcosindicalismo es la acción conjunta
Al hilo de supuestos movimientos desde la CGT hacia la unificación con CNT es necesario diferenciar entre lo que es una relación en clara mejora y lo que sería un proyecto real en marcha.
Galicia
Memoria histórica Cultura, exilio y lucha de las bibliotecarias gallegas durante la Segunda República
Durante los primeros años treinta, las bibliotecas se convirtieron en espacios de trabajo ideales para un modelo de mujer que aspiraba ser independiente y que había manifestado un claro compromiso político. La Guerra acabó con todas sus aspiraciones.

Recomendadas

Líbano
Ocupación israelí Israel incumple el acuerdo de paz y mantiene tropas en el sur de Líbano para “vigilar” a Hezbollah
El Ejército sostiene la ocupación de cinco colinas a lo largo de la frontera tras evacuar sus soldados de decenas de municipios. Miles de civiles regresan a sus casas para descubrir que lo han perdido todo.
Feminismos
Ana Bueriberi “El activismo tiene que ser colectivo: para contribuir al cambio es imprescindible despersonalizar la causa”
La periodista madrileña Ana Bueriberi reconoce que no sintió la discriminación hasta que llegó a la Universidad. Hoy, desde el proyecto Afrocolectiva reivindica una comunicación antirracista, afrofeminista y panafricanista.
Inteligencia artificial
Militarismo La máquina de los asesinatos en masa: Silicon Valley abraza la guerra
Las fantasías distópicas sobre los futuros usos de las máquinas en la guerra están más extendidas que el relato de lo que ya está pasando en los campos de batalla.