Opinión
Sevilla avanza... pero solo para algunos

Una ciudad avanza cuando la calidad de vida de sus ciudadanos mejora. Cuando los niveles de contaminación bajan. Cuando encontrar vivienda deja de ser un problema. Cuando el paro desciende. Cuando unos servicios públicos dignos son garantizados.

1 abr 2019 16:00

No avanza, sin embargo, cuando los planes de inversión de las grandes empresas se coordinan con los de la Administración Pública para beneficio del propio sector privado y de algunos que dicen representarnos.

Un ejemplo de ello es el enorme centro comercial construido en Palmas Altas proveerá de beneficios a Grupo Lar, el grupo empresarial que lo construye, y a los propietarios de las comercios instalados: Mercadona, 100 Montaditos, MCDonalds, Starbucks, KFC, Zara, Lefties o Primark, entre otras muchas multinacionales que poco o nada contribuyen con las arcas públicas o la sociedad. No ayudará mucho a los vecinos del barrio, que tendrán que soportar la afluencia añadida de unos 14 millones de visitantes anuales, con sus coches y sus humos, en el Puente del Centenario, punto negro de la SE-30. Resulta curioso que en la presentación pública del centro el pasado 19 de marzo, el director del proyecto hablara de un centro comercial propiedad "de los vecinos". ¿Qué vecinos?

¿Cómo competir con un gigante que además cuenta con todas las facilidades de la Administración? Es imposible.

El Mercadona del Higuerón Sur, además de ofrecer al vecindario unos cuántos puestos de trabajo, y de silencio, vendrá a enriquecer al conglomerado de Juan Roig al tiempo que debilita los pequeños negocios de la ciudad. No es nuevo, señor Espadas. Es lo que sucede en un día a día, en una calle, que parece ignorar. La implantación de una gran superficie de venta online, con un modelo de negocio tipo Amazon, es una losa más para los comerciantes de Sevilla y sus familias. ¿Cómo competir con un gigante que además cuenta con todas las facilidades de la Administración? Es imposible.

En su análisis, publicado hace unos días en el Diario de Sevilla, habla usted de cientos de nuevas viviendas en Torreblanca y Sevilla Este, construidas por un gigante privado. De un parque tecnológico de 50 millones de euros que otro gigante como Endesa construye en la Cartuja; de las obras de la Avenida El Greco (que tanto han padecido sus vecinos, aunque esto, claro, no lo menciona) y de la Fundación Cruzcampo, propiedad de Heineken, otra empresita humilde; del Puerto y de su Zona Franca, del Aeropuerto y de Ryanair; de los suelos de Santa Justa, de una residencia estudiantil de 70 millones de euros, de la Torre Sevilla.... “De Norte a Sur, de Este a Oeste (…) somos una ciudad atractiva para las inversiones”. Y de eso trata su análisis, de las inversiones de grupos privados en grandes proyectos. Ya para el final, con ligereza, el equilibrio medioambiental y social, la sostenibilidad y el desempleo, esas minucias que usted sabe que, por desgracia, también preocupan a las personas.

Trata de engañarnos, señor Espadas, cuando dice que para poner “fin de una vez a las desigualdades que persisten desde hace ya demasiado tiempo”, nosotros, ciudadanos, debemos compartir esa hoja de ruta diseñada por ustedes, políticos y empresarios privilegiados. Una hoja de ruta que no está pensada por los vecinos. Que ignora el paro estructural y la precariedad laboral, que obvia las carreteras a medio construir y las conexiones ferroviarias prometidas, que abandona viveros de negocio ya construidos para construir otros nuevos allende la ciudad.

Si tomamos el camino que nos muestra, en 2030 Sevilla tendrá algo tristemente parecido a lo que tiene hoy. Muchos pasos en la calle, muchos días de feria, pero demasiados turistas y camareros pobres. Tendrá también muy poca vivienda accesible, y muy pocos árboles. La desigualdad y la exclusión social harán la ciudad inhabitable para tantos que, su #Sevilla2030 será, señor Espadas, una Sevilla para privilegiados.

Turismo
Barrios de cartón piedra
Los procesos de turistización en los centros históricos de algunas ciudades andaluzas están transformando su geografía urbana y expulsando a parte de su población.
Cargando valoraciones...
Ver comentarios 1
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cargando relacionadas...

CRTVG - Corporación Radio y Televisión de Galicia
A Xunta do PP remata o seu plan de control sobre a CRTVG tras escoller á súa nova directora en solitario
A xornalista Concepción Pombo substituirá, co único aval do Partido Popular, a Alfonso Sánchez Izquierdo. O Goberno de Alfonso Rueda modificou a lei de medios para que os votos do seu partido fosen suficientes para elixila.
Altri
A Plataforma Ulloa Viva cambia a súa directiva para os vindeiros anos de loita contra Altri
A veciñanza da comarca máis afectada escolleu entre dúas listas logo de non chegar a un consenso. A gañadora tratará de ampliar a súa base de socias e socios por toda Galiza e abrirá máis as portas ás grandes organizacións do país, como a CIG.
El Salto n.79
A celulosa ou a vida: xornalismo situado e loita social para frear un ecocidio
O xoves 17 de xullo esperámosvos no CS 'A Nubeira' de Vigo para presentar o último número da revista El Salto xunto a algunhas das súas principais protagonistas: as que loitan contra o macroproxecto de celulosa liderado por Altri e avalado pola Xunta.
AGANTRO
O desprazamento forzoso en Chiapas: metáfora da vida núa
Conversamos coa investigadora América Navarro sobre o desprazamento forzoso en Chiapas.
Altri
Galiza elixe o rumbo da loita contra Altri nas eleccións á directiva da plataforma Ulloa Viva
A veciñanza da comarca máis afectada presenta dúas listas separadas logo de non chegar a unha proposta de consenso. Por unha banda, concorre unha candidatura continuísta e, pola outra, unha alternativa que se achega máis o nacionalismo institucional.

Últimas

O Salto medra contigo
O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar Altri
Queremos investigar os responsables políticos e empresarias do que podería ser o maior atentado ambiental da historia recente de Galiza.
Orgullo
O Orgullo Crítico enche de diversidade e de humanismo Galiza: “Transfeministas con Palestina”
Crónica visual de como unha enorme multitude encheu de diversidade o centro da cidade de Vigo.
O Teleclube
'O Teleclube' alucina no deserto con Óliver Laxe e 'Sirat'
Laxe leva o seu cuarto premio de Cannes, esta vez en competitición, polo seu novo filme que explosiona na gran pantalla.
A Catapulta
O tempo, o espazo e a poesía de Estíbaliz Espinosa
A poeta visita A Catapulta para conversar sobre o seu traballo e a súa traxectoria literaria
O Teleclube
'O Teleclube' pecha a temporada cos supervivintes de '28 anos despois'
Danny Boyle e Alex Garland volven ao mundo dos infectados que inspirou o renacemento dos 'zombis'.

Recomendadas

Medio rural
A esperanza da xestión colectiva fronte ao espolio: os comuneiros de Tameiga contra o Celta
Mentres varios proxectos industriais tentan privatizar e destruír os ecosistemas galegos, algúns grupos de veciños e veciñas organizadas fan oposición social construíndo alternativas comunitarias. Ás veces, tamén gañan ao xigante.
Feminismos
Dous anos sen reparación tras sufrir lesbofobia nun Rexistro Civil de Pontevedra cando ían inscribir a seu fillo
Un funcionario negouse a inscribir ao fillo de Antía e a súa parella. Un erro de redacción na lei trans está detrás dos argumentos que o funcionario esgrime para defender a súa actuación.
Migración
A veciñanza mobilízase para acoller migrantes tras o peche de centros de Rescate Internacional en Galiza
Tras o progresivo desmantelamento de varios dispositivos de acollida, moitos refuxiados foron trasladados a outros puntos do Estado sen aviso previo. Outros son simplemente desaloxados trala denegación da súa solicitude de asilo.
Ourense
Ourense organízase para loitar contra patrullas de extrema dereita nos barrios máis empobrecidos da cidade
A veciñanza e os movementos sociais responden ao discurso do medo promovido por Frente Obrero e sinalan a súa estratexia de criminalizar a pobreza e sementar odio en contextos de exclusión e abandono institucional.
Comentarios 1

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...