Historia
1861: la letra con sangre entra
El hambre y la furia del maestro serán de leyenda, y el analfabetismo pasará de padres a hijos como una hemofilia plebeya
Historia
1855: la primera huelga general
Pisando lo desconocido, los obreros reclaman lo imposible, o eso sentencia la opinión publicada. Jornadas de diez horas, derecho a la sindicación y jurados mixtos en las empresas
Historia
1852: matar a Isabel II
El Reino debe ser gobernado por quien sabe, protegido por quien puede y labrado por quien debe. España, piensa Bravo Murillo, no necesita del pueblo intelectuales que piensen sino bueyes que trabajen
Historia
1849: la Corte de los espadones y los milagreros
Reducido el Reino a un cortijo, el Estado se le aparece al menesteroso como un ogro que le da un tiento al aceite y dos a la mitad de sus hijos. La nación, de ser algo, será cosa de plumillas y señoritos
Historia
1842: bombardeen Barcelona
Espartero fusila a los rebeldes más vocingleros porque es sabido que la letra con sangre entra. A partir de ahora, se ufanan los generales, se gobernará Barcelona con metralla, no con palabras
Historia
1836: España comienza en una subasta
España deja de ser un señorío de condes y vasallos, de rentas señoriales satisfechas en docenas de huevos y fanegas de trigo, y camina pesadamente hacia un cortijo de señoritos y braceros contratados a destajo
Historia
1831: toda la majestad del mundo
Es este pestazo a fin de época lo que envuelve a Mariana Pineda como una plaga o una condena.
Historia
1823: de héroes y villanos
Señores y vasallos, nobles y plebeyos, así ha sido siempre y así seguirá mientras el rey lo tenga todo atado y bien atado.
Historia
1812: la patria cabe en un libro
Para la propiedad privada se liberalizarán las imprentas y los negocios, los gremios y los talleres, los caminos y los puentes, los bienes comunales y los amortizados, la madera de los bosques y las truchas de los arroyos.