Desahucios
Afectados por los desahucios de Sareb despliegan un “carnet de pobre” en la puerta del FROB

Quieren visibilizar los criterios “arbitrarios, excluyentes y contradictorios” de Sareb para subrogar los contratos de tres edificios de inquilinos en amenaza de desahucio.
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Afectados por los desahucios de Sareb despliegan el carnet de pobre en la sede del FROB y hacen cola para entregar su documentación. Foto: Plan Sareb.

“Nos cuesta una deuda de 35.000 millones de euros ¿Y ahora se niega a ofrecer soluciones y nos desahucia? Pues nos tendrá en la puerta”. Con este enigmático cartel, afectadas por los desahucios de la Sareb convocaban este lunes una concentración a las puertas del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB). Hoy daban las doce cuando se despejaba la incógnita: los activistas, agrupados en el colectivo Plan Sareb, desplegaban un gigantesco “carnet de pobre” frente a esta entidad pública, una de las dueñas del banco malo. Delante del cartel, una mesa y, frente a ella, una cola de 50 afectados y afectadas portando su carnet individual.

El objetivo: visibilizar los criterios “arbitrarios, excluyentes y contradictorios” de Sareb para subrogar los contratos de tres edificios de inquilinos en amenaza de desahucio. Entre los allí presentes, inquilinas pendientes de renovación o subrogación y personas que viven como precaristas en casas de Sareb. En concreto, vecinas y vecinos de los bloques de las calles Salvador Martínez Lozano (Puente de Vallecas), Juan Antón (distrito Latina) y Clara Campoamor (Carabanchel). Los dos primeros, con tres intentos de multidesahucios a sus espaldas, en viviendas que la Sareb ha ido adquiriendo sin querer subrogar sus contratos.

“Nos reímos así de sus criterios de acceso al alquiler, que dejan fuera a una mayoría de los hogares que sufrimos las consecuencias de la inflación, la carestía de la vivienda y los suministros o los bajos salarios”

“Nos reímos así de sus criterios de acceso al alquiler, que dejan fuera a una mayoría de los hogares que sufrimos las consecuencias de la inflación, la carestía de la vivienda y los suministros o los bajos salarios”, según denuncia Lucía Casado, portavoz de la campaña Plan Sareb, que integra ya a 300 familias.

Los bloques afectados han decidido rechazar la mediación de las empresas designadas por Sareb. Casado denuncia que realizan “trabajo de criba con el que pretenden blanquear los desalojos y marear a las vecinas mientras cobran de una empresa con mayoría de capital público”, ha señalado Casado. 

Además de frenar estos desahucios y conseguir alquileres sociales asequibles, desde Plan Sareb exigen levantar las alfombras en el banco malo. Piensan que es necesario auditar la situación de esta entidad, que respira gracias a fondos públicos. Además piden una mesa de negociación con Sareb y el FROB y “sin más intermediarios”. Denuncian que es muy difícil conseguir contratos de alquiler justos y, cuando estos se consiguen, contienen cláusulas abusivas.

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La compra del patrimonio “tóxico” de las cajas a precio inflado, su venta a precio de saldo, la falta de transparencia y los conflictos de intereses son algunas de las irregularidades señaladas por el Plan Sareb, organización que reúne a más de 300 familias afectadas por el banco malo.

Durante el pasado mes de mayo anunciaban la presentación de una denuncia ante la Fiscalía europea para que investigue un posible delito de fraude, apropiación indebida, estafa y administración desleal en la gestión del patrimonio inmobiliario. Esta entidad fue creada por el gobierno de Mariano Rajoy en 2012 para que se hiciera cargo de las viviendas y los préstamos de las cajas quebradas.

En este sentido, un informe del Banco de España, publicado en 2017, acusaba a la Sareb de estar vendiendo pisos por debajo de su precio de mercado y arrojaba dudas sobre todo el proceso de tasación, compras y venta. El informe describía una situación de caos, falta de criterio, rigurosidad y transparencia de la entidad

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