Tecnología
COVID-1984, ¿vigilando al virus o a la sociedad?

Debido al confinamiento mundial y la creación de nuevos paradigmas, las grandes tecnológicas no son ajenas y ya estamos oyendo el “ofrecimiento” de empresas como Google o Apple, que mediante sus sistemas móviles de Android y iPhone rastrearán ubicaciones mediante GPS para detectar posibles contagios. En numerosas ocasiones, no se cuenta con las autoridades sanitarias para este ejercicio de presunto altruismo, sin saber las consecuencias de un rastreo global. Diversos colectivos preocupados por la privacidad y la soberanía tecnológica han respondido con informes advirtiendo de los derroteros que puede llevar estas prácticas que, poco a poco, se asientan en nuestro día a día.

Sevilla vacia coronavirus 4
Empresas como Google o Apple se prestan a hacer un rastreo mundial de ubicaciones mediante GPS. María del Carmen Hernando Bejarano
Director de Políticas en European Digital Rights
13 abr 2020 13:16

La Organización Mundial de la Salud (OMS) sigue haciendo las mismas recomendaciones que desde el principio: hay que lavarse las manos a menudo, evitar el contacto con otras personas (el distanciamiento social) y la realización generalizada de tests a la población. A pesar de lo que la organización líder recomienda, poco después de que se estableciese que la crisis del COVID-19 fuese declarada como pandemia, la oleada tecnosolucionista, aquella que encuentra una solución tecnológica a cada problema, no tardó en hacerse notar. NOYB, el grupo activista austriaco liderado por Max Schrems, está realizando un mapeado de las aplicaciones que han promovido para combatir la pandemia (también existen este y este). Pero la pregunta que surge es: estas tecnologías, ¿vigilan al virus, o a los pacientes?

Elige (si puedes): tu teléfono o Telefónica

Las aplicaciones que se están desarrollando son para fines diversos: las que ayudan a auto-evaluarse, como la reciente propuesta del Gobierno español, las diseñadas para hacer que se cumpla el confinamiento y las que buscan trazar los contactos entre personas (contact tracing). Éstas últimas, que son las potencialmente más invasivas, se dividen fundamentalmente en dos tipos: las que usan los datos de posicionamiento de GPS, que las compañías telefónicas poseen, y las que usan bluetooth. Las primeras intentan ver los posibles movimientos entre dos personas y crean mapas más o menos anonimizados (la agencia de protección de datos de los Países Bajos ya ha dicho que los datos de localización no pueden ser anonimizados) de los movimientos de personas. Las de bluetooth, en su mejores versiones, se rigen por conexiones de un teléfono a otro sin que haya ninguna centralización de datos. En definitiva, en unas la persona usuaria puede controlar, hasta cierto punto, cómo y cuándo se procesan los datos personales, y en otras cedemos el control a una compañía privada que cede los datos a un gobierno su uso y disfrute. Simplificando al extremo, las opciones de aplicaciones de trazado se dividen en las que tu teléfono tiene el control, y en las que Telefónica tiene el control.

Si bien las basadas en GPS son menos exactas, los datos están a mano de los gobiernos y las empresas de telecomunicaciones están encantadas de poder dar esos datos ahora para poder justificar otros usos como el marketing ultra-personalizado, principalmente. El peligro es que, si bien en teoría los datos se agregan y se publican de forma anonimizadas (en cuadrículas de centenares de metros cuadrados, por ejemplo, en vez de casa por casa), no está claro si esa anonimización es posible. Si no lo es, el consentimiento de la ciudadanía para ser objeto de estas soluciones tecnológicas, puesto que estamos hablando de datos ultrasensibles, es esencial. Al contrario, las que se basan en el trazado de dispositivos bluetooth, sí albergan los datos localmente y con todas las garantías -datos cifrado-, pueden ser más protectoras de la privacidad. El problema de estas últimas surge con que algunos expertos apuntan a que necesitaríamos que el 75% de la población las usase para ser efectivas.

¿Vigilancia o barbarie?

La OMS, a través del Dr. Michael Ryan, epidemiólogo y experto en salud pública, ha dicho en dos ocasiones cómo la protección de datos es esencial en esta pandemia y que no podemos abusar esta crisis para ir más allá de las libertades fundamentales. La sociedad civil, desde muy temprano, se posicionó para que las soluciones a la pandemia que usen tecnología y que limiten los derechos fundamentales deban ser necesarias y proporcionales. El grupo Chaos Computer Club (CCC), en Alemania, un referente en cuanto a tecnología y libertades se refiere, ha publicado unas recomendaciones sobre las aplicaciones de trazado. Según CCC, estas aplicaciones deben tener la privacidad por defecto y por diseño, ser decentralizadas, de uso voluntario y ser transparentes y verificables. La Fundación Europea de Software Libre (FSFE) aboga por que, por razones de eficiencia, seguridad y solidaridad, las aplicaciones elaboradas con dinero público sean de código abierto.

Coronavirus
Datos y privacidad en tiempos del covid19
¿Es lícito plantear dilemas éticos de privacidad que puedan torpedear el uso de herramientas para frenar la crisis del covid19?

No es evidente hasta qué punto muchas de estas tecnologías son necesarias para combatir la pandemia. Son las autoridades y profesionales de la sanidad quienes deben decir qué datos necesitan. Una vez sepamos esto con claridad, la decisión de usar aplicaciones que requieran localización exacta para que la policía controle que estás en casa hasta aquellas que te alerten a ti, y a nadie más, que has pasado junto a alguien con la infección. La decisión sobre usar una u otra es política, no técnica. Dependiendo de las decisiones que se tomen para combatir esta pandemia, veremos si al final controlamos la expansión de futuros virus, o si la controlada es la sociedad.

Sobre o blog
Realidades jurídicas, sociales y económicas desde una perspectiva transformadora. Coordinado por Autonomía Sur Cooperativa Andaluza.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Inteligencia artificial
Panorama “No somos robots”: las empresas entregan la gestión de la mano de obra a las máquinas
Todavía no hay androides repartiendo paquetes o pasando la fregona, pero los algoritmos y la inteligencia artificial ya han asumido la gestión del trabajo en numerosos sectores y han transformado la economía para siempre.
Sidecar
Sidecar Máquinas de desaprendizaje
Un sistema educativo que ya amenaza con derrumbarse ofrece ahora un terreno fértil para el cultivo de una tecnología peligrosa.
Sobre o blog
Realidades jurídicas, sociales y económicas desde una perspectiva transformadora. Coordinado por Autonomía Sur Cooperativa Andaluza.
Ver todas as entradas
Israel
Israel Netanyahu acelera los planes de ocupación total de una Gaza diezmada por el hambre
El ejército israelí quiere movilizar a 30.000 reservistas para una nueva expansión de la ofensiva sobre Gaza. Las organizaciones dependientes de la ONU alertan de la hambruna y las enfermedades en un enclave en el que escasea el agua potable.

Últimas

O Teleclube
O Teleclube 'Os Pecadores' loitan contra montruos reais e mitolóxicos no novo episodio de 'O Teleclube'
O dúo do director Ryan Coogler e o actor Michael B. Jordan estrean unha película sobre a experiencia afroamericana cunha ameaza sobrenatural engadida.
Comunidad de Madrid
Universidad pública El alumnado de la UNED denuncia el “modelo antipedagógico” tras la supresión de tutorías presenciales
El proceso de eliminación de clases se remonta a 2008, aunque ha sido este año, con el nombramiento Claudia Sevilla como directora de centros asociados de Madrid, cuando el gobierno de Ayuso “ha pisado el acelerador”.
Opinión
Opinión El rentismo es racismo
La posición de las personas migrantes y racializadas en el conflicto del alquiler nos coloca como sujetos esenciales e imprescindibles en la lucha por la vivienda.
Tren de alta velocidad
Problemas ferroviarios Llegar a tu casa a las cuatro de la madrugada o cómo pasar la tarde del domingo atrapados en un tren
La línea de Iryo Sevilla-Madrid Puerta de Atocha fue uno de los 30 trenes afectados por las fuertes demoras. Su llegada, programada a las 20:50hrs, se produjo a las 3:05hrs de la madrugada sin apenas haber dado información a sus viajeros
Reducción de jornada
Reducción de jornada Cada vez está más cerca la semana laboral de 37,5 horas
Aprobada hoy en en Consejo de Ministros, la reducción de la jornada máxima legal será tramitada de urgencia en un Congreso que exigirá medidas compensatorias.
Más noticias
Rumanía
Rumanía La ultraderechista Alianza para la Unión de los Rumanos de George Simion se destaca para la segunda vuelta
La extrema derecha rumana sale de nuevo reforzada pese a la eliminación de la carrera electoral de su otro representante, Calin Georgescu. La segunda vuelta de las elecciones será el 18 de mayo.
València
València Rechazada la querella por tortura contra Ramón, policía infiltrado en València
Un juzgado de València desestima el recurso presentado por Alerta Solidària contra la inadmisión de la querella criminal por torturas contra el agente que pasó dos años infiltrado.
El Salto Radio
el salto radio Peinando canas 2: Ganas de cantar, ganas de vivir
En el segundo capítulo de esta serie dedicada al colectivo sénior destacamos el trabajo de Irina Capriles al frente del Cor de la Universitat Oberta per a Majors de les Illes Balears.
Opinión
Opinión El apagón y la ofensiva nuclear de las derechas
El gran apagón se ha producido en medio de una auténtica guerra cultural de la derecha contra el plan de cierre de las nucleares.

Recomendadas

Laboral
Laboral Coidar sen dereitos: a loita das traballadoras nas residencias privadas de Galiza
Sen tempo nin medios para ofrecer uns coidados axeitados, alertan dunha situación insostible nos centros e denuncian a privatización dun servizo a costa do benestar das persoas maiores e dependentes.
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña e Ourense mercaron material policial a Israel por medio millón de euros en só catro anos
O alcalde ourensán, Gonzalo P. Jácome, adxudicou un contrato por 70.000 euros días despois do sete de outubro. Abel Caballero asinou outro de máis de 200.000 euros e a alcaldesa da Coruña seguiu a estela cun contrato de 170.000 euros.