Filosofía
La “generación Q” y las sombras de la excelencia en la investigación

La cultura de las métricas de evaluación domina la carrera investigadora hasta límites insospechados. Las generaciones formadas en estas reglas de juego han normalizado el fin obsesivo de publicar en revistas de impacto. Pero las sombras de este sistema nos obligan a cambiar la evaluación científica
Publica o perece
Diseñado por Freepik
15 may 2024 08:00

Los nervios y las ilusiones contenidas suelen protagonizar los momentos largamente esperados. Recientemente defendí de manera exitosa, con nervios camuflados e ilusión manifiesta, mi tesis doctoral. No tengo ninguna duda de que mi tesis no cambiará el mundo, pero sí que puede que sea un detonante positivo en mi vida personal y profesional. El cambio deseado es el inicio de una carrera académica dedicada a la filosofía y la ética.

Los caminos profesionales de la academia son tortuosos. La precariedad, la cultura del sobretrabajo, los sueldos bajos a pesar de la alta cualificación, la crisis de salud mental (incluyendo principalmente el estrés, la ansiedad y el insomnio), las dificultades de conciliación (con sus respectivas inequidades de género), la realización de tareas profesionales no remuneradas, la excesiva servidumbre burocrática, el extendido fenómeno de la impostora o las inciertas perspectivas de futuro son algunos de los males que plagan las carreras académicas. El doctorado es una etapa en la que están presentes muchos de ellos, algunos incluso de forma acentuada.

En lo que sigue me gustaría reflexionar sobre otra característica distintiva de la academia actual: la omnipresencia de las métricas de evaluación de las revistas científicas. Para cualquiera que quiera hacer carrera académica, el doctorado supone una inmersión apresurada en la cultura de las métricas. Aunque el uso de indicadores de calidad es en muchos aspectos deseable e incluso inevitable, el abuso de las métricas de evaluación ha transformado la experiencia predoctoral y, en cierto modo, ha pervertido la naturaleza formativa del doctorado.

¿Cómo funcionan las métricas de las revistas científicas? Simplificando, el prestigio de las revistas científicas depende principalmente de su factor de impacto y de su posicionamiento relativo respecto al resto de revistas. Por un lado, el factor de impacto se mide de distintas maneras, pero generalmente indica la proporción normalizada de los artículos publicados por una revista y las citas recibidas durante un periodo concreto. Esta representación numérica da información bibliométrica bastante simple: cuanto más factor de impacto, mejor.

Por otro lado, el posicionamiento relativo de las revistas según su factor de impacto se divide en cuartiles. Es decir, las revistas que cumplen ciertas características como para ser indexadas en bases de datos científicas (como Scopus o Web of Science) son agrupadas en cuartiles. El primer cuartil (Q1) recoge a las revistas de mayor impacto, es decir, a las posicionadas en el primer 25%. A su vez, las revistas Q2 representan al segundo 25% mejor, las Q3 al tercero y las Q4 al cuarto. Estos cuartiles se actualizan cada año.

Como era de esperar, la aspiración mayoritaria del personal investigador es publicar en revistas Q1, o, en su defecto, en revistas Q2. Esta pretensión también la sostienen las personas que actualmente hacen su tesis doctoral. Tal cosa era impensable hace décadas. Como me recuerda mi director Francisco Lara Sánchez, a los de su generación —formados a principios de los ’90— se les recomendaba, curiosamente, que no publicasen nada hasta después de doctorarse. Los tiempos son tan diferentes que, ahora, en muchos de los programas de doctorado nacionales se requiere al menos una publicación indexada para poder depositar la tesis.

En resumidas cuentas, o se publica en revistas de prestigio, o se corre el riesgo de perecer en la carrera investigadora.

Estos cambios generacionales se deben, en parte, a la cultura de “publica o perece”. Publicar poco durante el doctorado o hacerlo solo en revistas de cuartil bajo disminuye las opciones postdoctorales. Sin publicaciones también es muy difícil sobrevivir profesionalmente hasta conseguir plaza fija. Y promocionar desde un puesto permanente es poco probable si no se cuentan con publicaciones bien indexadas. En resumidas cuentas, o se publica en revistas de prestigio, o se corre el riesgo de perecer en la carrera investigadora.

Educación
La filosofía en la Academia Todas somos impostoras
¿Por qué algunas nos sentimos impostoras haciendo filosofía? ¿Qué podemos hacer para sanarnos juntas?

Las métricas de la la Generación Q

Estas reglas del juego son las que han dominado los últimos años. Los que nos hemos formado al albur de estas reglas formamos parte de lo que podríamos denominar, si se me permite la expresión, la “generación Q”. La generación Q se ha formado en investigación sabiendo que publicar en revistas de altos cuartiles es una de las claves principales de la supervivencia académica. Esta generación, la que está acostumbrada a escuchar repetidamente la pregunta “¿cuántos Q1 tienes?”, ha internalizado prontamente el afán de posicionar los resultados de sus investigaciones en las revistas de los cuartiles de mayor impacto.

A diferencia de las generaciones anteriores, de las cuales muchas personas han tenido que adaptarse a los cambios en las reglas de juego modificando sus costumbres de publicación, a los integrantes de la generación Q nos han dejado claro desde el principio que las publicaciones bien indexadas son un mérito preferente para promocionar en la academia. Dentro de la colección dispar de méritos curriculares (docencia reglada, proyectos competitivos, charlas en eventos científicos, estancias en instituciones extranjeras, revisiones para revistas, divulgación, gestión, etc.) que puntúan para el avance en la carrera universitaria, las publicaciones se han erigido como el factor diferencial.

Hasta aquí, se ha explicado cómo lleva funcionado recientemente el sistema de evaluación científica. Quienes provengan de sectores profesionales no relacionados con la ciencia, puede que se pregunten ¿y qué tiene esto de malo? ¿El objetivo de hacer buena investigación no debería ser publicar en buenas revistas? ¿Al igual que el de los buenos escritores publicar en buenas editoriales? ¿O el del mundo del arte exhibir en los mejores museos? ¿O el del mundo del espectáculo actuar en los mejores teatros, cines y salas de conciertos? ¿O el de los deportistas profesionales competir en las mejores ligas y torneos?

A bote pronto, una primera respuesta al razonamiento anterior consiste en señalar que este sistema deja gente atrás injustamente. Obvio, publicar en revistas Q1 y Q2 no siempre es fácil. Alguna gente no lo consigue y otros lo hacen a duras penas. Pero esta respuesta no es especialmente satisfactoria. No todas las actrices pueden actuar en Broadway o Hollywood, ni tampoco todas las artistas pueden exponer en el MoMA o en el Guggenheim de Bilbao. Como en cualquier sector profesional competitivo, los méritos que dotan reputación no están distribuidos de manera equitativa. Es más, esta posible réplica debe tener en cuenta que el mérito también es una cuestión de justicia. Precisamente, publicar en revistas de alto impacto se valora tanto porque es difícil conseguirlo. Así, para los jóvenes investigadores, el hecho de publicar en revistas bien posicionadas supone, qué duda cabe, un empoderamiento. Al fin y al cabo, la universidad es una institución jerárquica con privilegios de antigüedad en la que obtener reputación gracias a la “investigación excelente” puede aliviar las diferencias de poder entre generaciones.

Vistos los problemas del anterior intento de respuesta, cabe preguntarse, de nuevo, ¿qué tiene de malo la omnipresencia de las métricas de evaluación de las revistas? ¿qué sombra proyecta la cultura de excelencia de las revistas de impacto? ¿qué secretos oscuros esconde este sistema? A continuación, voy a desarrollar brevemente cinco problemas de considerable envergadura. Aunque no puedo ofrecer un análisis exhaustivo, creo que estas cinco sombras —bien conocidas por el personal investigador— obligan a repensar la noción de excelencia científica y a reformar las evaluaciones de las carreras investigadoras.


El gran negocio y las desigualdades de la “batalla de los cuartiles”

En primer lugar, la mayoría de las revistas de mayor impacto pertenecen a editoriales privadas con ánimo de lucro. Estos consorcios editoriales (como Springer-Nature, Elsevier, Taylor & Francis, Wiley y otros de reputación más dudosa como Frontiers o MDPI) cobran cantidades enormes de dinero para que las publicaciones aparezcan en acceso abierto. Los investigadores pagan normalmente estos gastos a través de sus instituciones o de sus proyectos de investigación. A la postre, esto se traduce en un expolio multimillonario de dinero público por parte las editoriales comerciales, las cuales copan las rankings de impacto que favorecen los sistemas de evaluación.

La mayoría de las revistas de mayor impacto pertenecen a editoriales privadas con ánimo de lucro [...] A la postre, esto se traduce en un expolio multimillonario de dinero público.

En segundo lugar, la cultura del pública o perece tiene consecuencias dañinas para la ciencia. El intento desenfrenado de mejorar el currículo mediante la publicación en revistas indexadas ha incitado múltiples malas prácticas científicas. Se han incentivado perversamente dinámicas de investigación éticamente dudosas o directamente inaceptables, entre las que cabe destacar el plagio, el autoplagio, las publicaciones duplicadas, la falsificación, fabricación y omisión de datos, la autoría fantasma, la autoría honoraría, prácticas cuestionables de citación y revisiones fraudulentas. En particular, últimamente ha resonado con especial fuerza el escándalo de los miles de investigadores, un par de ellos españoles, que publicaban un artículo aproximadamente cada 5 días. Con lo oneroso que suele ser publicar, sospechar de estos “prolíficos investigadores” es inevitable.

En tercer lugar, el sistema actual promueve inequidades entre regiones del mundo, favoreciendo particularmente a los países anglosajones –especialmente a las universidades más famosas. Además de las diferencias de recursos, una de las causas de las inequidades globales se deben al privilegio del inglés. Desde hace décadas, el inglés se ha convertido en la lingua franca de la comunicación científica, una especie de nuevo latín para el mundo de la investigación, lo cual genera desventajas significativas a las personas no nativas. Estas desventajas a veces producen discriminación lingüística éticamente condenable, en la que se rechazan artículos originales y correctamente escritos por el estilo lingüístico de personas no nativas. La discriminación lingüística es especialmente sangrante en disciplinas de humanidades como la filosofía, lo que ha llegado a movilizar la declaración sobre los Principios de Barcelona para una Filosofía Globalmente Inclusiva.

En cuarto lugar, también se producen inequidades entre disciplinas, las cuales varían enormemente respecto a su factor de impacto. Las mejores revistas de filosofía tienen mucho menos impacto que las de psicología, y las de psicología mucho menos que las de medicina. Por esta y otras razones, las evaluaciones suelen dividirse en comisiones disciplinares. No obstante, hay otro problema: aunque casi todas las revistas de mayor impacto rechazan muchísimos artículos, las tasas de rechazo varían significativamente entre disciplinas. Un estudio reflejó que la tasa de aceptación en las revistas de filosofía más prestigiosas ronda el 10%, mientras que en las revistas de ciencias de la salud ronda el 50%. En otras palabras, dependiendo del área del conocimiento es más fácil o difícil publicar en las mejores revistas de la disciplina.

En quinto lugar, y no menos importante, el actual sistema tiene efectos negativos para el bienestar del personal investigador. En muchos casos, la presión por publicar alarga la jornada laboral hasta colonizar el tiempo familiar, de ocio, descanso y (auto)cuidados. A esto hay que sumarle lo que comentamos al inicio sobre los múltiples males de la carrera académica. Aunque cabe remarcar, de nuevo, los serios problemas de salud metal que la actual cultura de publica o perece está creando. La ansiedad, el estrés y la depresión amenazan la calidad de vida del personal investigador en todos sus niveles, estando estos factores más presentes en los estadios iniciales y puestos no permanentes, tal y como relatan algunos testimonios sobrecogedores.

Finalmente, puede que estemos cercanos al ocaso del “imperio de los Q1” en los sistemas de evaluación. Las iniciativas de la reforma de la evaluación científica como DORA o CoARA y los consecuentes cambios en los criterios de acreditación y de valoración de los sexenios de investigación por parte de la ANECA son buena muestra de ello. Ni que decir tiene que pasar de criterios de evaluación cuantitativos a criterios cualitativos (incluso con usos responsables de las métricas) no es ninguna panacea. Esta alternativa también es imperfecta: se corre el riesgo de que los sesgos y la subjetivad distorsionen las evaluaciones, dificulta las apelaciones y favorece las habilidades de marketing de quienes saben vender narrativamente la valía de sus investigaciones.

En cualquier escenario, es importante que los hábitos de publicación no se reduzcan a elegir las revistas como fines en sí mismos, sino como altavoces necesarios mediante los que maximizamos el público de nuestras mejores investigaciones. Se pertenezca a la generación Q u no, la carrera académica, no olvidemos, es personalmente privilegiada —constituyendo una vida dedica al saber— y colectivamente enriquecedora —gracias a la creación y transferencia de conocimiento. Así, en la persecución de este fin al servicio de la sociedad, es fundamental que la vida académica se dé en condiciones laborales dignas y que se antepongan la búsqueda del bien común a los intereses de las editoriales comerciales que dominan la batalla de los cuartiles, y sin perder nunca la innegociable aspiración de hacer investigación de calidad.





Sobre o blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Universidad
Universidades Críticas destructivas en la investigación científica
Los artículos científicos no siempre son aceptados por las revistas. La decisión final incluye informes que señalan los puntos débiles del trabajo, a veces de manera poco educada.
Investigación
Investigación Un cargo de Sumar levou seis millóns para xestionar unha residencia pública cunha empresa con cinco días de antigüidade
Unha das persoas clave de Yolanda Díaz en Galiza, Iván Olmos, recibiu da súa nai a concesión tras gañar un concurso millonario do Concello de Verín (PSOE) ao que só se presentou ela para xestionar un centro de día durante 15 anos.
Investigación
Investigación Un cargo de Sumar se llevó seis millones para gestionar una residencia pública con una empresa con cinco días de antigüedad
Una de las personas clave de Yolanda Díaz en Galicia, Iván Olmos, recibió de su madre la concesión tras ganar un concurso millonario del Ayuntamiento de Verín (PSOE) al que solo se presentó ella para gestionar un centro de día durante 15 años.
Sobre o blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas as entradas
Activismo
Mobilización Miles de persoas protestan en Vigo contra a Xunta pola precariedade do sistema educativo
Nais e pais reclaman ao presidente da Xunta, Alfonso Rueda, e ao conselleiro de Educación, Román Rodríguez, máis contratacións de profesorado e mellor na inclusión de alumnos e alumnas con diversidade.
Genocidio
Genocidio La inseguridad alimentaria y el hambre extrema atenazan la Gaza bombardeada
El informe de una agencia vinculada a Naciones Unidas alerta del peligro de hambruna y de la situación actual de emergencia. Toda la población de Gaza pasa hambre y hay más de 133.000 personas en situación catastrófica.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda Por qué las ayudas al alquiler del Gobierno no van ayudar a los jóvenes, sino todo lo contrario
Mientras Pedro Sánchez sostiene que son necesarias medidas “contundentes”, crecen las críticas a anuncios que copian recetas de la derecha y suponen una transferencia de recursos públicos hacia caseros, fondos de inversión y bancos.
Palestina
Genocidio Israel afirma haber asesinado a Yahya Sinwar, líder de Hamás
A través de su radio oficial el ejército israelí comunicaba la muerte de Sinwar, horas después de haber perpetrado un nuevo ataque contra una escuela de la UNRWA.
Explotación laboral
Riders Imputan al jefe de Glovo por utilizar falsos autónomos
Oscar Pierre, fundador y máximo dirigente de la empresa, tendrá que declarar ante la jueza el próximo diciembre acusado de un delito contra sus trabajadores.
Israel
Genocidio Israel continúa el exterminio de la población en el norte de Gaza e intensifica sus ataques contra el Líbano
Las autoridades palestinas, las organizaciones internacionales y la ONU alertan de la gravedad en la situación en el norte de la Franja. En Líbano, el ejército israelí vuelve a bombardear el sur de Beirut y asesina al alcalde de Nabatieh.

Últimas

Formación El Salto
Formación El Salto Del Magreb al Golfo Pérsico: ¿cómo informar(se) sobre el llamado mundo árabe?
El Salto Formación trae para octubre el primero de sus cursos orientados a la información internacional. Una propuesta en la que revisaremos de forma crítica cómo (nos) informamos sobre los países árabes y otros estados históricamente relacionados.
Análisis
Análisis Abre la cárcel italiana para migrantes en Albania con el aplauso de Von der Leyen
La primera ministra italiana se jacta de aparecer como un “modelo a seguir” en Europa después de inaugurar el presidio para migrantes acordado con Albania. La presidenta de la Comisión Europea aplaude la iniciativa.
Millonarios
Fiscalidad Los impuestos de patrimonio a los más ricos vuelven a estar de moda: el G20 y Europa los debaten
Una mayoría en la Eurocámara se ha posicionado a favor del nuevo impuesto a los súper ricos que se debatirá en la próxima reunión del Grupo de los Veinte en Brasil.
Comunidad de Madrid
Justicia El Supremo investiga al Fiscal General por salir a desmontar al equipo de Díaz Ayuso
La sala segunda del alto tribunal investigará por un presunto delito de revelación de secretos a Álvaro García Ortiz. El fiscal dice que no dimitirá y seguirá defendiendo que su notificación sobre la pareja de Ayuso no aportaba información relevante.
Comunidad El Salto
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate ‘El Estado feroz’, el primer libro de Pablo Elorduy
El responsable de Política de El Salto firma este ensayo donde recoge la historia política de las últimas dos décadas y la “restauración del orden tras el estallido de lo inesperado”.
Más noticias
O Teleclube
O teleclube A metáfora feminista de 'A Substancia' chega a 'O Teleclube'
Coralie Fargeat fai que o espectador se mire ao espello, nesta delirante, sanguenta e magnífica película.
Derecho a la vivienda
Alacant Las Jornadas por la Okupación como respuesta al problema de la vivienda
El Sindicat de barri de Carolines organiza este sábado un evento que ha llamado la atención de la prensa conservadora local y estatal.
Tribuna
Fondos Los fondos de inversión nos quitan las casas y la tierra
Igual que los fondos buitre echan a los vecinos de sus casas, estos mismos fondos buitre echan a los agricultores de sus campos y explotaciones.
Laboral
Laboral Oxfam advierte de que una de cada diez personas trabajadoras son pobres en España
La tasa de pobreza laboral alcanza el 14%. La encabezan las familias numerosas (40%), monomarentales (30%), migrantes (29%), Andalucía (19%), Extremadura (17%) y Castilla La Mancha (15%).

Recomendadas

América Latina
América Latina La popularidad de Milei se desploma mientras se multiplican las protestas contra los recortes en Argentina
La movilización social ha cobrado en octubre un renovado impulso, espoleada por los vetos presidenciales a leyes aprobadas por el Congreso que pretendían aumentar las pensiones o mejorar la financiación de las universidades públicas.
Laboral
Laboral Moderadores de Facebook que denunciaron discriminación salarial sufren una oleada de sanciones
Pasaron de 20 a 800 demandantes y, desde hace tres semanas, reciben sanciones de hasta siete días sin sueldo por el uso del tiempo de descanso, las visitas al baño y la comida. “Cada sanción cimienta un futuro despido disciplinario”, advierte Fist.
Memoria histórica
Memoria histórica Daniel Pont, fundador de la COPEL: “La carga punitiva durante el régimen fue contra los marginados”
El que fuera miembro de la Coordinadora de Presos en Lucha publica sus memorias, en las que repasa los antecedentes sociales y familiares que pronto le llevaron a la delincuencia.