Desigualdad
La violencia económica contra las mujeres

La violencia contra la mujer es una derivada del sistema patriarcal que subordina de forma estructural a la mujer y que presenta multitud de dimensiones, siendo la económica una de ellas.
Economistas sin Fronteras
24 nov 2022 07:00

El 25 de noviembre se celebra el día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Una de las diversas violencias que sufrimos las mujeres es la violencia económica. Es cierto que otros colectivos, como jóvenes o personas con edad avanzada, sufren también este tipo de violencia, pero como en otros muchos ámbitos, el hecho de ser mujer agrava y crea violencias específicas. Hay que tener en cuenta que la violencia contra la mujer es una derivada del sistema patriarcal que subordina de forma estructural a la mujer y que presenta multitud de dimensiones, siendo la económica una de ellas.

Violencia machista
Madrid Asambleas de barrios y pueblos convocan más de una veintena de concentraciones este 25N
Colectivos feministas mantienen la apuesta por la descentralización por tercer año consecutivo mientras que el sector transexcluyente llama a movilizarse contra iniciativas del Ministerio de Igualdad como la ley trans o la ley del solo sí es sí.

Dentro del ámbito de la pareja, por ejemplo, aparecen violencias relacionadas con el hecho de controlar los gastos y la gestión financiera de las mujeres, usurpación de su identidad, limitación del acceso a la información de las finanzas familiares o control de su desarrollo profesional. Esta violencia se produce también cuando se esconden los bienes patrimoniales o se utiliza el dinero para obligar a la mujer a mantener la relación con su maltratador. Este tipo de violencias pueden seguir después de la ruptura con el agresor, mediante el impago de la pensión de alimentos a los hijos e hijas o la dilatación de los procesos judiciales.

La acreditación de esta violencia económica es difícil ya que no existe, como ante una violencia física o psicológica, un certificado médico o un dictamen pericial que la certifique. Sin embargo, es más frecuente y con unas consecuencias más graves de lo que parece. Compromete la dignidad de la mujer. En sentencia del año pasado ya se fundamentaba de forma razonada la necesidad de modificación del Código penal en materia de violencia económica, pidiendo la tipificación de la violencia económica como un tipo de violencia machista de acuerdo al Convenio de Estambul.

La acreditación de esta violencia económica es difícil ya que no existe, como ante una violencia física o psicológica, un certificado médico o un dictamen pericial que la certifique.

Evidenciar y señalar las distintas violencias contra la mujer es un punto de partida, pero si no se trabaja y se regulan soluciones, no se puede avanzar en la consecución de una sociedad igualitaria y justa para todos sus miembros. Es necesaria una protección real. Se necesitan plazas de acogimiento urgente y alojamiento temporal que permitan un mejor acompañamiento psicológico de estas mujeres, personal especializado que ayude con temas administrativos y su inserción en el mercado laboral. La educación y sensibilización a profesionales de la judicatura, colegios de notarios, bancos, empresarios, es un trabajo básico para avanzar. Su compromiso para actuar con sensibilidad ante estas violencias, en aspectos tan sencillos como el pago de salarios o dinero procedente de venta de inmuebles en la cuenta personal de las mujeres que sufren estas violencias o permitir la adopción de medidas de protección financiera para ellas, es imprescindible. También la administración tiene su papel. Recordar que la primera sentencia en el Estado español en la que se obliga a la impartición de justicia con perspectiva de género, es una resolución relativa a una víctima de violencia de género a la que se le había denegado la pensión de viudedad. Se puede hablar también de una violencia institucional contra la mujer.

Pero la violencia económica no sólo se percibe en el ámbito de la pareja, se extiende a otras esferas de la sociedad. En el ámbito laboral, la discriminación salarial constituye una agresión continua a la vida de las mujeres y a su economía. Se distingue una discriminación salarial a priori, por la existencia de factores que condicionan el acceso al mercado laboral en las mismas condiciones que los hombres y una discirimación salarial a posteriori, cuando la mujer ya ha accedido a ese mercado laboral. Se infravalora el trabajo realizado por las mujeres tanto económica como socialmente. Baste sólo con un ejemplo de los muchos que se pueden referir; con datos del INE para 2019 el salario medio bruto era de 21.682,02.-€ para una mujer frente a los 26.934,38.-€ para un hombre. Otra vez aquí se compromete la dignidad de la mujer. La discriminación salarial es una realidad dificil de solucionar y que interpela a todos los sujetos sociales a una auténtica actitud de cambio. Bajo la apariencia de neutralidad, se producen perjuicios en las percepciones salariales de las trabajadoras cuyas consecuencias se dan tanto a lo largo de la vida activa como al alcanzarla jubilación.

Bajo la apariencia de neutralidad, se producen perjuicios en las percepciones salariales de las trabajadoras cuyas consecuencias se dan tanto a lo largo de la vida activa como al alcanzarla jubilación.

Es cierto que la discriminación directa ha quedado superada. Está ampliamente aceptado que a mismo trabajo, mismo salario. Sin embargo, la discriminación indirecta no se ha vencido. Cuando los trabajos son diferentes pero tienen el mismo valor, la retribución de quienes los desempeñen debe ser la misma, sin considerar las diferencias de género. Pero en la valoración de los puestos de trabajo persisten los prejuicios a la hora de decidir y valorar los factores a tomar en consideración. El registro obligatorio de salarios y auditorías salariales, así como los criterios a valorar en los sistemas de clasificación de los puestos de trabajo, que vienen regulados desde el año 2021, son una herramienta  disuasoria de esta descriminación retributiva.

La sociedad capitalista no sólo infravalora el trabajo remunerado que realiza la mujer, todo el trabajo de cuidados y reproductivo parece tener valor cero en nuestra sociedad. Este trabajo, impuesto a las mujeres, ha sido invisibilizado en el estudio de la realidad de tal manera que ni tan siquiera tenemos claro cómo podríamos incorporar su valor en el PIB nacional.

Violencia machista
Desigualdad económica y violencia contra las mujeres
Las medidas más efectivas para evitar la violencia y facilitar la salida del círculo de la violencia son las encaminadas a conseguir la autonomía económica de las mujeres.

El diagnóstico de la realidad es un primer paso, pero desde nuestras organizaciones nos preguntamos muchas veces si es posible ir más allá. Podemos caer en el fatalismo. Parece que exista una fuerza superior que conecta unos problemas con otros haciéndolos irresolubles. No podemos dar solución a un problema sin que aparezca otro que hay que solucionar antes. Sin embargo, ese desaliento, esa frustración, no es buena para la transformación social.

Nuestra realidad es compleja, enredada en múltiples crisis que se superponen unas a otras, pero si no anteponemos la vida a la lógica heteropatriarcal, capitalista y colonial que rige en la actualidad, no podremos avanzar en el desarrollo de una sociedad más próspera para todos y todas. No basta con denunciar y hacer visibles estas violencias, tenemos que propiciar espacios y procesos participativos de hombres y mujeres, donde se fomente el diálogo positivo para lograr resolver las desigualdades. Educar para la transformación social, para transitar a otro modelo menos violento, es una forma de generar los cambios que buscamos.

Sobre o blog
Economistas sin Fronteras Somos una Organización no Gubernamental de Desarrollo (ONGD), fundada en 1997 por un grupo de profesores y catedráticos universitarios, activamente comprometidos y preocupados por la desigualdad y la pobreza. Nuestro objetivo principal es contribuir a generar cambios en las estructuras económicas y sociales que permitan que sean justas y solidarias.
Ver todas as entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Cuidados
Privatización María Pazos: “El sistema público tiene que ser completamente de gestión pública y sin empresas privadas”
La economista y militante feminista repasa los cambios producidos durante la pandemia, el estado del movimiento feminista, la propuesta público-comunitaria y los límites de la política institucional.
Economía feminista
El congreso de Barcelona visibiliza la economía feminista y solidaria
Recogemos, a modo de crónica, el paso de la Economía Solidaria y Feminista por el Congreso de Economía Feminista celebrado en marzo y que ha tenido como tema articulador la economía (digital) feminista.
Economía feminista
Economía feminista Violencia económica contra las mujeres: algunas estrategias compartidas en el Congreso de Economía Feminista
La convocatoria cerró el sábado tras reunir a más de 400 personas en un encuentro híbrido marcado por la crítica decolonial y la necesidad de construir una lucha conjunta.
Sobre o blog
Economistas sin Fronteras Somos una Organización no Gubernamental de Desarrollo (ONGD), fundada en 1997 por un grupo de profesores y catedráticos universitarios, activamente comprometidos y preocupados por la desigualdad y la pobreza. Nuestro objetivo principal es contribuir a generar cambios en las estructuras económicas y sociales que permitan que sean justas y solidarias.
Ver todas as entradas
Feminismos
Feminismos As mulleres galegas ocupan o segundo posto de menor retribución por hora de todo o Estado español
A súa precariedade maniféstase na contratación temporal, oportunidades limitadas de promoción e acceso limitado a postos de dirección. A desigualdade estrutural afecta especialmente ás traballadoras do sector primario, onde permanecen invisibles.
Islamofobia
Religión El aumento de vetos al hiyab en escuelas reaviva el debate sobre la islamofobia en España
Cada vez son más los centros educativos que están vetando estas prendas propias de la cultura musulmana a través de disposiciones en sus protocolos internos.
Galicia
Galicia El Sergas entorpece el acceso a más de 8.500 contratos que suman 57 millones de gasto
La Axencia de Doazón de Órganos e Sangue indexa miles de pagos sin concepto e imposibilita su fiscalización. La Xunta de Alfonso Rueda aduce que la opacidad es causada por “un fallo de codificación”. Sin embargo, esa práctica se repite desde 2018.

Últimas

Grecia
Grecia La tragedia griega de Tempi: dos años de dolor y lucha por la rendición de cuentas
El 28 de febrero de 2023, un tren de pasajeros colisionó frontalmente con un convoy de mercancías cerca de Tempi. El impacto dejó 57 muertos, en su mayoría jóvenes estudiantes que regresaban del carnaval.
Opinión
Opinión Vox y la paradoja del soberanismo subordinado
Mientras denuncian el 'globalismo' abrazan sin fisuras el patrocinio del mayor supermillonario planetario, que no parece tener más patria que el aumento de los dividendos de sus empresas
Caribe
Opinión Granada: ecos de una revolución abortada
Granada fue durante algunos años símbolo de una América alternativa. Esta isla caribeña sirve de recuerdo fehaciente de las lecciones de Fanon, Malcom X y todos aquellos que se han atrevido y se atreven a cuestionar la estructura imperial
Análisis
Análisis ReArm Europe, el triunfo del capitalismo verde militar
El plan que acaba de presentar la presidenta de la Comisión Europea vuelve a utilizar la mágica cifra de los 800.000 millones, ahora con el objetivo declarado de transformar el modelo de defensa europeo.
Análisis
Análisis De geografías viables o de cómo habitar el territorio
La destrucción que trajo la barrancada es directamente proporcional a la ocupación del territorio y a los metros cuadrados de asfalto que nos dejaron los sucesivos booms inmobiliarios.
Más noticias
Feminismos
En directo Los feminismos salen a la calle por el 8M
Más de 1.200 convocatorias en todos los rincones del estado muestran la vitalidad de un movimiento que hoy tendrá el handicap de las fuertes lluvias en buena parte del territorio.
La vida y ya
La vida y ya Reparadoras de grietas
Piensa, sobre todo, en quién se fijará en los vínculos que rompieron las bombas. Quién se dará cuenta de todo lo que se quebró.
Argentina
La calle contra Milei Pensionistas argentinos salen a las calles para hacer frente al ajuste y la represión de Milei
Cada miércoles, jubilados y jubiladas se movilizan alrededor del Congreso en Buenos Aires exigiendo el aumento de sus haberes, la continuidad de la moratoria jubilatoria y el acceso a medicamentos esenciales.
Opinión
Opinión La pesadilla que no acaba
El funcionamiento de los servicios que deberían proteger a los menores de edad no alcanzan en forma y tiempo, y dejan familias rotas por el camino.

Recomendadas

Urbanismo
Urbanismo salvaxe Un pobo contra o asfalto: Bembrive e Mos rebélanse contra unha autovía que arrasará o seu pulmón verde
Veciñas e veciños conseguen presentar 25.000 alegacións contra unha estrutura de dez quilómetros, defendida xa só polo PSOE en Madrid e en Galiza, que partirá en dous unha poboación enteira e forzará a expropiación de decenas de vivendas.
Fronteras
Fronteras Sombras en el acuerdo de cesión de competencias pactado por el PSOE y Junts
El acuerdo sobre transferencia de las competencias en materia de migración entre PSOE y Junts encuentra el 'no' de Podemos y de organizaciones de migrantes y el 'sí' con matices de la izquierda independentista y de Sumar.
República del Sudán
Belkis Wille “En Sudán hay milicias practicando violaciones a gran escala contra mujeres y niñas”
Belkis Wille, investigadora de Human Rights Watch, denuncia los abusos de grupos armados como las Fuerzas de Apoyo Rápido en el conflicto sudanés, donde se registran crímenes tanto de esclavitud sexual como de sometimiento mediante violaciones.
Salud mental
Sesgos en medicina Mujeres y consumo de psicofármacos: la medicalización de sus vidas
Las mujeres consumen el doble de psicofármacos que los hombres. Además de una mayor prevalencia de depresión o ansiedad, las especialistas avisan de sesgos de género en los diagnósticos.