Pensamiento
Manifiesto por la no lectura

Otro punto de vista sobre la lectura en el contexto de la sociedad de mercado, atomizada, frágil, y del tiempo homogéneo y vacío.
No leer
Fotografía: Priscilla Du Preez. (Licencia Unsplash)

“Lean, lean, lean”, dijo el sabio. Atrévete a pensar, ¿cómo no te atreves a pensar?

Es evidente (supongo) que, por uno u otro motivo, la lectura (sobre todo de libros) está en retroceso. Lo cual es preocupante, está claro, es casi de Perogrullo. Pero ¿cuál es el problema de fondo? José Antonio Marina publicó hace años un pequeño manifiesto llamado Elogio a la lectura, haciendo un llamamiento a los andaluces para que leyesen, para que comprendiesen las bondades de la lectura y sus implicaciones como faro del mundo y de la sociedad.

Filosofía
Filosofia per al poble
Reflexionamos sobre la relación entre lectura y comunidad, así como sobre la posibilidad de expandir la filosofía más allá de sus muros.

“Necesitamos una democracia de lectores, necesitamos mayorías ilustradas, necesitamos recuperar la sabiduría de vivir”, reclamó con entusiasmo. No es el único; Vargas Llosa y tantos otros tienen textos similares. Ya lo saben, los ignorantes son los otros.

¿Pero qué es leer? Creo sinceramente que manifiestos tan recurrentes como este parten de una descontextualización: no creo que se lea menos en general; de hecho, estoy convencido de que, por lo menos entre los jóvenes, se suele leer más que en generaciones pasadas: redes sociales, chats, etcétera. Sí, eso también es “leer”. Lo que se lee menos son libros. Pero el libro (como mercancía, casi como objeto de devoción) está en crisis. En efecto, la lectura habitual en nuestro tiempo está fragmentada y es menos comprensiva, pero ¿puede explicarse esto solo con una descripción vaga sobre la “liquidez de los tiempos líquidos” y demás frases ultramanidas de un baumaniano de turno? Lo dudo, y lo dudo porque, en muchos casos, esas afirmaciones carecen tanto de perspectiva histórica como de una visión holística y socialmente comprometida del problema. Y en esto último me vuelve a la mente el texto de Marina: “Hay que leer [libros, se sobreentiende]”, exclama. Este tipo de afirmaciones en abstracto se convierten en meros cantos de sirena, en un fetiche hacia el libro sin la más mínima concreción. La lectura es un proceso social, y para comprenderla como tal es imprescindible 1) analizar su posición histórica concreta dentro de las relaciones de producción capitalistas: qué se lee, qué libros se producen, para qué se producen y 2) qué papel socialmente consciente y emancipador debe tener la propia lectura.

Atendiendo al primer punto, debemos asimilar que la producción de “literatura” (es decir, libros en sentido amplio o producción escrita) está inserta dentro de las lógicas del mercado y, esta, a la valorización constante del capital. Puede parecer una evidencia (aunque siempre se suele obviar en los análisis), pero su papel es trascendental. Los libros son mercancías y como tales deben ser entendidos. Su función en la producción no es cubrir una necesidad social (el leer por leer), sino generar valor. El valor, por tanto, no depende de que esos libros se lean o no se lean (da igual), sino que tengan recorrido en la transformación de capital en capital; o en otras palabras: de dinero en más dinero.

Sí, hay que leer. Pero no como mero fetiche complaciente, no para fortalecer unas formas de reproducción social –embellecidas con discursos humanistas– que acaban alimentando esta picadora de carne y espíritu que entendemos como “sociedad”

Teniendo en cuenta esto, y la inherente evolución de las relaciones de producción capitalistas en el contexto de las interminables crisis de rentabilidad, nuestra sociedad (OCCIDENTAL, remarco lo de occidental) vive en unos estadios en donde las formas de reproducción social propias de la modernidad (la familia nuclear, las formas disciplinarias de trabajo, etcétera), y de un poder impersonal como es el capital (a diferencia del poder directo y personal de épocas premodernas), están en crisis por el propio rodillo del capital mismo. La sociedad atomizada, frágil, y del tiempo homogéneo y vacío, como contra el que clamaba Walter Benjamin, impide la posibilidad de una lectura (de libros) pausada y reflexiva. Ahí está el problema, y no en una crítica moralista hacia las redes sociales.

Frente a esto, remito al segundo punto. Sí, hay que reivindicar la lectura. Pero no en abstracto o remitiendo a la bondad de la lectura por la lectura misma y naturalizando las relaciones de producción o el HUMANISMO en mayúsculas en su contexto histórico actual; sino porque esta tiene un potencial crítico y emancipador descomunal y como tal debe ser tratada. La lectura debe elevar las conciencias, debe contribuir a ver y entender el mundo y debe, sobre todo, generar una negación revolucionaria de nuestra realidad social.

Sí, hay que leer. Pero no como mero fetiche complaciente, no para fortalecer unas formas de reproducción social –embellecidas con discursos humanistas– que acaban alimentando esta picadora de carne y espíritu que entendemos como “sociedad”. Yo me niego, y en ese proceso de negación, revolucionaria, siempre hay un acto de fe (de fe, también, claro está, a la lectura) y con eso me quedo.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra na túa conta.

Relacionadas

Trabajo sexual
Anneke Necro “Es imposible hablar de porno sin analizar cómo hemos llegado hasta aquí en materia de placer”
Hablar de cómo se ha construido el deseo en nuestra cultura occidental es una de las motivaciones que Anneke Necro persigue en su primer texto, ‘Deseo disidente: las políticas del placer’.
Opinión
Opinión Por una subjetividad diferente
Nuestra respuesta a los nuevos acontecimientos acostumbra a ser siempre lenta. Difícil mirar de otro modo lo que nos rodea sin unos ojos nuevos.
Pensamiento
Pensamiento Un estoicismo “chill de cojones”
Frente a un “neoestoicismo” impostado de masculinidades frágiles, burpees y narcisismo funcional al neoliberalismo, un repaso necesario y una reivindicación del ideal estoico y sus motores éticos.
LGTBIAQ+
LGTBIAQ+ Monstros na academia: esta é a nova onda de estudos cuir en Galiza
Un monográfico de ‘Galicia 21’ fai realidade os primeiros estudos académicos que poñen no centro a disidencia e o pensamento cuir en Galiza, abrindo un debate que remove a universidade e o activismo.
Brecha salarial
Desigualdad La brecha salarial de género crece y se sitúa en el 19,6% después de años de contracción
La parcialidad sigue siendo la gran culpable de la desigualdad retributiva entre hombres y mujeres, que aumenta respecto a 2022 por el incremento salarial que se ha dado en sectores con más presencia masculina

Últimas

Cómic
Cómic Moebius, un género en sí mismo
La publicación de ‘Obra hermética’ es el mejor momento para recordar la relevancia de Moebius como catalizador cultural del surrealismo ‘sci-fi’ en una serie de cómics imprescindibles para entender la evolución de esta disciplina.
València
València El líder de Desokupa, Daniel Esteve, denunciado por incitación al odio
La asociación Acción Contra el Odio presenta ante la Fiscalía de València una denuncia por los bulos racistas, noticias falsas y amenazas contra las personas migrantes difundidas por Esteve.
Más noticias
Economía
Guerra comercial China mueve ficha en una guerra comercial (y tecnológica) que reconfigurará la economía global
Más allá de la disputa comercial, la carrera tecnológica es el verdadero eje de la rivalidad entre ambas potencias. Estados Unidos sigue liderando la tecnología mundial, pero China avanza rápidamente.
Palestina
Limpieza étnica Protestas en todo el mundo contra los planes de limpieza étnica para Gaza
Los países árabes rechazan la idea de desplazamiento lanzada por el presidente de Estados Unidos. Dos tercios de las infraestructuras de Gaza están dañadas o destruidas y comienza a hacerse realidad la especulación en el negocio de la reconstrucción.
Tribuna
Tribuna Militarismo y neofascismo
El militarismo rampante pone en grave peligro la convivencia, la cooperación, la seguridad y la paz mundial.

Recomendadas

Laboral
Laboral Investigada unha rede empresarial que explotaba a 82 migrantes nunha granxa de Lugo
Polo de agora, tres persoas responsables da granxa de Begonte centran as investigacións da Garda Civil. As 82 persoas explotadas vivían nun hotel de Ordes (A Coruña) que non tiña sequera licencia de hostalaría.
Trabajo sexual
Anneke Necro “Es imposible hablar de porno sin analizar cómo hemos llegado hasta aquí en materia de placer”
Hablar de cómo se ha construido el deseo en nuestra cultura occidental es una de las motivaciones que Anneke Necro persigue en su primer texto, ‘Deseo disidente: las políticas del placer’.
Colombia
Colombia Guerra a muerte en el Catatumbo entre el ELN y las disidencias de las FARC
Los enfrentamientos entre las guerrillas en el estado de Catatumbo, fronterizo con Venezuela, ha provocado el desplazamiento de 50.000 campesinos y la declaración del Estado de Conmoción Interno por parte del presidente Gustavo Petro.