Marina Hoyos Marín

Estas vacaciones, mientras turistas occidentales con nula empatía y conocimiento del mundo disfruten del agua que no pueden disfrutar los niños y niñas de Gaza; ciertas empresas de alquileres de casas de lujo llenarán sus arcas de sucio dinero.

Las imágenes de soldados de la ocupación israelíes humillando a hombres palestinos en calzoncillos, con las manos atadas a las espaldas y ojos vendados, nos recuerdan que la tortura persiste en nuestras sociedades. No solo eso, ya no se esconde.

Los pueblos oprimidos no necesitan reivindicar la autoridad sobre su propia opresión, puesto que el desarrollo de su historia ya les otorga esa autoridad. Tampoco necesitan demostrar la barbarie de la ocupación.

El periodismo feminista es emancipador, si bien denuncia las injusticias, también muestra la capacidad de agencia de las mujeres.

La morbilidad femenina, el conjunto de enfermedades, factores de riesgo y motivos de consulta recurrentes en las mujeres que merecen una atención específica, tiene múltiples ejes de discriminación: no es lo mismo en Suecia que en Palestina.